Película escrita y dirigida por Mickey
Keating (POD). Se estrenó de manera limitada en cines y VOD dentro de los
Estados Unidos el pasado 1 de abril, pero todavía no hay información sobre su
salida en formato físico o posible llegada a otros mercados.
Sinopsis:
Una chica solitaria (Lauren
Ashley Carter) es contratada para cuidar una mansión en Manhattan con perturbador
pasado. Un trabajo sencillo, pero mientras se encuentra en esa vieja casa
pronto se verá profundamente afectada por las leyendas que la rodean y, de paso,
iniciará su violento descenso a la locura.
Comentarios generales:
La verdad cuando uno lee la
sinopsis de Darling no puede evitar el pensar que esta ante otra simple
película de casas poseídas y por ello tus expectativas sobre lo que vas a ver
se centran en situaciones habituales de este tipo de trabajos. Lo cual es un
error asumir en esta ocasión, ya que el enfoque es totalmente distinto por
parte del director y guionista; a pesar de que por varios lapsos no parece
tener una idea lo suficientemente clara sobre lo que quiere contar.
Y es que inspirándose en la
famosa “Trilogía del Apartamento” de Roman Polanski, lo que nos trae Keatin es
una historia que se centra mucho más en temas satánicos/mentales y no en
cuestiones paranormales pensadas para lograr el susto fácil, haciendo de esta
experiencia una mucho menos llamativa para aquellos que busquen algo simple.
Donde se hace un uso muy superficial de la casa con el único objetivo de
establecer un pasado oscuro que sirva como detonante de los problemas de
nuestra protagonista sin nombre y a la misma vez genere dudas razonables sobre lo que verdaderamente ocurre ahí adentro al no dejar claro si esto es
producto de algún problema mental o si en verdad existe algo mucho más siniestro
escondido detrás de una de las habitaciones del lugar.
Sin duda un enfoque interesante que,
contrario a lo que se pudiera pensar, si logra construir un terror genuino
basado principalmente en la soledad e histeria de este personaje; el cual se
magnifica con un estupendo uso del sonido, así como de un poderoso score. Lo
malo es que una vez digerida esta situación las cosas se vuelven increíblemente
huecas y la historia como tal se empieza a desvanecer gracias al poco avance
que presenta, magnificándose mucho más por el ritmo lento manejado y la casi nula
presencia de personajes secundarios que le brinden un poco más de contexto al
tema de la casa para que así el misterio pueda seguir a flote.
La parte final tiene sus pros y
sus contras. Del lado positivo está el hecho de que se presentan los minutos
más tensos y sangrientos del filme, pero del lado negativo tenemos la
existencia de muchísimo relleno (por ejemplo, Darling limpiando una tina) y las
respuestas brillan por su ausencia; dejando así al espectador con una sensación
no solo de vacío, sino también de que lo que acaba de ver no tuvo sentido.
En cuestión de actuaciones se
trata de una película que depende exclusivamente de Ashley Carter y la verdad esta
chica nos regala una actuación estupenda que ayuda a tapar muchas de las carencias
existentes gracias a su progresivo deterioro mental. La producción es bastante
buena para tratarse de un proyecto tan pequeño: el trabajo de fotografía en
blanco y negro es estupendo, la dirección de arte es muy simple, el score es
realmente bueno, el trabajo de sonido es impecable y la cuestión de
efectos/maquillaje es ínfima.
Opinión final: Darling es
aceptable. Se trata de una película con cosas interesantes en muchos aspectos,
aunque nunca logra explotar.
Ojometro:
***
***