Película dirigida por Patrick Rea
(Nailbiter), quien comparte créditos junto a
Michelle Davidson como co-escritor del guión. Se estrenó en VOD dentro
de los Estados Unidos el pasado 3 de febrero y su salida en formato físico está
anunciada para el 18 de abril.
Sinopsis:
Una mujer aventurera que le
guarda un importante secreto a su esposo insiste en que ambos vayan de
campamento al bosque para tratar de reconectarse. Estando ahí presencian como “algo” mata a un grupo de
cazadores y este evita que puedan salir de su tienda de campaña; iniciando así
una peligrosa revelación de secretos e historias fantásticas que los pondrán a
pensar sobre cuál es la verdadera amenaza.
Comentarios generales:
No tuvo que pasar mucho tiempo
para que viera otra película localizada en un bosque, aunque en esta ocasión se
trataba de una de la que realmente tenía poco conocimiento y eso me generaba
más interés. Sin embargo, con Arbor Demon las cosas no fueron muy distintas, ya
que más allá de contar con un elemento peculiar que le da algo de originalidad,
se trata de otro trabajo con los problemas habituales.
Rea construye
fundamentalmente la primera mitad de la película bajo un concepto básico: una
pareja completamente fuera de sintonía. Integrando alguno que otro elemento
para dejar en claro que es una película de terror, pero toda su atención en
esta parte se centra en hacer de la relación el foco de atención a base de puro
dialogo y a la evidente tensión que existe entre ambos con respecto al tema por
el cual Dana guarda el secreto; uno que no es difícil de descubrir, pero que el
director trata de hacerlo mucho más evidente bajo el propósito de establecer la
relevancia que jugará más adelante.
Todo lo anterior no suena muy emocionante,
pero la verdad es que la dinámica entre ambos actores ayuda que las cosas
fluyan de manera rápida y se sientan muy naturales; aunque al alejarse tanto
del camino del terror la falta de interés se empieza a hacer presente. Lo cual
termina afectando la revelación de la amenaza debido a que el impacto que se supone debería de
tener se siente muy pequeño y eso empeora cuando se decide integrar a un tercer
personaje para regresar nuevamente a la dinámica centrada en el dialogo que no
ayuda a tener grandes avances gracias a que es a partir de aquí cuándo se
empiezan a jugar con temas fantásticos mucho más complejos que no pueden ser
mejor explotados gracias a la limitante que representa el escenario. Provocando
así una falta de identidad evidente.
Los últimos 15 minutos son
bastante potentes y el hecho de que las criaturas finalmente sean expuestas le
añade ese toque fantástico con el que se estuvo jugando en los minutos previos.
Además explican de manera no tan confusa los motivos por los cuales se dieron
todos estos sucesos y eso ayuda que el final sea más efectivo.
Las actuaciones no están nada
mal, Fiona Dourif (Dana) y Kevin Ryan (Charles) tienen muy buena química y es
gracias a eso que la primera mitad no es insufrible; mientras que Jake Busey (Sean)
no desentona en lo absoluto. La producción es pequeña: el trabajo de fotografía está ok, el score cumple, el trabajo de sonido es efectivo, los
efectos son muy simples y la labor de maquillaje es de buena factura en la
caracterización tan extraña de la amenaza.
Opinión final: Arbor Demon es
decepcionante. Una película que nunca sabe por qué apostar y termina cayendo en lo genérico por eso.
Ojometro:
**
**