Película escrita y dirigida por Dante
Tomaselli (Desecration, Satan's Playground), quien además también ejerce como
productor. Se estrenó en enero de este año directamente en DVD y diversas
plataformas digitales dentro de los Estados Unidos.
Sinopsis:
Jimmy Morgan (Carmen LoPorto) es
un niño encerrado en una jaula cual animal salvaje por su religiosa madre,
quien piensa que está poseído y trata de practicarle un exorcismo que termina
mal. Varios años después Jimmy escapa del instituto mental donde estaba
internado con deseos de venganza; aunque no está solo, ya que ha formado un
ejército de niños que lo ayudarán a satisfacer su sed de sangre.
Comentarios generales:
Quienes hayan visto los trabajos
anteriores de Tomaselli seguramente sabrán que no se trata de un director
común, ya que su estilo se enfoca más en decir con imágenes lo que no puede
decir con palabras para así retar la paciencia del espectador. Por ello su
cuarto filme causo mucha expectativa a inicios de este año y considerando el tiempo
que se tomó para hacerlo esperaba una evolución importante con respecto a su
último filme, pero en lugar de eso me encontré con algo que simplemente no me convenció.
Con Torture Chamber tenemos una película
que no sigue la clásica estructura de tres actos a la que estamos acostumbrados,
sino que en su propósito por lograr que esto luzca más como una auténtica
pesadilla Tomaselli va integrando escena tras escena sin la más mínima explicación
o solo brindándote alguno que otro punto de unión para comprender más o menos
la “historia” que quiere contar; dándole así mucho más importancia a la construcción
de la atmósfera gótica, a la creación de imágenes tétricas y al uso de iconografía
religiosa para tratar de incomodar al espectador por diversos frentes.
Claramente su intención no es divertir, sino golpearte desde lo más profundo de
tu cerebro al retar algunas creencias de lo que es el bien y el mal, utilizando
la venganza de Jimmy como el principal conducto.
El problema es que todo lo hace bajo
un ritmo sumamente pasivo, ya que a pesar de que solo dura una hora y media el
filme se vuelve eterno. Muestra algunas escenas violentas de tortura muy bien hechas
que logran mantenerte atento, pero la mayor parte del tiempo vemos cosas que se
repiten una y otra vez sin que añadan gran profundidad: ver correr a niños
quemados o ver como las victimas siempre terminan en el mismo lugar no es
precisamente interesante. Además el uso de los flashbacks nunca resulta lo
suficientemente convincente para justificar el odio de Jimmy hacia algunas de
sus víctimas.
El final no les podrá importar
menos debido a que en este punto la aburrición es tal que lo único que quieres
es que ya termine. Se siente completamente anti climático.
En cuanto a las actuaciones debo
de decir que LoPorto está muy bien, es uno de los niños más aterradores que he
visto en pantalla últimamente; aunque el resto del elenco no está a su altura: Christie
Sanford como la madre de Jimmy te termina por fastidiar y Vincent Pastore luce
totalmente perdido cada que aparece en pantalla. La producción es discreta,
pero aquí tiene algunos de sus puntos más fuertes como la fotografía y sobre
todo el estupendo trabajo de sonido que le añade bastante a determinadas
escenas. Igualmente el score es muy bueno.
Opinión final: Torture Chamber me
aburrió. Maneja muchos conceptos interesantes, pero nunca pudo atraparme como
tal vez lo haga con otras personas.
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