Cada vez que me preguntan por qué
no suelo escribir mucho sobre el cine de terror que se produce en mi país
siempre termino ofreciendo esta respuesta: el cine de terror mexicano en la
actualidad es casi inexistente. Obvio por ahí encuentras algunas propuestas
interesantes que se la pasan de festival en festival pero muchas de estas
nunca llegan a ver la luz de manera comercial y se terminan olvidando, lo cual provoca que sean contadas aquellas películas con la suficiente fuerza
como para poder solidificar nuevamente el género.
Aunque esto no siempre fue así,
ya que el cine de terror en México tuvo una presencia muy notoria durante
muchísimos años y siempre significó el género que más atrevimiento mostraba
durante épocas oscuras (70s s y 80s), al grado de convertirse en un capitulo
importantísimo para la historia de la industria nacional. Sin embargo, con la
llegada de la década de los 90s y diversos factores como la desaparición de
organismos gubernamentales, el retiro de Carlos Enrique Taboada (el “maestro
del terror” mexicano) y un nuevo enfoque dirigido a contar historias con
crítica social, este prácticamente desapareció durante mucho tiempo.
Aún así, la historia es lo
suficiente rica como para olvidarla y que mejor forma para recordarla que con
el siguiente top sobre las que, a mi juicio, son las mejores películas que
México ha aportado al cine de terror.
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10.- KM 31 (2006)
Esta película de Rigoberto
Castañeda se encargó de recordarles a las generaciones más jóvenes que
en este país puede producir cine de género comercial. Además de que contó con una de las
campañas de publicidad más interesantes en materia nacional.
9.- Alucarda, la hija de las
tinieblas (1978)
Tal vez no sea la mejor historia,
pero es por un gran margen una de las películas más impactantes visualmente
hablando que se produjeron. Todo gracias
a su alto grado de violencia y una cantidad de sangre inusual para la época.
8.- Veneno para las hadas (1984)
La película que le significó el
mayor reconocimiento a Taboada como director, aunque es la menos conocida de su
filmografía. Una historia en verdad macabra que demuestra como por medio de la
inocencia infantil también se pueden presentar cosas totalmente aterradoras.
7.- El escapulario (1968)
Una joya de terror no tan
convencional. Con la cual Servando González es capaz de sustentar absolutamente
todo en un objeto para ir generando suspenso y que el espectador vaya sacando
sus propias conclusiones.
6.- La Llorona (1933)
La más antigua del top, pero no
por ello la menos impresionante. Sin duda alguna la mejor película sobre esta
leyenda, a la cual el paso de los años no la ha beneficiado mucho que digamos pero que sigue generando un gran impacto por medio de sus imágenes.
5.- El Vampiro (1957)
Cuando se trata de identidad,
creo que ninguna otra película la refleja tanto como la obra de Fernando Méndez.
La cual no solo cuenta con una gran actuación de Germán Robles, sino que además
muestra una adaptación sublime de muchos elementos de Drácula al entorno
nacional.
4.- El libro de pierda (1968)
Inspirándose en “The Turn of the Screw”, Taboada nos
trae una historia que combina terror con fantasía como pocas dentro del cine
mexicano por medio de escenas inquietantes que invitan al espectador a descifrar
qué es realidad y qué no.
3.- Cronos (1993)
No solo resalta por ser la ópera
prima de Guillermo Del Toro, sino que además fue por muchos años la última
película de terror destacada antes de la debacle.
Sin duda una de las historias
de vampiros más originales que existen y un gran homenaje al género
gracias a sus múltiples referencias.
2.- Hasta el viento tiene miedo
(1968)
Carlos Enrique Taboada se hace
presente en la lista por tercera ocasión y ahora con la que para muchos es su mejor
película.
Sustentada en grandes actuaciones y una ambientación escalofriante de
principio a fin, esta historia que gira en torno al tema de las leyendas es
simplemente una delicia para una gran mayoría de los fans mexicanos.
1.- Santa Sangre (1989)
Hablar de “Santa Sangre” es complicado
si consideramos que viene de la mente de un director que de por si es difícil de
entender como Alejandro Jodorowsky. Además se trata de un trabajo que combina muchas cosas y que
tiene influencias muy marcadas que van desde el "giallo" de Dario Argento hasta
el horror de la desfiguración física de Tod Browning.
Un reto total para el espectador al no solo verse sumergido en los horrores de la mente humana en su búsqueda de
amor a cualquier costa, sino también porque es golpeado una y otra vez por escenas
visualmente impactantes que recordará durante varios años.
Menciones honoríficas: Más negro
que la noche (1975), Somos lo que hay (2010), El espejo de la bruja (1962)