martes, 1 de marzo de 2016

Crítica: Home (2016)


Película dirigida por Frank Lin (Hysteria), quien además comparte créditos como co-escritor del guión junto a Jeff Lam. Se estrenó en VOD y DVD dentro de los Estados Unidos este 1 de marzo, aunque no hay información sobre si saldrá en otros mercados.

Sinopsis:

Carrie (Kerry Knuppe) es una chica extremadamente religiosa cuya madre se ha declarado lesbiana y se ha casado con otra mujer con la que tiene una hija. Ahora ella se ve forzada a mudarse a una nueva casa con personas que simplemente no puede aceptar; aunque sus problemas alcanzarán un nuevo nivel cuando tenga que cuidar a su hermana mientras ocurren aterradores eventos dentro de su hogar que la obligarán a superar su miedos y creencias.



Comentarios generales:

El número de películas del que uno puede llegar a tener conocimiento es muy amplio, pero aquellas que llaman tu atención desde un inicio son pocas y en el caso de Home ciertamente uno no contaba con muchos elementos como para entusiasmarse hasta que veía el nombre de Heather Langenkamp. Cierto, la premisa resultaba algo interesante por el conflicto religioso; sin embargo, el hecho de ver a la protagonista de “A Nightmare on Elm Street” después de tantos años era por mucho lo más atractivo, a pesar de que prácticamente fuera un timo.

Esto porque Lin y Lam nos traen una historia en la que su personaje es prácticamente irrelevante, limitando su participación a unos cuantos minutos en donde se pretende generar el aspecto polémico de la película por medio del conflicto que vive Carrie gracias a sus creencias. Algo que ciertamente no se me hizo raro considerando que es el punto central, pero este es tratado de manera tan liviana que al final de cuentas importa poco. Realmente nunca se atreven a profundizar sobre el tema y mejor optan por acelerar las cosas para ir convirtiendo poco a poco esta historia en una mucho más convencional sobre casas poseídas cuyo principal sustento son los ruidos extraños.

Lo cual es lo único mínimamente ligado al terror que podrán encontrar durante todo el segundo acto y que para colmo se vuelve cansino después de unos cinco minutos (máximo diez) debido a que la película se queda atascada en una dinámica de sustos fáciles por medio de sonidos al por mayor. Aunado a esto, también está el hecho de que el ritmo utilizado no es el mejor debido a que todo avanza de manera exageradamente lenta y, en varias ocasiones, sin rumbo aparente.

Es como si cada situación estuviera metida con calzador para tratar de añadirle sustancia, forzándolas a desarrollarse de manera express sin que logren conformar una cadena de sucesos lo suficientemente sólidos como para construir algo de tensión que pueda explotar de manera efectiva durante los últimos minutos.

La parte final es la única en donde se logra establecer un verdadero peligro y (mínimos) momentos de terror que habían brillado por su ausencia. Además, el desenlace resultó ser mucho más elaborado de lo que esperaba.

De las actuaciones ciertamente Knuppe no lo hace mal considerando lo poco que le dan para trabajar, mientras que Langenkamp casi no aparece en pantalla y sin duda terminarán odiando a la niñita. La producción es muy limitada: el trabajo de fotografía es aceptable, cuenta con un score cumplidor (con un estilo de show de TV muy marcado), el trabajo de sonido ciertamente es bueno y los efectos especiales lucen como si fueran de finales de los 90s.

Opinión final: Home es una película del montón. Realmente no tiene nada destacable y su punto de venta es totalmente desperdiciado.

Ojometro:
**