sábado, 7 de enero de 2017

Crítica: Amityville Exorcism (2017)


Película dirigida por Mark Polonia (Splatter Farm, Terror House), cuyo guión fue escrito por Billy D'Amato. Se estrenó el pasado 3 de enero directamente en DVD y VOD dentro de los Estados Unidos.

Sinopsis:

Un padre alcohólico tendrá que poner toda su fe en manos de un misterioso sacerdote cuando una fuerza demoníaca, conectada con décadas de asesinatos ligados a su casa, toma posesión de su hija adolescente.   



Comentarios generales:

No tuvo que pasar mucho para tener la primera película obligada del año que pretende explotar la humilladísima marca de Amityville y aunque sabía que existía un porcentaje muy alto de encontrar un fiasco, le di una oportunidad. Sin embargo, absolutamente nada me tenía preparado para lo que me encontraría con Amityville Exorcism; uno de esos trabajos con los cuales no sabes si reír o llorar por lo atroces que son en absolutamente todos los sentidos.

La verdad uno puede darse una idea clara de lo que se arriesga a ver justo con la primera toma que presentan, ya que por medio de esta queda perfectamente claro el nivel de película que nos va a regalar Polonia; quien parece completamente desinteresado en pulir los detalles y solo se limita a filmar sin muchas preocupaciones. Dándole vida a una historia genérica que sigue los patrones normales de cualquiera ligada con Amityville, pero bajo una pasividad enorme y una nula construcción del suspenso que vuelve complicado el poder tomarla en serio; en especial cuando se empiezan a manifestar los aspectos paranormales. Los cuales dan más pena (o risa) que otra cosa en su búsqueda por querer establecer de manera digna a cada uno de estos personajes con tan poco carisma.

Situación que empeora cuando se revela la conexión con Amityville, la cual es absurda como pocas y que significa el estancamiento total de las acciones. Ya que a partir de aquí lo único que vemos son situaciones totalmente genéricas diseñadas con el único propósito de tratar de resaltar las perturbaciones sufridas por la joven poseída ante la presencia del sacerdote para así ir construyendo un enfrentamiento que, en teoría, tendría que ir subiendo de intensidad con el paso de los minutos (lo cual no ocurre).  

La parte final nos presenta uno de los exorcismos más desangelados que haya visto, no tanto porque carezca de cosas habituales en esta clase de historias, sino porque están increíblemente mal hechas. Obvio el raquítico presupuesto evitaba el poder ver algo de espectacular, pero ni siquiera se logra generar un ritmo adecuado para volverlo dinámico y además carece de cualquier clase de impacto que le pueda brindar la fuerza necesaria al desenlace.

Las actuaciones son completamente amateurs, alguna que otra los hará reír por lo falsas que resultan, pero en general todo lo que tiene que ver con este rubro es un desastre. La producción tampoco es mucho mejor:  el trabajo de fotografía es mediocre, la dirección de arte descuidada, el score es posiblemente lo más rescatable, el trabajo de sonido contiene fallas, los efectos parecen hechos con Windows Movie Maker y la labor de maquillaje es pobre.

Opinión final: Amityville Exorcism es un desastre. Primera película de 2017 que se convierte inmediatamente en una fuerte candidata para ser la peor del año.

Ojometro:
*