Película dirigida por Jennifer Kaytin Robinson, quien comparte créditos como co-escritora del guión junto a Sam Lansky. Se estrenó en cines dentro de México y los Estados Unidos los pasados 16 y 17 de julio; recaudando hasta la fecha $24.6 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.
Sinopsis:
En el pequeño pueblo de Southport, un grupo de amigos son aterrorizados por un brutal asesino que sabe de un horrible accidente del pasado. Trayendo recuerdos de la terrible masacre que azotó a dicha comunidad en 1997.
Comentarios generales:
Tras el fracaso de la serie de 2021 parecía que “I Know What You Did Last Summer” había agotado todas sus opciones para poderse mantener en la memoria colectiva, así que cuando se anunció esta cuarta entrega la reacción general fue más que nada de sorpresa debido a que no se trata de una franquicia por la que los fans estuvieran precisamente clamando por una nueva secuela. Poniéndola así en una situación extraña en la que no se sabía qué esperar y creo que eso mismo se trasladó a lo más profundo de este proyecto.
Ya que lo traído por Jennifer Kaytin Robinson no es que me haya parecido tan malo, pero entre que quiere replicar a la película del 97 y al mismo tiempo poder construir su propia identidad termina por dejar a medias todo lo que propone. Provocando unos primeros 35 minutos aburridos en los que, salvo por el accidente, realmente no tienen nada destacado y fallan en establecer de manera sólida a un grupo de amigos cuyas personalidades se sienten demasiado anticuadas y no generan gran interés con respecto a las brutales consecuencias que sus actos traerán más adelante.
Aunado a lo anterior, también es obvio que la directora no tenía muchas intenciones de darle demasiado tiempo en pantalla a Julie y Ray, dejando su presencia colgando de un hilo muy fino para solo explotarlos en momentos puntuales cuando la falta de conexiones con el material original empiece a ser muy marcado.
Situación que solo genera cuestionamientos con respecto al propósito de esta secuela, aunque para nuestra buena suerte una vez que el asesino empieza a tener mayor presencia las cosas se vuelven un poco más entretenidas dado a que las persecuciones y muertes en términos generales están bien logradas. Brindándole así a la segunda de la mitad de la película un ritmo mucho más ágil y una sensación de riesgo importante debido a que se logra mantener la duda con respecto a su identidad y por lo consiguiente no existe ningún momento de relativa tranquilidad porque la tensión es elevada en ese sentido.
Lo cual desafortunadamente no se traslada del todo a una parte final que se alarga un poco más de lo que debería, no tanto como para que se arruine o sea un desastre, pero si para quitarle fuerza a una revelación que para este punto ya no es tan sorpresiva. Además de que la manera en la que se integran a los personajes originales durante el desenlace resulta demasiado forzada y eso solo incrementa las sensaciones de que realmente nunca hubo intenciones de explotarlos más allá del tema de la nostalgia.
Sobre las actuaciones tenemos a una Chase Sui Wonders (Ava) que jamás la terminas por comprar como la final girl; de hecho, Madelyn Cline (Danica) termina robándole reflectores con un personaje muy bobo. Mientras que la presencia de Jennifer Love Hewitt y Freddie Prinze Jr. es mucho menor de lo que se esperaba y eso es algo decepcionante.
Y en lo que se refiere a la producción, sin duda es de buena factura: el trabajo de fotografía es sólido, la dirección de arte cumple, el score es competente, el trabajo de sonido no presenta fallos, los efectos son de buena calidad y la labor de maquillaje es discreta.
* Cuenta con una escena a la mitad de los créditos
Opinión final: I Know What You Did Last Summer está pasable. Secuela con crisis de identidad para perder el tiempo un día que no tengan otra cosa que hacer.
Ojometro:
***