Película dirigida por Hannah Macpherson, quien comparte créditos como co-escritora del guión junto a Michael Kennedy. Se estrenó directamente en Netflix a nivel mundial el pasado 30 de octubre.
Sinopsis:
Lucy (Madison Bailey) es una estudiante de preparatoria que accidentalmente encuentra una máquina del tiempo y viaja al año 2003. Un año en el que su hermana fue una de las víctimas de un peligroso asesino serial que aterrorizó al pueblo y que ahora planea salvar.
Comentarios generales:
Que existan películas similares no es algo extraño, son cosas que pasan; sin embargo, cuando uno veía el trailer de Time Cut era inevitable no compararla con “Totally Killer” dado a que no solo la premisa era casi idéntica, sino también porque el look del asesino es prácticamente el mismo. Lo cual no era una buena señal tratándose de un proyecto de Netflix, cuyo control de calidad últimamente no es que sea tan estricto y aquí se nota en demasía.
Ya que lo traído por Macpherson es un slasher muy blando al que pareciera darle vergüenza aceptar su propia esencia y durante todo el tiempo trata de limitar lo más que se pueda la violencia inherente al subgénero para centrarse en una historia de crisis existencial adolescente que no tarda demasiado tiempo en volverse frustrante. Donde a una supuesta masacre traumática para el pueblo se le da un tratamiento muy superficial y la manera en la que se plantea el viaje en el tiempo de Lucy se siente como algo tan improvisado que en ningún momento se logra generar gran interés por saber cómo se resolverá un misterio que tampoco es que tenga demasiada complejidad en cuanto a las posibles opciones de la identidad del asesino.
Y todo esto va a empeorando cuando estando ya en 2003 este solo es utilizado de forma esporádica mientras nuestra protagonista se la pasa lidiando con ciertos problemas que te dejan la sensación de estar viendo una teen movie con algunas gotitas de sangre en la que todo se vuelve sumamente previsible. Afectando con esto las contadísimas escenas de asesinatos que se supone son la vía para generar algo de tensión, pero que ante la premura por deshacerse de la violencia realmente no tienen ningún tipo de impacto y las decisiones impulsivas de Lucy para este punto dejan de ser relevantes dado a que no parecen afectar en lo absoluto la situación.
Llevándonos así a una parte final en la que resulta evidente que no se tenía una idea clara sobre cómo concluir la historia y ante una tibia revelación del asesino gracias a la carencia de sospechosos creíbles se termina optando por un desenlace con mayor dinamismo, pero poca lógica. Dejando un cierre que es digno de película de Disney.
Las actuaciones son mediocres en general, siendo Madison Bailey la que resalta un poco más al ser la protagonista y ser el único personaje que no se queda atrapado en un cliché. Mientras que en producción tampoco tiene mucho para presumir: el trabajo de fotografía cumple, la dirección de arte es pobre, el score no aporta gran cosa, el trabajo de sonido es sólido y todo lo referente a efectos/maquillaje es bastante discreto.
Opinión final: Time Cut es bastante mala. Película que falla como slasher y también como copia de otra película que es mucho mejor.
Ojometro:
**