lunes, 20 de marzo de 2017

Crítica: Los Parecidos (2016)


Película escrita y dirigida por Isaac Ezban (El Incidente). Se estrenó de manera limitada en cines dentro de México en octubre del año pasado y un mes después lo hizo en VOD dentro de los Estados Unidos. Todavía no se sabe cuándo saldrá en formato físico.

Sinopsis:

En la noche lluviosa del 2 de octubre de 1968, ocho personas se encuentran esperando en una remota estación de autobuses uno que los lleve a la Ciudad de México, pero durante su espera todos empezarán a experimentar un aterrador y extraño fenómeno.



Comentarios generales:

El cine de terror mexicano en años recientes ha dado muestras de que quiere resurgir y aunque todavía queda mucho camino por recorrer las señales son, por lo menos, alentadoras. Sin embargo, los problemas siguen siendo demasiados y probablemente el más crítico de todos es el tema de la distribución; uno que Los Parecidos sufrió como pocas películas al contar con una que rayó en lo ridículo por lo limitadísima que fue, lo cual provocó que prácticamente nadie pudiera verla cuando estuvo en cines y la verdad es una pena porque es de lo mejor que ha dado el cine nacional en mucho tiempo.

Antes que nada hay que decir que lo que nos trae Ezban es una combinación de ciencia ficción con terror que en todo momento muestra que su principal influencia es The Twilight Zone al presentar una estética y estructura que, al menos de inicio, se apegan muchísimo a las del legendario programa de televisión. Aspecto que sin duda apega a la nostalgia, pero utilizando como base la paranoia ocasionada por el movimiento estudiantil de 1968 esta historia poco a poco va obteniendo su propia identidad al presentar personajes llamativos a quienes envuelve en una situación por demás peculiar que te va absorbiendo de manera efectiva con el paso de los minutos no solo por medio de la intriga que generan todos los extraños sucesos, sino también por la increíble atmósfera que se logra construir.

En general la película avanza de manera fluida y, salvo por breves lapsos en donde la trama se vuelve algo enredada, siempre logra proporcionar el misterio suficiente para que el espectador quiera saber más con respecto a lo que está ocurriendo. Todo bajo un tono un tanto oscuro, pero que por momentos también logra proporcionar un humor particular por medio de situaciones exageradas y en especial por algunos elementos de la producción como los efectos o el maquillaje que le brindan un toque acorde a la época en la que se desarrolla; además de que involucran cierto gag fundamental que no pienso revelar por aquí.

La parte final es gratificante porque dicho gag es finalmente explicado y todas las piezas del rompecabezas empiezan a caer en su lugar de manera natural para provocar un desenlace bastante loco sí, pero que en el fondo resulta aterrador. Igualmente, juega con la teoría de que lo ocurrido está ligado con otras tragedias que sucedieron en México y el mundo; así como confirmar que tiene conexión con el trabajo previo del director.

Con respecto a las actuaciones puedo decir que son sólidas, tal vez en ciertos puntos un tanto exageradas, pero cumplen perfectamente el propósito general. La producción es de buena nota: el trabajo de fotografía es excelente, la dirección de arte bien cuidada, el score es agradable, el trabajo de sonido es impecable, los efectos en su mayoría son prácticos bien hechos y la labor de maquillaje resulta un tanto cómica, pero eso era parte de lo que querían lograr.

Opinión final: Los Parecidos es sumamente disfrutable. Una propuesta fresca que el cine de terror mexicano necesitaba.  

Ojometro:
****

sábado, 18 de marzo de 2017

Crítica: Arbor Demon (2017)


Película dirigida por Patrick Rea (Nailbiter), quien comparte créditos junto a  Michelle Davidson como co-escritor del guión. Se estrenó en VOD dentro de los Estados Unidos el pasado 3 de febrero y su salida en formato físico está anunciada para el 18 de abril.

Sinopsis:

Una mujer aventurera que le guarda un importante secreto a su esposo insiste en que ambos vayan de campamento al bosque para tratar de reconectarse. Estando ahí  presencian como “algo” mata a un grupo de cazadores y este evita que puedan salir de su tienda de campaña; iniciando así una peligrosa revelación de secretos e historias fantásticas que los pondrán a pensar sobre cuál es la verdadera amenaza.



Comentarios generales:

No tuvo que pasar mucho tiempo para que viera otra película localizada en un bosque, aunque en esta ocasión se trataba de una de la que realmente tenía poco conocimiento y eso me generaba más interés. Sin embargo, con Arbor Demon las cosas no fueron muy distintas, ya que más allá de contar con un elemento peculiar que le da algo de originalidad, se trata de otro trabajo con los problemas habituales.

Rea construye fundamentalmente la primera mitad de la película bajo un concepto básico: una pareja completamente fuera de sintonía. Integrando alguno que otro elemento para dejar en claro que es una película de terror, pero toda su atención en esta parte se centra en hacer de la relación el foco de atención a base de puro dialogo y a la evidente tensión que existe entre ambos con respecto al tema por el cual Dana guarda el secreto; uno que no es difícil de descubrir, pero que el director trata de hacerlo mucho más evidente bajo el propósito de establecer la relevancia que jugará más adelante.

Todo lo anterior no suena muy emocionante, pero la verdad es que la dinámica entre ambos actores ayuda que las cosas fluyan de manera rápida y se sientan muy naturales; aunque al alejarse tanto del camino del terror la falta de interés se empieza a hacer presente. Lo cual termina afectando la revelación de la amenaza debido a que el impacto que se supone debería de tener se siente muy pequeño y eso empeora cuando se decide integrar a un tercer personaje para regresar nuevamente a la dinámica centrada en el dialogo que no ayuda a tener grandes avances gracias a que es a partir de aquí cuándo se empiezan a jugar con temas fantásticos mucho más complejos que no pueden ser mejor explotados gracias a la limitante que representa el escenario. Provocando así una falta de identidad evidente.

Los últimos 15 minutos son bastante potentes y el hecho de que las criaturas finalmente sean expuestas le añade ese toque fantástico con el que se estuvo jugando en los minutos previos. Además explican de manera no tan confusa los motivos por los cuales se dieron todos estos sucesos y eso ayuda que el final sea más efectivo.

Las actuaciones no están nada mal, Fiona Dourif (Dana) y Kevin Ryan (Charles) tienen muy buena química y es gracias a eso que la primera mitad no es insufrible; mientras que Jake Busey (Sean) no desentona en lo absoluto. La producción es pequeña: el trabajo de fotografía está ok, el score cumple, el trabajo de sonido es efectivo, los efectos son muy simples y la labor de maquillaje es de buena factura en la caracterización tan extraña de la amenaza.

Opinión final: Arbor Demon es decepcionante. Una película que nunca sabe por qué apostar  y termina cayendo en lo genérico por eso.

Ojometro:
**

martes, 14 de marzo de 2017

Crítica: Devil in the Dark (2017)


Película dirigida por Tim Brown (The Cradle) y escrita por Carey Dickson. Se estrenó directamente en VOD el pasado 7 de febrero dentro de los Estados Unidos, aunque todavía no hay información sobre si saldrá en formato físico o si llegará a otros mercados.

Sinopsis:

Adam (Robin Dunne) y Clint (Dan Payne) son dos hermanos distanciados que tratan de mejorar las cosas al salir durante un fin de semana de cacería en la Columbia Británica, pero su reunión se verá afectada cuando una misteriosa presencia los empiece a perturbar dentro del bosque.



Comentarios generales:

En este punto sería absurdo quejarme sobre el hecho de situar historias en el bosque debido a que es un escenario que por años ha sido recurrente dentro del género, pero la verdad es que últimamente  las películas que se realizan dentro de bosques por lo regular me generan más dudas que certezas. Esto porque la mayoría siguen un patrón similar que da la sensación nadie se atreve a desafiar por miedo a arruinar una fórmula simple que facilita muchas cosas y tristemente Devil in the Dark no será una de las primeras en hacerlo.

Y es que lo que nos trae Brown es más un drama que una película de terror, al menos durante casi 50 minutos. Donde gran parte de su atención se centra en ir desarrollando a fuego muy lento esta tensa relación entre hermanos que básicamente son dos desconocidos al inicio y que por medio de distintas conversaciones, así como de algunos flashbacks, es como el espectador debe de entender los motivos detrás de todo esto. Lo cual debo de decir que si logra brindar alguno que otro momento gracioso, pero en general hace de toda la primera mitad bastante aburrida debido a que los avances son mínimos y el director no muestra intención alguna para cambiar el ritmo.

Provocando así que las cosas no mejoren de manera sustancial ya avanzados los minutos y que en algún punto todo se limite a presentar lo mismo en repetidas ocasiones mientras se trata de dejar en claro que la historia, más que centrarse en un monstruo dentro del bosque, es sobre estos dos hermanos y los resentimientos que han guardado por años. Situación que no encontré como algo desastroso, pero que nunca logra funcionar ante la falta de contenido y porque realmente la mezcla con el tema de la criatura que los asecha nunca se siente orgánica, sino más bien como dos ideas distintas que decidieron acoplar para ver si salía algo interesante.

La parte final presenta una mayor intensidad, pero todo resulta tan confuso que realmente uno no puede involucrarse de lleno con la situación porque nunca te brindan una explicación sólida con respecto a lo que ocurre y eso termina por afectar el producto en general. Especialmente el impactante suceso en la última escena; que te deja muy en claro que falto “algo”, pero no sabes qué. 

Las actuaciones no están mal, tanto Dunne como Payne logran lo necesario para hacer bastante creíble su tensa relación y con ello volver un poco más digerible gran parte de la película. La producción está bien para ser un filme independiente: el trabajo de fotografía cumple, la dirección de arte es simple, cuenta con un buen trabajo de sonido y la labor de maquillaje apenas se puede apreciar.

Opinión final: Devil in the Dark es aburrida. Un filme independiente con buenas intenciones que falla en tratar de generarte interés. 

Ojometro:
**

domingo, 12 de marzo de 2017

Top 10: Mejores episodios de Buffy the Vampire Slayer


Este pasado 10 de marzo se cumplieron 20 años del estreno del primer episodio de Buffy the Vampire Slayer, una de las series más influyentes e importantes del género de terror. 

La cual, junto a Blade y From Dusk Till Dawn, marcó una evolución fundamental a finales de los 90s para entender el cine de vampiros como lo conocemos hoy en día y que a pesar de tener 14 años de haber terminado sigue siendo muy recordada por los fans; quienes todavía no pierden la esperanza de poderla ver de regreso algún día.

Así que para celebrar este acontecimiento dejo los que a mi parecer son los 10 mejores episodios de esta legendaria serie.

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Mención honorifica:

- “Tabula Rasa” (Temporada  6, Episodio 8)
- “Becoming: Part 1” (Temporada 2, Episodio 21)
- “Angel” (Temporada 1, Episodio 7)
- “Seeing  Red” (Temporada 6, Episodio 19)
- “The Zeppo” (Temporada 3, Episodio 13)
- “Restless” (Temporada 4, Episodio 22)
- "Doppelgangland" (Temporada 3, Episodio 16)


10.- “Chosen” (Temporada 7, Episodio 22)


Un final que tiene de todo: regreso de personajes, emociones, muertes sorpresivas, una batalla épica y, sobre todo, un desenlace que en verdad se siente como algo por el cual valió la pena seguir la serie por siete largos años.


9.-  “Passion” (Temporada 2, Episodio 17) 


Evil Angel en su máxima expresión para lograr uno de los primeros episodios en verdad oscuros que demostraban que la dirección de la serie iba por un camino distinto al que pensábamos.


8.- "Once More, with Feeling"(Temporada 6, Episodio 7)


Si, el episodio musical no debe de faltar aquí. Uno que pudiera parecer un simple ejercicio pintoresco, pero que en el fondo contiene mucha más sustancia al revelar secretos importantes de todos los personajes.


7.- “The Wish” (Temporada 3, Episodio 9)


Una versión alternativa de Sunnydale más oscura, violenta y salvaje. Donde por primera vez se juega con el “qué hubiera pasado” utilizando al personaje menos evidente y ¡que matan a la mitad del episodio!


 6.- "Graduation Day: Part 2” (Temporada 3, Episodio 22)


Un cierre de temporada espectacular que en cierta manera marca el brinco de la adolescencia a la “adultez” en todos los sentidos para el show y sus personajes. Además de que significó la última aparición de Angel y Cordelia.


5.- “The Gift” (Temporada 5, Episodio 22)


Irónicamente este episodio, que fue diseñado como un posible final definitivo para la serie, terminó siendo el que mejor manejó todo el concepto de lo que significaba ser una cazadora de vampiros con la impactante conclusión de la batalla más importante hasta ese momento para nuestra heroína. 


4.- “Innocence” (Temporada 2, Episodio 14)


Tal vez Innocence sea el episodio más desgarrador de todos gracias a su giro inesperado que nos trajo el renacer de Evil Angel y que presentó por primera vez a una Buffy emocionalmente quebrada ante el hecho de saber que uno de los momentos más felices de su vida desató un peligro para ella, sus amigos y el mundo entero.


3.- “Hush” (Temporada 4, Episodio 10)


Probablemente el episodio más original de toda la serie y también uno de los más tétricos (hola The Gentlemen). El cual se centra en el silencio para obligar a los personajes a actuar de una manera distinta a lo normal y así generar momentos que resultan genuinamente hilarantes de ver gracias a la creatividad mostrada por los escritores.


2.- “Becoming: Part 2” (Temporada 2, Episodio 22)


Un cierre magistral para la que es la mejor temporada de Buffy the Vampire Slayer.

No solo se trata de un episodio que juega con el tema de los grandes sacrificios que en ocasiones se tienen que hacer para salir adelante de una situación adversa, sino que además significó un punto de quiebre para la serie al establecer el tono que manejaría por las temporadas restantes y mandar un claro mensaje de que ya no sería únicamente un simple show de matar vampiros. 


1.- “The Body” (Temporada 5, Episodio 16)


Curiosamente el mejor episodio de la serie es uno que se sale por completo del esquema tradicional; donde la muerte sigue siendo el tema principal, pero en esta ocasión no tiene absolutamente nada que ver con vampiros o demás cuestiones supernaturales. Simplemente un recordatorio de que todos vamos a morir algún día y eso es inevitable.

La escena inicial es desgarradora y por 45 minutos se nos muestra a la Buffy más humana e indefensa posible ante una situación de la cual no tiene control alguno y que ninguna de sus cualidades como caza vampiros podrá resolver.