martes, 29 de octubre de 2024

Crítica: It’s What’s Inside (2024)

Película escrita y dirigida por Greg Jardin. Se estrenó a nivel mundial directamente en Netflix el pasado 4 de octubre.

Sinopsis:

Un viejo grupo de amigos de la universidad se reúnen en la casa de uno de ellos un día antes de su boda, aunque pronto dicha reunión se convierte en una pesadilla psicológica cuando llega un invitado sorpresa con una misteriosa caja que empieza destrozar su vinculo.


Comentarios generales:

A pesar de que ha tenido sus altibajos, la verdad es que Netflix en estos últimos años había sido de las plataformas que ofrecían mayor cantidad de contenido para Halloween; sin embargo, en este 2024 el empuje fue mucho menor al que nos tenían acostumbrados. Sin duda una situación un tanto decepcionante que esperemos mejore para el próximo año, pero por lo menos con It’s What’s Inside nos dejaron algo que es difícil de ignorar.

Y no lo digo tanto porque piense que lo traído por Greg Jardin sea una obra maestra, sino más bien porque este es un thriller que se siente fresco a pesar de que la historia gira alrededor de un concepto como lo es el cambio de cuerpos que ciertamente no es algo nuevo. Logrando que desde muy temprano las cosas sean interesantes por medio de un vibrante trabajo de fotografía y una gran edición para que la dinámica de este grupo de amigos no resulte tan fastidiosa y siempre se logre palpar cierta fragilidad en su amistad; en especial cuando se da la aparición de Forbes (David W. Thompson), quien proporciona un aire de misterio inmediato debido a que gracias a su pasado es claro que él puede generar muchos problemas, nada más que no se tiene claro si solo lo hará mediante su juego o si el tipo recurrirá a algo más violento. 

Eso ayuda a que las dudas siempre existan y la dinámica sea agradable durante una primera mitad en la que las tentaciones predominan dado a que el juego permite ciertas libertades para plantear cualquier locura. Lo malo es que una vez que pasa la novedad poco a poco se entra en la monotonía ante el poco riesgo expuesto y cuando el director pretende sacudir esto por medio de un evento especifico los resultados no son los mejores, llevando a situaciones un tanto absurdas que se centran más en un drama cuasi adolescente que evita que se pueda generar un nivel de tensión importante para incrementar la sensación de caos que se busca.  

Aunque realmente lo que termina por perjudicar a la película es su parte final y mucho se debe a que existen una serie de decisiones cuestionables en la manera de solucionar el problema. Llevando a un giro que se siente forzado y a un cierre para muchos de los personajes que en general es demasiado tonto.  

En cuanto a las actuaciones tenemos a un elenco sólido que cumple muy bien con su labor de tener que interpretar múltiples personalidades que poco a poco van perdiendo la razón bajo una situación sin duda peculiar. Mientras que en temas de producción vemos una buena factura: el trabajo de fotografía es probablemente lo mejor de la película, la dirección de arte está bien cuidada, el score es sólido, el trabajo de sonido no presenta fallos y todo lo referente a efectos/maquillaje es bastante discreto.

Opinión final: It’s What’s Inside está ok. Thriller con buenas ideas que no termina de explotar, pero que no está de más checar.

Ojometro:
***

viernes, 25 de octubre de 2024

Crítica: Mr. Crocket (2024)

Película dirigida por Brandon Espy, quien comparte créditos como co-escritor del guión junto a Carl Reid. Se estrenó directamente en Hulu dentro de los Estados Unidos y Disney+ en otros territorios el pasado 11 de octubre.

Sinopsis:

Una agobiada madre se embarca en una peligrosa misión para rescatar a su pequeño hijo del malvado Mr. Crocket (Elvis Nolasco), un presentador de un show para niños que los secuestra para llevarlos a su mundo y “protegerlos” de los adultos.


Comentarios generales:

Octubre suele ser un mes caótico si te dedicas a escribir sobre cine de terror porque los estudios parece que no están enterados de que existen otros 11 meses para estrenar películas, llevando a una saturación que provoca que muchas propuestas terminen en el olvido debido a la falta de tiempo para verlas todas. Por eso el que una película pequeña como Mr. Crocket pudiera resaltar entre tantas otras llamó mi atención y creo que hace lo suficiente para ser un entretenimiento pasajero este Halloween.

Ya que lo presentado por Espy, si bien está lejos de ser memorable, lo cierto es que se logra posicionar como una película disrutable no solo porque el concepto alrededor de Mr. Crocket es muy extravagante y violento, sino también porque funciona para exponer algunas temáticas serias como lo son el secuestro, la violencia familiar o los estragos de ser madre soltera sin caer en un dramón asfixiante. Brindándole así una dualidad en la que indudablemente todo lo referente al show es lo que llama la atención desde el primer acto por lo que aporta a nivel visual, pero en ningún momento te deja de importar como espectador las situaciones que atraviesan los niños y por lo mismo tienes cierta expectativa por ver los castigos de este bigotudo presentador a los padres.

Lo malo es que una vez que se da el secuestro del niño principal las cosas se empiezan a volver aburridas debido a que se sigue una línea muy predecible en el proceso de “investigación” que lleva a cabo madre, además de que la presencia de nuestro villano deja de ser entretenida conforme van disminuyendo las muertes en pantalla. Simplemente nada resalta e incluso se añade un nuevo personaje de manera un tanto forzada que hace que todo se sienta acelerado y la verdad tampoco es tan difícil descifrar su propósito una vez que se empiezan a exponer más detalles sobre la vida de Mr. Crocket y por lo mismo todo el misterio que debería de aportar resulta inefectivo.

Aunque ya para la parte final se logra recomponer el rumbo gracias a que las acciones se trasladan al mundo fantástico y eso ayuda a que el tono se vuelva un poco más oscuro para una conclusión que no es tan intensa, pero si logra darle un cierre coherente a las cosas sin dejar de lado algo de la violencia que se había presenciado en el inicio.

Con respecto a las actuaciones quien más destaca es Elvis Nolasco como Mr. Crocket, lo hace bien y creo que establece lo necesario para que el personaje pueda seguir vigente con más secuelas. Mientras que en producción tenemos una película de presupuesto discreto: el trabajo de fotografía es sólido, la dirección de arte es simple, el score no destaca, el trabajo de sonido es limpio, los efectos en su mayoría son prácticos bien hechos y la labor de maquillaje cumple. 

Opinión final: Mr. Crocket está ok. De esas películas desechables ideales para ver en la época de Halloween.

Ojometro:
***

martes, 22 de octubre de 2024

Crítica: Smile 2 (2024)

Secuela escrita y dirigida por Parker Finn (Smile). Se estrenó en cines tanto en México como en los Estados Unidos los pasados 16 y 18 de octubre, recaudando hasta la fecha $46 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

A punto de embarcarse en un tour mundial, la estrella de música pop Skye Riley (Naomi Scott) empieza a experimentar una serie de inexplicables y aterradores eventos. Una situación que, al combinarse con las presiones de la fama, la forzarán a tener que enfrentar su pasado.


Comentarios generales:

Hace dos años “Smile” tomó a todos por sorpresa con una campaña de publicidad fantástica que la posicionó como una de esas películas que le interesaban incluso a aquellas personas que usualmente no ven cine de terror, convirtiéndola en un fenómeno que para nuestra fortuna tuvo buenos resultados. Por ello es que no fue sorpresivo que anunciaran una secuela, era algo lógico; sin embargo, la búsqueda por tratar de replicar dicho fenómeno iba a ser complicada ya sin el factor sorpresa y eso se notó desde el lado promocional, aunque si logró superar a su predecesora en todo lo demás. 

Y es que con Smile 2 lo que hace Parker Finn es tomar las cosas que funcionaron hace un par de años atrás y potenciarlas para contarnos una historia en la que el trasfondo sobre la esquizofrenia obtiene más relevancia, pero sin dejar de lado los elementos necesarios para añadir un terror convencional que ayude a generar dudas en todo momento por medio de un personaje tan vulnerable como lo es Skye Riley. Cuyos problemas físicos y emocionales facilitan que se pueda imprimir un nivel de intensidad alto desde temprano con el propósito de que la sensación de peligro alrededor de ella siempre esté presente, incluso durante sus actividades de estrella pop que igualmente sirven como una vía para construir algunos momentos de incomodidad bastante efectivos.

Ante esto la acumulación de tensión se va dando de manera progresiva conforme la inestabilidad de nuestra protagonista empieza a ser más agresiva en pantalla durante el segundo acto, donde poco a poco se va generando una atmósfera agobiante que en cada momento te hace cuestionar sobre si lo que ocurre en verdad es algo con tintes sobrenaturales o solo un problema médico. Lo cual afortunadamente el director es lo suficientemente hábil como para nunca revelarlo y aprovecha esto no solo para mostrarnos situaciones que generan un ritmo agradable o jumps scares bien pensados, sino también para brindar un poco más de contexto sobre el origen de la vulnerabilidad de Skye y con ello establecerla como un personaje un tanto grisáceo que no está tan exento de culpas.  

Preparando así todo para una parte final en la que la burbuja de tensión que se fue acumulando por fin explota y eso nos lleva a un caos muy entretenido en el que distinguir entre la realidad y la locura ya no resulta tan sencillo. Dejándonos ante un desenlace sumamente intenso que aclara las cosas que debe y además no ofrece un cierre que abre la puerta a varios posibles escenarios futuros para la franquicia.

Con respecto a las actuaciones hay que decir que este es el show de Naomi Scott de principio a fin. La chica en verdad está impecable en su papel de pop star paranoica debido a que puede sostener su locura por casi dos horas sin mayores contratiempos, pasando por diversos estados de ánimo que la vuelven un personaje no precisamente para empatizar, pero si para que te importe en todo momento lo que le puede llegar a ocurrir.

Y sobre la producción, nuevamente tenemos una factura de primer nivel: el trabajo de fotografía es muy bueno, la dirección de arte está bien cuidada, el score es un gran complemento, el trabajo de sonido vuelve a ser increíble, los efectos son de buena calidad y la labor de maquillaje sólida.

Opinión final: Smile 2 me gustó bastante. Uno de esos casos en los que la secuela supera en absolutamente todo a la original.

Ojometro:
***** 

viernes, 18 de octubre de 2024

Crítica: #AMFAD: All My Friends Are Dead (2024)

Película dirigida por Marcus Dunstan (The Collector, The Collection), cuyo guión fue co-escrito por Josh Sims y Jessica Sarah Flaum. Se estrenó en VOD durante el mes de agosto, mientras que su salida en formato físico se dio el pasado 8 de octubre.

Sinopsis:

Un grupo de amigos universitarios rentan un Airbnb para el festival de música más grande del año, aunque un fin de semana de fiesta pronto se convierte en una pesadilla cuando cada miembro del grupo va siendo asesinado uno por uno.


Comentarios generales:

El caso de Marcus Dunstan es uno peculiar debido a que si bien su curriculum incluye trabajos como guionista en una franquicia tan importante como Saw o una participación en la serie Into the Dark, lo cierto es que la mayoría de la gente lo ubica por “The Collector” y su secuela. Lo cual ha originado que desde hace más de una década los fans solo estén interesados en saber si finalmente se llevará a cabo la tan ansiada tercera entrega, un sueño que parece cada vez más lejano y con #AMFAD: All My Friends Are Dead probablemente empiecen a existir dudas sobre si en verdad será buena idea que la haga.

Y es que Dunstan nos trae un slasher en el que trata de replicar de cierta forma lo que hemos visto en su trabajo insignia, pero la realidad es que falla de manera importante en aspectos fundamentales para hacerlo interesante desde el primer minuto. Contándonos una historia que se sustenta en la dependencia a las redes sociales por parte de las generaciones más jóvenes y así presentarnos a unos universitarios que harán cualquier clase de tonterías para conseguir fama, siendo esto básicamente lo que predomina durante un primer acto que en ningún punto trata de construir algún tipo de suspenso sólido y solo se limita a hacerte saber de la manera más insípida posible que alguien está vigilándolos con oscuras intenciones.

Así avanzan las cosas de manera aburrida y muy genérica hasta que llega la primera muerte, la cual muestra de inmediato otro gran problema debido a que pareciera que el director solo se la quería sacar de encima y la realiza con una rapidez un tanto inusual que no le permite tener el impacto que debería. Iniciando con esto una dinámica en la que se mezcla drama juvenil con asesinatos poco imaginativos sin que en ningún momento se logre generar algo de tensión que haga de estos entretenidos, además de que para este punto no solo el tema de las redes sociales queda en el olvido, sino que uno más o menos se puede ir haciendo una idea de quién podría estar detrás de la masacre por simple descarte y ante eso cada situación se siente menos relevante.

Un problema que incluso resulta más marcado durante una parte final en la que todo se limita a una persecución en un sótano que añade cierta intensidad e impacto, pero no lo suficiente como para salvar las cosas. Dejándonos ante un cierre con una revelación final que, si bien no trata de irse por lo sencillo, lo cierto es que es blanda y se siente demasiado forzada.

Las actuaciones no son las mejores, por ahí un par de actores hacen una labor decente con lo que tienen pero la realidad es que ninguna logra aportar nada significativo a la película. Mientras que en producción tampoco tenemos demasiadas cosas para destacar: el trabajo de fotografía es regular, la dirección de arte está bien, el score es genérico, el trabajo de sonido no tiene fallos, los efectos cumplen y la labor de maquillaje es discreta.

* Cuenta con una escena a la mitad de los créditos

Opinión final: #AMFAD: All My Friends Are Dead es mediocre. Un slasher sin chispa que se volverá irrelevante en poco tiempo.

Ojometro:
**

martes, 15 de octubre de 2024

Crítica: The Substance (2024)

Película escrita y dirigida por Coralie Fargeat (Revenge). Se estrenó en cines dentro de los Estados Unidos y México el pasado 20 de septiembre, recaudando hasta la fecha $24.7 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

Elisabeth Sparkle (Demi Moore) es una celebridad en decadencia que consume una droga vendida en el mercado negro, la cual replica las células de manera temporal para crear una versión más joven y mejorada de ti mismo.


Comentarios generales:

Adentrarse al mundo del body horror no es tan sencillo como el slasher o los zombies, se necesita tener resistencia hacía lo grotesco para soportarlo y ahí es cuando muchas personas optan mejor por ignorarlo dado a que ciertamente puede no ser una experiencia agradable si lo que buscas es solo pasar un buen rato en el cine. Por ello es que me llevé una gran sorpresa cuando The Substance empezó a recibir tantos elogios a pesar de pertenecer a este subgénero, sin duda era una rareza y después de verla uno puede entender más o menos los motivos de esto.

Y es que lo traído por Fargeat trata temas como la cosificación de la mujer y la obsesión con la edad en Hollywood, lo cual resuena bastante en una época en la que la industria del entretenimiento atraviesa por un escrutinio muy fuerte. Permitiendo con esto que las libertades para contar esta historia sean bastantes y honestamente la directora logra que durante la primera mitad las cosas avancen de una manera impecable, logrando que el trasfondo no se pierda en lo absoluto entre lo extravagante que resulta todo lo relacionado con la sustancia; en especial cuando Sue entra en escena para añadir un toque de sensualidad que podría haber generado polémica.

Simplemente todo avanza bajo un ritmo agradable mientras de manera sutil se empieza a plantear la problemática que representa vivir bajo esta dinámica para las dos protagonistas, llevando así a un conflicto peculiar que va escalando en cuanto al nivel de tensión conforme las ambiciones de una afectan a la otra y dar así inicio al periodo en donde precisamente el body horror se vuelve el foco de atención. Aunque también hay que decir que una vez que llegamos a este punto la película pierde un poco el rumbo dado a que, conforme se va viendo la transformación de una de ellas, esta va cayendo en comportamientos un tanto absurdos que chocan por completo con el tono que se había estado manejando y eso le va quitando fuerza a las acciones mientras se le da vueltas a lo mismo sin que se presente un avance significativo en lo que ocurre en pantalla.

Algo que obliga a que para la parte final se tenga buscar el mayor shock posible con el propósito de disimular un poco la falta de profundización y ocultar ciertas incoherencias en lo que se refiere al comportamiento de Elisabeth. Dejándonos ante un espectáculo visual extremo que resulta muy divertido a pesar de todo, donde lo grotesco y lo sangriento se combinan de gran forma para dejar un cierre caótico que puede provocar varias sensaciones, menos el dejarte indiferente.

En cuanto a las actuaciones hay que decir que tanto Demi Moore como Margaret Qualley (Sue) hacen un gran trabajo, en teoría son la misma persona pero logran darle su sello único en base a la edad que representan en pantalla; además de que cuando toca irse a los extremos ambas cumplen sin demasiadas dificultades. Mientras que Dennis Quaid (Harvey) aporta el grado de excentricidad necesario con un personaje que resulta grotesco sin tener que transformarlo en un monstruo deforme.

Y en lo referente a la producción tenemos una buena factura: el trabajo de fotografía es muy sólido, la dirección de arte impecable, el score cumple, el trabajo de sonido es limpio, los efectos están muy bien hechos y la labor de maquillaje es de primer nivel.

Opinión final: The Substance me gustó. Definitivamente no es para todo el mundo, pero si disfrutan del body horror se van a divertir. 

Ojometro:
****

viernes, 11 de octubre de 2024

Crítica: V/H/S/Beyond (2024)

Séptima entrega de la franquicia, la cual cuenta con la participación de 7 distintos directores. Se estrenó en VOD dentro de los Estados Unidos el pasado 4 de octubre, aunque no hay información sobre si saldrá en formato físico.

Sinopsis:

Seis escalofriantes y sangrientos videos desatan el terror en un infierno inspirado en el sci-fi, empujando los límites del miedo y del suspenso.  


Comentarios generales:

Pocos lo saben, pero la primera “V/H/S” es una de las razones por las cuales decidí empezar este blog hace 12 años atrás y cada que sale una nueva entrega me remonto a aquella época. Por ello es que siempre les tengo cierta estima a pesar de su marcada inconsistencia en cuanto a la calidad y de mi poco gusto por el subgénero al que pertenecen; sin embargo, debo de decir que con V/H/S/Beyond me he encontrado con la mejoría más notoria desde que la franquicia fue revivida hace cuatro años.

Y es que el hecho de que ya no se centren en un año en especifico eliminó muchos de los problemas que se encontraron en mayor o menor medida con las tres películas previas, logrando con esto que la mayoría de los cortos no estuvieran atados a algo que no pretendían utilizar. Brindando así una libertad creativa que devuelve un poco la esencia de sus inicios sobre que cualquier cosa podía verse en esta antología, incluso si hay una línea predominante en cuanto a la temática (la cual ignoran un par de historias en esta ocasión). 

Sobre la producción solo hay un corto que claramente gozó de un presupuesto mayor dado a que depende muchísimo de los efectos visuales (“Live and Let Dive”). Aunque en realidad eso no afecta demasiado y todos mantienen un equilibrio que beneficia a la estética general del filme.

Pasando a los cortos:


“Abduction/Adduction” (Jay Cheel)

Es la historia enlace y como ya suele ser toda una costumbre, no es muy buena que digamos.

Del lado positivo está la manera en la que la presentan (estilo documental) porque no es algo que hubieran hecho antes, pero la realidad es que el caso principal no es relevante y se le da más importancia a una serie de entrevistas que tratan de añadir un toque realista de la manera más aburrida posible.


“Stork” (Jordan Downey)

Un corto que en esencia es uno de zombies y se sacan de la manga una justificación muy simple para alinearla con el tema predominante. Lo cual podría haber sido un problema de no ser por el hecho de que es sumamente entretenido al manejar un ritmo caótico y muchísima violencia; además de que incluso se dan el lujo de presentar a una criatura que definitivamente genera impacto por lo extraña que es.


“Dream Girl” (Virat Pal)

A mi juicio el más flojo de todos y en gran parte se debe a que está muy cargado de dialogo vació, aplicando la típica estrategia de revelar algo muy exótico con la esperanza de que eso sea suficiente para hacer olvidar la falta de sustancia previa.

Simplemente es aburrido y nada de lo pensado para generar impacto funciona, al grado de que te quedas con la sensación de que no hubiera pasado nada si no lo incluían.


“Live and Let Dive” (Justin Martínez)

Mi favorito.

Es una historia que combina a la perfección el miedo real de tener un accidente aéreo con la temática extraterrestre, logrando que tanto lo que ocurre en el aire como en tierra resulte igual de aterrador. Y en gran parte se debe a que el director mantiene un nivel de intensidad constante que no permite respiro alguno una vez que inicia el caos, llevando todo a los extremos y ofreciendo las dosis de violencia suficientes para hacer de los aliens unos muy amenazantes.


“Fur Babies” (Christian Long y Justin Long)

Probablemente uno de los cortos más extravagantes no solo de Beyond, sino de toda la franquicia de V/H/S.

Sobre todo porque utiliza de base el amor que los humanos tienen por sus mascotas y lo retuerce de tal manera que, a pesar de no ser tan violento u extremo, si es sumamente eficaz al momento de generar tensión e incomodidad.


“Stowaway” (Kat Siegel)

Indudablemente el de mayor perfil dado a que es el debut de Kat Siegel tras la cámara, pero sobre todo porque fue escrito por Mike Flanagan.

Se podría decir que es el que maneja la temática extraterrestre de forma más tradicional y por lo consiguiente el que se toma mayor tiempo para llevar a algo importante. Y aunque no es el más emocionante o visualmente atractivo, lo cierto es que una vez que empieza jugar de manera directa con la cuestión sci-fi logra presentarnos una situación que te atrapa y no te suelta hasta su efectiva conclusión.

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Opinión final: V/H/S/Beyond me gustó. No es perfecta, pero sin duda es de las mejores entregas de la franquicia.

Ojometro:
****

martes, 8 de octubre de 2024

Crítica: Salem’s Lot (2024)

Adaptación de la novela de Stephen King escrita y dirigida por Gary Dauberman (Anabelle Comes Home). Se estrenó a nivel mundial el pasado 3 octubre directamente en Max.

Sinopsis:

Ben Mears (Lewis Pullman) es un escritor que regresa a su pueblo natal Jerusalem’s Lot en búsqueda de inspiración para su nuevo libro, aunque estando ahí descubrirá que los habitantes del pueblo están siendo atacados por un vampiro sediento de sangre.


Comentarios generales:

Considerando la gran cantidad de adaptaciones que existen de los libros de Stephen King, la verdad resulta sorpresivo que siendo una historia de vampiros Salem’s Lot se haya quedado anclado durante tantos años con solo un par de mini-series (1979 y 2004) a pesar de ser fácilmente explotable. Así que cuando se anunció está nueva adaptación para cine me alegré bastante, pero también me encontraba dudoso gracias al caos que es Warner Bros en la actualidad y la verdad todas las decisiones que tomaron para terminar orillándola a un estreno por su plataforma de streaming solo empeoraban las cosas; sin embargo, al final me he pasado un buen rato.

Y es que aunque Dauberman se toma sus libertades y tiene que dejar fuera algunas cosas para poder contar esta historia en menos de dos horas, lo cierto es que se las ingenia para ofrecer una experiencia con la sustancia suficiente como para involucrarte de lleno con el pueblo y su numeroso grupo de habitantes. Algo que durante el primer acto lleva a que el ritmo sea un tanto acelerado y donde se puede argumentar que unos 15 o 20 minutos extra hubieran sido de gran ayuda, ya que ante la prisa por establecer determinadas situaciones importantes no se deja que los personajes tengan una presentación más sólida (especialmente Mark) y por momentos se siente que brinca de una escena a otra sin dejar el tiempo necesario para que estas tengan un mayor peso.

Algo que afortunadamente va quedando atrás con el pasar de los minutos y gracias a las tragedias se empieza a generar un tono más oscuro que permite trabajar con la presencia de los vampiros, apostando por el suspenso sin tener que ocultarlos por completo o recurrir a un gorefest para hacerlos amenazantes. Además, las cosas fluyen de manera agradable no solo por contar con momentos de tensión efectivos, sino que también porque la dinámica entre los personajes más importantes se empieza a sentir sólida y gracias a eso las escenas pensadas para reflejar el nivel de amenaza que está consumiendo al pueblo tienen un buen grado de efectividad más allá de la impecable labor visual lograda por medio del trabajo de fotografía y los efectos visuales.

Construyendo así un camino entretenido hacía una parte final que indudablemente es la que más se aleja del libro, pero que cumple con su objetivo a la perfección. Ya que aquí la intensión era exponer algo más espectacular sustentándose en la acción y al trasladar las acciones a un espacio abierto, en donde la cantidad de vampiros puede ser desplegada a mayor escala, le brinda mucha fuerza a un cierre que incluso con los cambios resuelve los puntos más importantes.

En el tema de las actuaciones tenemos a un Lewis Pullman que hace lo necesario para sacar adelante el personaje sin que este sea uno precisamente memorable; en gran parte por la rapidez con la que se desarrolla todo. Mientras que el resto del elenco cumple con sus objetivos para complementarlo de la manera más competente posible.

Y en cuanto a la producción, nos encontramos ante una factura de buen nivel: el trabajo de fotografía es muy bueno, la dirección de arte impecable, el score resulta agradable, el trabajo de sonido es limpio, los efectos son sólidos y la labor de maquillaje cumple con su propósito de manera efectiva.

Opinión final: Salem’s Lot me entretuvo. Película divertida de vampiros que puede servir para que nuevas generaciones sientan curiosidad por la novela de Stephen King.

Ojometro:
***

viernes, 4 de octubre de 2024

Crítica: Strange Darling (2024)

Película escrita y dirigida por JT Mollner. Se estrenó en formato digital dentro de los Estados Unidos el pasado 23 de agosto, mientras que su salida en formato físico está confirmada para el próximo 5 de noviembre.

Sinopsis:

Nada es lo que parece cuando una retorcida noche de sexo casual se torna en una en la cruel ola de asesinatos por parte de un asesino en serie.


Comentarios generales:

Cuando uno veía el trailer de Strange Darling realmente no se podía encontrar nada fuera de lo común y por ello es que no era una película a la que muchas personas le tuvieran la mirada puesta durante 2024. Sin embargo, el ruido que empezó a generar a su alrededor en festivales la convirtió en uno de esos casos en los que era imposible no sentir curiosidad por saber si en verdad era tan buena como decían y después de verla uno puede entender perfectamente bien el porqué de tantas alabanzas, incluso si no se trata de un trabajo tan memorable como te lo quieren vender.

Y es que lo traído por JT Mollner resalta por la forma no lineal en la que nos cuenta su historia, dividiéndola en seis capítulos que van saltando de uno a otro sin ningún orden numérico para magnificar las dudas desde muy temprano sobre lo que parece ser una simple persecución entre un psicópata y una mujer en peligro. Brindándole con esto al primer acto una dinámica interesante en la que los cambios bruscos de ritmo no afecten los distintos tipos de interacciones que manejan ambos protagonistas, quienes muestran una muy buena química y gracias a eso la intriga por saber qué diablos fue lo que originó todo el problema resulta ser muy elevada.

Algo que logran mantener hasta que se empiezan a centrar de manera más profunda en el encuentro sexual y por ciertos detalles uno puede llegar a descifrar rápidamente la sorpresa que tienen en mente, quitándole así gran parte del atractivo dado a que sin este factor sorpresa no es que se vuelva aburrido lo que ves, sino que la manera de contarlo ahora si es algo problemática. Más que nada porque evita que las acciones puedan mantener una fluidez que permita generar un nivel de tensión elevado debido a que los momentos diseñados para eso ya se utilizaron, volviendo difícil que el espectador se pueda meter de lleno nuevamente al peligro que se quiere manifestar en pantalla por medio de uno de los personajes.

Magnificándose esto mucho más durante una parte final que alarga la resolución por medio de una larga conversación para luego presentar una serie de decisiones bastante estúpidas que desentonan con todo lo previo. Dejándonos así ante un cierre que sorprende por lo sencillo y vacío que es.

En el tema de las actuaciones es sin duda donde tenemos la mayor fortaleza de la película con una Willa Fitzgerald (The Lady) que lo hace realmente bien por medio de un personaje que es mucho más complejo de lo que parece. Mientras que Kyle Gallner (The Demon) resulta muy intimidante y gracias a eso uno jamás puede estar seguro sobre su verdadera naturaleza.

Y en cuanto a la producción tenemos una buena factura: el trabajo de fotografía es muy bueno, la dirección de arte cumple, el soundtrack puede ser un tanto frustrante, el trabajo de sonido no es el más cuidado, los efectos son sólidos y la labor de maquillaje es discreta.

Opinión final: Strange Darling está ok. Película con buenas actuaciones cuyas grandes ambiciones no se logran materializar como hubieran querido.

Ojometro:
*** 

martes, 1 de octubre de 2024

Crítica: Afraid (2024)

Película escrita y dirigida por Chris Weitz (The Twilight Saga: New Moon). Se estrenó en cines dentro de los Estados Unidos el 30 de agosto, mientras que en México hizo lo propio el pasado 19 de septiembre; recaudando hasta la fecha $12.1 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

Curtis (John Cho) y su familia son seleccionados para probar un nuevo aparato: una asistente digital llamada AIA. Quien rápidamente aprende el comportamiento de todos los miembros y anticipa sus necesidades para asegurarse de que nada, ni nadie, se entrometa en su camino.


Comentarios generales:

Salvo que durante estos últimos tres años hayan estado viviendo en alguna caverna totalmente alejada de la civilización, lo más probable es que sepan que la IA (Inteligencia Artificial) ha estado en boca del mundo entero y, sobre todo, de Hollywood. Convirtiéndola en un tema perfecto para explotar considerando todo el morbo que genera en la actualidad y porque se presta para poder exagerar muchas cosas que encajan perfectamente con el cine de terror, aunque Afraid está lejos de ser el mejor ejemplo para demostrarlo.

Más que nada porque lo traído por Weitz jamás logra desarrollar su idea más allá de la curiosidad que representa una IA malvada y se limita a replicar muchas cosas que hemos visto antes en otras películas, esperando a que sea la dinámica familiar la que pueda cargar con el peso de la historia hasta que las cosas se descontrolen. Lo cual origina que los primeros 30/35 minutos sean de auténtico bostezo dado a que todos los integrantes son personajes unidimensionales cuyos problemas no te importan demasiado y sus interacciones con AIA llevan a situaciones predecibles que no ayudan en lo absoluto a la construcción del misterio que hay detrás de esta.

Algo que resulta mucho más evidente durante un segundo acto que por cuestiones naturales tiene que empezar a revelar detalles, pero que ante la falta de sustancia carece de un rumbo bien definido y por lo mismo se crean grandes huecos en donde pareciera que solo se fueron insertando ideas al vapor para poder rellenarlos. Evitando con esto que la película alcance un nivel de tensión decente como para sentir que la familia se encuentra en verdadero riesgo y que todo lo que hay detrás de la IA llevará a algo importante para tratar de justificar muchas cosas que simplemente no tienen lógica; en especial la manipulación de determinados personajes secundarios.

Cosa que lamentablemente no se da y el camino elegido para la parte final es todavía más absurdo. Dejándonos ante un desenlace que probablemente sea el único punto en donde vemos mayor intensidad en las acciones, sin embargo, esto no es suficiente como para corregir el rumbo y evitar que el cierre deje sensaciones de que todo lo que acabas de ver no llevó a absolutamente nada.

En cuanto a las actuaciones no hay mucho que decir, John Cho está correcto y ver a David Dastmalchian (Lightning) siempre es agradable, pero honestamente no hay mucho que destaque. Mientras que en producción tenemos una factura limpia sin nada que sobresalga de gran manera: el trabajo de fotografía cumple, la dirección de arte es simple, el score no aporta mucho, el trabajo de sonido es sólido y todo lo referente a efectos/maquillaje resulta discreto.

Opinión final: Afraid es mediocre. Película con poco sentido que es mejor evitar.

Ojometro:
**