Película dirigida por Andy Palmer
(Find Me), cuyo guión fue escrito por Ben Begley. Se estrenó en VOD y formato
físico dentro de los Estados Unidos el pasado 7 de junio, aunque todavía están
pendientes las fechas de su llegada a otros mercados.
Sinopsis:
Seis de los psicópatas más
peligrosos del mundo se escapan de un manicomio y proceden a desatar el terror
entre el público dentro de una casa de los horrores durante la noche de
Halloween, la cual está inspirada precisamente en sus crímenes más sangrientos.
Comentarios generales:
Robert Englund es uno de los
personajes más queridos y respetados dentro del género, así que cuando una
película cuenta con su participación es prácticamente una obligación verla. Obvio
con esto las expectativas crecen y en el caso de The Funhouse Massacre había
mucha curiosidad considerando que la vendían como un homenaje a los trabajos de
atracciones de los 80s (especialmente The Funhouse de Tobe Hooper), algo que
sin duda cumple; aunque con un humor que podrá no ser muy atractivo para todo
el mundo.
Y es que después de un inicio
sangriento que establece lo peligrosos que son los psicópatas (con sorpresa
incluida que seguro causará malestar) la película cae en una dinámica sustentada
en un humor muy simple por medio de personajes estereotipados que, además de no
aportar mucho, te mete la idea de que el aspecto cómico será lo dominante en
una historia cuya esencia tendría que ser la violencia. Provocando así que el primer
acto sea uno bastante lento, pero que poco a poco se va recuperando conforme las
acciones se trasladan dentro de la atracción y se empieza a explicar de mejor
manera lo que hay detrás de este macabro plan para generar un deseo genuino por
querer ver la masacre que nos espera.
Una que es realmente efectiva y
sin duda el alma de todo esto, ya que la manera en la que se desarrolla es algo
muy entretenido de ver gracias al balance entre humor/gore que el director
logra; uno que además se ve beneficiado por un ritmo caótico y un trabajo
visual en extremo llamativo. En verdad todo lo que tiene que ver con la casa de
los horrores está muy bien hecho y por lo mismo el espectador siente como si
estuviera dentro de una de estas atracciones; en donde además se muestra un
aspecto un tanto perturbador sobre como las personas bien podrían no
diferenciar en ciertas circunstancias lo que es verdad y lo que es ficción.
Para nuestra mala suerte la parte
final decae un poco, no tanto por la ausencia de sangre o momentos de impacto,
sino porque se siente muy acelerada. La mayoría de los psicópatas pasan a
segundo término y el conflicto que a lo largo de toda la película se va construyendo
termina de manera abrupta, sin demasiadas respuestas y con la clara encomienda
de dejar preparado el camino para una posible secuela.
Las actuaciones están bien, no
son ninguna maravilla y por lapsos el humor manejado vuelve a ciertos
personajes detestables, pero en general cumplen con su propósito. La producción
es de factura sólida: el trabajo de fotografía es bueno, la dirección de arte es
lo mejor de la película, el score está ok, el trabajo de sonido tiene altibajos,
los efectos son en su mayoría prácticos bien hechos y la cuestión del
maquillaje no desentona.
Opinión final: The Funhouse
Massacre me entretuvo. Ciertamente no es para todos los gustos, pero si logran
digerir su humor seguro pasarán un buen rato.
Ojometro:
***
***