Película dirigida por James Wan y
escrita por Leigh Whannell, la cual significó su segunda colaboración después
del gran éxito que tuvieron con Saw tres años antes. En 2007 fue un fracaso en
taquilla al solo recaudar $22 millones de dólares a nivel mundial (en muchos
países salió directamente en DVD), aunque con el paso de los años ha generado
grandes ganancias debido a que es muy fácil de conseguir.
Sinopsis:
Jamie Ashen (Ryan Kwanten)
regresa a su pueblo natal en busca de respuestas por el asesinato de su esposa
cuando descubre que todo puede estar conectado con un misterioso muñeco que le
perteneció a una famosa ventrílocua de nombre Mary Shaw.
Comentarios generales:
En estos últimos días no he
tenido muchos deseos de ver películas gracias a unos ligeros problemas de salud,
sin embargo, ayer me encontré esta por TV y me pareció una buena oportunidad
para hacer una crítica considerando que no la veía desde que se estreno hace
ocho años atrás. Realmente mi recuerdo era más que nada que se trataba de un
trabajo muy flojo con el cual pensaba que Wan iba a hundir su carrera, pero evidentemente
me equivoque.
Y es que analizar Dead Silence ya
con más años encima resulta bastante interesante porque uno se puede dar cuenta
sobre cómo esta marcó básicamente la línea que el director seguiría durante el
resto de su carrera y sobre como el cambio abrupto que presentó con respecto a
Saw en el tema de la brutalidad jugo un factor en su contra. Esto porque aquí lo
que nos trae es una historia cuya premisa bien pudo caer en los terrenos de
Childs Play, con pretensiones de crear un nuevo muñeco asesino, pero en lugar
de eso se va más por el lado del thriller detectivesco en donde su principal
sustento es la impresionante atmósfera generada para hacer sentir una sensación
de peligro constante en cada rincón del pueblo de Ravens Fair; logrando así
algunas escenas sumamente tétricas que, aunque no son excesivamente memorables,
si terminan marcando el tono general de la historia.
Sus problemas más que nada se
encuentran en la cuestión del ritmo y, sobre todo, en el interés mismo de la investigación.
La verdad es que todo avanza muy lento una vez que se establecen los puntos
centrales con respecto a Mary Shaw, volviendo así un tanto repetitivas las
cosas mientras esperas a que finalmente decidan brindarle un rumbo concreto al
misterio. Simplemente parece como si nunca supieran cuando empezar a integrar
la parte paranormal en todo esto sin caer en lo ridículo y alargan lo más que
se pueda este aspecto, quitándole así cierto interés.
El final claramente se vio afectado
por el hecho de que se tenía pensado realizar una secuela que ya nunca vio la
luz, pero en general creo que cumple con ese grado de sorpresa necesario para
aquellos que la ven por primera vez.
Las actuaciones están ok,
realmente no hay mucho, pero la química mostrada por Kwanten y Donnie Wahlberg
genera algunos momentos entretenidos. La producción es sin duda su punto más
fuerte: el trabajo de fotografía y dirección de arte son espectaculares, prácticamente
son lo que le dan vida a la película; el score está muy bien elegido y los
efectos son bastante sólidos en general.
Opinión final: Sin duda Dead
Silence es el punto más flojo en la carrera de Wan, aunque aún así sigue
estando por encima del promedio y resulta interesante ver cómo representó un
punto de quiebre en su estilo.
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