miércoles, 2 de abril de 2025

Crítica: Stutter (2025)

Producción alemana escrita y dirigida por Sebastian Matthias Weißbach. Se estrenó en VOD dentro de los Estados Unidos el pasado 7 de marzo, aunque todavía no hay información sobre si saldrá en formato físico.

Sinopsis:

Después de la trágica muerte de su esposa, Jon (Oskar Brown) rápidamente inicia un amorío con la enigmática Red (Judith Shoemaker). Aunque mientras se vuelve más cercano a ella, su vida se ve dominada por una omnipotente señal digital.


Comentarios generales:

Siempre he estado a favor de que los guionistas tengan total libertad para escribir lo que se les antoje y no se tengan que acoplar a las agendas actuales o a los caprichos de algún estudio, ya que al final de cuentas esos es lo que hace al cine interesante. Sin embargo, también creo que es importante que estos tengan una idea clara sobre lo que nos quieren contar y lamentablemente con Stutter eso no se percibe en ningún momento.

Ya que lo traído por Sebastian Matthias Weißbach juega con determinados saltos temporales que vuelven complejo el poder entender lo que ocurre y lo que debería de ser una historia sobre el duelo de Jon se vuelve un revoltijo de ideas que se supone deben de llevar a algo perturbador. Lo cual desde el primer acto se puede percibir sin mucho esfuerzo que no será tan sencillo porque la forma de ir desarrollando la relación entre Jon y Red jamás se siente orgánica, presentándonos escenas en donde no se puede notar mucha química y solo están llenas de diálogos que probablemente estaban pensados para generar incomodidad, pero más bien terminan quedando como unos bastante ridículos. 

Todo esto bajo un ritmo demasiado pasivo que para el segundo acto se vuelve un problema dado a que conforme avanzan los minutos las acciones se tornan en extremo repetitivas y gracias a eso realmente nada de lo que tratan de hacer genera sensaciones positivas en el espectador porque lo que ocurre no solo es aburrido, sino que también carece de sentido. Dejando que sea más que nada la rareza que rodea a Jon la que pueda cargar con todo, siempre bajo el jugueteo de ponerlo en situaciones que vendan la idea de que se puede terminar quebrando mentalmente y así llevarlo a extremos que, en teoría, deberían de añadir un nivel de impacto considerable.

Algo que no ocurre y por lo consiguiente la parte final resulta floja al no contar con la fuerza suficiente para que la paranoia lleve a algo significativo durante un desenlace que no es tan confuso, pero tampoco sabe solidificar su idea y gracias a eso el cierre se siente muy vacío.

Sobre las actuaciones hay que decir que Judith Shoemaker hace un trabajo correcto considerando que su personaje es el único con cierto propósito, pero lo de Oskar Brown es terrible. Más que nada porque no cambia de expresión durante más de noventa minutos y el rango de emociones manifestadas para un personaje que supuestamente se encuentra en duelo es pobre.

Y en cuanto a producción tenemos algo bastante discreto: el trabajo de fotografía cumple, la dirección de arte no es nada especial, el score es un tanto repetitivo, el trabajo de sonido es sólido y todo lo referente a efectos/maquillaje es ínfimo.  

Opinión final: Stutter es mala. Película aburrida y por grandes lapsos incomprensible que no vale la pena.

Ojometro:
**

viernes, 28 de marzo de 2025

Crítica: A Knight’s War (2025)

Película escrita y dirigida por Matthew Ninaber (Death Valley). Se estrenó en VOD dentro de los Estados Unidos el pasado 11 de febrero, mientras que su salida en formato físico está confirmada para el próximo 15 de abril.

Sinopsis:

Un valiente caballero se adentra en un reino mortal para salvar el alma de la Elegida. Aunque al enfrentarse a brujas, demonios y demás brutales enemigos descubrirá que su regreso podría desatar el caos y condenar a la humanidad.


Comentarios generales:

El terror fantástico no es algo tan común en la actualidad, obvio de vez en cuando salen películas, pero la realidad es que el numero es bastante reducido si lo comparamos con otros subgéneros y mucho de eso se debe a que es una combinación que por lo general requiere de un presupuesto considerable para obtener los mejores resultados. Por ello es que cuando se estrena una propuesta de este tipo siempre trato de verla y la verdad es que A Knight’s War resultó ser una experiencia entretenida, a pesar de que no logra ocultar sus claras limitantes.

Ya que lo traído por Ninaber es una propuesta más ambiciosa de lo que le permite su presupuesto y gracias a eso mucho de su efectividad depende de que tanto el espectador esté dispuesto a perdonar la falta de un complemento visual imponente que encaje con lo que se está contando y también sirva como distractor. Sobre todo porque la historia puede resultar algo enredada durante el primer acto debido a que todo avanza de manera acelerada y gracias a eso varias cosas relevantes no tienen la claridad necesaria como para sentir un verdadero interés por la travesía de un protagonista (Bhodie) que en este punto resulta bastante plano.

Una situación que va cambiando de a poco conforme este va interactuando con Avalon, con quien logra ir formando una relación de amor/odio que de inicio es un poco complicada de digerir por la manera en la que se desarrollan las acciones al depender demasiado del recurso de muertes en bucle, pero una vez que estabilizan eso las cosas funcionan de mejor manera. Además de que también se le da más juego a unas amenazas que, a diferencia de los entornos carentes de imaginación, si aportan su dosis de atractivo visual para magnificar el peligro que representan y ser la vía predominante con la cual se brindan detalles importantes de la trama.

Esto bajo un ritmo que no puede quitarse del todo la aceleración inicial y por lo mismo determinadas acciones no terminan por tener el impacto que deberían ante una construcción un tanto superficial. Dejándonos así una parte final que no está mal; sin embargo, jamás se logra generar esa sensación de majestuosidad que supuestamente representa el conflicto definitivo.

De las actuaciones hay que decir que cumplen, ya que tanto Jeremy Ninaber (Bhodie) como Kristen Kaster (Avalon) hacen un buen trabajo y la química que muestran en pantalla es lo suficientemente efectiva para sacar adelante una dinámica que se puede tornar tediosa por ciertos lapsos.

Mientras que en producción se nota que el presupuesto fue menor al que requerían, pero hay cosas interesantes: el trabajo de fotografía es correcto, la dirección de arte pobre, el score resulta agradable, el trabajo de sonido tiene altibajos, los efectos no son los más espectaculares y la labor de maquillaje es bastante buena. 

Opinión final: A Knight’s War está ok. Película con más ambiciones de las que puede manejar, pero que no está de más darle una oportunidad.

Ojometro:
*** 

martes, 25 de marzo de 2025

Crítica: Revelations (2025)

Producción surcoreana dirigida por Yeon Sang-ho (Train to Busan), quien comparte créditos como co-escritor del guión junto a Kyu-Seok Choi. Se estrenó directamente en Netflix a nivel mundial el pasado 21 de marzo.

Sinopsis:

Un pastor y una detective, impulsados por sus creencias, investigan la desaparición de una joven. Teniendo un perturbador crimen del pasado y revelaciones divinas como las principales pistas para encontrarla.


Comentarios generales:

No se necesita ser muy perspicaz para comprender que la única razón por la cual Revelations llamaba la atención era porque tras la cámara estaba la persona que hace unos años nos trajo una de las mejores películas de zombies de todos los tiempos, ya que de lo contrario hubiera pasado como una de las tantas producciones surcoreanas que suelen estrenarse en Netflix cada año. Convirtiéndola así en una película con un grado de interés importante, a pesar de que realmente no se inclina demasiado hacía el terror.  

Y es que lo traído por Yeon Sang-ho es más que nada un thriller policiaco que cuenta con algunos elementos sobrenaturales en el que el propósito principal es contarnos una historia con un par de protagonistas que no son ni totalmente buenos, ni totalmente malos y cuyas convicciones o creencias son el motor principal para hacer lo que ellos consideran que es lo correcto. Lo cual puede que no se escuche tan atractivo, pero en realidad desde el primer acto se logra ir construyendo un buen misterio que de manera sostenida va explotando las debilidades de ambos para lograr que las acciones del principal sospechoso sean, al menos de inicio, un tanto ambiguas.

Dando cabida a los pocos elementos sobrenaturales que se pueden ver durante el desarrollo y con ello empezar a ver a la propia naturaleza del pastor, quien con el pasar de los minutos va manifestando un comportamiento problemático que genera dudas con respecto a sus verdaderas motivaciones al tratar de justificarlas por medio de revelaciones divinas. Logrando con esto que durante el segundo acto se pueda contar con un ritmo ágil mientras se van entrelazando los caminos de los personajes para que la investigación llegue a una revelación que definitivamente es un tanto predecible, más logra mantener enganchado al espectador rumbo a la parte final.

Una que sin duda cuenta con la potencia necesaria y plantea de manera competente los dilemas de la detective con respecto a su forma de lidiar con el asesino. Teniendo como resultado un desenlace tenso con el que no se arriesga demasiado, pero que es lo suficientemente efectivo como para dejar sensaciones positivas.

De las actuaciones hay que decir que todas están bien y tienen el típico sello surcoreano de exagerar determinados aspectos, aunque no existe una en particular que logre dejar un gran impacto. Mientras que en producción es de factura limpia: el trabajo de fotografía es sólido, la dirección de arte cumple, el score es buen complemento, el trabajo de sonido no presenta fallos, los efectos son sencillos y la labor de maquillaje discreta.

Opinión final: Revelations me gustó. Un thriller entretenido que muestra la versatilidad de su director.

Ojometro:
****

jueves, 20 de marzo de 2025

Crítica: Halloween Candy (2025)

Película escrita y dirigida por Douglas A. Plomitallo. Se estrenó en VOD dentro de los Estados Unidos el pasado 21 de febrero, aunque no hay información sobre si saldrá en formato físico.

Sinopsis:

Mientras pasa su primer Halloween sola, una escritora recién divorciada busca inspiración en aquellos que tocan a su puerta para pedir dulces. Aunque pronto la noche se convertirá en una pesadilla cuando un visitante sorpresa hace de este Halloween uno que nunca olvidará.


Comentarios generales:

Sinceramente nunca he entendido que una película ambientada en la noche de Halloween no se estrene durante el mes de octubre, ya que está demostrado que a las producciones con dicha temática les suele ir mejor durante este periodo. Obvio la saturación que se suele dar puede ser un gran factor para no arriesgarse; sin embargo, con Halloween Candy me parece que hubiera sido lo más lógico estrenarla durante dicho mes debido a que así no hubiera quedado en el olvido.

Ya  que lo traído por Plomitallo es una de esas antologías que difícilmente uno vería si no estuviera ligada a la festividad dado a que todo su concepto está pensado para explotar la curiosidad del espectador sobre la dinámica del Halloween. Teniendo una historia principal que también funge como el enlace de los cortometrajes y por ello mismo cuenta con una elaboración mucho más cuidada en comparación de otras tantas que hemos visto, aunque eso no evita que tenga carencias en su construcción y deje la sensación de que en realidad se optó por hacer una antología porque simplemente no se supo cómo profundizar de mejor manera la idea central.

Y en cuanto a producción sin duda el hecho de que Plomitallo sea quien dirigió todos los cortometrajes ayuda a que la estética sea la misma, siendo evidente el presupuesto limitado que en algunos casos se nota de mayor manera o hasta los perjudica.

Pasando a los cortos:


“Halloween House”

El más genérico y el que refleja de manera clara que el director no sabía realmente cual rumbo quería tomar. Donde tal vez lo único rescatable es que saben sacar algo de ventaja de la atracción en la que está filmada.


“Predator: The True Horrors of Halloween”

Historia corta, simple y demasiado predecible que no está tan mal, pero a la que le hubiera beneficiado tener unos efectos de mejor calidad.


“Talking to the Dead”

Probablemente el mejor de todos.

Nuevamente se trata de un concepto simple e incluso ya un tanto sobreexplotado; sin embargo, la manera en la que manejan el misterio con la Ouija es lo suficientemente competente como para que su breve historia se sienta bien redondeada.


“Pumpkin Night”

Una historia de venganza que en ningún momento funciona y carece del impacto necesario como para que su extravagante premisa por lo menos deje alguna secuencia memorable.


“Coronaween”

Un intento por explotar la paranoia generada por el COVID-19 que no tiene ningún tipo de sentido, la cual tratan de combinar con cierto elemento slasher que solo añade más inconsistencias y un humor muy pobre.


“Killer Date”

Diría que este es el otro corto que vale la pena y más que nada porque es el único que tiene el tiempo suficiente para desarrollar su idea sin que se sienta totalmente acelerado. Vendiéndote una cosa para terminar con un giro que es efectivo y además cuenta con un toque de violencia decente.

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Opinión final: Halloween Candy es decepcionante. Una antología que tiene alguna que otra cosa para rescatar, pero que se termina perdiendo en la mediocridad.

Ojometro:
**

viernes, 14 de marzo de 2025

Crítica: Bloat (2025)

Película escrita y dirigida por Pablo Absento. Se estrenó en VOD dentro de los Estados Unidos el pasado 7 de marzo, mientras que su salida en formato físico está confirmada para el próximo 24 de abril.

Sinopsis:

Jack (Ben McKenzie) es un oficial militar que manda a su familia de vacaciones a Japón, donde su hijo menor casi muere ahogado en un lago. Evento traumático que le causa un cambio de comportamiento radical con el que hay algo mucho más siniestro detrás.   


Comentarios generales:

Los found footage que involucran una dinámica con pantalla de computadora todavía son algo relativamente fresco y por ello no existe un hartazgo tan grande hacia estos en comparación a otras propuestas del mismo subgénero. Sin embargo, también es cierto que ese toque distintivo representa cierta limitante en lo que se puede contar y con Bloat resulta más que evidente.

Esto porque lo presentado por Absento nos cuenta una historia que se sustenta en el folclore japonés pero tarda demasiado tiempo en desarrollar dicho aspecto y para tratar de consumir tiempo nos ponen a ver las habilidades con la computadora de un padre poco carismático. Algo que durante los primeros 10 o 15 minutos funciona de manera relativamente efectiva debido a que el constante cambio de ventanas y videollamadas hace que el ritmo sea ágil, logrando con esto que la dinámica familiar a distancia pueda ser digerible hasta que inicien las situaciones extrañas.

El problema es que una vez que se revela el raro comportamiento del hijo la película empieza a volverse demasiado monótona y lo que debería de ser un caso de posesión intenso (o al menos extravagante) no logra generar ningún tipo de impacto precisamente porque el propio formato limita lo que se puede ver de este. Teniendo que recargarse demasiado en la paranoia de Jack, quien poco a poco se vuelve un personaje fastidioso y la investigación que realiza jamás logra brindar la profundización necesaria como para sentir curiosidad por la leyenda de Kappa o, peor aún, para posicionarlo como una amenaza de peso dado a que no hay gran interés por mostrarlo de manera considerable en pantalla.

Llevándonos así por un viaje cada vez más aburrido en el que los contados intentos por exponer los peligros que representa este demonio sapo son insuficientes para brindarle fuerza a una parte final demasiado absurda. Cuyo desenlace es tan mediocre que solo te deja con la sensación de que los casi 80 minutos que acaban de pasar fueron una pérdida de tiempo.

Sobre las actuaciones hay que decir Ben McKenzie hace lo que puede con lo que le permite el formato y el resto del elenco realmente tiene poca exposición para hacer algo relevante. Mientras que en producción es de una factura muy discreta: el trabajo de fotografía no es gran cosa, la edición cumple, el trabajo de sonido es limpio y los efectos son mínimos.

Opinión final: Bloat es mala. Película aburrida y con pocas cosas para destacar.

Ojometro:
**

martes, 11 de marzo de 2025

Crítica: Presence (2025)

Película dirigida por Steven Soderbergh, cuyo guión fue co-escrito por David Koepp. Se estrenó en cines dentro de los Estados Unidos a finales de enero, mientras en México hizo lo propio el pasado 6 de marzo; recaudando hasta la fecha $9.2 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

Tras una serie de sucesos extraños, una familia se convence de que no están solos dentro de su nueva casa en los suburbios.


Comentarios generales:

Que Steven Soderbergh dirija una película ligada al género de terror es por sí mismo todo un acontecimiento, pero si a eso le agregas que lo hace con una propuesta que se siente fresca dentro de un subgénero tan gastado entonces tenemos algo que inevitablemente va a atraer muchas miradas. Lo cual convertía a Presence en un trabajo que generó más expectativas de las que probablemente se tenían contempladas y eso se nota en el resultado final.

Ya que lo presentado por Soderbergh no está pensado para generar sobresaltos aleatorios al espectador cada cinco minutos o provocarle una sensación de terror extrema, más bien su prioridad es desarrollar un drama familiar ante los “ojos” de un espíritu que por sí mismo es toda una incógnita debido a que no muestra el comportamiento habitual que uno esperaría. Haciendo que el primer acto no sea el más atractivo dado a que se sustenta en la monotonía de la vida familiar y en el ir plantando varias de las preguntas fundamentales que sostendrán el drama más adelante.

Ante eso las cosas avanzan de manera bastante lenta por las pocas emociones que se presentan en pantalla, aunque conforme vamos entrando al segundo acto se trata que el espíritu vaya adquiriendo un mayor involucramiento en las acciones y gracias a ello se se pueden ver algunos de los pocos momentos con cierto nivel de intensidad que a la postre llevan a que se quiera profundizar de alguna manera sobre este; sin embargo, la forma en la que lo hacen es tan vaga al grado de que queda parado como algo irrelevante. Siendo esa una problemática recurrente dado a que cada situación de importancia es tratada de manera muy superficial y por lo mismo va creando cierta sensación de vacío dentro de una historia a la que pareciera que jamás quieren añadirle más extravagancia ante el riesgo de convertirla en una propuesta convencional sobre fantasmas.

Volviendo con esto el visionado retador, más no particularmente aburrido; en especial durante una parte final que no cambia mucho la fórmula pero logra manejar un grado de tensión agradable. Dejándonos con esto un desenlace hasta cierto punto sorpresivo y, sobre todo, un tanto depresivo.

Las actuaciones no son espectaculares, pero cumplen con el propósito de demostrar la monotonía de una familia que tiene sus problemas y está al borde desmoronarse por diferentes motivos. Siendo Lucy Liu (Rebekah) la que tal vez resalta más por darle vida al personaje con la personalidad más dominante de todas.

Mientras que en producción tenemos una factura bien cuidada, pero discreta: el trabajo de fotografía es sólido, la dirección de arte simple, el score no destaca demasiado, el trabajo de sonido es bastante bueno, los efectos en general son básicos y la labor de maquillaje ínfima.

Opinión final: Presence está ok. Película con una propuesta fresca a la que le falta desarrollar mejor sus ideas.

Ojometro:
***

viernes, 7 de marzo de 2025

Crítica: Mouse of Horrors (2025)

Película dirigida por Brendan Petrizzo (Monster Hunters), cuyo guión fue co-escrito por Harry Boxley y Marc Gottlieb. Se estrenó en VOD dentro de los Estados Unidos el pasado 25 de enero, aunque no hay información sobre si saldrá en formato físico.

Sinopsis:

En una ciudad costera el caos se desata cuando las monstruosas creaciones del Dr. Rupert asechan por la noche, cosechando partes de cuerpos para un propósito siniestro y provocando que nadie se encuentre a salvo.


Comentarios generales:

Todos sabemos lo que está ocurriendo con las obras que han entrado al dominio público y eso seguirá siendo un tema de conversación durante mucho tiempo; sin embargo, el caso de Mickey Mouse es uno que llama particularmente la atención dado a que se trata de la mascota de Disney. Un monstruo empresarial que tiene seguidores y detractores por igual, así que el poder ver al ratón bajo estas circunstancias es sin duda una extravagancia que seguramente no le gustará a la gente de pantalón largo de dicha empresa, aunque la verdad Mouse of Horrors es tal vez una de las peores formas para explotar a tan icónico personaje.

Ya que lo traído por Petrizzo es un desastre que no tiene sentido y pareciera que conforme fue pasando el tiempo los cambios en el guión se volvieron una constante debido a que, lo que en teoría debía de ser un simple slasher, termina siendo un intento de crossover con “Winnie-the-Pooh: Blood and Honey” y al mismo tiempo una historia sobre un doctor loco con aires de “Frankestein” en la que la percepción del tiempo parece no ser algo relevante para el director, ni mucho menos el cuidado a los detalles.

Tratando de que sea el peculiar comportamiento de nuestro “Mickey Mouse” el principal factor de interés y por ello se expone la mayor cantidad de asesinatos posibles en pantalla sin importar si estos tienen algún tipo de relevancia para el desarrollo. Simplemente se trata de presentar muerte tras muerte con resultados bastante pobres al no generar nada de impacto por medio de estos, además de que conforme van pasando los minutos el nivel de incoherencia llega a tal punto que básicamente uno como espectador se da por vencido en tratar de encontrar algo que pueda resultar al menos interesante más allá de los manierismos del asesino y gracias a eso la experiencia se vuelve muy aburrida.

Ante esto realmente la parte final es bastante irrelevante porque una vez más todo brinca de un lado a otro y se le da prioridad a una pelea poco emocionante entre asesinos que desafían cualquier sentido del espacio y del tiempo. Aunque por lo menos dicho conflicto le brinda un ligero incremento al ritmo para que el cierre llegue más rápido y con ello dé por finalizado el sufrimiento.

Las actuaciones son terribles y eso se magnifica todavía más ante el mar de incoherencias que tiene la historia. Y en cuanto a producción, igualmente tenemos una pobreza muy evidente: el trabajo de fotografía es malo, el score no aporta nada, el trabajo de sonido es atroz, los efectos son de baja calidad y el trabajo de maquillaje es lo único decente.

* Cuenta con una escena post-créditos

Opinión final: Mouse of Horrors es muy mala. Otro intento fallido por querer explotar el dominio público.

Ojometro:
*

martes, 4 de marzo de 2025

Crítica: Blood Pay (2025)

Producción italiana dirigida por Brace Beltempo, cuyo guión fue escrito por Uberto Morosi. Se estrenó en VOD dentro de Italia y los Estados Unidos a mediados de enero, aunque no hay información sobre si saldrá en formato físico.

Sinopsis:

En una futura ciudad gobernada por la IA, la confortable vida de John (Gianluca Busani) solo es una fachada para sus estragos internos. Así que cuando una misteriosa publicidad le promete una experiencia única por medio de la inteligencia artificial su vida empezará a cambiar ante algo que difumina la línea entre el humano y la maquina.


Comentarios generales:

Dada la naturaleza polémica de la IA dentro de muchas industrias y especialmente la del entretenimiento, la verdad no es raro que con el paso del tiempo esta se vaya convirtiendo en un villano predominante dentro de muchas películas. Es algo natural ante el riesgo que puede representar para el bienestar laboral de millones de personas en el futuro, pero Blood Pay es tal vez una de las formas más absurdas de presentarla.

Ya que lo traído por Beltempo es una historia que realmente no tiene demasiada sustancia y eso se puede notar de inmediato con unos créditos iniciales larguísimos, así como con unos primeros 25 minutos en los que literal todo se limita a ver a distintas mujeres tratando de conquistar a John mientras este se cuestiona su existencia de la manera más aburrida posible. Dejando que sea hasta la aparición de la IA cuando la dinámica cambie un poco ante las rarezas que esta trae consigo, aunque más allá de esa extravagancia inicial tampoco es que existan demasiadas cosas que vuelvan interesantes los estragos internos de nuestro protagonista.

Llevándonos así a una relación que supuestamente se sustenta en las perversiones y deseos más oscuros de los humanos, pero la realidad es que eso se explota de manera muy superficial para dar paso a una problemática que involucra el ofrecimiento de sangre que no solo es absurda, sino que además no tiene ningún tipo de lógica. Siendo este el impulsor de lo que se supone son los momentos más intensos de la película; sin embargo, las escenas pensadas para añadir impacto resultan irrelevantes en el desarrollo y lo predecible de cada acción hace que el ritmo se vuelva incluso más lento de lo que ya era.

Ante esto llegamos a la parte final con más dudas que certezas y tampoco es como que exista mucha preocupación por aclararlas al centrarse más que nada en el quiebre mental de John para exponer su verdadera naturaleza. Preparando bajo dichas circunstancias un desenlace en el que la IA hace algo que no sorprende a nadie y solo provoca que lo visto deje una sensación de indiferencia muy marcada.

En cuanto a las actuaciones no hay mucho que decir, son bastante malas en general. Mientras que en producción tampoco existen grandes cosas para destacar: el trabajo de fotografía es pobre, la dirección de arte desangelada, el score es tremendamente repetitivo, el trabajo de sonido tiene fallos y todo lo relacionado a efectos/maquillaje es discreto.

* Cuenta con una escena post-créditos

Opinión final: Blood Pay es muy mala. Película que a base de rarezas trata de ocultar todos sus defectos sin nada de éxito.

Ojometro:
*

miércoles, 26 de febrero de 2025

Crítica: The Monkey (2025)

Película escrita y dirigida por Osgood Perkins (Longlegs), la cual está basada en la historia corta del mismo nombre escrita por Stephen King en 1980. Se estrenó en cines dentro de los Estados Unidos y México los pasados 20 y 21 de febrero, recaudando hasta la fecha $21.5 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

Cuando los gemelos Bill y Hal (Theo James) encuentran un viejo mono de juguete que le pertenecía a su padre, una serie de terribles muertes da inicio. Ante esto deciden deshacerse de este y seguir con sus vidas, pero 25 años después la maldición los vuelve a alcanzar.  


Comentarios generales:

Llevamos por lo menos ocho años con un flujo constante de adaptaciones a las obras de Stephen King y no parece que eso vaya a cambiar en el futuro cercano, lo cual honestamente es algo que a mí no me molesta en lo absoluto dado a que soy gran fan de lo que escribe el oriundo de Maine. Sin embargo, tampoco se puede ocultar el hecho de que los resultados de dichas adaptaciones han sido variados y por lo mismo siempre existen dudas cada vez que se anuncia una nueva debido a que no se sabe si los involucrados podrán hacerle justicia al material original, pero afortunadamente The Monkey ha sido uno de esos casos en los que se hicieron bien las cosas.

Ya que Osgood Perkins incluso cambia un poco su característico estilo para adaptarse a una historia que se sustenta totalmente en un humor negro al que por momentos puede costar trabajo encontrarle el gusto, aunque el hecho de que desde muy temprano también se logre establecer el alto nivel de violencia con el que será combinado ayuda a que no tengan que pasar muchos minutos para poder digerirlo. Sobre todo porque la primera media hora de la película en términos generales es muy ágil en su ejecución y no se complica en lo absoluto al momento de explicar la maldición detrás del juguete, brindándole así el tiempo suficiente a la relación entre los hermanos para que se pueda palpar lo fragmentada que se encuentra y los traumas con los que tienen que lidiar.

Algo que se magnifica para el segundo acto al centrarse principalmente en la patética vida parental de Hal, quien a base de su paranoia logra mantener la tensión a flote mientras se va construyendo todo el caos que existe a su alrededor por el regreso de la maldición. Llevándonos así a una serie de sucesos sangrientos que proporcionan impacto y algo de humor involuntario, pero también la constante sensación de peligro en la que él y su hijo tienen que navegar para descubrir algo que ciertamente es predecible e incluso lleva a algunos momentos que no se sienten tan orgánicos dentro de todo esto (principalmente los que involucran al personaje de Ricky).

Un aspecto que afortunadamente no afecta demasiado y que para la parte final lo solucionan de manera competente para que el conflicto decisivo sea interesante a pesar de que no es tan extremo como se esperaría. Dejándonos así un desenlace que juega mucho con el aspecto familiar y la repartición de culpas, pero sobre todo que pone en perspectiva el nivel de amenaza que representa el mono.

En el tema de las actuaciones tenemos a un Theo James que hace un buen trabajo al darle vida a la versión adulta de los gemelos combinando de manera acertada un humor muy peculiar con la paranoia generada por su constante miedo. Mientras que Christian Convery también hace un buen trabajo dándole vida a la versión infantil de estos, logrando que sus distintas personalidades sean muy marcadas para que así su relación en pantalla presente mayor complejidad.

Y en cuanto a producción, nos encontramos con una buena factura: el trabajo de fotografía es sólido, la dirección de arte está bien cuidada, el score cumple, el trabajo de sonido es estupendo, los efectos son de gran nivel y la labor de maquillaje resulta efectiva.

Opinión final: The Monkey me gustó. Película con humor negro y mucha sangre que te hace pasar un buen rato.

Ojometro:
****

viernes, 21 de febrero de 2025

Crítica: The Dead Thing (2025)

Película dirigida por Elric Kane, quien comparte créditos como co-escritor del guión junto a Webb Wilcoxen. Se estrenó en VOD dentro de los Estados Unidos el pasado 14 de febrero, aunque todavía no hay información sobre si saldrá en formato físico.

Sinopsis:

Alex (Blu Hunt) es una joven perdida en una serie de irrelevantes encuentros sexuales hasta que un día se enamora de un carismático y sensible hombre, quien oculta un oscuro secreto que convertirá su relación en una peligrosa obsesión.


Comentarios generales:

El terror erótico no suele ser un subgénero atractivo para muchas personas, especialmente porque se considera demasiado pretencioso y dichas propuestas difícilmente logran llegar a ser algo más que una simple curiosidad pasajera. Por eso tampoco se estrenan muchas películas de este tipo de manera tan seguida y cuando una lo hace suele llamar la atención, lo cual sin duda fue el caso con The Dead Thing, aunque al final no creo que ayude demasiado a cambiar dicha percepción.

Ya que lo traído por Kane es una historia con una idea interesante a la que hay que tenerle cierta paciencia dado a que su primera media hora es bastante lenta al enfocarse principalmente en la soledad de Alex y su desinterés por las relaciones humanas, siendo esto un periodo con pocas emociones hasta que entra en escena el personaje de Kyle. Quien no representa un cambio radical a la dinámica previa, pero que indudablemente añade una dosis de misterio suficiente como para que el espectador pueda sentir curiosidad por lo que vendrá más adelante.

Y es que una vez que se revela su secreto se entra en una etapa interesante en la que todo lo que ocurre entre ellos es particularmente extraño y al no existir tanta claridad sobre la naturaleza de Kyle cada situación que involucra a Alex representa un potencial riesgo. Logrando con esto que el ritmo sea mucho más amigable durante el segundo acto y además se pueda integrar un poco más de violencia que ayude a mantener la sensación de peligro latente incluso durante lapsos en los que el drama romántico es lo que predomina no solo con los protagonistas, sino también con algunos personajes secundarios.

Ante esto la llegada a la parte final cuenta con la fuerza necesaria para que sea intensa, sin embargo, eso lastimosamente no se da. Más que nada porque las escenas construidas para conseguirlo resultan muy blandas y el conflicto decisivo queda parado como algo pasajero que solo lleva a un desenlace que no considero precisamente malo, pero que si carece de impacto.  

Sobre las actuaciones hay que decir que el elenco en general hace un buen trabajo, siendo Blu Hunt la que más destaca sin que sea algo memorable lo que ofrece. Mientras que en producción tenemos una factura cumplidora: el trabajo de fotografía es sólido, la dirección de arte simple, el score es bastante bueno, el trabajo de sonido está bien cuidado, los efectos son mínimos y la labor de maquillaje es discreta.

Opinión final: The Dead Thing está ok. Película con una propuesta interesante que simplemente no logra alcanzar su máximo potencial.

Ojometro:
***

domingo, 16 de febrero de 2025

Crítica: Into the Deep (2025)

Película dirigida por Christian Sesma, cuyo guión fue co-escrito por Chad Law y Josh Ridgway. Se estrenó de manera limitada en cines y VOD dentro de los Estados Unidos el pasado 24 de enero, aunque no hay información sobre si saldrá en formato físico.

Sinopsis:

Un grupo de piratas se encuentra a la caza de un cargamento de drogas en el fondo del mar y secuestra un barco con turistas para forzarlos a bucear en aguas infestadas de agresivos tiburones con tal de lograr su objetivo.  


Comentarios generales:

Las películas de tiburones pueden ir hacía cualquier dirección, así que cuando veo una de estas sé de antemano que las probabilidades de encontrarme con algo que no está tan ligado al cine de terror son altas. Sin embargo, también suelen ser el tipo de propuestas ideales para perder el tiempo cuando no hay muchas otras cosas que ver y justo por eso mismo decidí darle una oportunidad a Into the Deep, aunque al final no fue la mejor decisión que pude haber tomado.

Ya que lo traído por Sesma no solo es un thriller extremadamente mediocre, sino que además los tiburones como tal tienen muy poco peso en una historia que en un inicio te vende una cosa y con el paso de los minutos muta a algo totalmente distinto sin siquiera poder explotar lo que, en teoría, es su principal atractivo. Aburriéndonos desde temprano con flashbacks de nuestra protagonista (Cassidy) que están planeados para tratar de generar una mayor conexión con ella mientras supera sus traumas, pero que solo quedan como momentos insertados de manera random con los que podamos recordar que, de vez en cuando, existirá un peligro en el agua.

Por si esto no fuera suficiente frustración, las cosas solo empeoran cuando los piratas entran a escena debido a que esto vuelve a la película monótona y bastante aburrida dado a que en ningún momento se logra generar una tensión lo suficientemente sólida como para sentir que el riesgo que estos representan es mayor al de los propios tiburones. Entrando así en una dinámica predecible que lleva a situaciones en las que las muertes son esporádicas y sin ninguna clase de impacto; especialmente aquellas que se dan en escenas debajo del agua que solo exponen un pésimo CGI.

Simplemente todo es pobre tanto desde el lado narrativo como del visual y nada de eso cambia demasiado durante la parte final. La cual se carga un poco más hacía el lado de la acción con el propósito de tener un poco más de dinamismo, aunque en realidad eso no representa ningún cambio relevante para que el desenlace tenga por lo menos algo que valga la pena recordar.

Las actuaciones son pasables a lo mucho, siendo Scout Taylor-Compton (Cassidy) la única que puede resaltar un poco más. Mientras que en producción tampoco hay muchas cosas para destacar: el trabajo de fotografía es pobre, el score genérico, el trabajo de sonido es decente y los efectos son terribles cuando se trata del CGI con los tiburones.

Opinión final: Into the Deep es muy mala. Thriller con tiburones en los que estos son lo menos importante.

Ojometro:
*

martes, 11 de febrero de 2025

Crítica: Piglet (2025)

Película dirigida por Andrea M. Catinella (Island of the Dolls 2) y escrita por Harry Boxley. Se estrenó en VOD dentro de los Estados Unidos el pasado 25 de enero, aunque todavía no hay información sobre si saldrá en formato físico.

Sinopsis:

En el viaje por el cumpleaños número 21 de Kate (Alina Desmond), ella y sus amigas se topan con un monstruoso hibrido humano/cerdo conocido como Piglet. El cual está sediento de sangre y al que Kate tendrá que enfrentar mientras confronta su pasado.


Comentarios generales:

Todos sabemos que las películas de terror basadas en personajes que están entrando al dominio público son una moda que seguirá por unos cuantos años más y en la mayoría de los casos se tratan de proyectos cuya única apuesta para generar interés es el morbo. Simplemente es demasiado tentador ver qué locuras harán con estos personajes, pero también suele ser muy fácil darse cuenta cuando no hay nada más allá de dicho morbo y Piglet es otro ejemplo perfecto de eso.

Y es que lo traído por Catinella es realmente malo y no tienen que pasar más de cinco minutos para entenderlo gracias a que su manera de presentar a Piglet es completamente desangelada y con pocos elementos para volverlo un asesino interesante con el que al menos se puedan dejar pasar las evidentes carencias en pantalla en pro de la violencia. Una que realmente se da a cuenta gotas durante el primer acto y que cuando la tratan utilizar para llevar a momentos más gráficos termina siendo inefectiva porque las muertes resultan irrelevantes y un tanto metidas con calzador para que nuestro asesino no se sienta tan ajeno a las acciones centrales del grupo de amigas.

Las cuales nos llevan por una serie de situaciones aburridas que solo están ahí para poder consumir tiempo y tratar de añadir cierta tensión mientras inicia la matanza principal, siendo estos los únicos minutos en los que el ritmo es más o menos decente. Aunque esto no dura demasiado debido a que nuevamente todo lo referente a Piglet jamás logra tener el impacto suficiente como para que el caos y la sangre hagan de la masacre entretenida, además de que se empiezan a soltar otras piezas de información que solo provocan que algo simple se termine enredando con cosas que claramente están de más.

Dejándonos así ante una parte final de la que no esperas mucho y que se termina volviendo una copia de The Texas Chainsaw Massacre al integrar algo de canibalismo sin demasiado sentido, haciendo con esto que el desenlace tenga un poco más de intensidad. Sin embargo, ante todo lo visto en los minutos previos realmente no existe nada que pueda salvar este desastre.  

De las actuaciones tenemos puras interpretaciones acartonadas y carentes de algún tipo de emoción. Mientras que en producción también vemos cosas lamentables: el trabajo de fotografía es malo, la dirección de arte mediocre, el score no aporta nada, el trabajo de sonido es atroz, los efectos son tal vez lo mejorcito de la película y la labor de maquillaje es ínfima.  

Opinión final: Piglet es terrible. De esas películas sin absolutamente nada destacable que se deben de evitar a toda costa.

Ojometro:
*

viernes, 7 de febrero de 2025

Crítica: Companion (2025)

Película escrita y dirigida por Drew Hancock. Se estrenó en cines tanto en México como en los Estados Unidos los pasados 30 y 31 de enero; recaudando hasta la fecha $17.2 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

Iris (Sophie Tatcher) y Josh (Jack Quaid) son la pareja ideal, aunque un fin de semana en una remota casa en el lago cambiará por completo lo que parecía ser una historia de amor perfecta.


Comentarios generales:

Últimamente la línea para definir si una película pertenece a un determinado género se ha vuelto muy delgada y el cine de terror es tal vez uno de los que más suele experimentar este fenómeno, convirtiendo en todo un reto el saber si lo que estás viendo pertenece o no al terror. Un dilema que indudablemente se da con Companion debido a sus tendencias más cargadas hacía el sci fi, pero que al final logra volverse un thriller que no solo logra disolver las dudas sobre eso, sino que además es entretenido. 

Y mucho se debe a que Hancock tiene la capacidad para mantener esta historia lo más simple posible a pesar de que involucra un elemento de ciencia ficción con el cual fácilmente podría haber tomado un camino que involucrara mucha más espectacularidad, pero la realidad es que desde un inicio se puede notar que su principal meta es tratar de hacer a Iris lo más humana posible en un entorno en el que no abunda la empatía. Algo que indudablemente hace que los primeros 25 minutos no resulten tan emocionantes e incluso me atrevería a decir que la manera en la que se expone su artificial dulzura puede fastidiar a más de uno; sin embargo, una vez que se da el suceso que detona todos los problemas las cosas se vuelven más interesantes.

Sobre todo porque se nos empieza a brindar información de la relación central y cómo funciona el tema de los robots de compañía, trayendo consigo un ligero toque de humor que se combina de manera sólida con el caos provocado por las “fallas” de Iris. Aunque también es a partir del segundo acto cuando se nos revela que existe algo mucho más profundo que un simple problema amoroso y con ello se empieza a mostrar mayor violencia en pantalla, obvio no tan extrema, pero si con el nivel de fuerza necesaria para que se manifiesten los peligros que podrían representar los robots bajo ciertas circunstancias y también plantear la disyuntiva sobre si son ellos o los humanos la mayor amenaza.

Lo cual es básicamente en lo que se sustenta una parte final bastante entretenida en la que se pueden ver los mayores guiños hacia el cine de terror por medio de muertes con mayor impacto o una atmósfera más oscura. Todo para dejarnos un cierre que es bastante predecible en general, más eso no significa que no sea efectivo.

Las actuaciones están bastante bien con una Sophie Tatcher que logra darle vida a una robot con la que en todo momento sientes empatía dadas las circunstancias en las que descubre su verdadera naturaleza y cómo enfrenta los problemas. Mientras que Jack Quaid termina siendo un personaje bastante detestable sin que sea el típico villano que odias desde el inicio.

Y en cuanto a producción se nota que el presupuesto no fue tan alto, aunque no por ello la factura desmerece: el trabajo de fotografía es bueno, la dirección de arte sencilla, el score es buen complemento, el trabajo de sonido no tiene fallos, los efectos están bien hechos y la labor de maquillaje es discreta.

Opinión final: Companion me gustó. Una película divertida sin muchas pretensiones que les hará pasar un buen rato.

Ojometro:
****

martes, 4 de febrero de 2025

Crítica: The Damned (2025)

Película dirigida por Thordur Palsson, quien comparte créditos como co-escritor del guión junto a Jamie Hannigan. Se estrenó en VOD dentro de los Estados Unidos el pasado 3 de enero, aunque no hay información sobre si saldrá en formato físico.

Sinopsis:

Una viuda del siglo XIX tiene que tomar una decisión imposible cuando, durante un invierno especialmente cruel, un barco pesquero se hunde frente a su villa pesquera en Islandia.


Comentarios generales:

Estrenarse durante los primeros días del año suele ser complejo para cualquier película que no sea de renombre, mucho más si se trata de una producción que se estrena en servicios de streaming. Ante eso existe siempre el riesgo de caer rápidamente en el olvido sin siquiera haber podido hacer algo de ruido y eso fue precisamente lo que le ocurrió a The Damned.

Un trabajo con el que Palsson apuesta fuertemente por el dialogo, así como por un tono oscuro y depresivo que desde muy temprano pueden llegar a ahuyentar a muchos espectadores porque con esto se establece rápidamente que se tratará de una experiencia densa en la que la paciencia será fundamental. Donde la historia en general es simple y depende mucho del folclore para que en el primer acto se puedan plantar las semillas con las que se sustentará el terror psicológico más adelante, volviéndolo bastante pesado en cuanto al ritmo debido a que realmente no ocurren muchas cosas interesantes más allá del hundimiento.

El cual evidentemente es el detonante de todos los problemas y de a poco esto hace que se empiecen a presentar situaciones ligeramente más atractivas que juegan con las mentes de los personajes sin que se llegue a nada extremo, pero si con la cantidad necesaria de misterio como para que todo lo referente a las supuestas maldiciones logren tener cierta fuerza que beneficie al desarrollo semi-lento de las acciones. Sobre todo porque una vez que se empiezan a dar las muertes nos topamos ante el problema de que lo ocurrido en pantalla puede llegar a volverse un tanto repetitivo de manera rápida y al no tener tanta claridad con respecto a la amenaza por lo menos pueden utilizar la paranoia de los involucrados de una manera que, si bien es predecible, da los recursos suficientes como para que cada problema tenga su dosis de impacto.

Logrando con esto que la parte final sea entretenida a pesar de que nunca logra alcanzar el nivel fuerza que se necesita en esta clase de historias. Dejándonos así un desenlace poco arriesgado y un tanto frio, pero que seguramente podrá sorprender a más de uno.

De las actuaciones hay que decir que nadie resalta por encima del resto, todas son correctas y sin grandes riesgos. Mientras que en producción también tenemos una factura discreta: el trabajo de fotografía es sólido, la dirección de arte básica, el score es buen complemento, el trabajo de sonido cumple y todo lo referente a efectos/maquillaje es bastante simple.

Opinión final: The Damned está ok. Película oscura y de ritmo lento que seguramente no será del gusto de todos.

Ojometro:
***

viernes, 31 de enero de 2025

Crítica: Bloody Axe Wound (2024)

Película escrita y dirigida por Matthew John Lawrence (Uncle Peckerhead). Se estrenó de manera limitada en cines y VOD dentro de los Estados Unidos el pasado 27 de diciembre, aunque no hay información sobre si saldrá en formato físico.

Sinopsis:

En el pequeño pueblo de Clover Falls una serie de asesinatos reales han sido puestos en películas y vendidos en la tienda del padre de Abbie (Sari Arambulo) durante décadas. Aunque conforme ella va aprendiendo más sobre el negocio y las victimas, poco a poco empezará a creer que probablemente es momento de utilizar un nuevo enfoque.


Comentarios generales:

No diría que es algo nuevo, pero sin duda nos encontramos en una época en la que algunos slasher están empezando a voltear hacía un público más joven con ideas que para muchos fans de mayor edad pueden no resultar del todo atractivas. Simplemente es parte de un ciclo que cada determinado tiempo se repite por cuestiones lógicas y hay que aceptarlo como tal, así que realmente Bloody Axe Wound puede que no sea para todo el mundo.

Lo cual no significa que lo presentado por Matthew John Lawrence me haya parecido malo; de hecho, cuenta con cosas entretenidas en su búsqueda por burlarse de los clichés plenamente establecidos del slasher que le dan un aire de originalidad a esta historia. Todo por medio de una dinámica entre padre e hija que durante el primer acto se encarga de establecer el hecho de que ambos no son muy diferentes en cuanto a su gusto por matar personas y a partir de esto profundizar sobre una relación que básicamente se sustenta en el deseo de Abbie de mantener la tradición familiar, logrando así que desde temprano existan situaciones con una buena dosis de sangre que hacen que el ritmo sea bastante agradable.

Lo malo es que una vez pasada esta novedad inicial las cosas poco a poco empiezan a caer en lo convencional justo cuando nuestra protagonista se involucra más en la vida escolar, donde nuevamente nos encontramos con muchos clichés, pero sin que estos resulten interesantes dado a que solo llevan a un tipo de comedia juvenil poco efectiva. No como para volver esto algo aburrido, aunque si para que el concepto inicial vaya difuminándose lentamente y las cosas se vuelvan demasiado predecibles en su ejecución; además de que el cambio de sentimiento por parte de Abbie hacia sus víctimas se siente un tanto forzado.

Haciendo con esto que el peso emocional no sea suficiente como para que realmente te importe mucho lo que les pueda llegar a ocurrir; sin embargo, a pesar de dicho problema la parte final se las arregla para ser entretenida. Más que nada porque el conflicto familiar brinda algunos momentos divertidos en los que la violencia es parte central y gracias a ello el desenlace no se siente tan blando.

Las actuaciones está bien con una Sari Arambulo que hace un trabajo correcto al pasar de ser una potencial asesina a una chica que comprende que sus víctimas son más que simples costales de carne que merecen morir. Mientras que Billy Burke (Roger Bladecut) logra tener unos momentos interesantes como el asesino serial que sigue absolutamente todos los clichés.

En cuanto a producción no es de alto presupuesto, pero ofrece buenas cosas: el trabajo de fotografía cumple, la dirección de arte es simple, el score resulta a agradable, el trabajo de sonido es sólido, los efectos están bien hechos y la labor de maquillaje resulta de buen nivel.  

Opinión final: Bloody Axe Wound está ok. Película con una idea curiosa para perder el tiempo y soltar alguna que otra risa.

Ojometro:
***

martes, 28 de enero de 2025

Crítica: Wolf Man (2025)

Película dirigida por Leigh Whannell (The Invisible Man), quien comparte créditos como co-escritor del guión junto a Corbett Tuck. Se estrenó en cines dentro de los Estados Unidos el 17 de enero, mientras que en México hizo lo propio el pasado 23 de enero; recaudando hasta la fecha $27.6 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

Mientras van en camino a una vieja granja, una familia es atacada por un misterioso animal del cual logran escapar. Aunque conforme transcurre la noche el padre empezará a transformarse en algo irreconocible para el ojo humano.


Comentarios generales:

Sabemos que para este punto Universal ha desistido por completo en su intento por crear un universo cinematográfico basado en sus icónicos monstruos y su enfoque más individual ha dejado buenos dividendos hasta el momento. Aunque también es innegable que existen personajes que representan un mayor riesgo dada su importancia histórica para el estudio y por lo mismo el lograr una visión más contemporánea de estos no es una tarea sencilla debido a que los cambios pueden llegar a ser polémicos, tal como lo demuestra Wolf Man.

Ya que Leigh Whannell toma la decisión de alejarse totalmente de la historia original al apostar por algo más minimalista para que la presencia del hombre lobo (se vea o no en pantalla) sea algo continuo desde temprano y así pueda generar grandes dosis de tensión que ayuden a establecer una atmósfera de peligro constante. Esto mientras se le da relevancia a una dinámica familiar un tanto quebrada que añade el tono depresivo suficiente para que el espectador sienta curiosidad por saber cómo sobrellevarán su apremiante situación dado a que poco a poco tendrán que lidiar con la inevitable transformación de Blake.

Y es precisamente la progresiva transformación del protagonista la que hace de esto algo interesante dado a que, contrario a lo habitual, acá se va dando por etapas y eso ayuda a que en los momentos en los que no hay tanta acción en pantalla se pueda contar siempre con la sensación de riesgo latente gracias a su naturaleza agresiva que simplemente en algún punto ya no podrá controlar. Todo bajo un ritmo agradable que evita que se caiga en lo repetitivo por el espacio tan limitado en el que se desarrollan las acciones, aunque también es cierto que existen algunas cosas que pueden resultar fastidiosas si se busca fidelidad con la película de 1941 y porque el conflicto resulta más o menos predecible en su ejecución.

Algo que afortunadamente no evita que existan buenas dosis de violencia y crudeza para acentuar el comportamiento salvaje del hombre lobo y así llevarnos a una parte final que juega mucho con la oscuridad, pero también con tratar de explotar el lado emocional de este desastre familiar. Lo cual no es tan potente como se pudiera esperar, pero ayuda a que el desenlace sea efectivo.

Las actuaciones están bastante bien y al tratarse de un elenco reducido la química que se logra entre los protagonistas es lo suficientemente sólida. Mientras que en producción tenemos una factura impecable: el trabajo de fotografía es muy bueno, la dirección de arte simple, el score es genial, el trabajo de sonido espectacular, los efectos son de buena calidad y la labor de maquillaje es de primer nivel.

Opinión final: Wolf Man me gustó. Una película sólida de hombres lobo que puede resultar polémica por su alejamiento del material original.  

Ojometro:
**** 

miércoles, 22 de enero de 2025

Crítica: Apocalipsis Z: El principio del fin (2024)

Adaptación de la novela del mismo nombre, la cual está dirigida por Carles Torrens (Apartment 143, Pet) y escrita por Ángel Agudo. Se estrenó directamente en Amazon Prime Video el pasado 31 de octubre, aunque no hay información sobre si saldrá en formato físico.

Sinopsis:

Manel (Francisco Ortiz) se encuentra en su casa resguardándose de una enfermedad muy contagiosa que pone de cabeza a todo el planeta. Hasta que se ve forzado a dejarla y encontrarse con compañeros de viaje poco convencionales, pero esenciales para lograr sobrevivir.


Comentarios generales:

A pesar de que es un libro que se puede encontrar de manera relativamente sencilla, la verdad es que Apocalipsis Z nunca logró llamar por completo mi atención como para leerlo; sin embargo, una vez que se supo que habría una adaptación mi curiosidad se elevó un poco. Y es que ante el hueco que dejó The Walking Dead no es raro que se quiera encontrar el nuevo gran éxito de zombies considerando que es un subgénero muy redituable y aunque Apocalipsis Z: El principio del fin tiene los elementos para iniciar algo interesante, lo cierto es que de momento no ha logrado generar gran impacto.

Y es que lo traído por Torrens es un trabajo competente que difícilmente se puede catalogar como malo, pero al ser una primera parte tiene que lidiar con las complejidades que representa el tratar de establecer un apocalipsis zombie en una cantidad de tiempo limitada y por lo mismo los primeros treinta minutos pueden resultar un tanto acelerados e incluso vacios. Donde la información sobre el virus se proporciona a cuenta gotas y realmente la sensación de caos que debería de ocasionar un evento como este no se puede sentir de manera plena ante lo poco que se ve a los infectados, provocando que existan pocas emociones mientras se muestran situaciones estándar de supervivencia.

Siendo realmente hasta el segundo acto cuando las cosas adquieren mayor ritmo al utilizar un poco más a los zombies y porque finalmente se nos empieza a mostrar el lado oscuro del comportamiento humano ante la crisis. Lo cual no se aleja demasiado de lo que ya hemos visto en otros trabajos, pero es suficiente para establecer un peligro extra con el que se construye básicamente el resto de la película sin que se rompan la cabeza en la manera de desarrollar las acciones y con ello también tomando el riesgo de caer en lo predecible en lo que se refiere al destino de Manel.

Llevándonos así a una parte final que realmente no presenta demasiadas sorpresas y en donde la integración de más personajes por lo menos añade mayor complejidad al momento de construir algunas escenas que añadan tensión. Ofreciendo un desenlace con intensidad, un poco más de sangre y que, sobre todo, deja bien claro que solo es el primer paso para algo más grande.

Las actuaciones no están mal, siendo el propio Francisco Ortiz y José María Yazpik (Pritchenko) quienes terminan teniendo mayor tiempo en pantalla para desarrollar una alianza que se siente algo forzada en principio y que funciona ligeramente mejor ya al final. Aunque es claro que este aspecto en específico se profundizará en la siguiente entrega.

Y en cuanto a producción, la verdad tenemos una buena factura: el trabajo de fotografía es sólido, la dirección de arte sencilla, el score no está mal, el trabajo de sonido es bastante bueno, los efectos cumplen y la labor de maquillaje es de buena calidad. 

Opinión final: Apocalipsis Z: El principio es entretenida. Película sólida de zombies para iniciar una aparente trilogía.

Ojometro:
***

sábado, 18 de enero de 2025

Crítica: Werewolves (2024)

Película dirigida por Steven C. Miller (Silent Night) y escrita por Matthew Kennedy. Se estrenó en cines y VOD dentro de los Estados Unidos el pasado 6 de diciembre, mientras que su salida en formato físico está anunciada para el próximo 4 de febrero.

Sinopsis:

Dos científicos tratan de detener una mutación que convierte a las personas en hombres lobo después de haber sido afectados por una súper luna un año antes, aunque con el tiempo en su contra las cosas se saldrán rápidamente de control.


Comentarios generales:

El cine de terror no es ajeno a reciclar o copiar ideas, es parte de su esencia y a lo largo de los años hemos visto incontables casos que han funcionado, así como muchísimos otros que no. Simplemente es algo inevitable y más cuando se tienen que hacer películas sobre determinados subgéneros que ya están muy explotados, tal como ocurre con Werewolves.

Y es que lo traído por Miller es literalmente “The Purge” con hombres lobo, lo cual en el papel no suena tan mal, pero la realidad es que al momento de querer combinar estas dos cosas no se logran los mejores resultados dado a que la historia carece de la sustancia necesaria como para que la problemática central no se sienta demasiado absurda. Orillando a que desde el primer acto veamos situaciones forzadas que en ningún punto logran hacer que los personajes te importen mucho que digamos y por lo mismo tu preocupación ante el riesgo que representa tanto la luna como los propios hombres lobo es demasiado baja como para generar cierto nivel de expectativa ante el inminente desastre que se avecina.

Uno que al menos inicia de una manera decente con un buen despliegue de efectos y violencia proporcionada por los licántropos; sin embargo, gracias a un pobre trabajo de edición realmente no se logra mantener una dinámica estable al estar cambiando constantemente de escenarios. Provocando con esto que no se pueda dar un desarrollo más o menos coherente que permita continuar con la idea inicial y evitar que se dé tan rápido el cambio a algo mucho más predecible cargado de acción genérica para hacer del protagonista un cuasi Rambo mientras su familia se ve en riesgo.

Con todo lo anterior evidentemente las esperanzas para que la parte final mejore no resultan muy altas y tampoco es que se realice un esfuerzo importante para lograr dicho propósito. Dejándonos ante un desenlace con pocas emociones y un cierre extremadamente acelerado que ni siquiera te da tiempo de procesar un poco lo sucedido debido al abrupto paso a los créditos. 

Sobre las actuaciones hay que decir no están tan mal tomando en cuenta lo poco que tiene para trabajar todo el elenco, cuya principal orden básicamente era tratar de lucir lo más robótico posible. Mientras que en producción tenemos algunas cosas positivas: el trabajo de fotografía es sólido, la dirección de arte discreta, el score resulta genérico, el trabajo de sonido es de buena calidad, los efectos tienen altibajos y la labor de maquillaje no es la más convincente.

Opinión final: Werewolves es mala. De esas películas de hombres lobo de las que nadie se acordará en un par de meses.

Ojometro:
**

martes, 14 de enero de 2025

Crítica: Y2K (2024)

Película dirigida por Kyle Mooney, quien comparte créditos como co-escritor del guión junto a Evan Winter. Se estrenó en cines dentro de los Estados Unidos a inicios de diciembre, mientras que su salida en VOD se dio el día 24 del mismo mes.

Sinopsis:

Dos donnadies de la escuela preparatoria deciden asistir a la última celebración antes de que inicie el nuevo milenio en la víspera del año nuevo de 1999. Aunque la noche se volverá todavía más loca de lo que hubieran imaginado cuando el reloj marque la media noche.


Comentarios generales:

Recrear las décadas pasadas es algo común en la industria del cine y justo estamos entrando en el periodo en el que los 2000s empiezan a ser traídos de vuelta, algo que personalmente me llama la atención dado a que fue la época en la que viví mi adolescencia y por ello la tengo mucho más marcada en mi memoria. Situación que hacía que Y2K me generara mayor curiosidad de la habitual a pesar de que se veía como una de esas propuestas absurdas sin nada interesante, lo cual en gran parte es cierto, pero no es tan mala como pensaba que sería. 

Ya que lo traído por Mooney es una historia que maneja un humor que puede llegar a fastidiar a más de uno en su propósito de exagerar los comportamientos adolescentes de la época, haciendo que el primer acto sea difícil de digerir. Sobre todo porque el mayor atractivo en esta parte es ver cuales situaciones del pasado logran representar de la manera más fidedigna posible y básicamente no existe ningún tipo de referencia a la paranoia que existió en su momento por el error que causaría la catástrofe informática, convirtiendo esto en una comedia adolescente como cualquier otra que tiene sus momentos de gracia esporádicos.

Algo que cambia una vez que empieza la revolución de la tecnología dado a que con ello llega el caos por medio de situaciones que rayan en lo ridículo, pero que precisamente por eso mismo terminan siendo disfrutables dado a que ayudan a establecer que absolutamente todo es posible. Brindándole así un ritmo un poco más ágil a las acciones y un nivel de violencia suficiente como para que la amenaza resulte de consideración; sin embargo, también hay que mencionar que dicha ridiculez con el pasar de los minutos resulta en un arma de doble filo debido a que, así como hay cosas que funcionan, igualmente hay otras que no y eso provoca que en determinado momento sientas que lo visto en pantalla no lleva a ningún lado.

Y en gran medida así es, aunque debo de decir que la parte final me pareció entretenida y mucho de eso se debe a que integran a la dinámica al vocalista de una banda de Nu metal para resaltar algo que incluso en aquellos años generaba polémica y cierto rechazo. Lo cual probablemente funcionará de mejor manera con quienes crecieron siendo fans de dicha banda o género musical (como es mi caso), pero en general esto hace que el desenlace no resulte tan genérico.

En cuanto a las actuaciones no hay mucho que decir, la mayoría sirve su propósito en base a estereotipos y comedia muy simplona; aunque Julian Dennison (Danny) tiene algunos momentos que te pueden sacar la carcajada. Mientras que en producción se nota que el presupuesto no fue tan robusto: el trabajo de fotografía cumple, la dirección de arte está bien, el score es sólido, el trabajo de sonido no tiene fallos, los efectos son simples y la labor de maquillaje discreta. 

Opinión final: Y2K está pasable. Película absurda del montón, pero que tiene algunas cosas que pueden hacerte reír un rato.

Ojometro:
***

miércoles, 8 de enero de 2025

Crítica: Nosferatu (2024)

Película escrita y dirigida por Robert Eggers (The Witch, The Lighthouse). Se estrenó en cines dentro de los Estados Unidos el 25 de diciembre, mientras que en México hizo lo propio el pasado 1 de enero; recaudando hasta la fecha $101.6 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

Un historia gótica de obsesiones entre una joven atormentada en la Alemania del siglo XIX y un antiguo vampiro obsesionado con ella, causando un terror inimaginable a todos los que se cruzan en su camino.


Comentarios generales:

Independientemente de si te gusta o no el estilo de Robert Eggers, lo cierto es que cuando se supo que trabajaría en una nueva versión de “Nosferatu” casi todo el mundo estaba de acuerdo en que era una combinación perfecta. Convirtiéndola así en una de las películas de terror más esperadas de 2024 a pesar de su peculiar fecha de estreno y que ha logrado satisfacer a una audiencia mucho más amplia de la que normalmente consigue atraer el director.

Y es que Eggers apuesta por la familiaridad de una historia conocida, pero que todavía no está tan sobreexplotada como la de “Drácula” y eso ayuda a que pueda imprimirle su sello sin que el tono depresivo o frio se sienta fuera de lugar. Logrando así que desde el primer acto se pueda magnificar el aspecto visual de la película que haga la espera por la primera aparición del Conde Orlok más digerible ante el ritmo pausado empleado, obteniendo con ello una atmósfera oscura muy potente que poco a poco va acaparando las acciones para que, cuando por fin veamos dicha aparición, se logre que el impacto sea muy fuerte sin que se tenga que recurrir a situaciones extremas para establecer el nivel de peligrosidad que este representa.

Llevando así a un segundo acto que se construye en base a la tragedia, ya que una vez que el Conde Orlok empieza a tener más peso dentro de todo esto la sensación de riesgo por cuestiones lógicas se incrementa y las desgracias para quienes se cruzan en su camino son las que se encargan de proporcionar algunas dosis de shock que logran mantener la dinámica estable. Sin embargo, también hay que mencionar que conforme se va profundizando la problemática alrededor del personaje de Ellen Hutter se puede llegar a sentir que las cosas se alargan de manera un tanto innecesaria y con ello ciertas situaciones que deberían de tener más peso se terminan quedando como algo sin tanta relevancia; además de que la obsesión por parte del director de nunca exponer de más al vampiro también juega un poco en contra.

Dejándonos ante una parte final en la que el tono depresivo se incrementa por la propia omnipotencia del Conde y las tragedias que este trae consigo al pueblo, lo cual en general es entretenido de ver. Aunque definitivamente el desenlace puede resultar un tanto decepcionante debido a que, si bien se apega al de la película de 1922, este te termina dejando con una sensación de que le faltó un poco más de fuerza.

En cuanto a las actuaciones tenemos trabajos que resaltan mucho más gracias a la propia excentricidad de los personajes como es el caso de Willem Dafoe (Prof. Albin Eberhart von Franz) y Bill Skarsgård (Conde Orlok), pero en general todo el elenco lo hace bastante bien. Incluso Lily-Rose Depp (Ellen Hutter), quien por algunos lapsos puede llegar a resultar un poco frustrante dado a que mantiene la misma expresión durante todo el filme.

Mientras que en producción tenemos una factura de un nivel altísimo: el trabajo de fotografía es espectacular, la dirección de arte increíble, el score es estupendo, el trabajo de sonido es de gran calidad, los efectos están bien hechos y la labor de maquillaje está muy bien cuidada.

Opinión final: Nosferatu me gustó. Es una buena película que, como todo lo que hace Eggers, generará diversas reacciones.

Ojometro:
****

miércoles, 1 de enero de 2025

Películas 2025

Aquí dejo el calendario con las películas que se conoce saldrán en 2025 y sus fechas tentativas de estreno durante este año dentro de los Estados Unidos, país de origen o del país en donde se distribuirá primero.

Es importante señalar que no todas las películas están 100% confirmadas, además de que siempre puede haber retrasos; mientras que en ciertos casos solo se ha revelado que saldrán este mismo año, pero no la fecha exacta.

* Recuerden que este calendario se estará actualizando de manera constante durante prácticamente todo el año cuando se den a conocer trailers o fechas de estreno.


ENERO

The Damned
Fecha de estreno: 3 de enero
Formato: VOD
Trailer

Peter Pan's Neverland Nightmare
Fecha de estreno: 13 de enro
Formato: Limitado en cines
Trailer

Wolf Man
Fecha de estreno: 17 de enero
Formato: En cines
Trailer

Werewolf Game
Fecha de estreno: 21 de enero
Formato: VOD
Trailer

Presence
Fecha de estreno: 24 de enero
Formato: VOD
Trailer

Grafted
Fecha de estreno: 25 de enero
Formato: VOD
Trailer

The Night Time World
Fecha de estreno: 28 de enero
Formato: VOD y formato digital
Trailer

Companion
Fecha de estreno: 31 de enero
Formato: En cines
Trailer

Dark Match
Fecha de estreno: 31 de enero
Formato: VOD
Trailer

Round The Decay
Fecha de estreno: 31 de enero
Formato: Limitado en cines
Trailer


FEBRERO

Heart Eyes
Fecha de estreno: 7 de febrero
Formato: En cines
Trailer

Dark Nuns
Fecha de estreno: 7 de febrero
Formato: En cines
Trailer

A Knight's War
Fecha de estreno: 11 de febrero
Formato: VOD
Trailer

The Dead Thing
Fecha de estreno: 14 de febrero
Formato: VOD
Trailer

The Monkey
Fecha de estreno: 21 de febrero
Formato: En cines
Trailer

Vicious
Fecha de estreno: 28 de febrero
Formato: En cines
Trailer

 

MARZO

Bloat
Fecha de estreno: 7 de marzo
Formato: Formato digital
Trailer

The Woman in the Yard
Fecha de estreno: 7 de marzo
Formato: En cines
Trailer

In the Lost Lands
Fecha de estreno: 7 de marzo
Formato: En cines
Trailer

Opus
Fecha de estreno: 7 de marzo
Formato: En cines
Trailer

The Rule of Jenny Pen
Fecha de estreno: 7 de marzo
Formato: En cines
Trailer

Control Freak
Fecha de estreno: 13 de marzo
Formato: Hulu
Trailer

Borderline
Fecha de estreno: 14 de marzo
Formato: En cines y formato digital
Trailer

The Fetus
Fecha de estreno: 21 de marzo
Formato: En cines
Trailer

Hood Witch
Fecha de estreno: 21 de marzo
Formato: En cines y formato digital
Trailer

Ash
Fecha de estreno: 21 marzo
Formato: En cines
Trailer

Locked
Fecha de estreno: 21 marzo
Formato: En cines
Trailer

Shadow of the Wolf
Fecha de estreno: 25 marzo
Formato: VOD y formato digital
Trailer

Cannibal Mukbang
Fecha de estreno: 25 marzo
Formato: Formato digital
Trailer

ABRIL

Screamboat
Fecha de estreno: 2 de abril
Formato: En cines
Trailer

825 Forest Road
Fecha de estreno: 4 de abril
Formato: VOD
Trailer

The Grove
Fecha de estreno: 4 de abril
Formato: En cines
Trailer

Drop
Fecha de estreno: 11 de abril
Formato: En cines
Trailer

Marshmallow
Fecha de estreno: 11 de abril
Formato: En cines
Trailer

Shadow of God
Fecha de estreno: 11 de abril
Formato: VOD
Trailer

Hell of a Summer
Fecha de estreno: 18 de abril
Formato: En cines
Trailer

Sinners
Fecha de estreno: 18 de abril
Formato: En cines
Trailer

The Ugly Stepsister
Fecha de estreno: 18 de abril
Formato: VOD
Trailer

Dead Mail
Fecha de estreno: 18 de abril
Formato: VOD
Trailer

Until Dawn
Fecha de estreno: 25 de abril
Formato: En cines
Trailer

The Killgrin
Fecha de estreno: 25 de abril
Formato: VOD
Trailer

FRÉWAKA
Fecha de estreno: 25 de abril (Irlanda)
Formato: VOD
Trailer

The Last Cabin
Fecha de estreno: 25 de abril
Formato: VOD
Trailer

 

MAYO

Rosario
Fecha de estreno: 2 de mayo
Formato: Limitado en cines
Trailer

Field of Screams
Fecha de estreno: 6 de mayo
Formato: Limitado en cines
Trailer

Clown in a Cornfield
Fecha de estreno: 9 de mayo
Formato: En cines
Trailer

Final Destination: Bloodlines
Fecha de estreno: 16 de mayo
Formato: En cines
Trailer

Hurry Up Tomorrow
Fecha de estreno: 16 de mayo
Formato: Formato digital
Trailer

The Severed Sun
Fecha de estreno: 16 de mayo
Formato: En cines
Trailer

Fear Street: Prom Queen
Fecha de estreno: 23 de mayo
Formato: Netflix
Trailer

Bring Her Back
Fecha de estreno: 30 de mayo
Formato: En cines
Trailer


JUNIO

The Ritual
Fecha de estreno: 6 de junio
Formato: En cines
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28 Years Later
Fecha de estreno: 20 de junio
Formato: En cines
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M3GAN 2.0
Fecha de estreno: 27 de junio
Formato: En cines
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JULIO

I Know What You Did Last Summer
Fecha de estreno: 18 de julio
Formato: En cines
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AGOSTO

Beneath the Storm
Fecha de estreno: 1 de agosto
Formato: En cines
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Together
Fecha de estreno: 1 de agosto
Formato: En cines
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SEPTIEMBRE

The Conjuring: Last Rites
Fecha de estreno: 5 de septiembre
Formato: En cines
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Him
Fecha de estreno: 19 de septiembre
Formato: En cines
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The Strangers: Chapter 2
Fecha de estreno: 26 de septiembre
Formato: En cines
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OCTUBRE

The Black Phone 2
Fecha de estreno: 17 de octubre
Formato: En cines
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NOVIEMBRE

Frankenstein
Fecha de estreno: 
Formato: Netflix
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DICIEMBRE

Five Nights at Freddy's 2
Fecha de estreno: 5 de diciembre
Formato: En cines
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FECHA SIN CONFIRMAR


- V/H/S/8
- The Gorge
- Orang Ikan
- Bambi: The Reckoning (Trailer)