Tercera entrega de la franquicia,
la cual está escrita y dirigida por Gary Dauberman. Se estrenó en cines dentro
de los Estados Unidos el pasado 26 de junio e hizo lo propio en México un par
de días después, recaudando hasta la fecha $78.3 millones de dólares en
taquilla a nivel mundial.
Sinopsis:
Ed y Lorraine Warren deciden que
para contener toda la maldad de Annabelle lo mejor es tenerla guardada dentro
del cuarto de objetos poseídos en su casa. Sin embargo, una noche el horror se
desata cuando la muñeca despierta a todos los espíritus malvados dentro del
cuarto; teniendo como objetivo a la pequeña hija de estos, Judy (Mckenna Grace),
y a sus amigos.
Comentarios generales:
El universo de The Conjuring es
peculiar debido a que este se ha ido construyendo de una manera un tanto
atípica, sin mucha planeación previa y decidiendo las cosas en base a ideas o
personajes que llegan a funcionar o resaltar dentro de alguna de las películas
que lo conforman. En el caso de Annabelle esto fue precisamente lo que ocurrió
con un resultado inicial muy decepcionante, pero que se corrigió de manera
excelsa en la segunda entrega y que dejó un panorama realmente complejo para Annabelle
Comes Home debido a que de la noche a la mañana esta se convirtió en un
proyecto trascendental para el futuro de dicho universo.
Proyecto que afortunadamente Dauberman
logra sacar adelante con buenos resultados en lo que representa su debut tras
la cámara, ya que no solo establece de manera clara lo que es la muñeca
(aspecto que para varios seguía sin ser muy claro), sino que además proporciona mucho material para futuras películas. Haciendo que esta secuela/precuela (de las dos
The Conjuring) sea prácticamente obligatoria de ver.
Y lo hace sin complicarse demasiado
la vida con una historia simple que se construye a fuego lento, brindándole durante
la primera mitad un mayor peso al desarrollo de los personajes para que podamos
conocer un poco más sobre la reputación de los Warren, pero sobre todo de la
vida de Judy. Centrándose en la dinámica con su niñera y otro personaje, lo
cual sirve como una buena vía para ir destapando los detalles que existen
detrás de algunos de los artefactos poseídos y añadir contexto a la decisión
que provocará el terror que está por venir.
Un camino que puede que no sea el
más emocionante porque por momentos si se siente un tanto lento el avance; sin
embargo, una vez que se inicia con el caos el filme alcanza notas muy altas. Esto
gracias a que el director logra que en un espacio cerrado como la casa de los
Warren se pueda generar una atmósfera tétrica y que en todo momento se sienta
el peligro para quienes están dentro o fuera de esta, ofreciendo algunas
secuencias sumamente efectivas con los nuevos demonios que aportan momentos
visualmente potentes y varios sustos. Además de añadir niveles de tensión
elevados por medio de persecuciones o simplemente por no saber exactamente qué
es lo que se encuentra en la oscuridad.
La parte final es la que no me
terminó por convencer. Por un lado la manera en la que se resuelve el problema
con los demonios es efectiva porque mantiene una buena intensidad y la sensación
de peligro nunca decrece, pero por el otro, el cierre se siente un tanto ajeno
al tono general.
En el tema de las actuaciones tanto
Madison Iseman (Mary Ellen) como Katie Sarife (Daniela) hacen una labor sólida
con sus respectivos personajes, aunque quien más resalta es Mckenna Grace. La
verdad está estupenda dándole vida a Judy Warren, cargando con gran peso de la
película y mezclando esa inocencia infantil con el hecho de que es alguien
habituada al mundo lleno de terrores por el que se mueven sus padres.
La producción es de gran factura:
el trabajo de fotografía es genial, la dirección de arte está muy bien cuidada,
el score es bastante bueno, el trabajo de sonido impecable, los efectos están
bien hechos y la labor de maquillaje cumple.
Opinión final: No está al nivel
de la segunda entrega, pero Annabelle Comes Home me gustó. Buena película para
expandir el universo de The Conjuring.
Ojometro:
****
****