martes, 10 de julio de 2018

Crítica: The Domestics (2018)


Película escrita y dirigida por Mike P. Nelson (Summer School). Se estrenó en VOD dentro de los Estados Unidos el pasado 29 de junio, aunque todavía no hay información sobre cuándo saldrá n formato físico.

Sinopsis:

En un aterrador mundo post-apocalíptico dominado por pandillas que se encuentran divididas en mortales facciones, un matrimonio cruza de manera desesperada los Estados Unidos en un viaje que los empujará hasta sus límites en la búsqueda de un lugar seguro para sobrevivir.



Comentarios generales:

Año con año salen cientos de películas de todo tipo, pero son pocas aquellas que logran generar un interés inmediato una vez que se dan a conocer. En ciertos casos es gracias a la excelente labor de publicidad o porque su premisa luce novedosa; sin embargo, en ocasiones también hay algunas que no parece que tengan nada especial y aún así te llaman poderosamente la atención sin saber exactamente el motivo, lo cual fue mi caso con The Domestics.

Un trabajo con el que Nelson nos ofrece algo que podría describir como una mezcla entre “Mad Max” y “The Purge” sin demasiada sustancia, en donde se trata de condensar lo más que se pueda todo lo que tenga que ver con los orígenes de este mundo post-apocalíptico para centrarse específicamente en la decadencia y la violencia que esto trajo consigo. Ocasionando así que el espectador tenga un conocimiento básico de la situación dentro de este viaje que va generando muchas preguntas sin respuesta que, al menos durante el primer acto, se dejan pasar por la excentricidad que rodea a la historia y porque las cosas avanzan con un ritmo caótico que difícilmente deja momentos para realizar análisis más a fondo.

Lo malo es que esto no es suficiente y con el pasar de los minutos se empieza a hacer evidente que lo que vemos no es más que un entretenido espectáculo visual que podía haber dado mucho más con un poco de profundización. Ya que todo el tema de las facciones en verdad es interesante por las peculiaridades que manejan, pero resulta prácticamente imposible poder entender qué diablos es lo que ocurre cuando no te explican en lo absoluto sus motivaciones (salvo por la que viene implícita en el nombre de una de estas).

A pesar de esto también se debe de decir que las cosas nunca se vuelven aburridas y la película avanza con una dinámica agradable que se ve complementada con un incremento gradual de la sangre que dejará satisfecho a más de uno. Además de que se empieza a desarrollar de mejor manera la complicada relación entre los protagonistas, en la cual incluso podemos ver cómo se da un cambio en los roles al momento de lidiar con los peligros.

La parte final la encontré bastante entretenida. Siguen sin existir respuestas con respecto a los orígenes u otras cuestiones que se fueron desenvolviendo durante los minutos previos, pero toda la acción y violencia se magnifican para ofrecer un cierre con mucha fuerza que no te deja con la sensación de vacío que hubieras imaginado.

En cuanto a las actuaciones tanto Kate Bosworth (Nina) como Tyler Hoechlin (Mark) no lo hacen mal, van de menos a más en su búsqueda por la química como pareja y la logran encontrar en el momento justo; además de que cuentan con la ayuda de un competente reparto secundario. La producción es de buena factura: el trabajo de fotografía cumple, la dirección de arte es sólida, tiene un buen score, el trabajo de sonido está muy bien cuidado, los efectos (prácticos en su mayoría) son de primer nivel y la labor de maquillaje cumple.

Opinión final: The Domestics está entretenida. Película palomera para pasar el rato y ver mucha violencia.

Ojometro:
***