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viernes, 25 de abril de 2025

Critica: Sinners (2025)

Película escrita y dirigida por Ryan Coogler. Se estrenó en cines tanto en México como los Estados Unidos los pasados 17 y 18 de abril, recaudando hasta la fecha $87 millones de dólares en maquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

Tratando de dejar sus conflictivas vidas detrás, los gemelos "Smoke" y "Stack" (Michael B. Jordan) deciden regresar a su pueblo para iniciar de nuevo. Aunque estando ahí descubrirán que un mal mayor se encuentra esperándolos para darles la bienvenida.


Comentarios generales:

Una creencia que suele ser universalmente aceptada es que hacer películas de vampiros en la actualidad es complicado porque se trata de uno de esos subgéneros que, dada su longevidad, difícilmente dan mucho margen de maniobra para contar cosas nuevas. Sin embargo, muy de vez en cuando llegan proyectos que logran retar dicha creencia ofreciendo algo que toma a todo el mundo por sorpresa y definitivamente Sinners es uno de esos casos.

Ya que lo traído por Coogler es una muy buena película de vampiros que aprovecha este gancho para tocar otros temas como la segregación, las libertades básicas, el racismo y la relevancia histórica del Blues sin que se sientan fuera de lugar en ningún momento. Logrando con esto que la historia tenga mucho más sustancia de la esperada, aunque evidentemente esto hace que la primera mitad no sea precisamente la más llamativa si lo único que quieres ver es a los vampiros matando a lo loco debido a que se toma su tiempo para tratar cada tema mencionado y así establecer de manera firme el contexto en el que se desarrollan las acciones.

Todo bajo un ritmo agradable que solo mejora conforme la música y los propios vampiros empiezan a tener un rol predominante para construir algunas de las mejores escenas, no solo por lo peculiares que resultan, sino porque poco a poco estas van haciendo que el tono de la película se vaya volviendo más oscuro y la sensación de riesgo se incremente de manera considerable. 

Logrando así que la transición de la parte “seria” a la parte supernatural resulte efectiva dado a que se logra posicionar a los vampiros como una amenaza de consideración sin tener que recurrir a situaciones visualmente complejas, generando en todo momento una atmósfera tensa que ayuda a que las interacciones entre ambos bandos sean bastante interesantes. Además de que gracias a esto el nivel de violencia se va incrementando de manera progresiva bajo la premisa de que realmente nadie está exento a la brutalidad de los chupa sangre, cuyas motivaciones son impulsadas por un concepto medio retorcido de la búsqueda de la libertad y el escape al racismo de la época.

Brindándole con esto mayor profundidad a las cosas rumbo a una parte final que ahora si apuesta más hacia la espectacularidad y gracias a ello logra tener muchísima fuerza al contar con sus buenas dosis de acción y sangre. Aunque también es cierto que el desenlace puede llegar a sentirse un tanto fuera de lugar o innecesario.

Sobre las actuaciones tenemos a un Michael B. Jordan genial dándole vida a dos gemelos de personalidades sumamente contrastantes con los que logra crear momentos emocionalmente diversos y además vender de manera creíble que no los está interpretando la misma persona. Mientras que el resto del elenco hace una gran labor complementándolo; en especial Delroy Lindo (Delta Slim), Hailee Steinfeld (Mary) y Wunmi Mosaku (Annie).

Y en cuanto a la producción nos encontramos con una factura de primerísimo nivel: el trabajo de fotografía es estupendo, la dirección de arte está bien cuidada, el score es fantástico, el trabajo de sonido impecable, los efectos son de buena calidad y la labor de maquillaje sólida.

* Cuenta con una escena a la mitad de los créditos

Opinión final: Sinners me gustó bastante. Muy buena película de vampiros que se posiciona como una de las mejores de 2025.

Ojometro:
*****

martes, 5 de noviembre de 2024

Crítica: Terrifier 3 (2024)

Tercera entrega de la franquicia, la cual nuevamente fue escrita y dirigida por Damien Leone. Se estrenó en cines el 11 de octubre dentro de los Estados Unidos y en México hizo lo propio el pasado 31 de octubre; recaudando hasta la fecha $63.4 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

Cinco años después de su brutal experiencia, Sienna Shaw (Lauren LaVera) sale de una institución mental para empezar una nueva vida con su tía y toda su familia. Aunque pronto los traumas del pasado regresarán cuando Art the Clown empieza a desatar el caos en Miles County durante la víspera de navidad.


Comentarios generales:

Tras diez años de su aparición en “All Hallows' Eve”, finalmente Art the Clown está logrando entrar al mainstream impulsado principalmente por su peculiar apariencia que lo ha convertido en un personaje llamativo incluso para aquellas personas que nunca han visto alguna de sus películas. Es uno de esos crecimientos orgánicos que suelen darse de vez en cuando, pero que también representan cierto riesgo ante probables presiones externas por tratar de cambiar su esencia para que llegue a más público; sin embargo, Terrifier 3 deja en claro que esas no son sus intenciones.

Ya que Damien Leone nos regala la entrega más salvaje hasta la fecha y desde el primer minuto nos hace saber que su propósito es ofrecer un gorefest que solidifique el peligro que representa Art the Clown para cualquiera, pero sin dejar de lado su meta de seguir expandiendo el lore detrás de este y su conflicto con Sienna. Logrando con esto que exista un buen equilibrio de lo extremo con las dificultades de nuestra protagonista para que así el desarrollo jamás caiga en lo monótono y se tenga una constancia que permita mantener la violencia siempre presente.

Lo cual es sumamente importante debido a que conforme pasan los minutos el nivel de dicha violencia se va incrementando y eso hace que el espectador todo el tiempo sienta curiosidad por saber qué nueva salvajada hará el payaso para superar a la anterior, llevando a situaciones que añaden una gran dosis de impacto e incluso algo de humor perverso. Todo bajo un ritmo que nunca decae y que ayuda a que los momentos enfocados en los traumas de Sienna no sean tan densos como para afectar la dinámica; especialmente una vez que se empieza a mostrar la fracturada relación con su hermano.

Un punto que probablemente sea lo más flojo de la película debido a que todo lo que ocurre entre ellos se siente un tanto desconectado y carece de la importancia que uno pensaría que tendría, pero eso no evita que el camino rumbo a la parte final siga siendo entretenido y mucho menos que esta cumpla con lo que se espera.

Y es que los últimos 25 minutos están llenos de una brutalidad que, al combinarla con la ambientación navideña, hacen que las cosas resulten mucho más llamativas. Dejándonos ante un desenlace que sigue jugando con los elementos sobrenaturales que fueron introducidos en la entrega previa, aunque lo que predomina es el gore en un enfrentamiento que le da su aparente cierre a una cosa y deja abierta la puerta para otra secuela.

En cuanto a las actuaciones la verdad es que Sienna Shaw está genial con un personaje que ahora tiene que lidiar con un trastorno mental y eso hace que no se sienta tan plano. Mientras que David Howard Thornton sigue siendo aterrador como Art the Clown, aunque en esta ocasión también se da el lujo de añadir un poco más de toques cómicos que te hacen reír incluso en las situaciones más extremas.

Sobre la producción sin duda se puede notar que hubo un mayor presupuesto: el trabajo de fotografía es sólido, la dirección de arte está bien cuidada, cuenta con un buen score, el trabajo de sonido es espectacular, los efectos están muy bien hechos y la labor de maquillaje es de buena calidad.

Opinión final: Terrifier 3 me gustó bastante. Gorefest puro y duro que logra lo que se propone de una manera por demás entretenida.

Ojometro:
*****

martes, 22 de octubre de 2024

Crítica: Smile 2 (2024)

Secuela escrita y dirigida por Parker Finn (Smile). Se estrenó en cines tanto en México como en los Estados Unidos los pasados 16 y 18 de octubre, recaudando hasta la fecha $46 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

A punto de embarcarse en un tour mundial, la estrella de música pop Skye Riley (Naomi Scott) empieza a experimentar una serie de inexplicables y aterradores eventos. Una situación que, al combinarse con las presiones de la fama, la forzarán a tener que enfrentar su pasado.


Comentarios generales:

Hace dos años “Smile” tomó a todos por sorpresa con una campaña de publicidad fantástica que la posicionó como una de esas películas que le interesaban incluso a aquellas personas que usualmente no ven cine de terror, convirtiéndola en un fenómeno que para nuestra fortuna tuvo buenos resultados. Por ello es que no fue sorpresivo que anunciaran una secuela, era algo lógico; sin embargo, la búsqueda por tratar de replicar dicho fenómeno iba a ser complicada ya sin el factor sorpresa y eso se notó desde el lado promocional, aunque si logró superar a su predecesora en todo lo demás. 

Y es que con Smile 2 lo que hace Parker Finn es tomar las cosas que funcionaron hace un par de años atrás y potenciarlas para contarnos una historia en la que el trasfondo sobre la esquizofrenia obtiene más relevancia, pero sin dejar de lado los elementos necesarios para añadir un terror convencional que ayude a generar dudas en todo momento por medio de un personaje tan vulnerable como lo es Skye Riley. Cuyos problemas físicos y emocionales facilitan que se pueda imprimir un nivel de intensidad alto desde temprano con el propósito de que la sensación de peligro alrededor de ella siempre esté presente, incluso durante sus actividades de estrella pop que igualmente sirven como una vía para construir algunos momentos de incomodidad bastante efectivos.

Ante esto la acumulación de tensión se va dando de manera progresiva conforme la inestabilidad de nuestra protagonista empieza a ser más agresiva en pantalla durante el segundo acto, donde poco a poco se va generando una atmósfera agobiante que en cada momento te hace cuestionar sobre si lo que ocurre en verdad es algo con tintes sobrenaturales o solo un problema médico. Lo cual afortunadamente el director es lo suficientemente hábil como para nunca revelarlo y aprovecha esto no solo para mostrarnos situaciones que generan un ritmo agradable o jumps scares bien pensados, sino también para brindar un poco más de contexto sobre el origen de la vulnerabilidad de Skye y con ello establecerla como un personaje un tanto grisáceo que no está tan exento de culpas.  

Preparando así todo para una parte final en la que la burbuja de tensión que se fue acumulando por fin explota y eso nos lleva a un caos muy entretenido en el que distinguir entre la realidad y la locura ya no resulta tan sencillo. Dejándonos ante un desenlace sumamente intenso que aclara las cosas que debe y además no ofrece un cierre que abre la puerta a varios posibles escenarios futuros para la franquicia.

Con respecto a las actuaciones hay que decir que este es el show de Naomi Scott de principio a fin. La chica en verdad está impecable en su papel de pop star paranoica debido a que puede sostener su locura por casi dos horas sin mayores contratiempos, pasando por diversos estados de ánimo que la vuelven un personaje no precisamente para empatizar, pero si para que te importe en todo momento lo que le puede llegar a ocurrir.

Y sobre la producción, nuevamente tenemos una factura de primer nivel: el trabajo de fotografía es muy bueno, la dirección de arte está bien cuidada, el score es un gran complemento, el trabajo de sonido vuelve a ser increíble, los efectos son de buena calidad y la labor de maquillaje sólida.

Opinión final: Smile 2 me gustó bastante. Uno de esos casos en los que la secuela supera en absolutamente todo a la original.

Ojometro:
***** 

martes, 3 de septiembre de 2024

Crítica: Longlegs (2024)

Película escrita y dirigida por Osgood Perkins (The Blackcoat's Daughter, Gretel & Hansel). Se estrenó en cines dentro de los Estados Unidos el 12 de julio, mientras que en México hizo lo propio el pasado 29 de agosto; recaudando hasta la fecha $102.6 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

En su búsqueda de un prolífico asesino serial, la agente del FBI Lee Harker (Maika Monroe) descubre una serie de pistas ocultas que ella misma tendrá que resolver para ponerle fin a la aterradora ola de asesinatos.


Comentarios generales:

Cuando se tengan dudas sobre lo importante que es contar con una buena promoción solo pónganse a analizar el caso de Longlegs. Una película de la que no se sabía demasiado y que de la noche a la mañana empezó a recibir teasers crípticos que poco a poco la convirtieron en un auténtico fenómeno viral que la colocó en ese pedestal de lo más esperado de 2024, dejándola así en una posición en la que siempre se tienen todas las de perder; sin embargo, este no fue el caso.

Y es que más allá de las diversas opiniones que pudiera llegar a generar, lo cierto es que lo presentado por Perkins tiene más cosas positivas que negativas y esto lo logra por medio de una historia que de inicio no es precisamente la más innovadora (incluso hace recordar por momentos a “The Silence of the Lambs”), pero va mutando en algo que sabe combinar de manera efectiva el thriller policiaco, el thriller psicológico y el satanismo para brindarle un sello propio.

Todo bajo un misterio que en cuanto a lo más superficial no es demasiado complejo dado a que nunca existe la intención de ocultar la apariencia total de Longlegs o negar sus vínculos con los asesinatos, dejando que sea realmente el aspecto satánico el que genere la mayor cantidad de dudas y en base a ello utilizar al personaje de Lee Harker como el medio para potenciar la rareza del caso. No solo por el hecho de que ella misma es alguien peculiar, sino también porque rápidamente se establece una conexión importante que solo añade más capas al enigma y, sobre todo, genera una sensación de peligro para nuestra protagonista que eleva el nivel de suspenso con el pasar de los minutos.

Siempre con un ritmo bien cuidado que permite ir generando una atmósfera de constante tensión que ayuda a no tener que recurrir a las escenas de shock de manera tan repetitiva, logrando con esto que cada una tenga su importancia en el desarrollo y por lo mismo dejen una impresión más marcada, sobre todo cuando Longlegs empieza a tener más exposición. Llevándonos a situaciones que le dan prioridad al aspecto satánico y con ello se atan de a poco algunos puntos de gran relevancia que llevan al encuentro entre nuestros dos personajes más importantes para brindar el que es indudablemente el momento de mayor impacto.

Algo que deja todo preparado para una parte final que sin duda puede ser polémica y un factor fundamental para que muchos no terminen por disfrutar del todo la película al optar por no ser tan ambigua y tratar de dar las respuestas más concretas posibles. Lo cual incrementa todavía más la sensación de rareza y ciertamente le brinda mucha potencia al desenlace, pero también es cierto que dichas respuestas son bastante abstractas y por lo mismo uno se puede quedar con más dudas que certezas.

Las actuaciones están muy bien con una Maika Monroe que sabe llevar el peso de la historia sin demasiados problemas por medio de un personaje que cuenta con sus propias dosis de excentricismo, pero con el que se puede sentir empatía. Aunque es indudable que quien se llevará toda la atención es Nicolas Cage en su papel de Lonlegs, no solo por su caracterización, sino porque en verdad logra ser sumamente perturbador a pesar de que su tiempo en pantalla no es tan extenso.

En cuanto a producción tenemos una factura de gran nivel: el trabajo de fotografía es estupendo, la dirección de está bien cuidada, cuenta con un gran score, el trabajo sonido es sólido, los efectos están bien hechos y la labor de maquillaje resulta impecable.

Opinión final: Longlegs me gustó bastante. Película oscura y rara que logra casi todo lo que se propone de manera efectiva.

Ojometro:
*****

viernes, 23 de agosto de 2024

Crítica: Alien: Romulus (2024)

Película dirigida por Fede Álvarez (Evil Dead, Don’t Breathe), quien comparte créditos como co-escritor del guión junto a Rodo Sayagues. Se estrenó en cines tanto en los Estados Unidos como en México el pasado 15 y 16 de agosto, recaudando hasta la fecha $121.8 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.  

Sinopsis:

Mientras hurgan en los escombros de una estación espacial abandonada, Rain (Cailee Spaeny) y un grupo de jóvenes colonos espaciales se encuentra cara a cara con la forma de vida más aterradora de todo el universo.


Comentarios generales:

Si bien la franquicia de “Alien” no ha sido tan explotada como algunas otras, lo cierto es que el llegar a una séptima entrega complica a cualquiera que pretenda hacer algo con esta y más tras unos 2010s que no dejaron del todo satisfechos a muchos fans con las películas ofrecidas. Por ello es que Alien: Romulus tenía un gran peso a sus espaldas debido a que daba la impresión de que, si no salían bien las cosas, la franquicia corría el riesgo de ser congelada por tiempo indefinido (al menos en cines); sin embargo, tras lo visto es claro que eso no va a ocurrir.

Ya que lo traído por Fede Álvarez regresa a las bases de las primeras dos películas para ofrecernos una historia que se sienta familiar pero a la vez tenga un aire de modernidad como para no caer en lo anticuado. Centrándose nuevamente en un desarrollo dentro de una nave con la se pueda replicar la estética característica de la franquicia, apostar más por un ambiente de peligro constante y lograr generar un tono oscuro que logre potenciar la amenaza que representa el Xenomorfo en todas sus facetas para que no quede relegado a un plano secundario.

Algo por lo cual realmente las acciones avanzan con relativa rapidez desde la primera media hora y gracias a eso ciertas cuestiones personales entre los personajes no son fastidiosas, dándole así el espacio necesario a la amenaza central mientras poco a poco se nos van presentando conexiones con otras entregas. Logrando con esto un buen ritmo que con el pasar de los minutos solo se vuelve más dinámico conforme el Xenomorfo va haciendo acto de presencia, añadiendo momentos de impacto necesarios y también brindándonos cierta información sobre su comportamiento o evolución que no habían sido expuestos en pantalla anteriormente, tales como la forma de detectar a sus presas o cómo madura tan rápido tras salir de su huésped.

Llevándonos así a un segundo acto que, además de estar lleno de sutiles referencias, también presenta un importante dilema entre Rain y su “hermano” Andy que añade un toque emocional a las cosas. Ayudando con esto a que cada momento de riesgo pueda contar con un nivel de tensión adecuado ante las decisiones que tiene que tomar el propio Andy por el bien de la humanidad y con ello se nos muestren algunas de las mejores escenas de acción que dejan en manifiesto el impecable aspecto técnico del filme.

Hasta ahí todo es sobresaliente, sin embargo, con la parte final puede que tengamos lo más divisivo. No tanto porque sea mala, sino porque lo presentado puede considerarse demasiado extravagante y diseñado para satisfacer teorías de los fans; aunque en general creo que es entretenida por la fuerza que le imprime a los minutos finales y porque le da cierta claridad a lo que Ridley Scott puso sobre la mesa con “Prometheus”.

Con respecto a las actuaciones hay que decir que tenemos a un elenco sólido, no espectacular, pero si lo suficientemente competente para sobrellevar las cosas sin muchos problemas. Siendo Cailee Spaeny y David Jonsson (Andy) quienes más destacan por una peculiar relación de “hermanos” que en todo momento se ve puesta a prueba gracias a la naturaleza de ambos.   

Y en cuanto a la producción nos topamos con una factura de primerísimo nivel: el trabajo de fotografía es muy bueno, la dirección de arte impecable, cuenta con un buen score, el trabajo de sonido es espectacular, los efectos son estupendos y la labor de maquillaje está bien cuidada.

Opinión final: Alien: Romulus me gustó bastante. Película que regresa a las bases de la franquicia para ofrecer un espectáculo de gran nivel.

Ojometro:
*****

martes, 5 de diciembre de 2023

Crítica: Thanksgiving (2023)

Película dirigida por Eli Roth (Cabin Fever, Hostel) y escrita por Jeff Rendell. Se estrenó en cines dentro de los Estados Unidos el 17 de noviembre, mientras que en México hizo lo propio el pasado 30 de noviembre; recaudando hasta la fecha $36.7 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

Después de que una venta de Black Friday termina en tragedia, un brutal asesino inspirado en el “Día de Acción de Gracias” aterroriza a la comunidad de Plymouth, Massachusetts – lugar en donde nació dicha tradición.


Comentarios generales:

Podrás tener una opinión sobre Eli Roth y sus trabajos, pero es innegable que el tipo es uno de los mayores impulsores del género de terror desde hace varios años y cuando anuncia algún nuevo proyecto inmediatamente este se vuelve de los más esperados. Aunque en el caso Thanksgiving todo eso se magnificó aún más al tratarse de una película que tardó 16 años en poder hacerse realidad y por ello las expectativas eran muy grandes, incluso un tanto irreales, pero lo cierto es que lo que nos ha dejado es uno de los mejores slashers de los últimos años.

Y lo más llamativo de todo es que Roth lo logra sin tener que recurrir a cosas tan complejas o innovadoras, simplemente se enfoca en las bases y a partir de ahí nos cuenta una historia sumamente entretenida que en ningún punto te aburre. Sustentando gran parte de su efectividad en la impecable construcción de una introducción que explota el caos del famoso Viernes Negro no solo para tirar cierta critica a lo absurdo del comportamiento humano en esa “tradición”, sino también para exponernos a prácticamente todos los personajes más o menos relevantes y establecer así con claridad las motivaciones que podría tener el asesino para matarlos.

Esto último siendo algo muy importante debido a que al ser un grupo grande de individuos las opciones de sospechosos son varias y por ello mismo el misterio sobre la identidad de John Carver siempre se mantiene intacto, lo cual se complementa con una brutalidad en pantalla que hace de nuestro asesino uno por demás interesante. Ofreciéndonos así varias muertes con las que no se escatima en lo absoluto en lo visual y además mantienen una frecuencia constante que hace que el ritmo realmente nunca se vuelva cansino o se caigan en situaciones huecas que no tendrán ningún tipo de peso más adelante.

Logrando así que durante el segundo acto la sensación de riesgo siempre sea alta y puedan aprovecharla al máximo para generar un caos agradable con el que se justifique lo difícil que resulta poder detener a Carver, dando pie a una última media hora que en su simpleza todavía guarda varias cosas destacables. 

Ya que es durante la parte final donde nos topamos con el momento más perturbador de la película y por lo consiguiente la muerte más original de todas, añadiendo un shock con el que se le da impulso a un desenlace que funciona precisamente por haber sabido esconder la identidad del asesino de buena manera. Haciendo que la revelación resulte sorpresiva y esto lleve a un cierre que se puede catalogar como estándar, pero que cuenta con la intensidad necesaria para que sea efectivo y deje las bases puestas de una ya confirmada secuela.

En lo que se refiere a las actuaciones tenemos un elenco que en términos generales lo hace bastante bien, cada quien en su rol cumple aportando ya sea estereotipos habituales o personalidades misteriosas. Aunque es innegable que Nell Verlaque (Jessica) como la final girl y Patrick Demsey (Sheriff Eric Newlon) son quienes más resaltan en primera instancia.

Mientras que en producción tenemos una factura impecable: el trabajo de fotografía es bueno, la dirección de arte está bien cuidada, el score es buen complemento, el trabajo de sonido aporta bastante a las escenas relevantes, los efectos son de primer nivel y la labor de maquillaje resulta efectiva.

Opinión final: Thanksgiving me gustó bastante. Slasher sumamente entretenido y sangriento que se alza como uno de los mejores que han salido en años recientes.

Ojometro:
*****

viernes, 17 de noviembre de 2023

Crítica: Cuando acecha la maldad (2023)

Producción argentina escrita y dirigida por Demián Rugna (Terrified). Se estrenó de manera limitada en cines dentro de los Estados Unidos a inicios de octubre y posteriormente el 27 del mismo mes hizo lo propio en VOD.

Sinopsis:

En una granja remota, Pedro (Ezequiel Rodríguez) y su hermano encuentran a un hombre infectado por un demonio que está a  punto de “dar a luz” al mal mismo. Asustados deciden deshacerse del cuerpo putrefacto, aunque esto solo esparcirá el caos hacia todos aquellos que les importan.


Comentarios generales:

Para este punto el encontrar propuestas sobre posesiones que resulten innovadoras es algo complicado debido a que es uno de los subgéneros más explotados que existen, así que siempre es complejo el poder generar interés por estas salvo que pertenezcan a alguna franquicia muy bien establecida. Sin embargo, de vez en cuando te vas a encontrar con una película que te sorprenda a pesar de los convencionalismos y justamente “Cuando acecha la maldad” es una de esas.

Ya que lo traído por Rugna se posiciona como una de las mayores sorpresas en este 2023 gracias a que logra darle frescura a una fórmula conocida sin tener que recurrir a cosas complejas y en base a eso construye una historia inquietante por la forma tan natural con la que los personajes lidian con el tema de la posesión, optando por no ocultar nada para no perder el tiempo en obviedades y así poder aprovecharlo para redondear la idea. Brindándole con esto un tono depresivo que desde el primer acto hace sentir que un suceso tan simple es en verdad riesgoso, lo cual se magnifica ante el pavor que manifiestan distintos personajes al saber que la maldad puede alcanzarlos.

Siendo esto último algo clave porque es la vía con la que el director puede exponer escenas de muertes brutales que no solo añaden el impacto inmediato por lo visual, sino también porque con estas establece sin ningún tipo de compasión que, en efecto, nadie está a salvo y así incrementar el nivel de intensidad de manera impresionante. Además de que gracias a estas muertes se clarifica cómo se manifiesta el demonio y con ello también empiezas a cuestionar si nuestro protagonista en verdad es alguien de confianza porque sus acciones son demasiado egoístas a sabiendas del riesgo que él mismo representa para sus seres queridos.

Llevándonos con ello a un segundo acto que se podría decir que es el más emocional porque precisamente es donde Pedro tiene que lidiar con las consecuencias de sus actos, pero eso no significa que el shock desaparezca. Aunque igualmente es aquí donde se profundiza un poco más con respecto a la problemática que enfrentan y las revelaciones sobre lo complejo que será frenarla para que en ningún momento desaparezca esa sensación de desesperanza rumbo a la parte final.

Una que probablemente no sea tan explosiva como se esperaría dado a que apuestan más por lo tétrico y gracias a eso el ritmo en esta parte es más tranquilo. Decisión que no afecta mucho que digamos al desenlace porque este sigue manteniendo las mismas bases y cumple a la perfección su propósito de ser desalentador sustentándose en las malas decisiones de Pedro.

En cuanto a las actuaciones tenemos un gran trabajo de Ezequiel Rodríguez por medio de un personaje bastante complejo con el que se pueden entender sus temores pero al mismo tiempo es difícil sentir empatía por él gracias a lo egoísta que resultan sus acciones. Mientras que Demián Salomón (Jimi) y el resto del elenco logran complementarlo de buena forma.

Y en lo que respecta a la producción tenemos una buena factura: el trabajo de fotografía es bastante bueno, la dirección de arte simple, el score resulta agradable, el trabajo de sonido no presenta fallos, los efectos están bien hechos y la labor de maquillaje es impecable.

Opinión final: Cuando acecha la maldad me gustó bastante. Película oscura y cruda que se les quedará en la memoria durante varios días.

Ojometro:
*****

martes, 3 de octubre de 2023

Crítica: Saw X (2023)

Décima entrega de la franquicia, la cual está dirigida por Kevin Greutert (Saw VI, Saw 3D) y cuyo guión fue co-escrito por Josh Stolberg y Pete Goldfinger. Se estrenó en cines dentro de los Estados Unidos y México el pasado 29 de septiembre, recaudando hasta la fecha $29.6 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

Un enfermo y desesperado John Kramer (Tobin Bell) viaja a México para someterse a un procedimiento medico experimental buscando curar su cáncer, aunque durante su recuperación se da cuenta que todo ha sido una estafa por la que hará pagar a los responsables.


Comentarios generales:

Cuando hace un par de años atrás salió “Spiral: From the Book of Saw” el sentimiento general fue que no era una buena película, pero que por lo menos iba a servir para darle nueva vida a una franquicia que se encontraba en terapia intensiva. Algo que hasta hace no mucho parecía impensado gracias a la sobreexplotación que tuvo y por lo cual resulta agradable ver un regreso tan satisfactorio como el que ha representado Saw X.

Y mucho de eso se debe a que Greutert y compañía toman una decisión inteligente al no enfocarse únicamente en el shock continuo como ha sido habitual en muchas de las secuelas y mejor tratan de construir una historia sólida en la que sea John Kramer el centro de atención (esta se lleva a cabo entre Saw I y II). Lo cual podría sonar no tan emocionante, pero la realidad es que como consecuencia tenemos un primer acto bastante interesante en el que podemos ver un lado más humano e incluso vulnerable de nuestro protagonista, quien en su desesperación por curarse del cáncer baja la guardia como nunca antes y gracias a ello podemos conocer a un conjunto de personajes con los que está más que justificada la brutalidad que se viene por delante.

Ya que cuando se revela la estafa las cosas se vuelven más oscuras y la vibra conocida de Saw se empieza a manifestar, aunque durante este periodo también se recurre a un terror un poco más convencional para traer de vuelta a Amanda. Generando así una expectativa importante con respecto a la venganza de Jigsaw, cuyos juegos en esta ocasión puede que no resulten tan rimbombantes en lo que respecta a la elaboración, más si cumplen por completo el objetivo de proporcionar un nivel de tensión brutal y las dosis de impacto visual elevadas que uno espera; especialmente porque no se ponen ningún tipo de limite en los fatales resultados.

Junto con esto también nos encontramos con ciertos dilemas por parte de Amanda que ayudan a profundizar su relación con Kramer y, sobre todo, le dan cierta pausa a las cosas. Logrando así que después de que cada muerte exista un periodo donde se pueda desarrollar de manera clara la situación y también se vaya posicionando al personaje de Cecilia como alguien de cuidado rumbo a la parte final.

Una que pone a nuestra pareja de asesinos en una situación un tanto atípica que no es tan sorpresiva, pero que ayuda a que el desenlace sea intenso y se pueda construir el típico giro de estas películas. El cual tal vez no sea el más impactante en cuanto a su ejecución, aunque si deja las semillas plantadas para una posible secuela directa.

De las actuaciones sin duda es la entrega en donde se puede ver al mejor Tobin Bell, ya que no solo mantiene todo lo que hizo a John Kramer/Jigsaw tan popular, sino que también se puede ver un lado más humano que le añade profundidad al personaje. Y lo mismo aplica para Shawnee Smith (Amanda) en un nivel más bajo; además de que Synnove Macody Lund (Cecilia Pederson) también realiza un buen trabajo como la antagonista.

En cuanto a producción nos encontramos con algo de buena calidad: el trabajo de fotografía es sólido, la dirección de arte está bien cuidada, el score es bastante bueno, el trabajo de sonido es espectacular, los efectos son de muy buen nivel y la labor de maquillaje impecable.

* Cuenta con una escena a la mitad de los créditos

Opinión final: Saw X me gustó bastante. Sin duda la mejor entrega desde la original de 2004 y una que vuelve a poner a la franquicia en el mapa.

Ojometro:
*****

viernes, 18 de agosto de 2023

Crítica: Talk to Me (2023)

Película dirigida por Michael Philippou y Danny Philippou, este último además compartiendo créditos como co-escritor del guión junto a Bill Hinzman. Se estrenó en cines dentro de los Estados Unidos el 28 de julio y en México el pasado 9 de agosto, recaudando hasta la fecha $40 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

Un grupo de amigos descubre cómo invocar espíritus utilizando una mano embalsamada y se enganchan con su nuevo juego para hacerlo viral. Esto hasta que uno de ellos lleva las cosas demasiado lejos y libera aterradoras fuerzas sobrenaturales.


Comentarios generales:

Creo que ya lo he comentado en ocasiones anteriores, pero cada que los medios que no suelen cubrir regularmente cine de terror empiezan a catalogar a una película como algo revolucionario mi interés y mis dudas se disparan de inmediato porque esta opinión muchas veces se da gracias a un importante desconocimiento de lo que ya existe dentro del género. Y en el caso de Talk to Me realmente se puede notar mucho de eso al querer resaltar "ideas nuevas" que no lo son, aunque esto no significa que sea erróneo mencionar que es un trabajo destacado y probablemente uno de los mejores de 2023.

Y es que lo traído por los Philippou en realidad utiliza conceptos que ya hemos visto en repetidas ocasiones, pero alterando ciertos detalles para brindarle frescura a una historia que esencialmente se trata sobre espíritus y posesiones. Esto bajo una perspectiva adolescente con la cual se tratan temas como el bullying, el duelo, la depresión y la obsesión por las redes sociales; siendo esto último el punto de partida para poder integrar la cuestión sobrenatural de una manera que ciertamente resulta llamativa a pesar de su simplicidad.

Logrando así que la comunicación con los espíritus sea un evento que te atrapa de inmediato, no solo por el hecho de que se sabe explotar a la perfección la excentricidad que aporta la mano embalsamada, sino porque el hecho de que muestren a dichos espíritus de manera tan directa hace que el tono oscuro aumente de manera exponencial. Aportando de golpe un nivel de intensidad no te esperas tan temprano y que con el pasar de los minutos solo se va incrementando por medio de acciones que terminan desencadenando una de las escenas más brutales de todo el filme.

Escena que significa un punto de quiebre debido a que a partir de ahí las cosas obtienen un grado de profundidad mayor, utilizando al personaje de Mia como la vía principal para ir desenvolviendo lo que verdaderamente ocurre. Algo que por momentos puede volverse repetitivo ante las decisiones que toma nuestra protagonista y por ende lleve a que el segundo acto tenga pequeños lapsos un tanto pesados en cuanto al ritmo, aunque para contrarrestar eso los directores muestran bastante habilidad en la construcción de situaciones de impacto que puedan elevar el nivel de adrenalina de manera rápida y así evitar que el daño sea grande. 

Preparando con esto el camino para una parte final que se sustenta en la fragilidad mental de Mia y su desesperación por corregir sus errores sin importar las consecuencias. Lo cual hace que el desenlace sea sumamente tenso y en todo momento se planteen dudas con respecto a lo que ocurre sin que sea complejo descifrar el cierre.

Las actuaciones no están nada mal, hay un buen elenco; sin embargo, Sophie Wilde (Mia) es sin duda la que más destaca bajo su personaje lleno de dudas y traumas que magnifica muchas de las escenas importantes. Además también hay que mencionar la aparición de Miranda Otto (Sue), quien con pocos minutos logra dejar una buena impresión bajo su rol de madre sobreprotectora.

En cuanto a producción tenemos una factura bien cuidada: el trabajo de fotografía es sólido, la dirección de arte sencilla, el score es bueno, el trabajo de sonido resulta brutal, los efectos son de buena calidad y la labor de maquillaje es de primer nivel.

Opinión final: Talk to Me me gustó. No es la revolución que dicen que es, pero si es una película muy efectiva en todo lo que propone.

Ojometro:
*****

martes, 25 de abril de 2023

Crítica: Evil Dead Rise (2023)

Quinta entrega de la franquicia, la cual está escrita y dirigida por Lee Cronin (The Hole in the Ground). Se estrenó en cines dentro de México el pasado 20 de abril y un día después hizo lo propio en los Estados Unidos; recaudando hasta la fecha $42.4 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

Ellie (Alyssa Sutherland) y Beth (Lily Sullivan) son dos hermanas distanciadas cuya reunión se ve interrumpida por el despertar de unos despiadados demonios que terminan poseyendo a una de ellas. Ocasionando con esto una brutal batalla por sobrevivir que distorsiona por completo el concepto de la familia.


Comentarios generales:

Evil Dead es una de las mejores franquicias de cine de terror que existen gracias a que se ha logrado mantener vigente durante tantos años con muy pocos proyectos en comparación con otras franquicias importantes y además todos de una calidad elevada que han establecido un estándar que impone cierto respeto. Por ello es que cuando se anunció una nueva entrega que no era secuela y además no contaba con la presencia de Bruce Campbell existieron ciertas dudas de mi parte; sin embargo, Evil Dead Rise me recordó que siempre hay que confiar en Sam Raimi y compañía.

Ya que lo presentado por Cronin no es tanto un reinicio, sino más bien una extensión que pueda abrir nuevos escenarios por su propia cuenta sin que se tenga que ignorar el lore ya construido, aunque al inicio de la película eso puede no ser tan obvio por la forma en la que deciden presentar esta historia en lo que se refiere a la temporalidad.

Lo cual ciertamente hace que el primer acto se pueda sentir algo raro en cuanto a la lógica, pero una vez que se nos presentan a los personajes y se establece la dinámica de familia disfuncional el panorama se esclarece de gran forma para ir construyendo momentos que hagan de la espera por la posesión una bastante entretenida. Sobre todo porque se van insertando pequeñas cosas que añaden sustancia con respecto al Necronomicon (incluso hay una sutil conexión a “Army of Darkness”) y con ello se aumenta la anticipación para cuando esta llegue, algo que se da de una manera por demás espectacular y así dejar claro que lo que está por venir no escatimará en lo absoluto en su búsqueda por dejar su marca.

Y es que una vez que Ellie es poseída el tono se vuelve muy oscuro, estableciéndola así como un demonio sumamente peligroso que en cualquier momento hará algo extremo y gracias a eso el nivel de tensión siempre resulta elevado. Llevando a escenas perturbadoras que juegan tanto con el aspecto psicológico/emocional de los personajes como con el lado visual, manifestando esto último poco a poco por medio de muertes que añaden mucho impacto y que, al combinarlas con la locación, hacen que se tenga una atmósfera claustrofóbica que magnifica todavía más el riesgo existente dado a que vende a la perfección la idea de que no hay escapatoria.

Todo esto bajo un ritmo ágil que no da respiro y hace que el caos se disfrute sin demasiados contratiempos. Dejando listo el escenario para una parte final brutal que de manera sorprendente logra rivalizar en cuanto a la exhibición de litros de sangre con el remake de 2013 por medio de situaciones bastante originales que se mantienen en sintonía con la esencia extravagante de la franquicia y llevan a un desenlace que, si bien es algo predecible, también clarifica el tema de la temporalidad de manera simple.

Sobre las actuaciones en general todo el elenco lo hace bastante bien, aunque es innegable que quienes se llevan los reflectores son Lily Sullivan y Alyssa Sutherland. Con la primera cumpliendo con su rol de nueva heroína expuesta a un tremendo nivel de salvajismo y con la segunda entregando una posesión realmente potente en la que con una sola sonrisa es capaz de perturbar al espectador y generar una sensación de peligro muy elevada.

Y en cuanto a producción nos encontramos con una factura impecable: el trabajo de fotografía es muy bueno, la dirección de arte está bien cuidada, el score es sólido, el trabajo de sonido espectacular, los efectos están muy bien hechos y la labor de maquillaje es de primerísimo nivel.

Opinión final: Evil Dead Rise me gustó mucho. Película violenta y muy sangrienta que sin duda es una nueva gran adición a la franquicia.

Ojometro:
*****

martes, 11 de octubre de 2022

Crítica: Werewolf by Night (2022)

Especial de Halloween dirigido por Michael Giacchino, cuyo guión fue escrito por Heather Quinn y Peter Cameron basándose en el cómic del mismo nombre. Se estrenó a nivel mundial por medio de Disney+ el pasado 7 de octubre.

Sinopsis:

Jack Russell (Gael García Bernal) forma parte de un grupo de cazadores de monstruos que son convocados tras la muerte de su líder Ulysses Bloodstone para competir en una cacería que determinará al nuevo dueño de la poderosa piedra de sangre.


Comentarios generales:

Para nadie es un secreto que el MCU se encuentra en una etapa un tanto tumultuosa en la que cada vez se le cuestiona más la calidad de sus proyectos y el hecho de que Marvel Studios hiciera un especial para Halloween después de que “Doctor Strange in the Multiverse of Madness” se quedara corta en cuanto al terror se refiere no era lo más emocionante. Sin embargo, en ocasiones son las cosas menos esperadas las que más te terminan sorprendiendo y hay que decir que con Werewolf by Night conectaron un home run.

Esto porque lo traído por Giacchino es un homenaje increíble al cine de terror antiguo, más concretamente al de los 30s y 40s; donde cada detalle está muy bien cuidado para brindar una experiencia que te remonte a la simplicidad de aquellas épocas por medio de una historia que no es muy compleja y ofrece la dualidad de poder disfrutarla ya sea como una experiencia única o como parte de todo el entramado del MCU. Lo cual es algo realmente valioso si tomamos en cuenta que solo se tienen menos de 55 minutos para desarrollarla.

Situación que hace que el ritmo sea muy fluido desde temprano y le brinda suficiente agilidad a la cacería para que el espectador mantenga interés aún sabiendo que el principal secreto que existe detrás de Jack Russell no lo es tanto y por lo consiguiente esa dosis de misterio se vea limitada. Algo que obliga a que las cosas se centren mucho más en Elsa Bloodstone y así ir construyendo una relación de confianza/desconfianza entre ambos para proporcionar una dinámica agradable que ayude a darles cierta humanidad a personajes que en esencia no tienen demasiada y por lo consiguiente se logra que te importen mucho más en comparación al resto de cazadores que solo están ahí para propósitos de contabilización de cuerpos durante las escenas de acción.

Unas que para mi sorpresa contienen un nivel de violencia mayor a lo que se esperaría (incluso en el apartado con la sangre) y eso resulta fundamental para una parte final que precisamente se sustenta en eso. Ofreciéndonos la respectiva escena de transformación para que esta sirva como punto de partida de un desenlace caótico, intenso y contundente en lo que se refiere a la resolución de la cacería, pero que también planteé preguntas sobre el futuro de los personajes.

Sobre las actuaciones, tanto Gael García como Laura Donnelly (Elsa Bloodstone) lo hacen bien y tienen una química en pantalla peculiar que funciona. Mientras que en producción nos encontramos con una factura de altísima calidad: el trabajo de fotografía es muy bueno, la dirección de arte impecable, el score es sólido, el trabajo de sonido limpio, los efectos son de primer nivel (tanto prácticos como CGI) y la labor de maquillaje está bien cuidada.

Opinión final: Werewolf by Night es genial. Gran homenaje al cine de terror de los años 30s y 40s que representa una bocanada de aire fresco para el MCU.

Ojometro:
*****

viernes, 23 de septiembre de 2022

Crítica: Barbarian (2022)

Película escrita y dirigida por Zach Cregger. Se estrenó en cines dentro de los Estados Unidos el pasado 9 de septiembre, mientras que en México hizo lo propio una semana después; recaudando hasta la fecha $24.1 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

Tess (Georgina Campbell) viaja a Detroit para una entrevista de trabajo y se aloja en una casa por medio de Airbnb. Aunque para su sorpresa descubre que un hombre también la ha rentado, iniciando así una serie de extraños sucesos que le harán comprender que dicho lugar no es lo que parece.


Comentarios generales:

En estos tiempos es un tanto atípico que una película relativamente pequeña y desconocida pueda abrirse camino sin una promoción agresiva durante meses por parte de su estudio, así que cuando a finales de junio se dio a conocer Barbarian parecía que estaba destinada al fracaso. Sobre todo porque su trailer te vendía algo muy genérico con lo que era difícil entusiasmarse; sin embargo, el resultado final ha sido por demás sorpresivo y satisfactorio.

Ya que lo traído por Cregger es de esas historias con las que es vital no saber prácticamente nada para que las disfrutes al máximo y por lo consiguiente también resulta un poco complicado escribir sin caer en terrenos peligrosos con respecto a los spoilers. Aunque durante los primeros 35/40 minutos nos encontramos con algo que resulta familiar gracias al trailer y se sustenta principalmente en el tema de la desconfianza existente entre dos completos desconocidos, haciendo de Tess y Keith una dupla protagonista interesante debido a que sus interacciones muestran un marcado contraste entre lo que ambos consideran peligroso sustentándolo desde el punto de vista femenino o masculino.

Siendo gracias a esto que la película pueda generar un nivel de tensión alto desde temprano, sin dejarlo caer de manera pronunciada debido a que uno como espectador sabe que existe un peligro latente pero no está tan seguro sobre qué es exactamente. Dejando así que dicha tensión se vaya acumulando y, cuando llegue el momento de la revelación, el impacto sea muchísimo mayor para encaminar las cosas de un modo que parece predecible… pero no lo es.

Y es que en determinado punto se toma una decisión sumamente arriesgada que cambia por completo la dinámica que uno esperaba ver, agregando más dudas y contexto sobre la locación en la que se desarrollan las acciones. Lo cual se va entrelazando con lo visto previamente de manera orgánica para ofrecer algo que contiene mucha fuerza y un trasfondo bastante perverso que vuelven el tono uno todavía más oscuro; además de que se añade mayor agilidad a las acciones gracias a que se entra en una dinámica de supervivencia que así lo necesita.

Posesionándonos con todo esto ante una parte final que contiene mucha intensidad e incluso cierto toque perturbador. Donde también se puede ver la mayor dosis de violencia (hay un par de muertes que añaden mucho impacto visual) y sobre todo se juega de cierta forma con el tema moral para brindar un cierre seco que resulta satisfactorio debido a que no trata de hacer más de lo que debe.  

En lo que respecta a las actuaciones esta es una película que destaca más por el conjunto. Con Georgina Campbell, Bill Skarsgård (Keith) y Justin Long (AJ) haciendo un buen trabajo en lo que respecta a sus personajes, aunque sin dejar nada particularmente memorable que haga destacar a uno por encima del resto.

Mientras que en producción tenemos una factura sólida: el trabajo de fotografía es bueno, la dirección de arte cumple, el score es genial, el trabajo de sonido está bien cuidado, los efectos están bien hechos y la labor de maquillaje cumple a la perfección su cometido.

Opinión final: Barbarian me gustó mucho. Muy buena propuesta que sin duda se posiciona como una de las mejores del año.

Ojometro:
***** 

lunes, 27 de junio de 2022

Crítica: The Black Phone (2022)

Película dirigida por Scott Derrickson (Sinister, The Exorcism of Emily Rose), quien comparte créditos como co-escritor del guión junto a Robert Cargill. Se estrenó en cines a nivel mundial entre el 23 y 24 de agosto, recaudando hasta la fecha $35.8 millones de dólares en taquilla.

Sinopsis:

Después de ser secuestrado por un asesino de niños y encerrado en un sótano a prueba de ruido, un chico de 13 años empieza a recibir llamadas en un teléfono desconectado que pertenecen a las victimas previas de su captor.


Comentarios generales:

Más allá de que estuviera inspirada en una historia corta de Joe Hill, la verdad es que lo que más me emocionaba de The Black Phone era el hecho de que Scott Derrickson y Robert Cargill se volvían a juntar diez años después de habernos regalado la fantástica “Sinister”. Simplemente es una combinación que generaba buenas sensaciones como para convertir a la película en una de las más esperadas de 2022 y que para mi alegría no decepciona en lo absoluto.

Ya que lo presentado por Derrickson es una historia sobre el abrupto fin de la niñez provocado por la putridez de los adultos, que en está ocasión se encuentra representada por un asesino brutal. Lo cual saca a la vista rápidamente ciertas similitudes que comparte Joe Hill con su padre Stephen King y no es difícil que se te venga a la mente por momentos “It”; sin embargo, esto se encuentra lejos de ser un clon y poco a poco se va forjando una identidad que combina lo sobrenatural con un peligro al que todo el mundo está expuesto.

Con un primer acto cuyo propósito es engancharte no tanto con el terror, sino por la presentación de Fiiney y Gwen con su dinámica fraternal que te atrapa por medio del contraste de personalidades que se complementan de manera perfecta y con la cual se introduce un elemento que hará de Gwen alguien importante con el pasar de los minutos. Esto mientras también se juega poco a poco con la presencia de este mal casi omnipotente tan solo  mencionándolo o, en determinados casos, solo con ver la camioneta en donde viaja para que cuando llegue el momento del secuestro el impacto sea grande.

Algo que sin duda logran debido a que con la aparición The Grabber el tono de la película cambia por completo, volviéndose uno mucho más oscuro gracias a que su mera presencia genera una sensación de peligro palpable sin que haga cosas tan extremas. Y esto se magnifica todavía más una vez que Finney empieza a recibir las llamadas porque la película entra en una dinámica mucho más pausada con la que se te van revelando detalles de la manera de operar del asesino (incluyendo ciertos flashbacks cuyo formato son un guiño a “Sinister”) y con ello siempre existe una inquietud constante sobre lo que pudiera llegar a hacer con él. 

Aunque también es en esta parte durante el segundo acto cuando el espectador pudiera llegar a experimentar cierta pesadez debido a que la cantidad de sustos para complementar dicho aspecto sobrenatural no es tan grande como se esperaría. Sin embargo, los pocos que hay son manejados de manera impecable y eso hace que el camino hacia la parte final resulte satisfactorio. 

Sobre todo porque le aportan buenas dosis de impacto a este proceso traumático que vive Fiiney, cuyos encuentros fantasmales terminan teniendo mayor sentido del que imaginarías al lograr que cada pequeño detalle cuente. Logrando así que la resolución resulte tensa y tenga un mayor peso emocional.

En cuanto a las actuaciones tenemos a dos niños en Mason Thames (Fiiney) y Madeleine McGraw (Gwen) que lo hacen realmente bien con su dinámica de hermanos, aunque quien se lleva la película es indudablemente Ethan Hawke como The Grabber. El tipo está impresionante de principio a fin, cada minuto que tiene en pantalla es perturbador y todo sin que se le vea en su totalidad el rostro o tenga diálogos tan extensos; simplemente con su presencia y gestos es suficiente para generar terror.

Y con respecto a la producción, nos encontramos con una factura de primer nivel: el trabajo de fotografía es excelente, la dirección de arte sencilla, cuenta con un gran score, el trabajo de sonido es impecable, los efectos están bien hechos y la labor de maquillaje está bien cuidada.

Opinión final: The Black Phone me gustó bastante. Gran película que se posiciona como una de las mejores del año.

Ojometro:
*****

miércoles, 19 de enero de 2022

Crítica: Scream (2022)

Quinta entrega de la franquicia dirigida por Matt Bettinelli-Olpin y Tyler Gillett, cuyo guión fue co-escrito por James Vanderbilt y Guy Busick. Se estrenó en cines dentro de los Estados Unidos y México el pasado 14 de enero, recaudando hasta la fecha $37.5 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

25 años después de los asesinatos originales que azotaron Woodsboro, un nuevo Ghostface emerge más violento que nunca para atormentar a Sam (Melissa Barrera) y a todos aquellos que la rodean.


Comentarios generales:

Scream de 1996 es una de las películas de terror más importantes de la historia gracias a que básicamente revivió el género cuando este se encontraba en uno de sus puntos más bajos y revitalizó al slasher, así que cualquier proyecto que se encuentre ligado a esta siempre tendrá que lidiar con un tremendo peso encima debido a que no estamos hablando de cualquier cosa. Y para esta nueva secuela dicho peso era incluso mayor debido a que después del fracaso de la serie de MTV parecía que la franquicia había muerto y tenía la labor titánica de no solo revivirla, sino además darle nueva vida debido a que también significaría un relanzamiento muy al estilo de Halloween.

Algo que para mi total sorpresa lograron hacer de manera por demás sobresaliente.

Ya que los chicos de Radio Silence nos traen la que se puede posicionar como la mejor entrega desde la original por medio de una historia con la que no solo pretenden honrar el legado de lo hecho por Wes Craven en su búsqueda por revitalizar el slasher, sino además construyen algo que examina cómo ha evolucionado el género desde los 90s utilizando la propia esencia del metacine que siempre ha estado presente. 

Lo cual se establece prácticamente de inmediato con una increíble introducción en la que queda claro cuál será la tirada y, de paso, exponer el nivel de violencia que se va a manejar. Poniendo así las bases para ir desenvolviendo poco a poco un misterio que tiene la suficiente cantidad de sospechosos como para generar dudas razonables sustentándose en las propias auto-referencias y que expande de manera interesante lo que ya conocíamos sin que los regresos de Sydney, Gale y Dewey resulten tan fundamentales para desarrollar dichas ideas. 

Todo bajo un ritmo que siempre se mantiene ágil y que se ve beneficiado por el hecho de que esta es la entrega más violenta de todas. En donde las muertes tal vez no son tan variadas en su concepto, pero si tienen una razón detrás que las justifiquen y son lo suficientemente intensas como para dejar al menos un par de momentos que tienen un peso emocional importante bajo el objetivo de hacer lucir al asesino como una amenaza formidable.

Algo que sin duda logran debido a que para la parte final, si bien ya te puedes ir haciendo una idea sobre quien podría ser, este sigue estando un paso adelante de todos y por lo consiguiente la sensación de peligro se mantiene latente hasta los minutos finales. Logrando así un cierre del que no se puede hablar demasiado sin soltar spoilers, pero que definitivamente logra combinar lo nuevo con lo viejo de una manera bastante orgánica para abrir la puerta a más secuelas a corto plazo y no tener que esperar otra década.

De las actuaciones tenemos un casting sólido con Melissa Barrera haciendo una buena labor como la potencial sucesora de Sydney y un Jack Quaid (Richie) que añade cierto toque cómico sin resultar exagerado; aunados al resto del elenco adolescente que muestra bastante personalidad. Además de que las apariciones de Neve Campbell, Courteney Cox y David Arquette añaden ese factor nostálgico necesario para complementar una historia con la cual siempre estarán ligados.

En cuanto a producción no hay quejas: el trabajo de fotografía es bueno, la dirección de arte cumple, cuenta con un buen score, el trabajo de sonido está bien cuidado, los efectos están bien hechos y la labor de maquillaje es sencilla.

Opinión final: Scream me ha gustado bastante. Una exanimación de la evolución del género que no deja de lado lo que ha hecho popular a la franquicia.

Ojometro:
*****

martes, 2 de noviembre de 2021

Crítica: Antlers (2021)

Película dirigida por Scott Cooper, quien además comparte créditos como co-escritor del guión junto a Henry Chaisson y Nick Antosca. Se estrenó en cines tanto en los Estados Unidos como en México el pasado 29 de octubre, recaudando $6.6 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

En un aislado pueblo de Oregon, la maestra Julia Meadows (Keri Russell) y su hermano se involucran con la preocupante situación de uno de sus estudiantes, cuyos oscuros secretos los llevarán a cruzar caminos con una criatura que va más allá de su comprensión.


Comentarios generales:

Realmente parecía que el destino de Antlers era quedar olvidada en alguna plataforma de streaming para rellenar su catálogo debido a que fue una de las principales afectadas de la compra de Fox por parte de Disney y de la pandemia ocasionada por el COVID-19. Por ello es que su estreno en cines es un logro por sí mismo y la verdad es que no pudo llegar en mejor momento, ya que no solo es de una de las mejores películas que salieron durante esta época de Halloween, sino también una de las mejores propuestas de todo el año.

Y es que lo que nos presenta Cooper es una historia que desde los primeros minutos te deja claro que será muy depresiva y oscura tanto por su estética general como por todo lo que vive el personaje de Lucas. Quien tiene que lidiar con situaciones como el bullying, la desnutrición o el abandono familiar mientras le hace frente a una situación aterradora para alguien de su edad y que es el medio para ir develando un misterio en el que lo importante realmente no es tanto saber qué fue lo que pasó, sino más bien qué diablos puede ocurrir si por alguna razón no logra mantener su frágil fachada.

Algo que en verdad resulta desgarrador de ver y que lleva su tiempo para desarrollarse plenamente, por lo cual puede que el ritmo no sea precisamente el más atractivo durante varios lapsos de la primera mitad; sin embargo, una vez que se expone el secreto la película entra en una dinámica que fluye de manera prácticamente perfecta. Magnificando la violencia para ir dejando unas muertes que aportan bastante impacto e inmediatamente incrementan la sensación de angustia y de peligro entre los personajes principales, quienes se ven superados por una problemática de la cual no les es fácil conseguir respuestas lógicas.

Llevando así a una parte final en la que los elementos sobrenaturales toman más relevancia y en donde, ahora sí, se le brinda mayor exposición al increíble monstruo. Lo cual añade un nivel de fuerza brutal a las acciones para tener un desenlace en el que el tema de los lazos de sangre sigue siendo fundamental, pero tampoco representa un impedimento para proporcionar un cierre potente que encaje con el tono oscuro que predominó durante las casi dos horas de duración.

En lo que se refiere en las actuaciones tenemos un elenco muy sólido, aunque hay dos en particular que destacan. La primera es la siempre confiable Keri Russell con un personaje que poco a poco va obteniendo fuerza y el segundo es el pequeño Jeremy T. Thomas (Lucas), cuya desesperación por tratar de mantener su pequeño mundo familiar a flote es básicamente el sustento de esta historia.

Sobre la producción tenemos una factura por demás cuidada: el trabajo de fotografía es muy bueno, la dirección de arte efectiva, cuenta con un buen score, el trabajo de sonido es impecable, los efectos están muy bien hechos y la labor de maquillaje es de primer nivel.

Opinión final: Antlers me gustó mucho. Película oscura y depresiva que definitivamente es una de las mejores de 2021.

Ojometro:
*****

lunes, 13 de septiembre de 2021

Crítica: Malignant (2021)

Película dirigida por James Wan (Saw, The Conjuring) y escrita por Akela Cooper. Se estrenó en cines tanto en México como los Estados Unidos el pasado fin de semana, recaudando hasta la fecha $15 millones de dólares en taquilla a nivel mundial. También se encuentra disponible en HBO Max para ciertos mercados.

Sinopsis:

Madison (Annabelle Wallis) se paraliza por causa de las visiones de asesinatos espeluznantes que tiene. Y su tormento empeora cuando se da cuenta que estos son, de hecho, realidades aterradoras que pronto la alcanzarán.


Comentarios generales:

Pocos directores tienen un peso tan importante en la actualidad dentro del género de terror  como James Wan, así que el que siga regresando siempre es una buena noticia debido a que con el pasar del tiempo parece que eso se irá volviendo más y más complicado. Por ello es que Malignant era una de las películas de mayor perfil para 2021, esto a pesar de que realmente no se sabían grandes detalles sobre esta más allá de que estaría inspirada en el giallo y no cabe duda que tanto secretismo a su alrededor terminó funcionando.

Y es que mientras menos sepas sobre esta nueva propuesta de Wan mucho mejor, ya que se trata de su trabajo más audaz y por lo mismo uno que puede generar mucha polarización ante las ideas tan locas que rodean una historia que al inicio parece simple, pero que con el pasar de los minutos va construyendo de manera calmada un misterio muy sólido cuyas piezas embonan perfectamente. El cual gira alrededor del personaje de Madison, quien durante el primer acto se ve expuesta a una serie de situaciones que la colocan en una posición de duelo, mucho estrés e incluso soledad para establecer una atmósfera y tono oscuros que predominarán por el resto del metraje.

Algo sumamente importante debido a que la idea del director es precisamente esa, dejar muy marcada la oscuridad para que el villano siempre se mantenga como este ser en extremo peligroso y aterrador con el cual pueda realizar sus mayores acercamientos al giallo. Utilizándolo primordialmente para construir los momentos de impacto con muertes brutales que poco a poco van exponiendo las conexiones necesarias bajo un ritmo ágil que hace fluir las cosas de manera agradable mientras se integran elementos sobrenaturales que te hacen suponer que ya descifraste lo que está pasando.

Situación que resulta preocupantes durante unos instantes debido a que todo indica hacia una dirección cuando todavía falta una cantidad de tiempo considerable, pero cuando piensas que ya todo está escrito resulta que no es así y el misterio como tal sigue volviéndose más interesante hasta que se presenta algo que cambia por completo las cosas para la parte final.

Una de la cual no pienso hablar tan a fondo porque podría arruinar la sorpresa, aunque sí puedo decir que a pesar del shock todo termina encajando con lo que hemos visto y es por mucho donde la brutalidad se magnifica. Dejándonos así un desenlace atrevido que está lleno de acción, violencia y sangre que bien podría rivalizar con cualquier película de John Wick, pero que también cuenta con su dosis emocional para añadir un poco más de profundidad a las cosas.

En lo que respecta a las actuaciones tenemos a un elenco muy sólido, donde Annabelle Wallis destaca por su tiempo en pantalla y porque en general hace una gran labor para que su personaje te importe desde el primer minuto. Sin embargo, esto sin los secundarios difícilmente funcionaría debido a que, salvo que estén pensados para morir, estos resultan un gran complemento para que el propio misterio se vaya develando de forma clara sin que todo recaiga de manera excesiva en la protagonista.  

Sobre la producción, tenemos una factura de alto nivel: el trabajo de fotografía es muy bueno, la dirección de arte está bien cuidada, el score es espectacular, el trabajo de sonido es impecable, los efectos están muy bien hechos y la labor de maquillaje es bastante efectiva.

Opinión final: Malignant me gustó mucho. Una loca y retorcida interpretación del giallo por parte de James Wan que sin duda es de lo mejor del año.

Ojometro:
*****

martes, 6 de julio de 2021

Crítica: Fear Street (Part One): 1994

Primera parte de la trilogía basada la serie de libros del mismo nombre escritos por R.L. Stine, la cual está dirigida por Leigh Janiak (Honeymoon); quien además es co-escritora del guión junto a Phil Graziadei. Se estrenó directamente en Netflix a nivel mundial este pasado 2 de julio.

Sinopsis:

Un grupo de adolescentes accidentalmente despierta a un ser maligno responsable de una serie de brutales asesinatos que han plagado su pueblo durante más de 300 años. Bienvenidos a Shadyside.


Comentarios generales:

Si crecieron en la década de los 90s como su servidor muy probablemente leyeron alguno de los libros de R.L. Stine al ser básicamente una lectura obligada para todos aquellos niños y adolescentes que fueran fans del terror. Así que cuando Netflix reveló su ambicioso proyecto de una trilogía basada en algunos de esos libros mi interés se fue por las nubes y rápidamente se convirtió en algo de lo más esperado por mi parte en 2021; con altas expectativas incluidas que podían ser contraproducentes, pero que al menos con Fear Street: 1994 se cumplieron de manera satisfactoria.  

Y es que con esta primera parte Janiak deja el listón muy alto para las dos siguientes al presentarnos lo que básicamente es un homenaje a los slasher noventeros realizado de manera impecable. Donde claramente la mayor inspiración es “Scream” (la introducción de la película es el ejemplo más evidente de esto), pero esta logra forjarse una identidad propia por medio de una historia que no solo se limita a explotar el factor nostalgia, sino que también busca tener un poco más de sustancia al combinar el slasher con un elemento sobrenatural para que así el importante contexto histórico del pueblo cuente con mayor relevancia.

Contexto que durante la primera media hora se explota más que nada por medio de un drama juvenil que sirve como introducción a un grupo de personajes con características conocidas y que pasando ese periodo de tiempo toma incluso mucho más relevancia al iniciar la masacre. La cual hace que el ritmo se vuelva dinámico y en general se incremente de golpe el nivel de intensidad de las acciones cuando empiezan a caer los cuerpos y, por lo consiguiente, empieza a brotar la sangre.

Convirtiendo esto en una persecución que con los minutos se va volviendo más y más grande al ir involucrando múltiples asesinos cuyo accionar parece el típico de esta clase de películas en el que todo es matar por matar, pero en realidad cuentan con una diferencia fundamental que cambia por completo la manera en la que las víctimas tienen que enfrentarlos. Estableciendo así un mayor nivel de peligrosidad por medio del aspecto sobrenatural previamente mencionado y a la vez brindando la oportunidad de presentar situaciones de riesgo en las que el caos o la acción siempre estén presentes para que la experiencia no se vuelva monótona.

Algo que se mantiene de manera estable hasta llegar a una parte final que logra generar muchísima tensión y además se da el lujo de contar con momentos sorpresivos que le brindan mayor impacto visual e, incluso, cierto toque depresivo. Aunque dejando todo abierto para que las secuelas complementen lo que hace falta.

En el tema de las actuaciones tenemos un elenco que hace una buena labor, no podría decir que alguien destaca en especifico pero todos generan una buena química y cumplen con sus roles de manera sólida. Mientras que en el tema de producción tenemos una gran factura: el trabajo de fotografía es muy bueno, la dirección de arte impecable, el soundtrack es fantástico, el trabajo de sonido no presenta fallos, los efectos son de gran nivel y la labor de maquillaje está bien cuidada.

Opinión final: Fear Street 1994 es genial. Un homenaje a los slasher de los 90s que sin duda se posiciona como una de las mejores películas en lo que va del año. 

Ojometro:
*****

viernes, 18 de junio de 2021

Crítica: A Quiet Place Part II (2021)

Secuela dirigida nuevamente por John Krasinski, quien además en esta ocasión es el escritor del guión. Se estrenó en cines dentro de los Estados Unidos el 28 de mayo, mientras que hizo lo propio en México el pasado 10 de junio; recaudando hasta la fecha $201 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

Después de los eventos ocurridos en su casa, la familia Abott ahora enfrenta el terror del mundo exterior. Viéndose forzados a aventurarse hacia lo desconocido donde descubrirán que las criaturas que los cazan no son las únicas amenazas más allá del camino de arena.


Comentarios generales:

Hace tres años “A Quiet Place” sorprendió a propios y extraños por su enorme calidad, posicionándola como una de las mejores películas de terror de los 2010s. Simplemente fue un éxito rotundo con el que Paramount no iba a desaprovechar la oportunidad de crear una posible franquicia considerando el potencial existente de su tema apocalíptico, lo cual generaba ciertas dudas naturales ante lo voraces que suelen ser los estudios; sin embargo, A Quiet Place Part II no solo superó con éxito el retraso de un año por la pandemia, sino que además se posiciona como una de las mejores secuelas dentro del género en los últimos años.

Y es que lo que nos presenta Krasinski es una extensión natural de la historia original, pero también se toma la libertad de añadir un poco más de contexto con respecto a los comienzos de la catástrofe por medio de un inicio explosivo que contrasta con el tema general del silencio. Brindándole así los que son sin duda los minutos con más acción y que sirven para exponer de mayor manera lo verdaderamente peligrosas que son las criaturas en escenarios amplios y con más personas de por medio.

Siendo esto un preámbulo de lo que podría ocurrir en los siguientes actos, más no es necesariamente lo que predominará debido a que una vez que pasan esos primeros minutos la película regresa a sus bases al posicionar las acciones justo en donde se quedaron en la primera entrega y a partir de ahí sustentar nuevamente su efectividad en la construcción de secuencias que exploten la generación de tensión por medio del sigilo. Funcionando de manera impecable la mayoría del tiempo y con ello ir preparando el camino para lograr su principal meta que es hacer lucir al personaje de Regan.

Quien en esta ocasión es el centro de atención debido a que es por medio de ella como se empiezan a exponer los peligros exteriores sin dejar de lado todo lo demás. Con un enfoque que no dista demasiado de lo que hemos visto en otras películas o series con respecto al apocalipsis y sus consecuencias en el comportamiento humano, pero que realmente no se vuelve algo tan importante en el desarrollo para no caer en lo genérico. Aunque si es el medio para proporcionar uno de los momentos más satisfactorios del filme que, además, revela un aspecto fundamental con respecto a las criaturas.

Llevándonos así a una parte final que en cierto modo se podría decir que es lo más flojo de la película al establecer la presencia de unos personajes que la verdad resultan irrelevantes. Sin embargo, a pesar de esto logra tener un desenlace muy intenso, lleno de acción y que cumple perfectamente su objetivo de no solo establecer una ventaja para los humanos, sino también de posicionar a los dos niños Abott como el posible futuro de la franquicia.

En el tema de las actuaciones tenemos nuevamente a Emily Blunt (Evelyn), Noah Jupe (Marcus) Millicent Simmonds (Regan) haciendo una gran labor; en especial esta última mostrando una evolución natural para su personaje que explota a la perfección. Mientras que la presencia de Cillian Murphy (Emmett) añade un buen contraste con respecto a lo que representaba el personaje de Krasinski en la primera entrega. 

Sobre la producción, como era de esperar, es de una factura altísima: el trabajo de fotografía es estupendo, la dirección de arte está bien cuidada, cuenta con un gran score, el trabajo de sonido es impecable, la labor de maquillaje es sólida y los efectos se siguen manteniendo de primer nivel, aunque aquí se les exige un poco más en términos de espectacularidad.  

Opinión final: A Quiet Place Part II es muy buena. No está al nivel de la primera entrega, pero es una gran continuación que vale mucho la pena.

Ojometro:
*****