lunes, 27 de noviembre de 2017

Crítica: Mayhem (2017)


Película dirigida por Joe Lynch (Wrong Turn 2: Dead End) y escrita por Matias Caruso. Se estrenó de manera limitada en cines y VOD dentro de los Estados Unidos el pasado 10 de noviembre, mientras que su salida en DVD está anunciada para el próximo 26 de diciembre.

Sinopsis:

Después de haber sido despedido de manera injustificada, Derek Cho (Steven Yeun) se encuentra bajo cuarentena en las oficinas de su empresa gracias a un extraño y peligroso virus que desata los impulsos más salvajes de las personas. Ya sin nada que perder y con la ayuda de un inesperado aliado (Samara Weaving), ahora tendrá que pelear para llegar hasta el piso superior con tal de poder ajustar cuentas con sus jefes.



Comentarios generales:

La verdad es muy probable que Mayhem hubiera pasado totalmente desapercibida si no fuera por la presencia de Steven Yeun, quien después de la muerte de su personaje en The Walking Dead había estado alejado del género y muchos fans querían verlo de regreso. Al menos en mi caso esa fue la razón principal para verla, ya que realmente su premisa no resultaba tan interesante; de hecho, este mismo año ya habíamos tenido un trabajo un tanto similar y por eso mismo no esperaba demasiado, aunque al final lo que me encontré fue algo que me brindó casi 90 minutos de pura diversión.

Ya que aunque lo que nos trae Lynch no es precisamente innovador, este si trata de añadir suficientes cosas para hacerte sentir que lo que estás viendo es algo fresco; iniciando con el propio virus, el cual no convierte a las personas en zombies u infectados sin emociones, sino que simplemente inhibe aquello que los hace comportarse de manera decente. Un detalle que parece insignificante pero gracias a esto el director básicamente tiene vía libre para presentar lo que le plazca y por medio de la construcción en los minutos iniciales es claro que lo que uno verá alcanzará niveles de exageración importantes basándote en que los propios personajes que, aun sin estar infectados, ya son seres de los cuales puedes esperar cualquier cosa considerando los estereotipos presentados.

Sus acciones solo son una extensión de su personalidad, están plenamente conscientes de ello, así que cuando el tema del virus toma relevancia esto explota y a partir de ahí el ritmo se vuelve caótico para presentar una historia llena de violencia completamente justificada, la cual además sirve para satirizar en todo momento el ambiente corporativo. Una situación que podría parecer que no ofrece nada más elaborado considerando la dinámica sangrienta, sin embargo, por medio de todo este caos también se va construyendo una relación entre los dos personajes principales que poco a poco va añadiendo ciertos cuestionamientos morales que le brindan profundidad sin dejar de lado el humor o la sangre.

La parte final por momentos flaquea al tratar de generar algunos despistes sobre si Derek podrá lograr su objetivo o no. Eso le quita algo de emoción a los minutos finales, pero no es suficiente como para derrumbar todo lo previo y se termina ofreciendo una conclusión satisfactoria.

Las actuaciones están muy bien, la dupla Yeun/Weaving muestra una química natural que hace que todo fluya de manera increíble y, a pesar de que sus acciones son algo cuestionables, uno está completamente a favor de lo que hacen; mientras que todo el resto del elenco también realiza una buena labor. La producción está bien cuidada: cuenta con un buen trabajo de fotografía, la dirección de arte cumple, el score es muy agradable, el trabajo de sonido es sólido, los efectos son simples y la labor de maquillaje no tiene complicaciones.

Opinión final: Mayhem me entretuvo bastante. Sin duda una de las películas más divertidas y sangrientas del 2017. 

Ojometro:
****

jueves, 23 de noviembre de 2017

Crítica: Eat Locals (2017)


Película escrita por Danny King que significa el debut tras la cámara del actor Jason Flemyng, quien además tiene una pequeña participación actoral. Salió directamente en DVD en algunos mercados europeos durante el mes de mayo y en cines dentro del Reino Unidos en el mes de septiembre.

Sinopsis:

Atravesando momentos difíciles y con sus días de gloria ya en el pasado, los ocho vampiros británicos supremos se juntan para su reunión semestral. Sin embargo, antes de que llegue el amanecer, dicha reunión terminará con sangre y muchos cadáveres por todo el lugar.



Comentarios generales:

Cuando un actor con un currículum bastante respetable decide hacer su debut como director por medio de una comedia de vampiros sin duda va a llamar la atención, no es algo usual y por eso mismo mi curiosidad se desató una vez que supe de Eat Locals. La verdad no sabía que esperar debido a que no es un terreno fácil de explorar, mucho menos cuando hace apenas un par de años salió la que muchos consideran la comedia definitiva de vampiros (What We Do In The Shadows), pero al final lo que me encontré fue algo entretenido.

En gran medida porque afortunadamente Flemyng identifica a la perfección de lo que se trata todo esto y no se toma tan en serio las cosas, estableciendo rápidamente cual será el tono para la historia al resaltar ciertos chistes específicos de manera temprana. Una situación que no luce como la mejor opción considerando que es el primer acto y normalmente no se desea aligerar tan rápido el ambiente, pero que termina funcionando gracias a que dentro de todo el humor también se integran de manera inteligente los elementos necesarios para presentar a un grupo de vampiros que no son ridiculizados y cuyos motivos para justificar su reunión tienen de fondo un tema que los deja parados como esos seres a los que solo les importa alimentarse.

Esto hace que la película te atrape, sin embargo, el guión no es tan sólido como parece y con el pasar de los minutos el tema de los ocho vampiros supremos empieza a ser dejado de lado (en realidad, lo olvidan casi por completo) para centrarse en un conflicto con el ejército que no resulta tan interesante. Más que nada porque a partir de ahí la película se vuelve un hit or miss constante al tener escenas de acción que fluyen de manera agradable, pero que en ocasiones quedan paradas como simples rellenos para obtener un poco más de tiempo o como un capricho para mostrar las habilidades de los vampiros sin nada de trasfondo.

Aunque, por otra parte, los referente a la comedia sigue siendo manejado de manera sólida y existen varios momentos hilarantes que me hicieron reír bastante, ya sea por medio de comedia física o algunos diálogos muy bien logrados con el típico humor británico.

La parte final cumple. Sigue teniendo varios huecos y ciertamente la razón detrás de la traición del ejército es medio estúpida, pero en general el desenlace es satisfactorio ya que no se rompen la cabeza y siguen un camino sin complicaciones.

Las actuaciones están bastante bien, hay varios rostros conocidos que hacen de este grupo de vampiros uno con bastante química sin que nadie destaque por encima del resto; mientras que los secundarios fungen como buen complemento. En cuanto a la producción, es austera: el trabajo de fotografía no está mal, el score es medio genérico, el trabajo de sonido resulta efectivo, los efectos son sólidos y la labor de maquillaje cumple con lo mínimo.

Opinión final: Eat Locals está divertida. Película para no tomar demasiado en serio y pasar un rato agradable.

Ojometro:
***

lunes, 20 de noviembre de 2017

Crítica: House of the Witch (2017)


Película dirigida por Alex Merking (House of Bodies) y escrita por Neil Elman. Se estrenó el pasado 7 de octubre por el canal Syfy dentro de los Estados Unidos, aunque no se sabe si llegará a salir en otros formatos.

Sinopsis:

Un grupo de jóvenes prepara una broma de Halloween en una casa abandonada, pero una vez que entran ahí se convertirán en las victimas de una bruja que desatará toda su furia sobre ellos.



Comentarios generales:

Cada año el canal Syfy (por medio de su señal estadounidense) hace un esfuerzo muy interesante con su especial de “31 Days of Halloween” para celebrar dicha festividad como se merece. Realmente es algo que ningún otro canal o servicio hace y en este 2017 sin duda tuvieron una de sus programaciones más ambiciosas, la cual contaba con varias películas originales y de las que House of the Witch era, en el papel, una de las más interesantes; aunque al final terminó siendo una total perdida te tiempo.

Y no es que esperara una joya considerando que se trata de una película para TV, pero lo ofrecido por Merking y Elman no es más que una película en extremo genérica que, incluso con una premisa tan simple, nunca logra establecer sus propósitos de manera convincente. Utilizando a un grupo de jóvenes con bien poco carisma a los que ponen sin mucho contexto dentro de una casa y a partir de ahí tratar de construir de manera acelerada una historia que gira alrededor de una bruja cuyo comportamiento va más acorde con una clase diferente de amenaza, provocando así un conflicto casi instantáneo de identidad del cual no podrán salir.

Uno que tratan de disimular por medio de elementos más violentos de los que se esperarían para una clase de película como esta, pero los cuales con el pasar de los minutos se van perdiendo en la irrelevancia debido a que todo lo que ocurre es una repetición de las mismas acciones; generando así que lo que ves sea bastante aburrido a pesar de que el ritmo en si no es para nada cansino. Simplemente los momentos de impacto resultan inefectivos y en general la atmósfera dentro de la casa no es lo suficientemente absorbente como para lograr que aquellas escenas diseñadas para producir cierto suspenso funcionen.

Los últimos 10 minutos son lo más entretenidos, no tanto porque milagrosamente el nivel en todos los aspectos se eleve, sino más bien porque es donde la intensidad con la que se desarrollan las acciones se siente mejor lograda. Además el desenlace es al menos más oscuro de lo que te imaginas y deja bien establecidos los propósitos de la bruja.

De las actuaciones no se puede decir mucho, todos están bastante mal y un tanto caricaturescos. La producción es probablemente lo más decente: tiene un trabajo de fotografía cumplidor, la dirección de arte es sólida, el score no es nada del otro mundo, el trabajo de fotografía está bien, los efectos resultan poco convincentes gracias al CGI y la labor de maquillaje está ok.  

Opinión final: House of the Witch es bastante mediocre. Una película olvidable en todo sentido que se perderá con el pasar de unos cuantos meses.  

Ojometro:
** 

jueves, 16 de noviembre de 2017

Crítica: Jigsaw (2017)


Película dirigida por The Spierig Brothers (Undead, Daybreakers), cuyo guión fue co-escrito por Pete Goldfinger y Josh Stolberg. Se estrenó en cines dentro de los Estados Unidos el pasado 27 de octubre, mientras que en México hizo lo propio el 10 de noviembre. Recaudando hasta la fecha $79.9 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

Varios cadáveres han empezado a aparecer en la ciudad, cada uno de ellos presentando rasgos de tortura inimaginable. La sorpresa es demasiada y conforme avanza la investigación esta solo aumenta cuando la evidencia apunta a un solo sospechoso: John Kramer, el asesino serial mejor conocido como Jigsaw y que lleva muerto diez años.



Comentarios generales:

Durante la década pasada pocas cosas me emocionaron tanto como la primera Saw, aunque nunca me imaginé que esa pequeña película sería el inicio de una de las franquicias más prolíficas que ha tenido el género de terror; una con altibajos muy marcados y con la cual fui perdiendo el interés con el paso de la entregas, pero de la que siempre respeté el hecho de que quisieran darle un cierre definitivo cuando fue evidente su declive. Así que cuando se anunció que había planes por revivirla no me emocioné demasiado, ya que a pesar de haber pasado 7 años seguía sin creer que pudieran revitalizar la fórmula y lo que hace Jigsaw es simplemente confirmar dicho pensamiento.

Esto porque lo que nos regalan los hermanos Spierig realmente no rompe en lo absoluto el esquema tradicional y en general se trata de una amalgama de todo lo que funcionó en las entregas anteriores para así ir construyendo una historia que, al menos de inicio, sustenta su complejidad en el simple hecho de tratar de darle sentido a la aparente resurrección de Jigsaw. Un aspecto que durante el primer acto creo que resulta efectivo porque ese aire de familiaridad que estás viendo ayuda a solidificar la teoría de que, tal vez, John Kramer si haya sobrevivido y así tener un choque de ideas que logren generar una duda razonable entre si se trata de un simple imitador o del icónico asesino.

Lo malo empieza cuando esa familiaridad no es suficiente para sostener toda la película, ya que de pronto resulta muy evidente que esto se trata de una versión modernizada de Saw V y poco a poco el interés se va perdiendo; no solo porque lo que gira en torno a la investigación no es tan atractivo, sino que además el elemento de impacto tan característico de la franquicia por momentos se siente ajeno. Obvio si cuenta con muertes, pero estas se dan entre lapsos muy prolongados de tiempo y eso provoca que el ritmo no sea tan ágil; además de que la falta de creatividad que ya se empezaba a evidenciar desde hace siete años atrás sigue notándose debido a que ninguna de las presentadas logra generar un nivel de tensión o incomodidad tan elevado y por lo consiguiente son incapaces de quedarse en la mente del espectador a largo plazo, resultando así un tanto desechables.

La parte final si es muy Saw. No pretendo decir mucho para no arruinárselas pero hacen un trabajo adecuado al unir las piezas y así brindar un desenlace que le dé sentido a todo lo que acabas de ver (incluido el momento más llamativo visualmente hablando); dejando abierta la posibilidad de más secuelas porque añaden algo que si cambia de manera importante lo que ya sabíamos.

Las actuaciones son el estándar de la franquicia, nada especial; aunque ver a Tobin Bell de regreso siempre es agradable. La producción si sigue manteniendo buena factura: el trabajo de fotografía es sólido, la dirección de arte bien cuidada como siempre, el score no presenta mucha novedad, el trabajo de sonido es bueno, los efectos mantienen su calidad y la labor de maquillaje es de primer nivel.

Opinión final: Jigsaw está pasable. Es más de lo mismo, aunque probablemente los fans de la franquicia si queden más satisfechos.  

Ojometro:
***