Película escrita y dirigida por David
Koepp (Stir of Echoes, Secret Window), la cual es una adaptación de la novela
del mismo nombre. Se estrenó en VOD dentro de los Estados Unidos el pasado 18
de junio, aunque todavía no hay información sobre si saldrá en formato físico.
Sinopsis:
Un banquero retirado, su joven
esposa actriz y su pequeña hija van de vacaciones a una apartada y sumamente
moderna casa en los campos de Gales en la que nada es lo que parece.
Comentarios generales:
Blumhouse se ha vuelto una fuerza
tan dominante dentro del género de terror que incluso en medio de una pandemia
ha podido capitalizar un proyecto que se vio afectado por las medidas de
contención aplicadas dentro de los Estados Unidos. Ya que originalmente You
Should Have Left se iba a estrenar en cines, pero ante las complicaciones se
optó por estrenarla en otras plataformas que parecían un tanto extrañas para
una película que aparentaba ser de un perfil mayor en los planes del estudio.
Aunque al final esta decisión parece que fue la mejor que pudieron tomar.
Y es que lo que nos trae Koepp es
un thriller psicológico bastante discreto cuyo atractivo depende en gran medida
de las actuaciones de su reconocido elenco, ya que la historia como tal es
mucho más predecible de lo que imaginas y uno bien puede descifrar durante los
primeros 15 minutos detalles que serán muy importantes. Lo cual no luce como
algo sumamente alentador, pero la verdad es que no es suficiente como para
quitarte todo el interés en la película debido a que durante el primer acto se
logra establecer una dinámica sólida de familia feliz que hace que sientas
curiosidad por saber si al menos tenías razón con respecto a lo que
descifraste.
Además a esto hay que agregarle que
el estilo visual minimalista de la propia casa ayuda a la generación temprana
de momentos desconcertantes con los que se empiezan a sembrar las dudas con
respecto a lo que verdaderamente ocurre ahí. Esto porque igual puede ser una
cuestión psicológica de Theo, la presencia de algún fantasma o simplemente el
hecho de que la casa está embrujada.
Hasta ahí todo va bien, sin
embargo, una vez que las cosas se empiezan a asentar la caída resulta evidente.
Principalmente porque la construcción de los momentos diseñados para generar suspenso
no es precisamente la mejor, aunque el
mayor problema recae en el hecho de que, en el afán por querer elaborar en
demasía situaciones no tan
complejas, se empieza a caer en una repetitividad que poco a poco hace que el
ritmo se vuelva cansino y con ello todo lo referente al misterio detrás de la
casa vaya perdiendo fuerza.
Dejándonos así un último acto que
es predecible, pero que al menos logra recomponer el rumbo por medio de un juego
visual llamativo con los escenarios y, sobre todo, por darle rienda suelta a la
fragilidad mental de Theo. Cuya problemática sin duda ayuda a que los minutos
finales cuenten con un nivel de intensidad adecuado.
Como lo mencione anteriormente,
las actuaciones son lo que sostiene a la película. Con un Kevin Bacon (Theo) que
está realmente bien de principio a fin, mostrando un sutil pero constante descenso
a la locura que te hace involucrarte de lleno con su personaje; mientras que
Amanda Seyfried (Susanna) y en especial la pequeña Avery Tiiu Essex (Ella)
realizan una buena labor de complemento.
La producción es de factura
impecable: el trabajo de fotografía es muy bueno, la dirección de arte es
sólida, el score cumple, el trabajo de sonido está bien cuidado, los efectos
están bien hechos y la labor de maquillaje es bastante simple.
Opinión final: You Should Have
Left es aceptable. Un thriller con buenas actuaciones que jamás puede redondear
su propuesta.
Ojometro:
***
***