martes, 9 de enero de 2024

Crítica: The Devil on Trial (2023)

Documental escrito y dirigido por Chris Holt. Se estrenó a nivel mundial en Netflix el pasado 17 de octubre.

Sinopsis:

Usando recreaciones y viejas grabaciones caseras, este documental investiga la aparente posesión de un niño y el posterior asesinato que le siguió. Llevando así al primer caso en los Estados Unidos en donde se utiliza la “posesión demoniaca” dentro de un juicio.


Comentarios generales:

Salvo que estén centrados en alguna figura o franquicia importante dentro del género, ciertamente los documentales de terror no son lo que más me atrae; sin embargo, el caso de The Devil on Trial era distinto debido a que se trata de la historia en la que está inspirada “The Conjuring: The Devil Made Me Do It”. Simplemente había curiosidad por ver la versión no exagerada para propósitos de entretenimiento, aunque al final creo que es mejor quedarse con lo visto en la pantalla grande.

Y es que lo traído por Holt no es precisamente una investigación con la que sientas que estas recibiendo grandes revelaciones y durante gran parte de su duración solo se la pasa prometiendo cosas que nunca llegan. Enfocándose en una posesión que después de los primeros 15 minutos se vuelve poco interesante porque no presentan nada que no sepamos ya gracias a la película y los intentos por generar curiosidad mediante las grabaciones no son lo suficientemente efectivos para que dicho suceso resulte lo desgarrador que debería; de hecho, por medio de estas y la presencia de los Warren empiezan a brotar los cuestionamientos lógicos sobre su veracidad ante las similitudes que existen con los diálogos de algunas películas de exorcismos que ya habían salido para ese entonces (The Exorcist principalmente). 

Provocando con esto que, cuando se empieza a exponer el que supuestamente es el punto más importante del documental (el juicio), este resulte irrelevante debido a que no existen demasiadas pruebas que puedan poner en duda las motivaciones detrás del asesinato y por lo consiguiente el espacio que se le dedica al caso es mínimo. Cayendo así en una repetitividad con la que las cosas se empiezan a volver aburridas e incluso absurdas, hasta que de golpe salen a relucir las verdaderas intenciones detrás de este proyecto: exponer a los Warren.

Algo que no es precisamente nuevo porque su credibilidad siempre ha estado en duda desde que saltaron a la fama, pero aquí se presenta un testimonio fundamental apoyándose en su extraña manera de desenvolverse durante la crisis para que la parte final sea lo más interesante. Además de que le brinda un enfoque más humano a todo esto al dejar en claro que, a pesar de lo que se pueda creer sobre las posesiones o lo paranormal, lo cierto es que aquí hubo varios afectados cuyas vidas jamás volvieron a ser las mismas.   

En cuanto a la producción no hay mucho que recriminar: el trabajo de fotografía es cumplidor, el score complementa de buena forma las recreaciones y el trabajo de sonido es limpio durante todo el metraje.

Opinión final: The Devil on Trial es decepcionante. Documental que pretende investigar una cosa, pero termina enfocándose en otra.

Ojometro:
**