domingo, 28 de septiembre de 2014

Crítica: At the Devil's Door (2014)


Película escrita y dirigida por Nicholas McCarthy (The Pact). Se estrenó vía VOD durante el mes de agosto y llegó de manera limitada a cines dentro de los Estados Unidos el pasado 12 de septiembre. Seguramente llegará a otros mercados hasta el próximo año.

Sinopsis:

Leigh (Catalina Sandino Moreno) es una ambiciosa agente de bienes raíces a la que le piden vender una casa con un pasado tormentoso. Ahí tiene un encuentro extraño con una joven (Ashley Rickards), el cual no solo tendrá consecuencias para ella, sino también para su hermana Vera (Naya Rivera).



Comentarios generales:

Después de lo que hizo con su ópera prima era evidente que McCarthy encontraría camino libre para filmar lo que quisiera; de hecho, tuvo la oportunidad de involucrarse en una secuela y prefirió hacerse a un lado para enfocarse en un trabajo nuevo, que estuviera ligado a un tema probablemente no tan original pero al que le pudiera brindar algo diferente. Eso es lo que ocurre con At the Devil's Door, una película de la cual mientras menos sepan de esta mejor (por ello la sinopsis es tan simple).

En el que es apenas su segundo filme el director sigue con una línea similar a la que le vimos con The Pact al darle mucha más importancia a la construcción del suspenso de manera bastante lenta, dejando que la atmósfera juegue un papel fundamental al momento de involucrarte con lo que ocurre y provocando una sensación de que algo maligno está presente todo el tiempo; aún dentro de situaciones comunes. Aquí no tiene prisa por sacarte sustos de manera constante, sino que los va dosificando poco a poco de diversas maneras para que cuando los más fuertes hagan acto de presencia verdaderamente tengan un impacto considerable dentro de la propia historia.

Historia que, dicho sea de paso, está estructurada de tal manera para que se sientan tres completamente diferentes sin que se trate de algún tipo de antología o cosa similar, y las cuales están entrelazadas de manera bastante efectiva para que todo tenga sentido dentro de los límites del terror que pretenden manejar; siendo además la manera en la que se le da una buena dinámica para que la lenta construcción previamente mencionada no te resulte en exceso pesada. Aunque igualmente puede que sea uno de sus principales puntos en contra, sobre todo porque si llega un momento en donde se notan ciertas cosas forzadas dentro de las historias de las hermanas y porque genera un ligero desbalance en el ritmo general.

El final lo sentí un poco flojo, no malo, pero considerando los sucesos mostrados uno pensaría que el conflicto iba a tener más fuerza. Sientes como si la idea hubiera sido algo mucho más fuerte, pero no se atrevieron a llevarla a cabo.

En las actuaciones sin duda es Rickards la que se lleva la atención a pesar de no ser la protagonista, es la que muestra más evolución en su personaje; mientras que Moreno y Rivera, aunque no están mal, nunca logran atraparte por completo. La producción es austera, pero bastante efectiva: tiene un sólido trabajo de fotografía, un muy buen score, el trabajo de sonido es impecable y una combinación de CGI/efectos prácticos que da buenos resultados.

Opinión final: At the Devil's Door es una buena película, aunque por su estructura y la manera de presentar las cosas puede no termine por agradarle a varios.

Ojometro:
****

jueves, 25 de septiembre de 2014

Crítica: Scream Park (2014)


Película escrita y dirigida por Cary Hill, la cual representa su debut tras la cámara. Su salida en DVD dentro de los Estados Unidos se dio en el mes de abril, pero desde el pasado 30 de julio también está disponible en VOD e iTunes.

Sinopsis:

Los empleados de un parque de diversiones que está a punto de cerrar deciden hacer una fiesta dentro de este a escondidas. Lo que no saben es que un par de asesinos se han infiltrado y harán de su noche una pesadilla como parte de un plan para atraer más gente.



Comentarios generales:

Siempre he pensado que los parques de diversiones son de los mejores escenarios para desarrollar una película de terror gracias a que añaden una atmósfera muy peculiar. Muchos trabajos que los involucran suelen dejar cosas originales en el camino o al menos un entretenimiento ligero para pasar el rato; aunque ese no es el caso con Scream Park.

En su ópera prima lo que nos ofrece Hill es un slasher con una falta de inspiración y originalidad como pocos; en donde tratando de hacer un tributo a trabajos del género en los 80s se olvida por completo de la sustancia para simplemente quedarse con lo visual en su intento de querer generar algún tipo de reacción por parte del espectador. Es una historia random con personajes random de los que no sabemos nada y que son perseguidos por un par de asesinos igualmente random sin ningún motivo aparente hasta los últimos 15 minutos, donde al parecer se acordaron de que tenían que utilizar la escena con Doug Bradley para justificar su presencia en la película.

No solo no sigue la estructura clásica de los slasher, sino que además nunca te importa quienes son los asesinos (de hecho, ni siquiera se esfuerzan en decirnos quienes son en realidad) y eso es pésimo para esta clase de trabajos. Aunado a que no tienen ni un solo momento de tensión o de suspenso, y las muertes están tan mal hechas que incluso la cuestión de impacto se siente blanda a pesar de que exponen situaciones un tanto gráficas.

Al final le añaden un giro que, si bien no me lo esperaba, realmente termina por importar poco debido a que está ligado a una situación que con el paso de los minutos dejan de tratar.

Las actuaciones rayan un nivel de amateurismo muy elevado y Bradley solo aparece un par de minutos en pantalla. La producción es muy pobre en todos los sentidos; sin embargo, el trabajo de sonido se lleva la atención por ser una auténtica pesadilla: se notan los cortes para integrar los diálogos, por momentos no se escucha nada e incluso en un breve momento se pueden escuchar voces ajenas de la gente detrás de cámara.

Opinión final: Scream Park es horrible. No desperdicien su tiempo con este intento de slasher.

Ojometro:
*

martes, 23 de septiembre de 2014

Crítica: Found (2014)


Película dirigida por Scott Schirmer, la cual es una adaptación de una novela del mismo nombre escrita por Todd Rigney. Se estrenó de manera limitada en cines, VOD y diversas plataformas digitales dentro de los Estados Unidos el pasado 25 de agosto, mientras que su salida en DVD se dio precisamente el día de hoy.

Sinopsis:

Marty (Gavin Brown) es un alumno de quinto grado modelo: saca buenas calificaciones, escucha a sus maestros y nunca se mete en problemas. También es fanático de las películas de terror y victima de bullying por parte de otros niños; sin embargo, un día descubre que su hermano mayor es un asesino serial y guardar el secreto amenaza con cambiar su vida para siempre.



Comentarios generales:

Debo de admitir que no he leído la novela, así que cuando vi el titulo lo primero que pensé fue que este trabajo estaría conectado de alguno y otro modo con el found footage, especialmente con su ínfimo presupuesto, pero me lleve una agradable sorpresa al ver que no era así.

Con Found lo que nos trae Schirmer es una historia que podía haber caído en la simpleza de vendernos la idea de que uno se vuelve violento por lo que ve en pantalla (en este caso, las películas de terror), pero en lugar de eso le brinda un enfoque totalmente distinto al utilizarlo más como un síntoma provocado por la desestabilidad en el hogar y otros temas complejos como el bullying o el racismo.

Todo desde la perspectiva de un niño de 12 años que tiene que lidiar con una situación aterradora incluso dentro del único lugar en donde supuestamente está a salvo, provocando así una sensación de inseguridad y terror muy fuerte durante más de una hora a pesar de que la película en si no ofrece muchas escenas de impacto; aunque las que tiene logran aportar muchísimo en dosis muy bien cuidadas para no convertirla en un trabajo de serie b más que le quite atención a lo verdaderamente importante.

Básicamente por medio de un ritmo semi lento se construye una dinámica entre los hermanos muy interesante en la que no estás completamente seguro sobre como reaccionará cada uno o si Marty terminará sucumbiendo ante la oscuridad como lo hizo su hermano; un ritmo que puede llegar a ser un problema para varios y no los culparía, ya que por momentos la película se siente pesada con tanta escena contemplativa cuyo único propósito es  evitar que el espectador se sienta bajo la idea de que está viendo un slasher convencional. Otro problema que le encontré es que nunca mencionan la época en la que se desarrolla la historia, ya que por los VHS uno asume que es en los 80s o 90s, pero al tratar temas tan actuales como que hace corto el no saber muy bien la década.

El final es tremendo. Perturbador y con muchísima fuerza; en donde el director nos invita a imaginarnos las atrocidades fuera de cámara sin que eso afecte en lo más mínimo el resultado. 

Las actuaciones de Brown y de Ethan Philbeck como su hermano Steve son muy buenas, tienen mucha química; aunque especialmente el primero logra ofrecer varios momentos destacados con su lenta transformación de niño bueno a niño con conflictos bastante pesados. La producción, como era de esperarse para un trabajo con un presupuesto aproximado de $8000 es muy discreta, pero en ocasiones ni lo parece: tiene un buen trabajo de fotografía, el score es absorbente y todos lo que tiene que ver con la cuestión de efectos/maquillaje logra de manera efectiva su tarea de recrear un estilo ochentero en los filmes expuestos. Lo único criticable es el sonido, algo que no es de extrañar en esa clase de películas.

Opinión final: Foud es probablemente la mejor película indie de este 2014. Bastante recomendable.

Ojometro:
****

domingo, 21 de septiembre de 2014

Crítica: Apocalyptic (2014)


Producción australiana escrita y dirigida por Glenn Triggs. Salió directamente en DVD en Australia apenas el pasado 17 de septiembre, pero desde el mes de junio ha estado disponible en el Reino Unido vía Amazon.

Sinopsis:

La documentalista Jodie Black (Jane Elizabeth Barry) y su camarógrafo aceptan ir a filmar a un notorio culto australiano para exponerlo al mundo. Ya estando ahí se encuentran con una comunidad integrada por puras mujeres cuyo misterioso líder, Michael Godson (David Macrae), se autoproclama como la manifestación de Dios y tiene aterradores planes para todas ellas.



Comentarios generales:

Con The Sacrament y Children of Sorrow mi cuota de trabajos sobre cultos durante este 2014 parecía cubierto, ya que como he mencionado con anterioridad estos suelen ofrecer poca variedad como para tener varios que sobresalgan a lo largo de un año. Sin embargo, Apocalyptic me llegó de pura casualidad y le di una oportunidad, especialmente por su genial portada; aunque al final me encontré más de lo mismo.

Lo que nos trae Triggs es una película con buenas intenciones pero que lamentablemente no pone nada nuevo o innovador sobre la mesa como para considerar que valió la pena el tiempo invertido en ella, sobre todo porque en ningún momento sientes que la intención sea realmente ofrecer algo aterrador. Ya que en su afán por lograr un realismo extremo (es found footage) se olvida por completo de ir creando poco a poco situaciones que te hagan sentir que algo está terriblemente mal dentro de ese lugar; solo se limitan a mostrarnos entrevistas, a varias mujeres cenando en una mesa y largas caminatas por el campo que terminan aburriéndote al punto de que cuando llega un aspecto incomodo básicamente no te importa en lo absoluto.

Tiene un ritmo cansino y es repetitiva como pocas cosas. Aunque lo peor es que casi no profundizan respecto a los motivos que hay detrás de esta comunidad: si los tratan de manera muy superficial, pero nunca les dan suficiente tiempo para que la construcción del final te resulte interesante y no totalmente acelerado… o falto de originalidad.

A pesar de esto los últimos diez minutos son lo mejor de toda la película gracias a que es en el único lapso en donde se sube de tono y se intenta generar algo de terror. Aunque la verdad resulta imposible creer que alguien con el mínimo grado de empatía por otros seres humanos se pueda quedar filmando eventos tan impactantes solo para “documentar los hechos”.

En las actuaciones no hay mucho que decir, solamente Macrae me pareció ligeramente arriba del promedio de lo que consideraría aceptable gracias a que por momentos es bastante friki. La producción es muy limitada y con dificultad algo resalta; salvo el trabajo de fotografía en todo lo que respecta a exteriores que me pareció sólido en términos generales.

Opinión final: Apocalyptic es un clon del clon. No es algo terrible, pero no se perderán de nada si no la ven.

Ojometro:
**

jueves, 18 de septiembre de 2014

Crítica: Deliver Us From Evil (2014)


Adaptación del libro Beware the Night que está dirigida por Scott Derrickson (Sinister), quien además es co-escritor del guión junto con Paul Harris Boardman. Se estrenó en cines durante el mes de julio dentro de los Estados Unidos y desde entonces en varios otros países, pero apenas llegó a las salas en México el pasado 11 de septiembre.

Sinopsis:

Ralph Sarchie (Eric Bana) es un oficial de policía en Nueva York que empieza a investigar una serie de perturbadores crímenes. Al inicio nada parece tener sentido, pero cuando se cruza con un sacerdote poco convencional y empieza a unir la pistas entenderá que todo está ligado a fuerzas demoníacas mas allá de su comprensión.



Comentarios generales:

La combinación crimen/horror no es tan fácil de manejar debido a que existe el riesgo de caer en los eternos clichés y fórmulas que muchas veces ya se sienten viejas. Para complicar más las cosas Deliver Us From Evil está basada en supuestos hechos reales, exponiéndola así a un escrutinio mucho mayor del público, pero afortunadamente cayó en las manos del director que mejor sabe llevar esta clase de temáticas.

Ahora Derrickson no nos trae una historia tan original como su último trabajo, incluso por el país donde se lleva a cabo el inicio sin duda a muchos les vendrá a la mente The Exorcist, pero a pesar de eso logra una mezcla de thriller policíaco y posesiones demoníacas muy efectivo.

Evidentemente para ello tiene que recurrir a un camino por demás conocido en donde el escéptico poco a poco se va convenciendo por medio de alguien más sobre la oscuridad que hay detrás de los crímenes, provocando así que los primeros 40/50 minutos pudieran resultar algo pesados para varios ante lo convencional; sin embargo, gracias al ritmo que le imprime, a la ligera comedia, a la creación de imágenes de impacto y al uso de sustos fáciles personalmente nunca lo vi como un problema. Aquí es donde se encarga de establecer de manera efectiva el tono y la atmósfera un tanto deprimente de toda la historia.

Lo mejor llega cuando se devela el tema de los demonios por completo y la película entra a una dinámica distinta, ofreciendo así una larga secuencia dentro de un edificio que termina encapsulando todos los elementos importantes de manera perfecta para incrementar el nivel de tensión, así como el grado de brutalidad que hasta ese momento se había mantenido fuera de cámara. Aunque igualmente al cambiar de dinámica deja varias preguntas sin respuesta como: ¿Quién diablos escribió el texto en el zoológico? ¿Por qué la niña escuchaba sonidos en su habitación? ¿Qué tiene ver una canción de The Doors en todo esto?. Siendo esta última muy molesta porque es un detalle que luce totalmente forzado y nunca hacen algún esfuerzo para tratar de justificarlo.

El final involucra una de las mejores escenas de exorcismos de los últimos años y eso hace que la película cierre con muchísima fuerza.

En las actuaciones Eric Bana nunca termina por convencer, le cuesta muchísimo trabajo el poder demostrar diferentes emociones; de hecho, Édgar Ramírez se lo come en cada escena en la que están juntos en pantalla. Aunque quienes merecen una mención especial son Sean Harris, Olivia Horton y Chris Coy como los poseídos; la verdad hacen un papel muy destacado, especialmente los dos primeros están aterradores.  

La producción es bastante destacada. El trabajo de fotografía ayuda a crear un tono de oscuridad muy interesante en diferentes escenarios de NY, la dirección de arte en determinados sets está muy bien cuidada y el sonido es sólido; mientras que los efectos/maquillaje funcionan a la perfección para los momentos en los que son más relevantes (los últimos 25 minutos principalmente).

Opinión final: Deliver Us From Evil es una buena película. Aunque considerando su temática puede que no sea para todos los gustos.

Ojometro:
****

martes, 16 de septiembre de 2014

Crítica: The Pact 2 (2014)


Secuela ahora escrita y dirigida por la dupla Dallas Richard Hallam / Patrick Horvath; en la cual Nicholas McCarthy en esta ocasión no tuvo ningún tipo de injerencia, ni siquiera como productor. Se estrenó el pasado 5 de septiembre vía VOD y tendrá un estreno limitado en cines dentro de los Estados Unidos el próximo 10 de octubre. 

Sinopsis:

Semanas después de que Annie Barlow terminará con el terror provocado por Judas Killer, ahora una joven de nombre June (Camilla Luddington) empieza a tener extrañas pesadillas sobre terribles asesinatos. Por otro lado, un agente del FBI investiga a un duplicador del recién fallecido asesino; provocando que sus caminos se crucen para revelar secretos del pasado.



Comentarios generales:

Soy gran fan de la primera entrega, pero realmente no es una película que haya dejado mucho material disponible para una secuela. Por eso cuando anunciaron esta segunda parte me sorprendí porque realmente no sabía qué rumbo tomarían; además el hecho de que McCarthy no estuviera involucrado en lo absoluto con el proyecto no era nada alentador, pero debo de decir que The Pact 2 ha sido bastante agradable.

Lo que nos traen ambos directores es un trabajo que tiene muchas similitudes con su predecesora, en donde logran integrar ciertos elementos que le ayudan a darle una identidad propia sin que se aleje demasiado del concepto original. Sigue mezclando el poltergeist con el thriller policíaco, pero en esta ocasión lo último es lo que predomina y por lo consiguiente aumenta de manera leve la violencia, así como la sangre; ahora no todo depende de la construcción del suspenso (que sigue siendo muy bueno) por medio de una atmósfera atrapante, sustos fáciles, sustos elaborados y un ritmo muy pausado, sino que la labor de investigación juega un papel mucho más importante con el fin de generar dinamismo y más sustancia para una historia cuya profundidad se ve limitada entrando al segundo acto.

Y es que es claro que llega un punto en donde se topan con pared: le empiezan a dar varias vueltas a determinadas cosas sin poder conectar de manera convincente los eventos y como principal salida utilizan a personajes de la primera película para hacerlo.

El problema aquí es que Annie no parece tener un motivo lo suficientemente sólido para justificar su regreso y Stevie solo aparece un minuto en pantalla. Ambas se sienten metidas con calzador e incluso te deja con la sensación de que la primera pudo ser otro personaje sin ningún problema ante lo irrelevante que resulta su anexión, esto cuando en teoría tendría que ser alguien sumamente relevante dentro de este universo.

El final no es tan potente como hubiera esperado porque el giro presentado es una opción que seguramente varios podrán considerar entre sus opciones minutos antes. Pero a pesar de todo logran un desenlace satisfactorio que incluso deja abierta la posibilidad de otra entrega.

En las actuaciones Camilla Luddington no lo hace mal y Patrick Fischler como detective del FBI está muy exagerado; mientras que la presencia de Caity Lotz y Haley Hudson son más que nada cameos. La producción nuevamente es muy discreta: el trabajo de fotografía cumple, el sonido está bastante bien cuidado, el score me agradó y los efectos siguen siendo muy sobrios en términos generales.

Opinión final: The Pact 2 es una buena película. No está al nivel de su predecesora, pero vale la pena.

Ojometro:
****

domingo, 14 de septiembre de 2014

Crítica: Dead Snow 2: Red vs. Dead (2014)


Secuela dirigida por Tommy Wirkola, quien además es co-escritor junto a Stig Frode Henriksen y Vegar Hoel. Se estrenó en cines en Noruega a inicios de año y su salida en formato físico se dio el 25 de junio; aunque su llegada a los Estados Unidos está programada para el próximo 10 de octubre de manera limitada en cines.

Sinopsis:

Después de los sangrientos sucesos que terminaron con la vida de sus amigos y de su novia, Martin (Vegar Hoel) despierta en un hospital con la sorpresa de que le han implantado un brazo que no es suyo. Mientras tanto, el ejército nazi de zombies inicia su camino para terminar una misión que Hitler les asigno 70 años atrás; aunque el propio Martin y un peculiar escuadrón anti zombies están dispuestos a arruinarles sus planes.



Comentarios generales:

Contrario a muchos que la consideran como una de las mejores películas de zombies de los últimos años, a mí la primera entrega se me hizo bastante pobre en muchos aspectos y por ello veía con cierta duda una secuela. Sin embargo, conforme fue pasando el tiempo mi interés creció con tantos anuncios de su producción; especialmente por el hecho de que se convirtió en la película nórdica de terror más cara de toda la historia. Esto hacía suponer algo grande y así fue.

Wirkola no cambia ni por un momento el toque cómico que caracterizó a la anterior, pero en Red vs. Dead se encarga de magnificarlo (y pulirlo) de tal manera que ahora la película se siente mucho más ligera y sin escenas forzadas en donde muestre una obsesión por darnos a conocer cuáles son sus influencias. Además lo hace brindándole un enfoque totalmente diferente, dejando de lado la atmósfera de soledad y la sensación de desesperanza para darle paso a un escenario con tintes más épicos por medio del personaje de Martin; quien evoluciona de un tipo completamente intrascendente a un anti héroe que lidera a un grupo de freaks de la manera más atípica y menos convencional de todas hacia lo que básicamente se trata del último episodio de la segunda guerra mundial.

Tiene un ritmo muy fluido y el gore está a la orden del día. Aunque sin duda lo más interesante fue saber un poco más sobre los zombies nazis y su verdadero propósito debido a que esto no solo nos lleva por un largo camino de muertes muy divertidas, sino que ayuda a que el grado excesivo de violencia tenga sentido porque en esencia convierte a la historia en una sátira; sin decir que le brinda una dinámica completamente distinta. En cierto modo diría que aplica la fórmula que utilizo Raimi en Evil Dead 2 para hacer esto mucho más grande utilizando solo pequeños aspectos de la entrega inicial.

Mi única queja es todo lo que tiene que ver con el grupo de policías. Realmente no tienen ningún peso en el desarrollo de la historia, nunca se involucran de manera directa con los zombies y el comandante es un personaje fastidioso.

El final es una batalla a gran escala que dejará a todos contentos. Acción sin parar y mucha sangre.

En las actuaciones Hoel está muy bien en su papel, su manejo del humor es muy digerible y lo sabe mezclar a la perfección con determinados momentos “serios”; mientras que el resto del elenco es un complemento sólido para su dinámica. La producción deja ver en todo momento el importante presupuesto con el que contaron: el trabajo de fotografía es bastante espectacular (magnificado por los paisajes islandeses), el maquillaje de los zombies está impecable, cuenta con un trabajo de sonido destacado y sobre todo con un despliegue de efectos especiales enorme muy bien logrados; que utiliza tanto CGI como elementos clásicos.

* Hay una escena post-créditos

Opinión final: Red vs. Dead es extremadamente divertida. Supera a su antecesora en todo y nos regala una expansión sólida dentro un universo que inicialmente no parecía tener mucho.

Ojometro:
*****

jueves, 11 de septiembre de 2014

Crítica: Torture Chamber (2014)


Película escrita y dirigida por Dante Tomaselli (Desecration, Satan's Playground), quien además también ejerce como productor. Se estrenó en enero de este año directamente en DVD y diversas plataformas digitales dentro de los Estados Unidos.

Sinopsis:

Jimmy Morgan (Carmen LoPorto) es un niño encerrado en una jaula cual animal salvaje por su religiosa madre, quien piensa que está poseído y trata de practicarle un exorcismo que termina mal. Varios años después Jimmy escapa del instituto mental donde estaba internado con deseos de venganza; aunque no está solo, ya que ha formado un ejército de niños que lo ayudarán a satisfacer su sed de sangre.



Comentarios generales:

Quienes hayan visto los trabajos anteriores de Tomaselli seguramente sabrán que no se trata de un director común, ya que su estilo se enfoca más en decir con imágenes lo que no puede decir con palabras para así retar la paciencia del espectador. Por ello su cuarto filme causo mucha expectativa a inicios de este año y considerando el tiempo que se tomó para hacerlo esperaba una evolución importante con respecto a su último filme, pero en lugar de eso me encontré con algo que simplemente no me convenció.

Con Torture Chamber tenemos una película que no sigue la clásica estructura de tres actos a la que estamos acostumbrados, sino que en su propósito por lograr que esto luzca más como una auténtica pesadilla Tomaselli va integrando escena tras escena sin la más mínima explicación o solo brindándote alguno que otro punto de unión para comprender más o menos la “historia” que quiere contar; dándole así mucho más importancia a la construcción de la atmósfera gótica, a la creación de imágenes tétricas y al uso de iconografía religiosa para tratar de incomodar al espectador por diversos frentes. Claramente su intención no es divertir, sino golpearte desde lo más profundo de tu cerebro al retar algunas creencias de lo que es el bien y el mal, utilizando la venganza de Jimmy como el principal conducto.

El problema es que todo lo hace bajo un ritmo sumamente pasivo, ya que a pesar de que solo dura una hora y media el filme se vuelve eterno. Muestra algunas escenas violentas de tortura muy bien hechas que logran mantenerte atento, pero la mayor parte del tiempo vemos cosas que se repiten una y otra vez sin que añadan gran profundidad: ver correr a niños quemados o ver como las victimas siempre terminan en el mismo lugar no es precisamente interesante. Además el uso de los flashbacks nunca resulta lo suficientemente convincente para justificar el odio de Jimmy hacia algunas de sus víctimas.

El final no les podrá importar menos debido a que en este punto la aburrición es tal que lo único que quieres es que ya termine. Se siente completamente anti climático.

En cuanto a las actuaciones debo de decir que LoPorto está muy bien, es uno de los niños más aterradores que he visto en pantalla últimamente; aunque el resto del elenco no está a su altura: Christie Sanford como la madre de Jimmy te termina por fastidiar y Vincent Pastore luce totalmente perdido cada que aparece en pantalla. La producción es discreta, pero aquí tiene algunos de sus puntos más fuertes como la fotografía y sobre todo el estupendo trabajo de sonido que le añade bastante a determinadas escenas. Igualmente el score es muy bueno.

Opinión final: Torture Chamber me aburrió. Maneja muchos conceptos interesantes, pero nunca pudo atraparme como tal vez lo haga con otras personas.

Ojometro:
**

martes, 9 de septiembre de 2014

Crítica: Find Me (2014)


Primer largometraje del director Andy Palmer, quien además comparte créditos como co-escritor del guión junto a Cameron Bender y Kathryn Lyn (ambos protagonistas del filme). Se estrenó vía VOD y diversas plataformas digitales dentro de los Estados Unidos el pasado 2 de septiembre.

Sinopsis:

Emily (Lyn) y Tim (Bender) son una pareja de recién casados que se mudan a una pequeña casa ubicada en el pueblo donde ella pasó su infancia. Todo parece normal, pero al poco tiempo ambos empiezan a experimentar cosas extrañas que los hacen suponer sobre la presencia de un fantasma; del cual, con la ayuda de una amiga, empezarán a tratar de descifrar su identidad.



Comentarios generales:

Con el tiempo he aprendido a valorar las películas sobre casas con actividad paranormal filmadas en formato clásico debido a que para mí es la mejor manera de contar esta clase de historias a pesar del poco margen de innovación que representa. Por ello no es de extrañar que Find Me hiciera que recordara a trabajos que disfrute bastante en el último par de años, aunque en una escala mucho menor.

Lo que nos trae Palmer es básicamente una mezcla de The Pact con algo The Conjuring pero siempre bajo un concepto mucho mas intimo, el cual se apega a la regla de menos es más para ir desmenuzando poco a poco una historia cuya complejidad no es demasiada y de la cual es probable que puedan descifrar varias cosas desde el primer acto. Para ello implementa un ritmo bastante pausado, por momentos cansino; en donde se enfoca en la construcción de una atmósfera lo más aterradora posible mientras va soltando algunos sustos fáciles en el proceso que ayudan a sacarla de la pesadez. Esto complementado con la revelación temprana de los fenómenos a los personajes principales que vuelve la dinámica entre estos mucho más interesante durante el proceso de búsqueda de respuestas (contrario a otros trabajos, donde todo recae en un solo individuo la mayoría de las veces).

El principal problema que tiene es el hecho de que a pesar de tanto énfasis a los detalles, la verdad por varios lapsos sientes que no ha pasado demasiado; por no decir nada. Cuenta con varios puntos muertos y el nivel de intensidad en momentos clave no es lo suficientemente alto como para poder considerar tan amenazante al espíritu que hay en la casa (que lo es) y además los orígenes de este son demasiado vagos como para generarte gran expectativa conforme se va acercando el desenlace.

El final no está mal, pero si sentí que le falto más fuerza. En especial porque el “conflicto” principal es limitado a no más de cinco minutos.

Las actuaciones son aceptables, todo se centra en tres actores que logran una buena química en los momentos en los que están juntos en pantalla; aunque en algunas escenas donde se necesitaba más fuerza se quedan cortos. La producción es verdaderamente discreta, realmente nada resalta; por ahí tiene algunos problemas con la iluminación, pero más allá de eso cumple en lo que presenta dentro de sus limitaciones.

Opinión final: Find Me es un trabajo aceptable. Es más para aquellos que gustan de experiencias pequeñas cuyo grado de originalidad no es mucho.

Ojometro:
***

sábado, 6 de septiembre de 2014

Crítica: Bunnyman Massacre (2014)


Secuela nuevamente escrita y dirigida por Carl Lindbergh. Se estrenó en TV el pasado de mes de abril dentro de los Estados Unidos por medio del canal Chiller, pero su salida oficial en formato físico se dio apenas a mediados de agosto (también en Europa).

Sinopsis:

La aventura de Joe (David Scott) y Bunnyman continúa en su pueblo fantasma, donde este último sigue con su sed de sangre; matando a todo ser vivo que se le cruce en su camino. El problema es que esto empieza a ser un riesgo por la cantidad de cuerpos que se acumulan y porque la desaparición de un par de oficiales atrae la atención del sheriff local.



Comentarios generales:

La primera Bunnyman es un trabajo difícil de digerir debido a sus desesperantes fallas y porque ciertamente no es un producto atractivo en general, pero el hecho de tener a un asesino tan peculiar daba pie a la creación de una franquicia indie. Por ello esta secuela no me sorprendió en lo absoluto, era algo lógico que se diera; aunque si esperaba ver algo con un poco más de calidad considerando las bases previamente establecidas.

Con Massacre lo que hace Lindbergh es repetir casi todos los errores de su primera entrega, pero ahora bajo una historia casi inexistente que principalmente se sustenta en Bunnyman matando a diestra y siniestra todo lo que se le cruce en su camino; una situación que no está mal en determinados casos como la impactante escena inicial del autobús escolar debido a que esto ayuda a establecer el nivel de violencia que se manejará, pero al no existir un hilo conector lo suficientemente sólido terminan sintiéndose como situaciones aisladas.

En serio, la continuidad de la película es bastante triste. Nunca sientes fluidez en los sucesos e incluso por momentos parece que estamos viendo una serie de cortos colocados de manera aleatoria para que dé alguno u otro modo todo tenga sentido. Ni siquiera el pequeño giro que le añaden funciona.

Otro punto negativo es que en esta ocasión Bunnyman por grandes lapsos termina siendo un mero espectador para darle más tiempo en pantalla a Joe, lo cual es increíblemente perjudicial para la película porque no solo se trata de un personaje genérico y sin gracia, sino que además las escenas con este involucran mucho dialogo que la vuelven muy pesada; algo que en un slasher es imperdonable. Aunque por otra parte hay que decir que las muertes (o la mayoría de estas) son bastante satisfactorias, sobre todo una que involucra a un barril sumamente original a la que de momento no recuerdo haberla visto en ningún otro trabajo. Esto dejará satisfechos a quienes solo buscan ver sangre o un entretenimiento barato.

El final es un tanto deprimente. Nunca hay un reto verdadero para los asesinos y ciertamente uno puede adivinar con bastante tiempo de anticipación lo que ocurrirá con estos.

En actuaciones no se puede decir mucho cuando el más destacado es alguien con una botarga de conejo. La producción mejora de forma considerable con respecto a la primera; en especial los efectos y el maquillaje están mejor logrados para brindarle una sensación de impacto mucho mayor a las muertes sin llegar a ser precisamente muy gráficas.

* En Europa el nombre oficial es The Bunnyman Resurrection

Opinión final: Bunnyman Massacre es una ligera mejora con respecto a su predecesora, pero salvo el look del asesino y algunas muertes, realmente poco recordarán a las dos horas de haberla visto.

Ojometro:
**

jueves, 4 de septiembre de 2014

Crítica: Septic Man (2014)


Película dirigida por Jesse Thomas Cook (Monster Brawl), cuyo guión corrió a cargo de Tony Burgess (Pontypool). Primero se estrenó directamente en TV dentro de Canadá el pasado mes de abril, pero su salida en formato físico apenas se dio el 19 de agosto de manera simultánea tanto en ese país como en los Estados Unidos.

Sinopsis:

Jack (Jason David Brown) es un trabajador de aguas residuales a quien se le pide investigar la causa detrás de la contaminación del agua del pueblo que ha hecho evacuar a todo el mundo. Para ello decide ir a la planta de tratado local, pero termina siendo atrapado en una fosa séptica por un par de hermanos psicópatas que no pretenden dejarlo salir de ahí con vida.



Comentarios generales:

Con el simple titulo uno se imagina que estará a punto de ver algo que involucre escenas que visualmente no son agradables, una situación de la que no suelo ser gran fan, pero para la cual si tengo un nivel de tolerancia bastante elevado. Sin embargo, con Septic Man lo grotesco no se utiliza como un simple conducto para algo más relevante y eso termina convirtiéndola en un trabajo del montón.

Thomas Cook nos trae una historia que inicia bien, vendiéndonos un panorama de peligro ante la contaminación del agua que no solo hace tener sentido a la extraña escena inicial, sino que además le añade cierto aire depresivo muy interesante que supones establecerá toda la tónica mientras hace algún tipo de crítica sobre como la clase media/trabajadora es la que sufre siempre las tonterías del gobierno; esto acompañado de un pequeño aire de misterio bastante sólido. El problema es que partir de los 20 minutos, cuando el personaje de Jack queda encerrado en la fosa séptica, se deja de lado todo eso para dar paso a una repetición de sucesos que convierten a la película en una totalmente hueca; en donde el director se escuda en miles de vómitos, desmembramientos y mucha mierda para tratar de mantener la atención del espectador en base a la duda sobre que tan lejos llegará con la implementación de lo grotesco.

Y es que no miento, decir que se estanca seria poco: básicamente todo se limita a ver a Jack vomitando o gritando mientras alguien tira partes de un cadáver a la fosa. Ni siquiera la presencia de un par de hermanos dementes es suficiente para sacar adelante algo que hubiera funcionado mejor como un cortometraje dado a que las interacciones con ellos son limitadísimas en todos sentidos; no le añaden nada importante a la trama y por momentos parece que solo fueron integrados a la historia para conectar de algún modo al protagonista con el mundo exterior. Nunca sabes exactamente sus motivaciones para matar (¿Son caníbales?) o por qué estos se odian entre sí.

Inclusive la propia mutación de Jack no podría ser menos interesante (desde el lado psicológico, en el visual es otra cosa). Realmente nunca te establecen una línea de tiempo que te indique cuanto lleva metido en la fosa, pueden ser días o meses y tú no lo sabes, por ello cuesta tanto trabajo creer su locura sustentada en solo unas cuantas alucinaciones.

El final por lo menos no sigue la línea “feliz” que uno esperaría, de hecho, es un tanto devastador para el héroe del pueblo.

En actuaciones realmente todo recae en David Brown, quien está aceptable en un papel cuyas limitaciones son bastantes. En producción cuenta varias cosas positivas: tiene un diseño de producción muy bien cuidado y los efectos son sólidos, pero sobre todo el trabajo de maquillaje se lleva las palmas gracias a lo que se hace con el aspecto físico del protagonista.

Opinión final: Septic Man es aburrida. Pretende sustentar su éxito en lo grotesco, pero ni eso logra salvarla.

Ojometro:
**

martes, 2 de septiembre de 2014

Crítica: The Cemetery (2014)


Película escrita y dirigida por Adam Ahlbrandt (Cross Bearer). Se estrenó en formato físico el pasado 31 de julio en Alemania y su salida en los Estados Unidos ya fue confirmada para finales de este año, aunque aún no se ha dado a conocer la fecha exacta.

Sinopsis:

En las profundidades de las colinas de Pennsylvania se encuentra un cementerio para aquellos que murieron durante un exorcismo y que sigue siendo un gran secreto por parte de la iglesia. Sin embargo, Bill (J.D. Brown) y su grupo de investigadores paranormales pretenden revelar la verdad para su show de TV; aunque esto despertará a los brutales demonios del pasado.



Comentarios generales:

En ocasiones los trabajos independientes suelen tener la fortuna de contar con una base de fieles seguidores que se encargan de enaltecerlos hasta que es inevitable escuchar o leer sobre estos sin hacer mucho esfuerzo. Eso fue lo que me ocurrió en esta ocasión; de pronto me tope con tantos comentarios positivos que fue me imposible ignorar The Cemetary y la vi esperando algo importante, pero el resultado no pudo ser más decepcionante. 

Lo que nos trae Ahlbrandt es una historia poco elaborada a pesar de que su premisa supone lo contrario, ya que en lugar de centrarse en los aspectos detrás de los exorcismos y de todas las atrocidades cometidas por la iglesia, lo único que nos muestra durante los dos primeros actos es a un grupo de investigadores bastante lamentable cuyo único propósito pareciera ser fastidiar al espectador. Simplemente sabes que son investigadores paranormales porque llevan una cámara (la única en una investigación a gran escala), pero de ahí en fuera su comportamiento va más acorde con una comedia juvenil de inicios de los 2000s y, salvo una breve mención a lo ocurrido dentro de este cementerio, todo lo demás se limita a escenas de sexo, infidelidades o a un humor muy pobre que se sustenta en… más sexo.

Obvio ante la falta de sustancia y de la poca creación de tensión el director se apega a lo visual para sacar adelante la película, lo cual logra hacer con cierto grado de efectividad. Hay mucha sangre, decapitaciones e incluso una escena un tanto memorable en donde una poseída saca varios órganos y huesos de un cadáver; esto logra crear dinamismo necesario para complementar la nulidad previa, pero si uno no se deja envolver por dicho impacto visual se seguirá metiendo una aburrida bárbara.

El final es bastante lamentable, ya que nunca responden nada e incluso te deja la impresión de que realmente no sabían cómo terminar la película.

Las actuaciones son muy malas, ninguno de los actores sabe manejar el humor o la seriedad según sea la necesidad de la escena y lucen increíblemente acartonados todo el tiempo. En producción lo más destacado, por mucho, son los efectos y el maquillaje: todo es muy elaborado para darle un toque bastante gráfico a la película que funciona bien.

Opinión final: The Cemetary es bastante meh. Las escenas sangrientas bien hechas la salvan de ser una atrocidad, pero hasta ahí.

Ojometro:
**