Primer largometraje de la
directora Tricia Lee, quien además es la co-escritora del guión
junto con Corey Brown. Se estrenó a mitad de año de manera limitada en cines
dentro de Canadá y posteriormente durante el mes de septiembre salió en DVD y
VOD; mientras que en los Estados Unidos salió en diversas
plataformas digitales.
Sinopsis:
Janey (Chelsea Jenish) es enviada
a un campamento para someterse al tratamiento de silencio y meditación en
medio del bosque como parte de su rehabilitación. Estando ahí se vuelve
rápidamente en alguien que rompe las reglas constantemente y gracias a eso se
da cuenta que los hombres que dirigen el lugar les han estado lavando el
cerebro a todas las internas; aunque eso no parece ser lo único perturbador del
lugar.
Comentarios generales:
Cuando leí sobre Silent Retreat
me llamó poderosamente la atención debido a que pocas propuestas dentro del género
manejan el silencio como algo relevante y no sabía exactamente si esperar algo
convencional o algo que se acercara de manera discreta al cine mudo. Así que
después de una larga espera por fin llegó y aunque me decepcionó un poco el que
dicho aspecto central fuera solo utilizado en parte, creo que en términos
generales se logran buenos resultados.
Y es que esta es una película que
bien se puede dividir en dos partes muy claras, siendo donde Lee se dedica
exclusivamente a manejar las cosas en base al tema del silencio por mucho la
más interesante.
Esto se da prácticamente durante todo el primer acto y en un breve lapso del segundo, generando una sensación de paranoia y una atmósfera de soledad increíblemente fuertes que se mezclan de manera ideal para brindarnos algunos momentos que, si bien no son precisamente aterradores, si le añaden algo distinto a las cosas; especialmente porque se toca un tema controvertido y se deja que sea el propio espectador quien saque sus conclusiones sobre lo que ocurre en dicho lugar. Aunque para hacerlo se maneja un ritmo que es lento, sin muchas prisas; el cual provoca que sientas como si lo que estuvieras viendo no llevara a ningún lado.
Esto se da prácticamente durante todo el primer acto y en un breve lapso del segundo, generando una sensación de paranoia y una atmósfera de soledad increíblemente fuertes que se mezclan de manera ideal para brindarnos algunos momentos que, si bien no son precisamente aterradores, si le añaden algo distinto a las cosas; especialmente porque se toca un tema controvertido y se deja que sea el propio espectador quien saque sus conclusiones sobre lo que ocurre en dicho lugar. Aunque para hacerlo se maneja un ritmo que es lento, sin muchas prisas; el cual provoca que sientas como si lo que estuvieras viendo no llevara a ningún lado.
Luego está la otra mitad donde
las cosas suben de intensidad, así como de ritmo, para introducir a una
criatura peculiar que a muchos les hará recordar de cierto modo a The Descent y
que dicta el inicio de la poca claridad dentro de la historia. Lo cual es una pena
porque la criatura en si no es el problema, sino la poca lógica presentada para
justificar su presencia: nunca te explican qué diablos es, por qué vive en el
bosque o por qué te debe de importar lo que haga. De hecho, una vez que entra
en la dinámica la película pierde toda su esencia y a pesar de que se hacen
esfuerzos por querer integrar los aspectos iniciales estos terminan esfumándose
en la violencia.
El final no está mal, es mucho
más sangriento de lo que uno se imaginaria al inicio y le añaden cierta lógica
al tema de la criatura.
En las actuaciones casi todo
recae en Jenish y Robert Nolan, siendo este último el que brinda algunas de las
mejores escenas. La producción en general tiene buena nota: la fotografía es
sobria (ayuda mucho especialmente con la primera mitad) y los efectos/maquillaje
son muy simples; aunque por ahí existe alguno que otro traspié con el trabajo de sonido en
ciertos diálogos que se nota tuvieron que ser sobrepuestos. Mención aparte
merece el score.
Opinión final: Silent Retreat me agrado. Es una pena que le
agregaran algo innecesario pero en general vale la pena.
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