Co-producción
mexicana/estadounidense escrita y dirigida por Adrián García Bogliano (Late
Phases). Se estrenó directo en VOD y DVD
dentro de los Estados Unidos durante el pasado 3 de mayo, aunque todavía no hay
información sobre cuándo llegará a otros mercados.
Sinopsis:
Aram (Francisco Barreiro) es un
contador cuya existencia es patética y su esposa solo empeora las cosas
recordándole que en su trabajo no le dan el aumento por el que tanto ha
trabajado. Frustrado por el escaso progreso y convencido de que se merece algo
más, este secuestra a una estudiante para mantenerla cautiva, desatando así una
serie de eventos que le cambiarán su vida para bien y… para mal.
Comentarios generales:
Lamentablemente el tema del
secuestro es uno que ha afectado mucho a la sociedad mexicana desde hace varios
años y por ello cuando se realiza una producción nacional o extranjera que toca
dicho tema dentro del país siempre hay un escrutinio mayor al habitual. Así que
gracias a esto Scherzo Diabólico me resultaba interesante por la forma en la
que lo manejarían y aunque al final lo hacen de manera correcta, tampoco se
vuelve un medio lo suficientemente sólido como para ofrecer una película simplemente
aceptable.
Ya que Bogliano nos regala un
primer acto lento, cuyo argumento se asemeja muchísimo a una muy popular serie
de TV con un hombre desesperado que está dispuesto a realizar lo que sea para
asegurarle una mejor vida a su familia, algo que para muchos podrá resultar
atractivo, pero que en la práctica es realmente aburrido de ver. Esto porque el
director se toma muchísimo tiempo en la planeación del secuestro al presentar
sucesos que no ayudan a elevar de manera progresiva el nivel de tensión para cuando
se lleve a cabo; provocando así que el momento crucial de la primera mitad se sienta,
si bien no irrelevante, si como algo con muy poca fuerza e impacto.
Para la segunda mitad las cosas
mejoran. No en la cuestión del ritmo, que sigue siendo insufrible, pero le
añaden una pequeña sorpresa que cambia un poco la dinámica y con ello se va
construyendo de manera acertada un inevitable conflicto que te genera un
interés genuino por ver cómo se resuelve.
Lo malo es que este explota de la manera más ridícula posible (aunque si le da cierto sentido al preponderante uso de la música en el primer acto) y a partir de ahí resulta complicado involucrarse de lleno con lo que ocurre; especialmente porque existen varios huecos evidentes con la manera en la que uno de los personajes resuelve los misterios, dejándote con la sensación de que ni el propio Bogliano sabia como explicarlos de manera coherente y mejor decidió evitarse problemas cortando ese tema.
Lo malo es que este explota de la manera más ridícula posible (aunque si le da cierto sentido al preponderante uso de la música en el primer acto) y a partir de ahí resulta complicado involucrarse de lleno con lo que ocurre; especialmente porque existen varios huecos evidentes con la manera en la que uno de los personajes resuelve los misterios, dejándote con la sensación de que ni el propio Bogliano sabia como explicarlos de manera coherente y mejor decidió evitarse problemas cortando ese tema.
La parte final es caótica y un
poco difícil de tomar en serio. Aquí es donde la violencia se desborda, lo cual
está bien; sin embargo, uno nunca entiende realmente cÓmo diablos en tan poco
tiempo se pudo dar todo esto y mucho menos comprar la locura tan repentina cuyo
mayor propósito es el shock por medio de una sed de sangre desbordada.
Las actuaciones no me
convencieron, tanto Barreiro como Daniela Soto Vell se sienten muy planos y
nunca logran generar suficientes emociones para que uno realmente se involucre
de lleno con sus personajes (además de que presentan al peor niño actor me haya
tocado ver). La producción cumple: tiene un buen trabajo de fotografía, la
dirección de arte está ok, el score es llamativo por las piezas clásicas que
utiliza, los efectos prácticos están bien hechos y el trabajo de maquillaje es
aceptable.
Opinión final: Scherzo Diabólico
no está mal, pero se queda corta. Un ritmo lento y poca coherencia evitan que
veamos un trabajo muchísimo más trascendente.
Ojometro:
***
***