sábado, 2 de julio de 2016

Crítica: Baskin (2016)


Coproducción turca/estadounidense que significa el primer largometraje para el director Can Evrenol, quien además comparte créditos como co-escritor del guión junto a Ogulcan Eren Akay, Cem Ozuduru y Ercin Sadikoglu. Se estrenó en cines dentro de Turquía en el mes de enero y posteriormente hizo lo mismo en VOD dentro de los Estados Unidos durante el mes de marzo.

Sinopsis:

Un escuadrón de policías inocentes va directo a una trampa hacia el infierno cuando responden un extraño llamado que los llevará a una misa negra dentro de un edificio abandonado.



Comentarios generales:

Ciertamente Turquía no es un país desconocido dentro del cine de terror, obvio no cuenta con los reflectores de países europeos como Francia, Alemania o España, pero ya lleva unos cuantos años produciendo películas y consolidando un estilo propio que difícilmente pasa desapercibido. Por ello el anuncio de Baskin me resultaba llamativo debido a que sabía que mínimo me encontraría con algo un poco distinto a lo habitual y así fue; aunque no al nivel del material original (un cortometraje de 2013).

Y es que, aunque Evrenol hace todo lo posible para que su idea de 11 minutos cobre vida de manera extendida, al final siempre te encuentras pensando que lo que estás viendo es una historia sin mucho contenido y sí con mucho relleno. En especial durante un primer acto en el que se nos presenta a este grupo de policías un tanto detestables con el cual, según palabras del propio director, uno debería de sentir empatía; sin embargo, eso resulta prácticamente imposible gracias a sus acciones y comportamiento natural, lo cual hace que todo esto sea más que nada cascajo sin mucha relevancia que se desarrolla de manera bastante lenta.

Para el segundo acto las cosas se vuelven un poco más complejas con la integración de unos extraños sueños y la sensación de terror se incrementa debido a que es a partir de aquí cuando se empieza a generar una atmósfera bastante tétrica que te absorbe de inmediato. La película adquiere un toque mucho más sombrío y el director empieza a jugar de manera tímida con posibles amenazas para añadir suspenso, pero nuevamente se te queda la sensación de que no ocurre nada relevante y que lo presentado no tendrá demasiada importancia a futuro. La cual se magnifica cuando integran a un puñado de personajes que pasan sin pena ni gloria como un tipo de enlace entre los policías y el edificio abandonado.

Lo mejor llega en los últimos 25/30 minutos. En esta parte parece una historia completamente diferente y es donde se toman todas las libertades posibles para tocar un tema ligado al infierno de la manera más brutal posible; utilizando una buena dosis de impacto gráfico y mucha sangre, pero también integrando un nivel de rareza extremo (incluso llegando un poco a lo grotesco) que hace que uno como espectador no pueda voltear la mirada debido a que todo es posible dentro este recinto.

Las actuaciones no están mal, realmente no conocía a ninguno de los actores, pero todos cumplen de manera sólida con sus roles; sobre todo Mehmet Cerrahoglu como el líder del culto. La producción es bastante buena salvo por alguno que otro detalle: el trabajo de fotografía es estupendo, la dirección de arte cumple, el score realmente me gusto, el trabajo de sonido por lapsos no es tan bueno, los efectos están ok y el trabajo de maquillaje cumple de buena manera durante todo el último acto.

Opinión final: Baskin es más envoltura que contenido. Causará mucha división, pero su concepto es interesante como para verla una vez.

Ojometro:
***