Película dirigida por Josh
Gerritsen (quien hace su debut tras la cámara) y escrita por Tess Gerritsen. Se
estrenó el pasado 15 de mayo vía VOD dentro de los Estados Unidos, mientras que
su salida en formato físico está planeada para el mes de julio.
Sinopsis:
Los habitantes de una isla
pesquera cerca de Maine se encuentran incomunicados del mundo exterior después
de que misteriosamente el ferry que los conecta deja de pasar. Al inicio parece
un simple evento sin importancia, pero con el transcurso de los días el
panorama se vuelve cada vez más desalentador y las cosas empeoran cuando restos
humanos empiezan a aparecer a en la costa.
Comentarios generales:
Al ver la palabra “Zero” en
cualquier titulo uno puede imaginarse más o menos de lo que puede tratar la
película, no existe mucha ciencia al respecto y por lo general dichas
suposiciones se suelen cumplir. Sin embargo, en el caso de Island Zero todo
indicaba que sería algo un poco distinto y eso me llamaba la atención debido a que
lucía como un pequeño proyecto con intenciones interesantes, pero terminó
siendo una tremenda decepción.
Y es que lo que nos traen los
Gerritsen se nota a todas luces que es un trabajo en el que ciertamente había
una idea clara sobre lo que querían contar, más no sabían exactamente cómo
hacerlo. Obligándonos así a ver una película que tiene un inicio sumamente
lento que involucra a un grupo de habitantes que se comporta de manera poco
sensata ante una situación que claramente no es normal, provocando así que uno como
espectador no pueda tomar en serio nada de lo que ocurre y resulte imposible el
poder sentir empatía hacía cualquiera de los personajes.
Por si esto no fuera suficiente,
el ritmo con el que se desarrolla la historia es demasiado cansino y ante la
carencia de eventos relevantes en verdad uno se pone la aburrida de su vida
esperando a que ocurra algo de interés. Ya que esta es una película en donde la
mayoría de los sucesos violentos se desarrollan fuera de cámara durante al
menos 55 minutos con la idea de construir cierto suspenso y generar expectativa
por saber qué demonios es la amenaza, pero esto se extiende demasiado; al grado
de que cuando por fin se da la revelación te termina importando muy poco. Mucho
más porque se trata de una que es invisible en un claro intento por mantener a
raya el presupuesto (aunque la justificación brindada resulta coherente).
La parte final es tal vez lo más
entretenido. Se añade cierto elemento militar que brinda contexto al tema de la
amenaza y por algunos instantes se logra generar cierta sensación de peligro
importante a pesar de que no existe nada particularmente destacado.
De las actuaciones la única que a
mi juicio se salva es la de Laila Robins (Maggie), quien sin hacer nada espectacular saca adelante al personaje menos plano de todos y logra brindar una figura de
liderazgo decente. La producción es realmente limitada: el trabajo de
fotografía es pobre, la dirección de arte no presenta gran cosa, el score cumple,
la labor de sonido está ok y los efectos son bastante arcaicos.
Opinión final: Island Zero es
bastante mala. Un proyecto pequeño sin pies ni cabeza que no vale la pena que
vean.
Ojometro:
**
**