sábado, 3 de septiembre de 2016

Crítica: Regression (2015)


Película escrita y dirigida por Alejandro Amenábar (The Others). Se estrenó en cines a finales del año pasado en España, otras partes de Europa y Canadá, mientras que en los Estados Unidos llegó de manera limitada a inicios de 2016; recaudando una muy discreta cifra de $17,6 millones de dólares a nivel mundial en taquilla. También ya se encuentra disponible en formato físico y digital.

Sinopsis:

Después de que la joven Angela Gray (Emma Watson) fuera violada por su padre, el detective Bruce Kenner (Ethan Hawke) tendrá que iniciar la investigación para inculparlo. Sin embargo, en el proceso se encontrará con evidencia que podría guiar a la captura de un culto satánico que ha causado temor por toda la nación.



Comentarios generales:

La verdad es que Regression era una película que tenía en el radar desde hace mucho tiempo, pero al considerar que su elenco era lo suficientemente atractivo como para obtener una distribución decente mejor espere de manera paciente para verla en el cine. Lamentablemente eso nunca se pudo dar debido a que no se ve como para cuando llegué a México, así que estando ya en otros formatos la vi con bastante interés, aunque al final me he quedado con un sabor de boca un tanto agridulce.

Ciertamente los elementos para ver una buena película están ahí, ya que Amenábar se encarga de construir un misterio sólido durante el primer acto; uno en donde se toma su tiempo para ir desmenuzando un suceso siempre terrible que, relato a relato, luce cada vez más perturbador. Algo que beneficia mucho para establecer el tono oscuro de la historia y las circunstancias extrañas que la rodean para que así el espectador no se sienta muy seguro sobre qué es exactamente lo que está viendo, sobre todo porque es en este punto cuando no se tiene una línea clara entre la realidad y la ficción. Además de que se realiza un muy buen trabajo para mantener cierta expectativa para cuando finalmente aparezca el personaje interpretado por Emma Watson, quien indudablemente es uno de los principales atractivos.

El problema llega justo cuando se entra en el segundo acto, a partir de aquí empieza a sentirse que las cosas no tienen un progreso constante gracias a que se le da muchas vueltas a los mismos puntos con una ligera integración de aspectos visuales llamativos por medio de sueños cuyo propósito es agregarle algo de impacto. Lo cual hasta cierto punto se da, sin embargo, al avanzar las acciones de manera tan lenta dicho impacto pasa completamente de largo al revolverse con toda esta serie de pistas que no llevan a ningún lado y que vuelven la película realmente aburrida; en especial cuando en determinado momento te revelan algo que hace el personaje de Angela que básicamente termina con todo el misterio.

Provocando así que la parte final sea bastante mala debido a que es cuestión de lógica saber qué es lo que paso o quien fue el verdadero responsable de todo, lo cual le quita interés de inmediato; esto a pesar de que el director hace el intento por crear un despiste desesperado. Además, tampoco ayuda ese desenlace digno de episodio de cualquier serie de televisión policíaca que no deja ningún tipo de pago satisfactorio.

En cuanto a las actuaciones solo puedo decir que Hawke y Watson están bien, en general la película está bien actuada, pero no hay nada verdaderamente sobresaliente. La producción si es de primer nivel: el trabajo de fotografía es estupendo, la dirección de arte está bien cuidada, el score me pareció bastante bueno, el trabajo de sonido cumple y toda la cuestión de efectos/maquillaje es discreta.

Opinión final: Regression no está mal, pero nunca deje de sentir que le faltó “algo”. No creo que sea un desperdicio, aunque definitivamente es una película que amaran u odiaran por igual.

Ojometro:
***