Película escrita y dirigida por
Richard LeMay (Dementia 13). Se estrenó el pasado 15 de enero directamente en
iTunes y VOD dentro de los Estados Unidos, mientras que todavía no hay
información sobre si saldrá en formato físico.
Sinopsis:
Cada 25 años una familia con
poderes ilimitados llega a un pequeño pueblo rural como parte de un antiguo
pacto que los obliga a sacrificar cuatro vidas humanas, incluyendo una de sus
propios miembros.
Comentarios generales:
Es 2019 y la obsesión con los
aquelarres o los cultos sigue a tope, son temas por los que el paso del tiempo
no parece tener efecto alguno y siguen generando la misma fascinación que hace
50 años atrás. Más ahora con éxitos como “The Witch” o “Hereditary” que han
puesto esta clase de trabajos una vez más en el ojo público y por los cuales
era inevitable ver películas de un corte más modesto empezar a salir para
tratar de explotar este nuevo brote de popularidad, siendo Blood Bound una de
las primeras en hacerlo. Aunque no con los mejores resultados.
Y es que aquí tenemos el típico
caso de una película cuya idea base es bastante clara pero nunca sabe
exactamente cómo desarrollarla de manera convincente, ya que LeMay demuestra
varios problemas al momento de establecer los planes del culto al acelerar de
manera muy abrupta las acciones cuando apenas uno se está empezando a familiarizar
con los personajes que, en teoría, son los principales. De golpe algo que trata
sobre ladrones adolescentes se transforma en una historia oscura con rituales
satánicos que no parece tener mucho sentido y que de un momento a otro cambia
de manera radical el enfoque de las cosas para centrarse en un embarazo.
Uno que con el paso de los
minutos se revela que tiene propósitos mucho más macabros, pero que solo lleva
a un aburrimiento total mientras vemos a un grupo de personas con poderes
aparecer y desaparecer a su antojo sin que se nos revele grandes detalles sobre
ellos. Haciendo así que las cosas se desarrollen bajo un ritmo demasiado lento
y sin nada particularmente llamativo en una dinámica que no cuenta con los
contrapesos suficientes para hacer que la situación no esté tan cargada de un
solo lado y poder construir momentos que le añadan emoción o por lo menos algo
de tensión al segundo acto.
La parte final se podría decir que
es lo más interesante: primero porque es aquí donde por fin se logra percibir
un ligero incremento en el ritmo y, segundo, porque al menos se mantienen
fieles a su tono pesimista y oscuro. Presentando algo más de violencia y un
giro que le brinda cierta frescura cuando parecía que todo tenía un rumbo claro;
aunque con esto se generan más preguntas que respuestas.
Las actuaciones son muy pobres,
en verdad llega un punto en el que resulta desesperante ver a este grupo de
personajes con sus caras de muertos todo el tiempo y sin reflejar grandes
emociones que le añadan intensidad a sus escenas. La producción tampoco es la
gran cosa: el trabajo de fotografía no es el mejor, la dirección de arte no
tiene mucho que destacar, el score está ok, el trabajo de sonido no es muy
limpio, los efectos son mínimos y la labor de maquillaje es simple.
Opinión final: Blood Bound es
bastante mediocre. Película aburrida que tal vez solo disfruten quienes son muy
fans de todo el tema de los cultos.
Ojometro:
**
**