sábado, 30 de marzo de 2013

Crítica: The Fallow Field (2013)


Debut tras la cámara del director Leigh Dovey. Esta producción inglesa fue filmada en el 2009 y solo tuvo una pequeña exhibición en un festival, pero fue hasta inicios de este mes que se salió en DVD en el Reino Unido.

Sinopsis:

Matt Sadler (Steve Garry) por alguna razón siempre se despierta en medio del campo sin que recuerde absolutamente nada, lo cual es algo recurrente y por lo general pasa una semana como desaparecido, lo que ocasiona que su esposa lo corra de su casa. Ante esto, Matt viaja al lugar donde suele despertar en busca de repuestas y llega a una granja donde el dueño de nombre Calham (Michael Dacre) oculta algo que simplemente termina con toda lógica de la naturaleza humana.



Comentarios generales: 

¿La historia es peculiar? Si. ¿Maneja el tono oscuro del cine de terror ingles? Si. ¿Es algo que marcará época? Lo dudo.

Especialmente porque me parece que esta película se quiere tomar tan en serio las cosas que al final termina convirtiéndose en algo muy aburrido para el espectador. Dovey se limita a filmar todo de manera muy lenta, queriendo sustentar gran parte en el dialogo entre los dos actores para que choquen sus personalidades y eso vuelve extenuante una historia que podía haber dado bastante más que simplemente buenos diálogos; sobre todo porque saben cómo darle un buen giro a la trama para no caer en el vicioso torture porn cuando parece destinada a ir en esa dirección.

Además, cuando quiere imprimirle cierta tensión o cierta acción, no le resulta en lo absoluto (hay una escena de escape lamentable) y en gran medida se debe a que el ritmo de la película alcanza tales niveles de pasividad de los que no puede librarse.

Garry y Dacre hacen un buen trabajo, tienen química y sacan un par de escenas bastante interesantes. En producción no se puede ocultar que es de muy bajo presupuesto, por ahí la fotografía cumple y no hay mucho más.

Opinión final: Creo que The Fallow Field es una película que dividirá opiniones y yo estoy del lado de quienes no la encuentran como algo destacado.  No estoy en contra de los trabajos que tratan de exponer su visión sin irse a los extremos conocidos y más que explotados dentro del género, pero en esta ocasión simplemente no pude engancharme en ningún momento con lo que estaba viendo.

Ojometro:
**