sábado, 24 de enero de 2015

Crítica: Gnome Alone (2015)


Película dirigida por Timothy Woodward Jr., cuyo guión originalmente fue autoría de Glenn Ennis pero posteriormente fue re-escrito por Lauren De Normandie; igualmente se le da crédito a John Michael Elfers como director y escritor de algunas escenas adicionales. Salió directamente en DVD dentro de los Estados Unidos este pasado 20 de enero.

Sinopsis:

Justo cuando Zoe (Kerry Knuppe) piensa que se encuentra sola en este mundo, una anciana le traspasa a su embrujado gnomo (Verne Troyer); quien está atado por magia para proteger a su amo. Lo malo es que este no es el típico gnomo de jardín y pronto Zoe lo descubrirá cuando se dé cuenta que ha estado eliminando a sus enemigos de la manera más sádica posible.



Comentarios generales:

Ciertamente no me vienen a la mente trabajos sobre gnomos, seguramente por ahí existen algunos pero la verdad no es muy común que estas criaturas sean fuente de inspiración dentro del género de terror y normalmente son más comunes en el cine fantástico. Por eso Gnome Alone resultaba llamativa, ya que básicamente no existe nada similar.

Lamentablemente lo llamativo e inusual es lo único que tiene a su favor porque esta es una mala película en todos los sentidos, algo que no debería de extrañar cuando su guión tuvo que ser re-escrito y además se tuvieron que añadir escenas extras por medio de otro director.

Tal vez lo más rescatable sean sus primeros cinco minutos, en donde alternando animaciones con escenas reales logran explicar la leyenda que hay detrás; lo cual viéndolo de manera más fría hubiera sido mejor que durara al menos media hora o que centraran toda la historia en esa etapa (no me extrañaría que la idea original fuera esa). Esto porque una vez que se nos muestran dichos acontecimientos lo que vemos es básicamente una comedia con situaciones vistas hasta el cansancio y un humor muy absurdo dirigido a un público sumamente joven que tal vez lo encuentre hilarante, pero el resto no creo.

Y es que dada su naturaleza no se pueden esperar momentos de gran tensión o la elaboración de un terror memorable, pero si una serie de sucesos que por lo menos te hagan soltar alguna que otra carcajada, cosa que no se da: todos son muy huecos, genéricos y varios se ven perjudicados por la forma de hablar de Troyer porque no le entiendes a sus chistes. Ante esto, todo lo que le quedó a los directores fue irse por el lado de lo gráfico, cumpliendo de manera al menos correcta con dicho apartado porque la mayoría de las muertes involucran mucha sangre, así como miembros cercenados para provocar que uno sienta curiosidad por conocer como le irá a la siguiente víctima.

El final es bastante acelerado, sacado completamente de la nada. La transformación de Zoe se siente forzada y nunca se da un verdadero enfrentamiento con el gnomo que le dé sentido a su conflicto; además el regreso del Leprechaun no tiene sentido.

La actuación de Verne Troyer es pasable, aunque tiene una obsesión terrible por sacar la lengua y como lo mencione antes, casi no se entiende lo que dice. La producción es muy pobre: la iluminación no ayuda mucho en ciertas escenas, el trabajo de sonido es deficiente y el soundtrack te fastidia; lo único rescatable son los efectos prácticos, así como la caracterización del gnomo. 
   
Opinión final: Gnome Alone es una comedia de terror muy simplona y estúpida. Seguramente estará dentro de las peores del año.

Ojometro:
*