martes, 2 de mayo de 2023

Crítica: Renfield (2023)

Película dirigida por Chris McKay, cuyo guión fue co-escrito por Ryan Ridley y Robert Kirkman. Se estrenó en cines dentro de los Estados Unidos el 14 de abril y en México el 27 del mismo mes; recaudando hasta la fecha $22.4 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

Renfield (Nicholas Hoult) lleva sirviéndole a Drácula (Nicolas Cage) por siglos sin importar lo degradantes que sean sus órdenes. Sin embargo, ya en el mundo actual empieza a cuestionarse si está listo para tener una nueva vida lejos de su exigente jefe y cortar dicha relación extremadamente tóxica… sin pensar en las brutales consecuencias.


Comentarios generales:

Sin duda alguna la mejor decisión que pudo tomar Universal Studios fue desistir en su búsqueda por crear un universo cinematográfico con los Universal Monsters, simplemente no funcionaron sus múltiples intentos y la verdad era un desperdicio mantener a franquicias que todavía gozan de reconocimiento por parte de los fans atadas a un proyecto sin pies ni cabeza. Por eso el nuevo enfoque personalizado que han adoptado para cada proyecto me parece muy interesante porque no todo tiene que estar siempre conectado y si bien Reinfield no alcanza los niveles magistrales de la película anterior (The Invisible Man), si logra dejar sensaciones positivas.

Y sorprendentemente lo hace siendo una cuasi secuela de “Drácula” de 1931 que toma el riesgo de ser una comedia de terror, lo cual podría haber sido una receta para el fracaso pero en realidad lo que nos presenta McKay logra encontrar un balance ideal para que las cosas funcionen la mayoría del tiempo y eso se nota prácticamente desde el inicio. Donde se establece la compleja relación entre Renfield y Drácula respetando el legado de su historia original mientras se le adapta a los tiempos modernos bajo un tono cómico que encaja perfectamente con la personalidad de nuestro protagonista y lo vuelve alguien más cercano para el espectador debido a que sus cuestionamientos sobre su forma de vida resultan bastante válidos, aunque al mismo tiempo también se nos recuerda que aquí hay cosas más fantasiosas de por medio al presentar escenas de acción que garantizan no solo mucha sangre, sino también un nivel de violencia más elevado del que esperarías.

Brindándole así un ritmo dinámico que ayuda a que la comedia pueda ser digerible incluso en los momentos de mayor simplicidad gracias a que con esto pocas situaciones se extienden más de lo que deberían y por lo mismo el conflicto se desarrolla de manera ágil. Sobre todo durante un segundo acto en el que se empieza a involucrar a la policía y a la mafia de forma más activa con el propósito de añadir sustancia a los problemas morales que se manejan, además de que su presencia sirve como la excusa perfecta para construir secuencias que proporcionen las principales dosis de espectacularidad y así llegar a la parte final con muchísima fuerza.

La cual afortunadamente logran mantener durante un enfrentamiento decisivo que por momentos se puede sentir algo forzado en determinadas cuestiones; sin embargo, estas no evitan que se genere un caos bastante entretenido con el que la sangre siga fluyendo y se exponga una manera de derrotar a Drácula que ciertamente resulta original.

En lo que se refiere a las actuaciones, sin duda nos encontremos con una de las fortalezas del filme debido a que Nicholas Hoult y Nicolas Cage lo hacen muy bien. No solo porque tienen buena química en pantalla, sino que además ambos logran imprimirles un aire extravagante a estos dos icónicos personajes sin caer en lo ridículo y así lograr que se adapten perfectamente al tono predominante manteniendo su esencia.

Mientras que en producción tenemos una factura de calidad: el trabajo de fotografía es bueno, la dirección de arte está muy bien cuidada, el score es buen complemento, el trabajo de sonido espectacular, los efectos son de primer nivel y la labor de maquillaje está muy bien lograda.

Opinión final: Renfield me gustó. Película bastante divertida para pasar un buen rato viendo mucha acción y sangre.

Ojometro:
****

viernes, 28 de abril de 2023

Crítica: Infinity Pool (2023)

Película escrita y dirigida por Brandon Cronenberg (Antiviral, Possesor). Se estrenó en cines dentro de los Estados Unidos a finales de enero y en México hizo lo propio a finales de marzo, mientras que su salida en formato físico se dio el pasado 11 de abril.

Sinopsis:

James (Alexander Skarsgård) y su esposa se encuentran disfrutando unas vacaciones con todo incluido en la isla ficticia de La Tolqa, pero cuando ocurre un accidente fatal la perversa subcultura del resort llena de turismo hedonista, violencia sin sentido y demás horrores sale a relucir.


Comentarios generales:

Ciertamente el ser el hijo de una figura tan respetada como David Cronenberg te va a abrir puertas que otros directores difícilmente tendrán, resulta absurdo negarlo, pero también es cierto que se necesita tener el talento necesario para saber aprovecharlas y no cabe duda que David Cronenberg lo tiene. Ya que su estilo es reminiscente al de su progenitor y por lo mismo cada película suya genera gran curiosidad, siendo Infinity Pool otro ejemplo de eso.

Y es que lo traído por Brandon es una historia que te puede causar de todo menos indiferencia por los temas que toca, aunque probablemente no sea su propuesta más sólida al momento de ejecutar sus ideas en pantalla. 

Iniciando de manera lenta con un primer acto que es un tanto genérico al exponer situaciones que hemos visto en muchas otras ocasiones y con las que uno puede predecir de manera bastante sencilla qué es lo que va a ocurrir debido a que básicamente esta parte se encuentra diseñada para llevar a un acontecimiento especifico que detonará el siempre interesante dilema de Hombre vs. Clon. El cual es el punto de partida para que salgan a relucir las extravagancias por parte del director y ciertamente las sensaciones iniciales con esto son positivas dado a que la intensidad que se imprime es muy agradable y conforme avanzan los minutos empiezan a existir ciertas dudas con respecto a la verdadera identidad de James. 

Sin embargo, durante el segundo acto toda la cuestión hombre/clon poco a poco se vuelve irrelevante debido a que se va dándole más relevancia a los privilegios de la alta sociedad y sus acciones atroces para así explotar determinados elementos visuales que logren proporcionarle impacto a los excesos de este grupo tan detestable de personajes sin que el proceso sea el más agradable dado a que no tardan demasiado tiempo en volverse repetitivos. Algo que no afecta de gran manera al ritmo, pero si hace que la experiencia se empiece a sentir vacía y más larga de lo que debería gracias a la carencia de respuestas en determinadas cuestiones que uno supondría son de gran importancia. 

Aunque también hay que dar crédito por hacer que la parte final por lo menos tenga la fuerza suficiente como para no resultar indiferente y poder implantar una duda razonable con la que el desenlace abierto a la interpretación resulte la opción más lógica de todas.

Sobre las actuaciones hay que decir que Alexander Skarsgård cumple a secas, viéndose opacado por una Mia Goth (Gabi Bauer) que vuelve a demostrar que los personajes mentalmente inestables son su fuerte. Mientras que en producción no hay mucho que recriminar: el trabajo de fotografía es bastante bueno, la dirección de arte está bien cuidada, el score cumple, el trabajo de sonido es limpio, los efectos no presentan demasiada complejidad y la labor de maquillaje es discreta.

Opinión final: Infinity Pool está ok. Película más que nada para fans de Cronenberg que toca algunos temas interesantes.

Ojometro:
***

martes, 25 de abril de 2023

Crítica: Evil Dead Rise (2023)

Quinta entrega de la franquicia, la cual está escrita y dirigida por Lee Cronin (The Hole in the Ground). Se estrenó en cines dentro de México el pasado 20 de abril y un día después hizo lo propio en los Estados Unidos; recaudando hasta la fecha $42.4 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

Ellie (Alyssa Sutherland) y Beth (Lily Sullivan) son dos hermanas distanciadas cuya reunión se ve interrumpida por el despertar de unos despiadados demonios que terminan poseyendo a una de ellas. Ocasionando con esto una brutal batalla por sobrevivir que distorsiona por completo el concepto de la familia.


Comentarios generales:

Evil Dead es una de las mejores franquicias de cine de terror que existen gracias a que se ha logrado mantener vigente durante tantos años con muy pocos proyectos en comparación con otras franquicias importantes y además todos de una calidad elevada que han establecido un estándar que impone cierto respeto. Por ello es que cuando se anunció una nueva entrega que no era secuela y además no contaba con la presencia de Bruce Campbell existieron ciertas dudas de mi parte; sin embargo, Evil Dead Rise me recordó que siempre hay que confiar en Sam Raimi y compañía.

Ya que lo presentado por Cronin no es tanto un reinicio, sino más bien una extensión que pueda abrir nuevos escenarios por su propia cuenta sin que se tenga que ignorar el lore ya construido, aunque al inicio de la película eso puede no ser tan obvio por la forma en la que deciden presentar esta historia en lo que se refiere a la temporalidad.

Lo cual ciertamente hace que el primer acto se pueda sentir algo raro en cuanto a la lógica, pero una vez que se nos presentan a los personajes y se establece la dinámica de familia disfuncional el panorama se esclarece de gran forma para ir construyendo momentos que hagan de la espera por la posesión una bastante entretenida. Sobre todo porque se van insertando pequeñas cosas que añaden sustancia con respecto al Necronomicon (incluso hay una sutil conexión a “Army of Darkness”) y con ello se aumenta la anticipación para cuando esta llegue, algo que se da de una manera por demás espectacular y así dejar claro que lo que está por venir no escatimará en lo absoluto en su búsqueda por dejar su marca.

Y es que una vez que Ellie es poseída el tono se vuelve muy oscuro, estableciéndola así como un demonio sumamente peligroso que en cualquier momento hará algo extremo y gracias a eso el nivel de tensión siempre resulta elevado. Llevando a escenas perturbadoras que juegan tanto con el aspecto psicológico/emocional de los personajes como con el lado visual, manifestando esto último poco a poco por medio de muertes que añaden mucho impacto y que, al combinarlas con la locación, hacen que se tenga una atmósfera claustrofóbica que magnifica todavía más el riesgo existente dado a que vende a la perfección la idea de que no hay escapatoria.

Todo esto bajo un ritmo ágil que no da respiro y hace que el caos se disfrute sin demasiados contratiempos. Dejando listo el escenario para una parte final brutal que de manera sorprendente logra rivalizar en cuanto a la exhibición de litros de sangre con el remake de 2013 por medio de situaciones bastante originales que se mantienen en sintonía con la esencia extravagante de la franquicia y llevan a un desenlace que, si bien es algo predecible, también clarifica el tema de la temporalidad de manera simple.

Sobre las actuaciones en general todo el elenco lo hace bastante bien, aunque es innegable que quienes se llevan los reflectores son Lily Sullivan y Alyssa Sutherland. Con la primera cumpliendo con su rol de nueva heroína expuesta a un tremendo nivel de salvajismo y con la segunda entregando una posesión realmente potente en la que con una sola sonrisa es capaz de perturbar al espectador y generar una sensación de peligro muy elevada.

Y en cuanto a producción nos encontramos con una factura impecable: el trabajo de fotografía es muy bueno, la dirección de arte está bien cuidada, el score es sólido, el trabajo de sonido espectacular, los efectos están muy bien hechos y la labor de maquillaje es de primerísimo nivel.

Opinión final: Evil Dead Rise me gustó mucho. Película violenta y muy sangrienta que sin duda es una nueva gran adición a la franquicia.

Ojometro:
*****

viernes, 21 de abril de 2023

Crítica: The Unheard (2023)

Película dirigida por Jeffrey A. Brown (The Beach House), cuyo guión fue co-escrito por los hermanos Michael y Shawn Rasmussen. Se estrenó en VOD dentro de los Estados Unidos el pasado 31 de marzo, aunque no hay información sobre si saldrá en formato físico.

Sinopsis:

Chloe (Lachlan Watson) se somete a un tratamiento experimental para recuperar su sentido del oído y se va a descansar a la casa de su infancia. Aunque estando ahí empezará a experimentar extrañas alucinaciones auditivas relacionadas con su madre desaparecida varios años atrás.


Comentarios generales:

El cine de terror no está exento de propuestas que giren alrededor de la falta de alguno de los sentidos, pero tampoco suele ser una temática que abunde dentro del género. Así que no es de extrañar que The Unheard llamara la atención porque representaba cierta frescura, aunque el que fuera Shudder quien apostara por ella levantaba las alertas conociendo los altibajos con sus propuesta previas y ciertamente esa reputación negativa no la pudo dejar de lado en esta ocasión.

Ya que lo traído por Brown es una historia con la que pareciera que los hermanos Rasmussen nunca tuvieron una idea fija sobre cómo desarrollarla debido a que el inicio es interesante, pero una vez pasada la novedad todo es una espiral descendente de aburrimiento y predictibilidad. Lo cual es una pena porque la manera en la que se utiliza la sordera de Chloe durante el primer acto hace que se convierta en un personaje que genuinamente te importe, jugando con los sonidos de tal forma que el espectador experimente todo tal como ella misma lo hace al combinar momentos de limpieza auditiva durante su rutina diaria con otros donde existe una distorsión que establece un evidente peligro que te hace suponer que nos encontramos ante algo que jugará con el aspecto psicológico de nuestra protagonista.

Hasta ahí todo va bien, sin embargo, una vez que Chloe recupera su sentido no solo se pierde el atractivo que este proporcionaba a nivel sonoro, sino que además abre paso a algo mucho más convencional al integrar a un asesino que prácticamente de inmediato cambia la dinámica del filme. Esto porque ahora las cosas se centran más en el misterio sobre su identidad y para nuestra mala fortuna resulta evidente quién es el asesino desde muy temprano por el elenco tan reducido que se tiene, provocando con esto que todo lo que tratan de hacer para generar dudas resulte inefectivo y por lo consiguiente exista un estancamiento muy marcado al exponer lo mismo en repetidas ocasiones sin que en ningún momento se logre generar tensión ante el evidente peligro en el que se encuentra Chloe o se profundice sobre el tema de las distorsiones.

Un problema del cual jamás logran salir al dejar que todo siga el rumbo preestablecido, alargando de más un misterio que simplemente no existe y como consecuencia haciendo que las cosas se sientan que avanzan más lento. Incluso durante una parte final en la que se trata de imprimir un poco más de vértigo para añadir una mayor sensación de riesgo, pero para este punto ya nada tiene el impacto necesario y eso mismo hace que el desenlace resulte demasiado intrascendente.

Con respecto a las actuaciones es Lachlan Watson quien carga con todo el peso de la película y, aunque no lo hace mal, el hecho de que su personaje haga lo mismo una y otra vez no le ayuda para ofrecer algo más memorable. Mientras que en producción tenemos cosas interesantes: el trabajo de fotografía es sólido, la dirección de arte no es nada del otro mundo, el score cumple, el trabajo de sonido es limpio y todo lo relacionado a efectos/maquillaje es bastante discreto.

Opinión final: The Unheard es decepcionante. Película larga y aburrida que nunca logra construir un misterio interesante.

Ojometro:
**