Primer largometraje del director
James Crow, del cual además es el escritor del guión. Se estrenó el pasado 18
de mayo en los Estados Unidos y Reino Unido directamente en DVD, así como en
algunas plataformas digitales.
Sinopsis:
Una mujer inocente, acusada de
asesinar a su hijo y colgada como bruja, deja una maldición en un árbol que
afecta a los niños que juegan a su alrededor. Los efectos de este acto de
revancha hacen eco durante siglos y los espíritus de las almas sin descanso
rondan por la casa en donde sus cuerpos fueron enterrados; un lugar que ahora
recibe una nueva familia que poco a poco empezará a descubrir la aterradora
verdad de su hogar.
Comentarios generales:
He repetido en varias ocasiones
que el tema de las brujas es uno desaprovechado dentro del género, está
olvidado al menos en el cine y cada trabajo que sale me causa interés a pesar
de que sepa muy poco de lo que trata. Algo que en esta ocasión fue
contraproducente debido a que Curse of the Witching Tree, aunque en esencia es
de brujas, termina siendo una experiencia mucho más genérica ligada a fórmulas
que abundan en la actualidad.
Realmente Crow parece tener una
idea clara sobre la historia que quiere contar, pero de igual manera uno puede
notar cómo le cuesta trabajo desde muy temprano el poder establecer una amenaza
interesante con este concepto (el árbol pasa casi inadvertido) y poco a poco
empieza a conducir lo que ocurre por caminos más seguros que le permitan
explotar mucho mejor los conflictos de la familia azotada por la tragedia. Ya
que para ser sinceros los primeros 45 minutos de esto son bastante aburridos, llenos de discusiones, bullying y prácticamente cualquier susto fácil existente
en el catálogo para tratar de generar suspenso mientras las piezas pretenden conformar
algo que tenga sentido, incluso si eso llega a sacrificar elementos que uno
supondría iban a tener más relevancia.
Hay fantasmas, un asechador y
alguien en estado de coma con aparentes vínculos que todo el tiempo se sienten
completamente desconectados, en parte porque las transiciones de unas escenas a
otras no tienen la fluidez necesaria para explicar de manera sólida esto;
además de que las conexiones importantes tardan bastante en revelarse. En
general todo transcurre lento, no diría que a un ritmo soporífero pero si a uno
complicado de aguantar y que se amplifica mucho más cuando la cuestión de los espíritus
empieza a dar vueltas sin rumbo al no establecer una sensación de peligro considerable
que le dé sentido a sus acciones.
La parte final es lo más
destacable a pesar de que el director sigue sufriendo para lograr que la
transición de amenaza no física a una física resulte convincente. Por fin nos
ofrece escenas interesantes en cuanto al aspecto del terror y aumenta un poco
la violencia, además le añade una sorpresa que no vi venir.
Las actuaciones no son la gran
cosa, casi todos los actores reciben un tiempo en pantalla similar pero
realmente ninguno sobresale del resto; les falta fuerza en muchos momentos. La producción
es discreta: el trabajo de fotografía en exteriores tanto de día como de noche
es sólido, la ambientación de la granja no es de presumir, el sonido por
momentos tiene algunos fallos y todo lo que tiene que ver con
efectos/maquillaje es realmente muy básico.
Opinión final: Curse of the
Witching Tree es irrelevante. Una película del montón que da lo mismo si la ves
o no.
**