martes, 29 de junio de 2021

Crítica: Censor (2021)

Película dirigida por Prano Bailey-Bond, quien además comparte créditos como co-escritora del guión junto a Anthony Fletcher. Se estrenó en VOD dentro de los Estados Unidos el pasado 11 de junio, pero todavía no hay información sobre si saldrá en formato físico.

Sinopsis:

Después de ver una desagradable película que le resulta extrañamente familiar, Enid (Niamh Algar), quien se desempeña como censora de películas, se propone a resolver el misterio sobre la desaparición de su hermana. Embarcándose en una búsqueda que disuelve la línea entre la ficción y la realidad.


Comentarios generales:

Creo que a todos los que somos fans del cine de terror en algún punto de nuestras vidas nos han llegado a juzgar por nuestra afición, como si el ver estas películas nos convirtiera en potenciales asesinos seriales de manera automática. Es un prejuicio que nunca dejará de existir y que durante mucho tiempo se vio impulsado por organismos reguladores llenos de falsos puritanos que, curiosamente, tenían muy poca capacidad para diferenciar la realidad de la ficción.

Por ello es que cuando vi el primer trailer de Censor inmediatamente entró en mi lista de películas más esperadas de 2021, ya que es raro ver una propuesta que toque estos temas en conjunto y afortunadamente no ha decepcionado.

Esto porque lo que nos presenta Prano Bailey-Bond es una historia que por grandes lapsos tiene mucho de slasher gracias a la estética y a los momentos tan gráficos con los que cuenta, pero está muy lejos de serlo debido a que su intención es elaborar algo más complejo partiendo desde la base de la censura. Por lo cual el inicio puede resultar un tanto lento debido a que se hace mucho énfasis en la labor de Enid como censora y en cómo sus propias creencias o disgustos juegan un papel fundamental en la manera en la que juzga a las películas de terror mientras no se da cuenta que tal vez ella tenga más problemas que aquello que desea erradicar.

Haciendo de este viaje uno en el que poco a poco se va construyendo una atmósfera bastante tenebrosa que claramente tiene inspiración en el giallo y en donde diversos sucesos empiezan a quebrar de manera sostenida a la protagonista, ya sea por lo que ve en las películas o por cuestiones que ocurren ajenas a su trabajo. Lo cual no solo pone sobre la mesa el tema de culpar al género por tragedias ante la menor provocación (y también cómo se ignora todo cuando se descubre que no tuvo influencia alguna), sino también la fragilidad mental de Enid como el medio para ir generando dudas razonables con respecto a si lo que está tratando de resolver es en verdad posible o solo es producto de su imaginación.  

Algo que sin duda es el sustento para ofrecer unos 25 minutos finales muy potentes, en los que el nivel de locura se incrementa de golpe y los visuales vuelven a tomar un aire de giallo muy marcado para dejar así un cierre que transita entre la realidad y la ficción de manera sutil. Aunque nunca sin dejar de esclarecer la situación perturbadora que se vive.

Sobre las actuaciones realmente este es el show de Niamh Algar, ella es el alma de la película y no decepciona al mostrar un descenso hacia la locura muy bien construido que te termina dejando una impresión bastante fuerte. Y en cuanto a la producción, tenemos una buena factura: el trabajo de fotografía es muy bueno, la dirección de arte está bien cuidada, cuenta con un gran score, el trabajo de sonido es impecable, los efectos (en su mayoría prácticos) están muy bien hechos y la labor de maquillaje resulta efectiva.

Opinión final: Censor me gustó. Una propuesta fresca que puede tardase un poco en digerir, pero que te dejará pensando en ella incluso varios días después de verla.

Ojometro:
****