Película dirigida por Eren Celeboglu y Ari Costa, quienes comparten créditos como co-escritores del guión junto a JJ Braider. Se estrenó en VOD dentro de los Estados Unidos a inicios de septiembre, mientras que en México llegó a las salas de cine el pasado 9 de noviembre.
Sinopsis:
Un grupo de adolescentes en Salem, Massachusetts descubren un cuchillo maldecido con un demonio que los obligará a jugar versiones mortales de juegos para niños en los que no habrá ganadores, solo sobrevivientes.
Comentarios generales:
Los últimos meses no fueron sencillos en Hollywood gracias a las huelgas que tuvieron lugar, así que cualquier película que se haya estrenado desde mediados de julio hasta hace algunos días atrás tuvo muchas complicaciones al no poder contar con sus actores para que pudieran promocionarlas. Y en el caso de All Fun and Games esa problemática se acentuó mucho más al tratarse de un proyecto pequeño que realmente se dio a conocer de la noche a la mañana, llevándolo a que haya pasado totalmente desapercibido.
Algo que puede llegar a considerarse como mucho castigo para lo que nos traen Celeboglu y Costa debido a que se trata de una película cumplidora que en cualquier otro momento hubiera tenido un poco más de trascendencia al combinar el slasher con posesiones para salirse de lo convencional en cuanto a las historias localizadas en Salem. Preponderando la simpleza ante todo con tal de poder explotar esta combinación desde temprano sin que existan grandes dudas sobre lo que ocasiona el problema y así tratar manifestar una sensación de peligro que en ningún momento desaparezca, sin importar los altibajos que existan en el camino.
Y es que aunque nos encontramos ante algo básico lo cierto es que la primera media hora se sostiene más que nada por la atmósfera oscura que se genera, lo cual hace que no existan muchos momentos destacados y se caiga en varios lugares comunes de los problemas adolescentes; sin embargo, una vez que el personaje de Marcus es poseído esto cambia. Ya que a partir de aquí es cuando la dinámica se inclina más hacia la de un slasher sin que exista el misterio detrás de la identidad del asesino e inmediatamente la tensión se incrementa dado a que tanto la persecución como las muertes resultan efectivas en exponer el nivel de amenaza que representa, a pesar de que varias de estas apenas se ven en pantalla.
Así las cosas avanzan bajo un ritmo agradable rumbo a una última media hora que explota de manera más clara el tema de la maldición y por lo consiguiente le da más exposición a elementos sobrenaturales (así como a los juegos) para darle claridad a los origines del demonio antagonista. Brindándole con esto la oportunidad de construir escenas tétricas dentro de un espacio reducido que en algunos casos funcionan mejor que en otros, aunque si brindan lo necesario para que el desenlace sea uno depresivo y no se vaya por el camino feliz.
Las actuaciones en general están decentes, siendo Natalia Dyer (Billie Fletcher) y Asa Butterfield (Marcus Fletcher) quienes más destacan. Mientras que en producción tenemos algunas cosas interesantes: el trabajo de fotografía es sólido, la dirección de arte no es nada para presumir, cuenta con un buen score, el trabajo de sonido está bien cuidado, los efectos cumplen y la labor de maquillaje es sencilla.
Opinión final: All Fun and Games está ok. Película para ver una tarde y olvidarla un par de semanas después.
Ojometro:
***