jueves, 18 de septiembre de 2014

Crítica: Deliver Us From Evil (2014)


Adaptación del libro Beware the Night que está dirigida por Scott Derrickson (Sinister), quien además es co-escritor del guión junto con Paul Harris Boardman. Se estrenó en cines durante el mes de julio dentro de los Estados Unidos y desde entonces en varios otros países, pero apenas llegó a las salas en México el pasado 11 de septiembre.

Sinopsis:

Ralph Sarchie (Eric Bana) es un oficial de policía en Nueva York que empieza a investigar una serie de perturbadores crímenes. Al inicio nada parece tener sentido, pero cuando se cruza con un sacerdote poco convencional y empieza a unir la pistas entenderá que todo está ligado a fuerzas demoníacas mas allá de su comprensión.



Comentarios generales:

La combinación crimen/horror no es tan fácil de manejar debido a que existe el riesgo de caer en los eternos clichés y fórmulas que muchas veces ya se sienten viejas. Para complicar más las cosas Deliver Us From Evil está basada en supuestos hechos reales, exponiéndola así a un escrutinio mucho mayor del público, pero afortunadamente cayó en las manos del director que mejor sabe llevar esta clase de temáticas.

Ahora Derrickson no nos trae una historia tan original como su último trabajo, incluso por el país donde se lleva a cabo el inicio sin duda a muchos les vendrá a la mente The Exorcist, pero a pesar de eso logra una mezcla de thriller policíaco y posesiones demoníacas muy efectivo.

Evidentemente para ello tiene que recurrir a un camino por demás conocido en donde el escéptico poco a poco se va convenciendo por medio de alguien más sobre la oscuridad que hay detrás de los crímenes, provocando así que los primeros 40/50 minutos pudieran resultar algo pesados para varios ante lo convencional; sin embargo, gracias al ritmo que le imprime, a la ligera comedia, a la creación de imágenes de impacto y al uso de sustos fáciles personalmente nunca lo vi como un problema. Aquí es donde se encarga de establecer de manera efectiva el tono y la atmósfera un tanto deprimente de toda la historia.

Lo mejor llega cuando se devela el tema de los demonios por completo y la película entra a una dinámica distinta, ofreciendo así una larga secuencia dentro de un edificio que termina encapsulando todos los elementos importantes de manera perfecta para incrementar el nivel de tensión, así como el grado de brutalidad que hasta ese momento se había mantenido fuera de cámara. Aunque igualmente al cambiar de dinámica deja varias preguntas sin respuesta como: ¿Quién diablos escribió el texto en el zoológico? ¿Por qué la niña escuchaba sonidos en su habitación? ¿Qué tiene ver una canción de The Doors en todo esto?. Siendo esta última muy molesta porque es un detalle que luce totalmente forzado y nunca hacen algún esfuerzo para tratar de justificarlo.

El final involucra una de las mejores escenas de exorcismos de los últimos años y eso hace que la película cierre con muchísima fuerza.

En las actuaciones Eric Bana nunca termina por convencer, le cuesta muchísimo trabajo el poder demostrar diferentes emociones; de hecho, Édgar Ramírez se lo come en cada escena en la que están juntos en pantalla. Aunque quienes merecen una mención especial son Sean Harris, Olivia Horton y Chris Coy como los poseídos; la verdad hacen un papel muy destacado, especialmente los dos primeros están aterradores.  

La producción es bastante destacada. El trabajo de fotografía ayuda a crear un tono de oscuridad muy interesante en diferentes escenarios de NY, la dirección de arte en determinados sets está muy bien cuidada y el sonido es sólido; mientras que los efectos/maquillaje funcionan a la perfección para los momentos en los que son más relevantes (los últimos 25 minutos principalmente).

Opinión final: Deliver Us From Evil es una buena película. Aunque considerando su temática puede que no sea para todos los gustos.

Ojometro:
****

martes, 16 de septiembre de 2014

Crítica: The Pact 2 (2014)


Secuela ahora escrita y dirigida por la dupla Dallas Richard Hallam / Patrick Horvath; en la cual Nicholas McCarthy en esta ocasión no tuvo ningún tipo de injerencia, ni siquiera como productor. Se estrenó el pasado 5 de septiembre vía VOD y tendrá un estreno limitado en cines dentro de los Estados Unidos el próximo 10 de octubre. 

Sinopsis:

Semanas después de que Annie Barlow terminará con el terror provocado por Judas Killer, ahora una joven de nombre June (Camilla Luddington) empieza a tener extrañas pesadillas sobre terribles asesinatos. Por otro lado, un agente del FBI investiga a un duplicador del recién fallecido asesino; provocando que sus caminos se crucen para revelar secretos del pasado.



Comentarios generales:

Soy gran fan de la primera entrega, pero realmente no es una película que haya dejado mucho material disponible para una secuela. Por eso cuando anunciaron esta segunda parte me sorprendí porque realmente no sabía qué rumbo tomarían; además el hecho de que McCarthy no estuviera involucrado en lo absoluto con el proyecto no era nada alentador, pero debo de decir que The Pact 2 ha sido bastante agradable.

Lo que nos traen ambos directores es un trabajo que tiene muchas similitudes con su predecesora, en donde logran integrar ciertos elementos que le ayudan a darle una identidad propia sin que se aleje demasiado del concepto original. Sigue mezclando el poltergeist con el thriller policíaco, pero en esta ocasión lo último es lo que predomina y por lo consiguiente aumenta de manera leve la violencia, así como la sangre; ahora no todo depende de la construcción del suspenso (que sigue siendo muy bueno) por medio de una atmósfera atrapante, sustos fáciles, sustos elaborados y un ritmo muy pausado, sino que la labor de investigación juega un papel mucho más importante con el fin de generar dinamismo y más sustancia para una historia cuya profundidad se ve limitada entrando al segundo acto.

Y es que es claro que llega un punto en donde se topan con pared: le empiezan a dar varias vueltas a determinadas cosas sin poder conectar de manera convincente los eventos y como principal salida utilizan a personajes de la primera película para hacerlo.

El problema aquí es que Annie no parece tener un motivo lo suficientemente sólido para justificar su regreso y Stevie solo aparece un minuto en pantalla. Ambas se sienten metidas con calzador e incluso te deja con la sensación de que la primera pudo ser otro personaje sin ningún problema ante lo irrelevante que resulta su anexión, esto cuando en teoría tendría que ser alguien sumamente relevante dentro de este universo.

El final no es tan potente como hubiera esperado porque el giro presentado es una opción que seguramente varios podrán considerar entre sus opciones minutos antes. Pero a pesar de todo logran un desenlace satisfactorio que incluso deja abierta la posibilidad de otra entrega.

En las actuaciones Camilla Luddington no lo hace mal y Patrick Fischler como detective del FBI está muy exagerado; mientras que la presencia de Caity Lotz y Haley Hudson son más que nada cameos. La producción nuevamente es muy discreta: el trabajo de fotografía cumple, el sonido está bastante bien cuidado, el score me agradó y los efectos siguen siendo muy sobrios en términos generales.

Opinión final: The Pact 2 es una buena película. No está al nivel de su predecesora, pero vale la pena.

Ojometro:
****

domingo, 14 de septiembre de 2014

Crítica: Dead Snow 2: Red vs. Dead (2014)


Secuela dirigida por Tommy Wirkola, quien además es co-escritor junto a Stig Frode Henriksen y Vegar Hoel. Se estrenó en cines en Noruega a inicios de año y su salida en formato físico se dio el 25 de junio; aunque su llegada a los Estados Unidos está programada para el próximo 10 de octubre de manera limitada en cines.

Sinopsis:

Después de los sangrientos sucesos que terminaron con la vida de sus amigos y de su novia, Martin (Vegar Hoel) despierta en un hospital con la sorpresa de que le han implantado un brazo que no es suyo. Mientras tanto, el ejército nazi de zombies inicia su camino para terminar una misión que Hitler les asigno 70 años atrás; aunque el propio Martin y un peculiar escuadrón anti zombies están dispuestos a arruinarles sus planes.



Comentarios generales:

Contrario a muchos que la consideran como una de las mejores películas de zombies de los últimos años, a mí la primera entrega se me hizo bastante pobre en muchos aspectos y por ello veía con cierta duda una secuela. Sin embargo, conforme fue pasando el tiempo mi interés creció con tantos anuncios de su producción; especialmente por el hecho de que se convirtió en la película nórdica de terror más cara de toda la historia. Esto hacía suponer algo grande y así fue.

Wirkola no cambia ni por un momento el toque cómico que caracterizó a la anterior, pero en Red vs. Dead se encarga de magnificarlo (y pulirlo) de tal manera que ahora la película se siente mucho más ligera y sin escenas forzadas en donde muestre una obsesión por darnos a conocer cuáles son sus influencias. Además lo hace brindándole un enfoque totalmente diferente, dejando de lado la atmósfera de soledad y la sensación de desesperanza para darle paso a un escenario con tintes más épicos por medio del personaje de Martin; quien evoluciona de un tipo completamente intrascendente a un anti héroe que lidera a un grupo de freaks de la manera más atípica y menos convencional de todas hacia lo que básicamente se trata del último episodio de la segunda guerra mundial.

Tiene un ritmo muy fluido y el gore está a la orden del día. Aunque sin duda lo más interesante fue saber un poco más sobre los zombies nazis y su verdadero propósito debido a que esto no solo nos lleva por un largo camino de muertes muy divertidas, sino que ayuda a que el grado excesivo de violencia tenga sentido porque en esencia convierte a la historia en una sátira; sin decir que le brinda una dinámica completamente distinta. En cierto modo diría que aplica la fórmula que utilizo Raimi en Evil Dead 2 para hacer esto mucho más grande utilizando solo pequeños aspectos de la entrega inicial.

Mi única queja es todo lo que tiene que ver con el grupo de policías. Realmente no tienen ningún peso en el desarrollo de la historia, nunca se involucran de manera directa con los zombies y el comandante es un personaje fastidioso.

El final es una batalla a gran escala que dejará a todos contentos. Acción sin parar y mucha sangre.

En las actuaciones Hoel está muy bien en su papel, su manejo del humor es muy digerible y lo sabe mezclar a la perfección con determinados momentos “serios”; mientras que el resto del elenco es un complemento sólido para su dinámica. La producción deja ver en todo momento el importante presupuesto con el que contaron: el trabajo de fotografía es bastante espectacular (magnificado por los paisajes islandeses), el maquillaje de los zombies está impecable, cuenta con un trabajo de sonido destacado y sobre todo con un despliegue de efectos especiales enorme muy bien logrados; que utiliza tanto CGI como elementos clásicos.

* Hay una escena post-créditos

Opinión final: Red vs. Dead es extremadamente divertida. Supera a su antecesora en todo y nos regala una expansión sólida dentro un universo que inicialmente no parecía tener mucho.

Ojometro:
*****

jueves, 11 de septiembre de 2014

Crítica: Torture Chamber (2014)


Película escrita y dirigida por Dante Tomaselli (Desecration, Satan's Playground), quien además también ejerce como productor. Se estrenó en enero de este año directamente en DVD y diversas plataformas digitales dentro de los Estados Unidos.

Sinopsis:

Jimmy Morgan (Carmen LoPorto) es un niño encerrado en una jaula cual animal salvaje por su religiosa madre, quien piensa que está poseído y trata de practicarle un exorcismo que termina mal. Varios años después Jimmy escapa del instituto mental donde estaba internado con deseos de venganza; aunque no está solo, ya que ha formado un ejército de niños que lo ayudarán a satisfacer su sed de sangre.



Comentarios generales:

Quienes hayan visto los trabajos anteriores de Tomaselli seguramente sabrán que no se trata de un director común, ya que su estilo se enfoca más en decir con imágenes lo que no puede decir con palabras para así retar la paciencia del espectador. Por ello su cuarto filme causo mucha expectativa a inicios de este año y considerando el tiempo que se tomó para hacerlo esperaba una evolución importante con respecto a su último filme, pero en lugar de eso me encontré con algo que simplemente no me convenció.

Con Torture Chamber tenemos una película que no sigue la clásica estructura de tres actos a la que estamos acostumbrados, sino que en su propósito por lograr que esto luzca más como una auténtica pesadilla Tomaselli va integrando escena tras escena sin la más mínima explicación o solo brindándote alguno que otro punto de unión para comprender más o menos la “historia” que quiere contar; dándole así mucho más importancia a la construcción de la atmósfera gótica, a la creación de imágenes tétricas y al uso de iconografía religiosa para tratar de incomodar al espectador por diversos frentes. Claramente su intención no es divertir, sino golpearte desde lo más profundo de tu cerebro al retar algunas creencias de lo que es el bien y el mal, utilizando la venganza de Jimmy como el principal conducto.

El problema es que todo lo hace bajo un ritmo sumamente pasivo, ya que a pesar de que solo dura una hora y media el filme se vuelve eterno. Muestra algunas escenas violentas de tortura muy bien hechas que logran mantenerte atento, pero la mayor parte del tiempo vemos cosas que se repiten una y otra vez sin que añadan gran profundidad: ver correr a niños quemados o ver como las victimas siempre terminan en el mismo lugar no es precisamente interesante. Además el uso de los flashbacks nunca resulta lo suficientemente convincente para justificar el odio de Jimmy hacia algunas de sus víctimas.

El final no les podrá importar menos debido a que en este punto la aburrición es tal que lo único que quieres es que ya termine. Se siente completamente anti climático.

En cuanto a las actuaciones debo de decir que LoPorto está muy bien, es uno de los niños más aterradores que he visto en pantalla últimamente; aunque el resto del elenco no está a su altura: Christie Sanford como la madre de Jimmy te termina por fastidiar y Vincent Pastore luce totalmente perdido cada que aparece en pantalla. La producción es discreta, pero aquí tiene algunos de sus puntos más fuertes como la fotografía y sobre todo el estupendo trabajo de sonido que le añade bastante a determinadas escenas. Igualmente el score es muy bueno.

Opinión final: Torture Chamber me aburrió. Maneja muchos conceptos interesantes, pero nunca pudo atraparme como tal vez lo haga con otras personas.

Ojometro:
**