viernes, 22 de mayo de 2015

Crítica: Out of the Dark (2015)


Primer largometraje del español Lluís Quílez, cuyo guión fue escrito por la tripleta conformada por Javier Gullón, David Pastor y Alex Pastor. Se estrenó de manera limitada en cines y en formato digital dentro de los Estados Unidos en el mes de febrero, mientras que en México llego a cines durante el mes pasado.

Sinopsis:

Paul (Scott Speedman) y Sarah (Julia Stiles) son una joven pareja que se muda a Colombia para que ella trabaje en la fábrica de su padre. Su vida transcurre normal hasta que de pronto su hija empieza a ser acechada por los fantasmas de unos niños ligados con una trágica historia del pasado.



Comentarios generales:

Las películas sobre fantasmas deben de ser un dolor de cabeza para todo director y guionista porque son tantas las que salen año tras año que el espacio para la originalidad cada vez es más escaso. Por eso con esta clase de trabajos lo más común es ver el reciclaje de ideas, lo cual no me molesta ya que aún así se pueden llegar a ver buenas cosas; sin embargo, en el caso de Out of the Dark es claro que esa falta de ideas fue un gran problema.

Ciertamente Quílez no nos regala una mala película, de hecho, el primer acto es uno bastante interesante debido a que ofrece las pistas necesarias para ir estableciendo los peligros y, sobre todo, pone sobre la mesa una historia con detalles macabros que ayudan al espectador a comprender que los fantasmas no serán unas blancas palomas. Lo cual hace que inmediatamente el tono sea uno mucho más oscuro del esperado y que, complementado con una gran fotografía, la atmósfera presentada logre construir momentos aterradores por medio de sustos fáciles sin gran esfuerzo; simplemente todo transcurre de manera fluida para esperar lo inevitable, esa gran escena de impacto que cambie por completo las cosas.

Algo que sin duda se da, pero en lugar de generar un punto de quiebre intenso que te tenga expectante por lo que sigue, lo que provoca es un claro estancamiento en el desarrollo de las acciones. Poco a poco empieza a perder fuerza la trama y todos los elementos de suspenso presentados no son los suficientemente sólidos como para evitar que te aburras, obligando así a tener que recurrir a ideas que has visto en repetidas ocasiones que no ayudan en lo absoluto con el factor sorpresa e incluso evitan que uno pueda involucrarse mucho más con el sufrimiento de esta pareja durante el evento más traumático de sus vidas.

El final lo sentí carente de emociones, muy plano. Pasa sin mayor relevancia y aunque el giro que se da con respecto a los niños resulta bien pensado, la verdad es que no tiene nada de especial para regresarle la fuerza necesaria que fue perdiendo con el paso de los minutos; además de que se van por el camino fácil.

Stiles y Speedman hacen un trabajo apenas correcto, realmente no ofrecen nada fuera de lo que ya les hemos visto en otros trabajos, incluso por momentos no notas mucha química entre ellos; mientras que a Stephen Rea (Jordan) se queda muy cortó como el “malo” en todo esto. La producción es su punto fuerte sin duda: el trabajo de fotografía con los paisajes de Bogotá es espectacular y gran parte de los momentos aterradores se deben a la atmósfera creada por este; igualmente está bien ambientada, tiene un score sólido, cuenta con efectos discretos y el trabajo de maquillaje sufre un poco por el tono oscuro que manejan en las escenas donde tiene más presencia.

Opinión final: Out of the Dark está ok. Más que nada es una película para rentar una vez que ya se te hayan agotado todas tus opciones.

Ojometro:
***