jueves, 5 de junio de 2014

Crítica: Malignant (2014)


Película escrita y dirigida por Brian Avenet-Bradley (Dark Remains). Se estrenó el pasado 23 mayo dentro de los Estados Unidos vía VOD e iTunes; aunque por lo que he visto también ha tenido algunas exhibiciones limitadas en cines.

Sinopsis:

Después de la muerte de su esposa, Allex (Gary Cairns) lidia con su pérdida hundiéndose en el alcohol. Él no parece muy preocupado por curar dicha enfermedad, pero lo que no sabe es que un misterioso científico lo convertirá en su sujeto de pruebas para un experimento con el cual pretende curarlo.



Comentarios generales:

Avenet-Bradley en esta ocasión nos trae un thriller muy ligero, uno que le tira más a ser un drama psicológico que otra cosa y cuya mayor virtud es sin duda mostrar un poco más de sustancia dentro de una historia que bien pudo irse fácilmente por el camino de la sangre o violencia extrema. Esto porque en Malignant podemos presenciar el proceso por el que atraviesa el personaje de Allex de manera muy detallada: desde el dolor y la prácticamente nula asimilación de la pérdida de su esposa, hasta su absoluta perdición por la bebida; así como su total desinterés por sobreponerse de esta, incluso si esto tiene consecuencias fatales tanto para él como para otras personas.

El problema viene en que todo este análisis hace que los primeros 40/45 minutos sean en verdad pesados para el espectador (debo de admitir que pestañee al menos un par de veces) al convertir a la película en una de un solo personaje y que en general no muestra demasiadas cosas para que uno sienta simpatía hacia este; simplemente no te intriga demasiado todo lo que le ocurre e incluso uno lo encuentra como alguien extremadamente distante, a pesar de que aparece en todas las escenas. Igualmente, su forma de lidiar con los eventos que son producto de sus propios actos no te producen mucho cuando el propósito general es pasar de sentir cierta pena por él a detestarlo en determinado grado y en gran parte se debe a que estos son mostrados con una pasividad abrumadora, sin ningún tipo de valor de shock.

A esto también hay que agregarle que los detalles sobre el experimento en si son muy limitados. Uno sabe más o menos de que va el asunto, pero realmente nunca se llega a profundizar demasiado en un aspecto cuya complejidad o excentricidad que merecía mucha más atención. 

La parte final está bien. Definitivamente le falta fuerza y una explicación sólida para un pequeño suceso que queda completamente en el olvido, pero en general me parece que era la única conclusión posible para hacerte sentir “bien” por el personaje de Allex.

En las actuaciones debo de decir que Gary Cairns me pareció bastante frustrante debido a que muestra exactamente la misma expresión en toda la película y eso no ayuda; mientras que Brad Dourif está en su rango acostumbrado. La producción es sumamente pequeña: tiene un trabajo de fotografía decente, una dirección de arte muy meh! y efectos limitadísimos.

Opinión final: Malignant no es tan mala, pero te deja al final muy poco. Típico trabajo que no perdurará mucho en nuestra memoria. 

Ojometro:
**

lunes, 2 de junio de 2014

Crítica: Demon Legacy (2014)


Primer largometraje del director Rand Vossler, cuyo guión fue escrito por Tracy Morse. Salió a la venta directamente en DVD el pasado 19 de mayo, aunque de momento parece tener una distribución bastante limitada.

Sinopsis:

Cinco amigas se reúnen en una remota cabaña localizada en la montaña. Todo es diversión hasta que por medio de una sesión con la tabla Ouija liberan accidentalmente a un ente maligno cuyas intenciones son las de acabar con la humanidad.



Comentarios generales:

Mientras uno ve Demon Legacy no puede evitar el pensar que simplemente hay películas que no deben de salir a la luz una vez pasado cierto periodo de tiempo desde su filmación, ya que corre el riesgo de que esta se sienta vieja. Situación que ocurre con este trabajo cuya filmación fue en 2008/2009.

¿Se trata de una historia genérica? Si. ¿Tiene absolutamente todos los clichés posibles? Si. ¿Tiene sexys protagonistas? Si. ¿Creo que eso es malo? No precisamente.

Sin embargo, en esta ocasión lo que Vossler presenta es algo que difícilmente puede considerarse como destacado gracias a que todo el tiempo la película se siente carente de alma, de ese algo que durante algún determinado periodo de tiempo la haga diferente, por más breve que haya sido. Ya que los primeros 30/35 minutos se limitan a mostrarnos a cinco chicas que se cuentan sus problemas, se hacen bromas, se meten a un jacuzzi, se besan y mucho más cosas que parecen no llevar a ningún lado hasta que abruptamente llega una tabla Ouija ha desatar el caos sin dar realmente mayores detalles.

Esto lleva a la que es la parte más sólida del metraje, unos 15 minutos a lo mucho en donde se logra encontrar un buen ritmo y una serie de situaciones que te sacan del tedio provocado por el inicio; con la aparición de algunos demonios peculiares (cuya conexión con la tabla Ouija nunca es revelada), violencia y persecuciones. Aunque una vez pasado este lapso la película cae nuevamente en un hoyo del cual ya no puede salir, especialmente porque integran nuevos personajes sin ningún tipo de justificación para poder tener más muertes en pantalla y porque se nota claramente que llegado a este punto ya no sabían qué diablos hacer para lograr que se alcanzara la hora y media de duración al darle muchas vueltas a un mismo punto.

El final es totalmente anti climático. Le quieren añadir un giro “impactante”, pero dado a que carece de fuerza simplemente no funciona.

Las actuaciones son bastante pobres en términos generales: todas las actrices se sienten forzadas en sus roles, salvo cuando varias de estas se convierten en demonios. La producción es muy limitada (lo cual no es raro al saber que tuvieron que recurrir a Kickstarter para terminar la post producción), lo mejorcito son algunos efectos y el sonido; aunque el trabajo de maquillaje deja mucho que desear.

Opinión final: Demon Legacy no es exageradamente mala como algunos otros trabajos independientes, pero eso no la convierte en algo digno de ver.

Ojometro:
**

sábado, 31 de mayo de 2014

Crítica: Las brujas de Zugarramurdi (2014)


Película dirigida por Álex de la Iglesia, quien además es co-escritor de la misma junto con Jorge Guerricaechevarría. Se estrenó en cines a finales del año pasado en España y aquí en México llegó a inicios del 2014; mientras que en Estados Unidos solo ha estado disponible en festivales.

Sinopsis:

Después de robar una casa de empeño, José (Hugo Silva) y Antonio (Mario Casas) huyen de las autoridades por medio de un taxi ocupado. Su plan es cruzar la frontera hasta Francia, pero en el camino llegan al pueblo de Zugarramurdi; donde se toparán con una familia de brujas que los esperan como parte de una festividad en la cual ellos forman parte del banquete.



Comentarios generales:

Mentiría si dijera que soy gran fan del director vasco, casi todas sus películas terminan teniendo algunos detalles que por lo regular hacen que su filmografía no me entusiasme demasiado y cuando me enteré de este proyecto la verdad no esperaba mucho. Era como lanzar una moneda al aire y por ello la vi con mucho escepticismo; sin embargo, el resultado en esta ocasión fue totalmente opuesto a lo que esperaba.

Esto gracias a que en Las brujas de Zugarramurdi vemos el regreso de De la Iglesia a sus raíces o, al menos, donde recobra el espíritu de sus primeros filmes al combinar de manera más que acertada humor, terror y espectacularidad. Brindándonos así un trabajo en el cual desde la primera escena nos envuelve dentro de un ritmo frenético como pocos para no soltarnos, generando así unos primeros 30/40 minutos de primer nivel llenos de comedia en donde no solo se limita a provocarnos risas mediante diálogos, sino también por medio de algunas imágenes que quedarán grabadas en la cabeza del espectador por un lapso de tiempo importante (acuérdense de esto: Bob Esponja).

Después viene la aparición de las brujas, entrando así al terreno del terror, pero sin dejar de lado lo cómico. Sin duda otra parte caótica esta del aquelarre, llena de la acción necesaria que como dicen los gringos esta over the top, pero cuyo propósito es ese mismo para seguir golpeándote con el dinamismo y no dejarte descansar ni un solo minuto; añadiéndole elementos que profundizan mucho más las acciones “oscuras” de las brujas sin ningún tipo de complejos. Aunque también cuenta con un pequeño punto bajo al presentar un romance construido en no más de cinco minutos.

El otro momento en donde flaquea un poco es durante la parte final, lo cual no es nada nuevo en las películas del director. Y no es que le baje muchos puntos, pero aquí es cuando la locura me parece que se desborda y no saben cómo controlarla del todo; generando así una sobre saturación importante de situaciones que no terminan por acoplarse de manera fluida.

A nivel actoral es bastante buena, tiene un casting amplio y de primer nivel con algunos actores que se salen por completo de lo que nos tienen acostumbrado con resultados muy positivos; así como un trió conformado por Carmen Maura, Terele Pávez y Carolina Bang (ah, la sexy Carolina Bang) con una química muy disfrutable. En el lado de la producción tiene una nota alta: el trabajo de fotografía es muy bueno, la dirección de arte es excelente, el trabajo de sonido esta ok, el score es atrapante y las caracterizaciones, si bien no son espectaculares, si son sólidas. Lo único no tan convincente son algunos efectos especiales en la parte final.

Opinión final: Las brujas de Zugarramurdi no creo que sea para todo el mundo, pero yo la encontré muy divertida de principio a fin. Bastante recomendable.

Ojometro:
*****

jueves, 29 de mayo de 2014

Crítica: Motel Hell (1980)

Película dirigida por Kevin Connor (The House Where Evil Dwells) y escrita por Robert & Steven-Charles Jaffe. Se estrenó en 1980 logrando una decente recaudación en taquilla de un poco más de 6 millones de dólares y actualmente se puede conseguir en un DVD que MGM lanzó en el 2002 como parte de sus paquetes de Midnite Movies, aunque a partir de agosto de este año estará disponible en Blu-ray gracias a Scream Factory.

Sinopsis:

Vincent Smith (Rory Calhoun) y su hermana Ida (Nancy Parsons) viven en una granja que además cuenta con un hotel. Sin embargo, su principal fuente de ingresos es la carne ahumada que este vende y que es considerada la más deliciosa del área; cuyo ingrediente secreto es carne humana.

Comentarios generales:

1980 es un año particularmente interesante dentro del género gracias a que es sin duda la etapa transición entre la creatividad de los 70s y la sobre-explotación de los 80s, lo cual hace que de este veamos algunos trabajos con un sello muy particular que difícilmente pudo ser replicado en los años posteriores y Motel Hell es tal vez uno de los ejemplos más claros de esto.

Es obvio que en parte está inspirada en TCM, pero lo que nos trae Connor no podría estar más alejado del clásico del 74 y genera su propio sello personal dentro del mundo del canibalismo con una historia ciertamente más ligera en la forma de presentárnosla, siendo más una sátira; donde el punto central es la carne humana claro, pero en lugar de darnos una perspectiva un tanto grotesca o perturbadora opta por tomar un camino un poco más chusco o cuasi inocente con los personajes pueblerinos. Un aspecto que sin duda le quita impacto visual a la película, pero por otra parte logra brindarle una sensación de locura bastante peculiar al añadirle una frialdad a los actos de los asesinos que está justificada en una creencia meramente personal de su parte, la cual además se ve amplificada con los extraños métodos de preparación de la carne ahumada.

Y es que si uno se pone a analizar a detalle ciertamente no encontrará muchas cosas aterradoras; de hecho, el guión en general es bastante pobre, muy básico y los eventos poco a poco se tornan repetitivos, pero es precisamente esa simpleza la que, junto con el tono alegre de dos caníbales que se la pasan sonriendo todo el tiempo, le dan un toque distinto. Además de que su ritmo es lo suficientemente fluido como para poder soportar algunas escenas que se sienten forzadas.

El final es por mucho la parte más intensa de todas. Se podría decir que es lo que más se acopla a los estándares actuales al mostrar una pelea con sierras o un momento que quiere representar cierta esencia “zombie” a su modo.

Calhoun y Parsons están realmente geniales en sus roles, te los crees por completo y eso mismo hace que el resto del elenco quede en un segundo plano. La producción es decente; aparentemente su presupuesto fue de unos tres millones de dólares, pero incluso se nota mucho más modesta: gran parte esta filmada en exteriores, casi no hay trabajo de maquillaje y los efectos son muy básicos. Aunque debo de decir que está bastante bien ambientada, la dirección de arte cumple a la perfección su cometido.

Opinión final: Motel Hell es una película que deben de ver al menos una vez. Especialmente si están interesados en la evolución del género dentro de una etapa tan importante.

Ojometro:
***