martes, 5 de septiembre de 2023

Crítica: ZOM 100: A Bucket List of the Dead (2023)

Adaptación del manga del mismo nombre, la cual está dirigida por Yusuke Ishida y escrita por Tatsuro Mishima. Se estrenó a nivel mundial el pasado 3 de agosto por medio de Netflix.

Sinopsis:

Akira Tendo (Eiji Akaso) es un joven empleado de oficina que es explotado por su jefe, trabaja horas extra y no tiene vida propia. Aunque un día descubre que para volverse a sentir vivo lo único que necesitaba era que iniciara un… ¿apocalipsis zombie?


Comentarios generales:

A pesar de que he escuchado sobre el manga, la verdad es que no lo he leído y por ello mi conocimiento sobre esta adaptación es muy limitado, así que evidentemente no puedo saber si es fiel o no al material base. Aunque lo que si podía saber con tan solo ver el trailer es que ZOM 100: A Bucket List of the Dead no iba a ser una experiencia común y en definitiva causaría opiniones divididas gracias a su manera de lidiar con la temática zombie, lo cual fue lo que pasó.

Y es que lo traído por Ishida es una historia de zombies muy ligera en la que estos tienen poca relevancia y en la que el nivel de tolerancia hacía la personalidad extravagante de nuestro protagonista resultará fundamental para poder disfrutarla o de plano detestarla, sobre todo durante un primer acto en donde él es el principal punto de diferenciación dentro de este mundo apocalíptico que no tiene nada distinto a otros tantos que ya hemos visto. Donde su actitud positiva e ingenua es el medio para ir construyendo momentos cómicos que en ocasiones funcionan y en otras no tanto, provocando así que exista cierto tedio desde muy temprano dado a que pasada la novedad de la lista no parece que las cosas vayan hacia ningún lado.

Algo que va cambiando poco a poco una vez que Akira empieza a interactuar con otros personajes de manera continua, no solo porque con ello se integra de manera más relevante a los zombies en ciertas escenas de acción, sino también porque Kencho y Shizuka hacen que su actitud se vuelva más digerible sin que se altere demasiado el tono ligero que vemos desde el inicio. Logrando con esto que sus metas vayan evolucionando y se vuelvan más significativas a pesar de su simplicidad, aunque esto conlleva a que una vez más entremos a terrenos demasiado pasivos en los que ocurren pocas emociones y, peor aún, se sienta que el tiempo de duración es más largo de lo que debería.

Ante esto los últimos 35 minutos quedan en una posición compleja y más cuando se muestra que se retomará la problemática inicial de Akira; sin embargo, a pesar de todo logran sacarlos adelante. En parte porque el ritmo se vuelve ágil, pero principalmente por la presentación de una de las criaturas zombie más ridículas que recuerde y que entre lo absurdo de su propia naturaleza termina añadiéndole un toque de acción importante al desenlace para que por lo menos no te deje totalmente indiferente.

Las actuaciones son algo complicado de analizar porque están pensadas para imitar lo que sería una adaptación en anime, exagerando el comportamiento de los personajes al extremo y subiendo el tono de voz de manera importante. Objetivo que logran, pero la verdad es que Eiji Akaso puede llegar a desesperarte muy rápido y, salvo por una excepción (Mai Shiraishi como Shizuka), el resto del elenco es similar en ese sentido.

Mientras que en producción tenemos una factura cuidada: el trabajo de fotografía es bueno, la dirección de arte cumple, el score resulta agradable, el trabajo de sonido es sólido, los efectos no están nada mal y la labor de maquillaje es de muy buen nivel.

Opinión final: ZOM 100: A Bucket List of the Dead está ok. Comedia de zombies extravagante que causará división, pero no está de más checarla.

Ojometro:
***