viernes, 5 de noviembre de 2021

Crítica: Paranormal Activity: Next of Kin (2021)

Séptima entrega de la franquicia, la cual está dirigida por William Eubank (Underwater) y escrita por Christopher Landon. Se estrenó a nivel mundial directamente por Paramaount+ el pasado 29 de octubre.

Sinopsis:

Margot (Emily Bader), una joven que fue abandonada por su madre cuando era bebé, viaja a una apartada comunidad Amish junto a un equipo de filmación para conocer a sus parientes y encontrar respuestas sobre su pasado.


Comentarios generales:

A pesar de que durante 2015 se dijo que “The Next Dimension” sería la última entrega, la verdad es que muy pocos lo creyeron debido a que Paranormal Activity es demasiado rentable como para dejarla en la congeladora y por ello cuando se anunció su regreso de manera exclusiva para Paramaount+ a nadie le tomó por sorpresa. Aunque lo que si fue sorpresivo fue saber que Next of Kin iba a ser un reinicio para la franquicia, lo cual parecía una decisión extraña considerando que esta no es tan vieja; sin embargo, una vez terminado el visionado cobró mucho sentido.

Y no es porque lo presentado por Eubank y Landon sea una maravilla, sino porque si logran construir de manera relativamente simple una nueva mitología que dará bastante contenido para los próximos años.

Todo por medio de una historia con la que no se rompen la cabeza en términos de originalidad y que durante la primera media hora no se diferencia mucho de otras tantas películas que manejan una premisa similar. Siendo lo más atractivo el ver como en cuanto a producción esta es la entrega más cuidada de todas y también como el tema del found footage en primera persona en está ocasión no es tan estricto debido a que el director realmente utiliza otros ángulos de cámara sin una justificación lógica cuando la escena así lo necesita.

Aspectos técnicos que son interesantes pero que no evitan que el visionado resulte aburrido debido a que no existen demasiadas situaciones para recordar desde el lado del terror y la extravagancia de la propia comunidad Amish se desgasta de manera rápida, aunque una vez que empiezan a salir a la luz los misterios que ocultan hay una mejoría evidente. Sobre todo porque el tono se vuelve más oscuro, se incrementan los jump scares y los aspectos satánicos logran generar algunos momentos de tensión efectivos para ir preparando el camino de lo que será una parte final en la que se ponen absolutamente todas las esperanzas para dejar un impacto positivo.

Algo que sin duda logran gracias a que es por mucho lo mejor de la película y en general lo que la salva de ser totalmente intrascendente. Sustentándose en una persecución que abarca diferentes escenarios y en general es puro caos del bueno; donde la violencia se magnifica para establecer precisamente un nuevo peligro que, en teoría, será la base de lo que podría venir en futuras secuelas.

Sobre las actuaciones tenemos lo habitual con una Emily Bader que hace un trabajo correcto en lo que se refiere a los gritos e intensidad que esta clase de historias necesitan. Además de que Dan Liper (Dale) como aporte cómico secundario tiene algunos momentos bastante graciosos con la comunidad.

En cuanto a producción, tal como lo mencione anteriormente, esta es la entrega más cuidada en ese sentido: el trabajo de fotografía es sólido, la dirección de arte cumple, el trabajo de sonido es limpio, los efectos son sencillos y la labor de maquillaje resulta efectiva. 

Opinión final: Next of Kin está apenas pasable. Entrega genérica a la que la salva su parte final, pero que definitivamente le dará nueva vida a la franquicia.  

Ojometro:
***