Película dirigida por Darren Lynn
Bousman (Saw II, The Devil’s Carnival) y escrita por Christopher Monfette. Se
estrenó de manera limitada en cines y VOD dentro de los Estados Unidos durante
diciembre del año pasado, mientras que su salida en formato físico se dio en
febrero de 2017.
Sinopsis:
La reportera Julia Talben (Jessica
Lowndes) hará equipo con un oficial de policía para resolver el misterio que
rodea a una serie de asesinatos a lo largo de los años, incluido el de su propia
hermana.
Comentarios generales:
Sinceramente Abattoir salió de mi
radar durante el año pasado gracias a la época en la que se dio su estreno,
pero era una propuesta que me llamaba la atención con lo poco que había visto. Más
que nada porque su director es alguien con un estilo muy particular que no teme
experimentar con algunas de las ideas más absurdas o locas que se puedan
encontrar dentro del género, siendo esto precisamente el sello característico
de este trabajo.
Lo digo porque Bousman y Monfette
nos regalan algo que tiene muy poco sentido pero de algún modo logran que sea entretenido
de ver, sobre todo por la manera en la que hacen que esta historia mute de una
mitad a otra, al grado de que en un punto parezcan de películas totalmente
distintas. Ya que la primera es un thriller en toda la regla, uno que además
arranca de manera sumamente intensa para lograr que nuestra protagonista se
vuelva un personaje emocionalmente vulnerable por medio de la tragedia y que gracias
eso se inicie una investigación que avanza de manera mucho más rápida de lo que
te hubieras imaginado; insertando así elementos extraños dentro de este
peculiar caso que por determinados momentos son un tanto complicados de
comprender ya que, como mencione anteriormente, no tienen mucho sentido.
Es ya llegada la segunda mitad cuando las
cosas se calman, el ritmo se desacelera y el thriller pasa a ser algo mucho más
fantasioso cuyo sustento ahora serán el aspecto visual (un sello característico
de Bousman) y la revelación de una secta que mueve todos los hilos. Entrando
así a la parte en la que ciertamente se logra generar la mejor atmósfera y el
grado de suspenso se eleva de manera importante, aunque igualmente es a partir
de aquí cuando poco a poco se empieza a volver tedioso lo que te muestran; no
tanto por la falta de intensidad, sino porque es más que evidente que se elabora
de más una idea que en un punto toca pared y simplemente no saben cómo
redondearla de la manera menos perjudicial considerando su extravagancia.
La parte final ciertamente es
caótica. Visualmente es un deleite, los escenarios son hipnotízantes y ya para
estas alturas la posible coherencia con lo que ocurre importa poco, lo cual da
vía libre para explotar el tema de la violencia y así poder construir un
cierre potente que afortunadamente no toma el camino fácil.
En el tema de las actuaciones Lowndes
no lo hace mal, esto a pesar de que le cuesta mucho trabajo poder expresar emociones
un poco más marcadas; aunque cuando la ponen junto a actores como Lin Shaye
(Allie) o Dayton Callie (Jebediah) resulta totalmente opacada. En cuanto a producción
es destacada: el trabajo de fotografía es muy bueno, la dirección de arte estupenda,
cuenta con un buen score, el trabajo de sonido es sólido, los efectos cumplen
su objetivo y la labor de maquillaje resulta discreta.
Opinión final: Abattoir está ok.
Se trata de una idea medio absurda que no explota por completo, pero puede ser
una buena opción para ver un fin de semana.
Ojometro:
***
***