miércoles, 29 de junio de 2016

Crítica: The Darkness (2016)


Película dirigida por Greg McLean (Wolf Creek), quien además comparte créditos como co-escritor del guión junto a Shayne Armstrong y Shane Krause. Se estrenó el pasado 13 de mayo en cines dentro de los Estados Unidos y posteriormente salió en VOD, aunque todavía no se confirma cuándo saldrá en formato físico.

Sinopsis:

Cuando una familia regresa de sus vacaciones en el Gran Cañón, pronto su casa se ve poseída por una entidad sobrenatural que uno de ellos despertó sin saberlo y que los obligará a pelear para sobrevivir.  



Comentarios generales:

Existen películas con las cuales uno no puede comprender cómo diablos pudieron conseguir a ciertos actores, sobre todo dentro de un género al cual históricamente muchos suelen huirle. Por ello The Darkness me resultaba atractiva, su casting era sólido y su director ya había demostrado credenciales importantes para que esto fuera un win-win seguro; sin embargo, el resultado terminó siendo otro simple clon de Poltergeist que retará la paciencia de la mayoría de las personas que la vean.  

Esto porque si bien McLean nos regala una historia un poco más elaborada gracias a la integración de un aspecto mitológico bastante interesante, al final termina siguiendo un patrón por demás conocido que se sustenta principalmente en una serie de ruidos extraños, sustos fáciles, sombras rondando y a un niño particularmente extraño que sirve como carnada. Aunque en realidad el punto fuerte, sobre todo dentro del primer acto, es el hacer que el espectador se pueda conectar a nivel emocional con cada uno de los personajes gracias a los diversos problemas cotidianos que enfrentan y que no tienen nada que ver con un tema sobrenatural; mandando así un mensaje sobre que la vida está llena de cosas aterradoras también.

Un enfoque digerible durante unos 20 minutos, pero cuando notas que el tiempo avanza y las cosas no mejoran este empieza a ser contraproducente; en especial porque el ritmo utilizado es uno pausado que evidencia de manera muy clara los grandes lapsos entre escenas pensadas para generar terror y la cantidad de relleno que no aporta absolutamente nada al desarrollo. Igualmente, existe el grave problema de que la explicación sobre el interesante origen de estos espíritus es tratada de manera muy superficial con solo una pequeña búsqueda por internet, dejando todo a la interpretación sobre las acciones de un niño autista que no te dicen mucho y que carecen, en su mayoría, de impacto para establecerlos como esa gran amenaza que te quieren vender.

La parte final es lo más disfrutable. Principalmente porque es aquí donde las manifestaciones contienen más de fuerza, pero también por un humor involuntario generado con la solución presentada; una que por más que quise tomarla en serio no pude, pero que logra darle cierto dinamismo a una conclusión muy poco arriesgada.

Las actuaciones son sólidas y eso hace que la película no sea tan insufrible, sobre todo porque Kevin Bacon (Peter) y Radha Mitchell (Bronny) logran una química bastante buena gracias a su inestable relación y al deterioro que ambos personajes van mostrando con el pasar de los eventos. La producción tiene sus altibajos: el trabajo de fotografía cumple a secas, la dirección de arte no resalta, el score no tiene la fuerza necesaria, el trabajo de sonido es aceptable y los efectos exageran en el uso del CGI, convirtiéndolos así en unos más acorde a una película de tv.

Opinión final: The Darkness es una película bastante mediocre. Tiene actuaciones sólidas, pero todo lo demás deja mucho que desear.

Ojometro:
**

domingo, 26 de junio de 2016

Penny Dreaful: Tercera temporada



El pasado 19 de junio llegó a su fin la tercera temporada de Penny Dreadful, la cual, para sorpresa de prácticamente todos los que seguimos la serie, también resultó ser el final definitivo de esta. Una noticia bastante triste para los fans, pero que es comprensible considerando que los eventos dentro de la historia básicamente obligaban a los creadores a elegir dos caminos: seguirla bajo un enfoque distinto (que bien pudieron haberlo hecho gracias a un nuevo personaje y a una referencia a otro clásico) o terminarla bajo sus propios términos. Y ciertamente la segunda opción, cuando se trata de productos de TV, suele ser la mejor.

En cuestión de ratings la serie siguió en declive y tal vez fue otra de las razones por la que decidieron terminarla, ya que en promedio logró unos 578,000 televidentes (sin contar On Demand o Showtime App), lo cual representó una disminución considerable con respecto al año pasado. Números que para un canal premium no son tan malos, pero que al compararlos con otras series de drama en su programación mostraban claramente que este era un show prácticamente de nicho.

Aquí me centraré en lo positivo y negativo de la temporada, ya que de lo contrario me extendería demasiado. Así que, si aún no la han visto o aún no la han visto completa, ES MOMENTO QUE DEJEN DE LEER PORQUE HABRÁ SPOILERS IMPORTANTES.

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LO POSITIVO

Actuaciones


Durante los dos primeros años fue claro que este era el show de Eva Green y, si bien en la tercera temporada eso tampoco cambió, ahora no se sintió como algo tan marcado.

Esto porque realmente todo el elenco hizo un trabajo excepcional para poder lograr un balance adecuado entre las historias más importantes e incluso en las secundarias por algunos lapsos. Pasando por el siempre increíble Rory Kinnear como John Clare, Billie Piper como la temible Lily Frankenstein e incluso la tripleta de Timothy Dalton, Josh Hartnett y Wes Studi que fue uno de los principales sustentos en esta ocasión.


Renfield



Si algo fue evidente en Penny Dreadful es que la integración de nuevos personajes no era sencilla; sin embargo, en esta temporada se introdujeron un par que destacaron y uno de ellos fue indudablemente Renfield. Un personaje cuya transformación fue un deleite el poder verla con el pasar de los episodios, al grado de que terminó opacando al propio Drácula.


Catriona Hartdegan


Si hay algo por lo que en verdad lamento que la serie no continúe es precisamente por este personaje, ya que lo poco que pudimos ver de Catriona fue muy entretenido. Básicamente se trataba de una cuasi Buffy del siglo XIX cuya concepción parecía planeada para continuar la serie en otra dirección, incluso fuera de Londres (no por nada hubo una ligera referencia a “The Mummy” en la despedida de Ferdinand Lyle).


Kaetenay siendo el “padre lobo” de Ethan


En una serie donde las identidades de los personajes se revelaban muy rápido fue bueno conocer este secreto de manera tan sorpresiva. Esto porque, al menos en mi caso, nunca me pasó por la mente que el apache fuera precisamente quien convirtió en hombre lobo a Ethan; agregándole así más dinamita a su ya de por si compleja relación.


“A Blade of Grass”


Sin duda el mejor episodio de la temporada y probablemente en el top 5 de los mejores de toda la serie. Solo dos actores y un pequeño cuarto bastaron para desarrollar de manera impecable una parte importantísima de la historia.


Diseño de producción


Penny Dreadful se caracterizó por ser una serie con un diseño de producción impecable, pero durante esta tercera temporada elevaron el nivel. 

Fue sin duda la más grande y con más retos debido a los diferentes escenarios presentados, pero ya fuera una cantina en Nuevo México, el rancho Talbot, el Museo de Historia Natural, la guarida de Drácula o el laboratorio del Dr. Jekyll, SIEMPRE cumplieron con una altísima calidad.


La muerte de Vanessa 


A muchos no les agradó la muerte de la protagonista de la serie, pero a mí me pareció el final ideal. Ya que difícilmente el personaje de Vanessa Ives lo podías visualizar como el de una mujer con un futuro feliz cuando básicamente era el imán absoluto para cualquier ente maligno existente, así que eliminarla para evitar que terribles acontecimientos siguieran ocurriendo encajaba perfectamente para convertirla en una mártir por excelencia.


THE END


Admítanlo, nadie vio venir esto.

A pesar de que el episodio fue concluyendo de manera depresiva y dramática cada una de las historias todavía quedaba una pequeña sensación de que la serie podía continuar de alguna u otra manera en 2017. Pero cuando apareció ese “THE END”, justo después de la hermosa toma de John Clare frente a la tumba de Vanessa, fue el shock total.

Uno de los secretos mejor guardados en TV en tiempos recientes y un momento que seguramente los fans recordarán durante mucho tiempo. 


Episodios imperdibles:

(1) The Day Tennyson Died
(4) A Blade of Grass
(5) This World Is Our Hell
(6) No Beast So Fierce
(8) Perpetual Night
(9) The Blessed Dark



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LO NEGATIVO

Dorian Gray: tercera parte


Penny Dreadful llegó a su fin y yo nunca supe qué diablos hacía Dorian Gray en todo esto. Su historia siempre fue ajena a lo que ocurría con los demás personajes y cuando parecía que por fin tendría un poco más de relevancia gracias a su romance con Lyly terminó siendo, otra vez, un simple personaje de relleno destinado a tener una escena de sexo llamativa.


El irrelevante Dr. Jekyll


Esto verdaderamente me decepcionó, ya que tenía muchas expectativas por la aparición del Dr. Jekyll y, eventualmente, Mr. Hyde. Pero al final de cuentas se trató de un personaje sin mayor relevancia, cuyo propósito en la serie básicamente nunca tuvo un pago concreto y lo dejó en el limbo.


Lily y sus prostitutas 


Resultó una pena ver como una historia que inició con muchísima fuerza fue perdiendo poco a poco importancia y probablemente sea la prueba contundente de que había más planes para la serie en un futuro. Esto porque fue otra que terminó de manera abrupta, sin muchas explicaciones y alejada de su propósito inicial.

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Opinión final: Ver terminar una serie siempre es difícil de digerir, pero Penny Dreadful se fue en lo más alto con la que tal vez haya sido su mejor temporada. Obvio tuvo sus detalles que pudieron mejorar, pero a mi juicio no solo es la más impresionante a nivel de producción, sino también es la que mejor engloba lo que esta historia significaba y donde quedó claro que los personajes estaban por encima de todo lo demás.

viernes, 24 de junio de 2016

Crítica: Monsterland (2016)


Antología que cuenta con la participación de 12 diferentes directores para contar nueve aterradoras historias. Se estrenó directamente en DVD y formato digital el pasado 7 de junio dentro de los Estados Unidos, pero no hay información sobre cuándo podría llegar a otros mercados.

Sinopsis:

Bienvenido a Monsterland! Un lugar aterrador donde bestias salvajes, criaturas carnívoras y grotescas abominaciones son la constante; y ahora la raza humana se encuentra en el fondo de la cadena alimenticia.



Comentarios generales:

La primera antología producida por Dread Central (Zombieworld) tenía algunas cosas interesantes que daban pie a futuras mejoras en su formato y por ello Monsterland llamaba mi atención, ya que normalmente es en las segundas entregas cuando los errores del pasado se corrigen para obtener mejores resultados. Sin embargo, en esta ocasión dicho aprendizaje no aplicó y gracias a eso tenemos una antología que, si bien mantiene más o menos una línea general con sus historias, nunca se siente como algo completamente homogéneo.

Esto porque nuevamente utilizaron cortometrajes de años atrás (2012 y 2014 principalmente) para complementar el proyecto, lo cual no está mal, pero al final de cuentas eso siempre termina complicando las cosas gracias a que los valores de producción son distintos. Ocasionando así que la película se sienta más como una simple inserción de vídeos y no como una antología en sí; en especial cuando la historia de enlace es tan irrelevante como ocurre aquí.

Pasando a los segmentos:

"Don’t Go Into the Water" (Corey Norman)

Uno de los más cortos, pero que va muy acorde con el tema de los monstruos. Realmente no ofrece nada novedoso y aún así es entretenido gracias a que sigue la formula básica de sustos fáciles, sangre y chicas desnudas. Aunque es un tanto decepcionante que la criatura no aparezca en pantalla.


"The Grey Matter" (Peter & Luke McCoubrey, 2014)

Probablemente uno de los cortos más elaborados tanto en historia como en el aspecto visual. Brindando un enfoque diferente sobre los zombies y sus orígenes por medio de una criatura pintoresca que deja un par de momentos divertidos.


"Curiosity Kills" (Sander Maran, 2012)

Una historia absurda sobre los peligros de la ciencia cuyo tono es uno mucho más cómico. Es totalmente mudo y eso le brinda cierta novedad, pero de ahí en fuera no encontraran un contenido realmente interesante.


"Hag" (Erik Gardner, 2014)

Técnicamente se podría decir que este es el corto más inclinado hacia al terror, aunque es medio confuso. Se centra en las brujas y gracias a ello podemos ver un par de momentos de impacto; sin embargo, es en exceso repetitivo.


"Monster Man" (Frank Sudol)

Relleno puro. Animación corta que casi no cuenta con historia y cuyo principal atractivo es el gore al final.


"House Call" (Graham Denman)

Este corto me agradó. Su tema gira en torno a los vampiros, pero nunca lo trata de manera convencional y se centra más en incomodar al espectador por medio de un elemento muy simple que a una gran mayoría le genera dolor con solo verlo.


"Happy Memories" (Jack Fields)

Mmmm… no sé qué decir sobre esto. Es algo muy raro a lo que no le encontré ninguna explicación.


"Stay at Home Dad" (Andrew Kasch & Jonh Skipp, 2012)

Las rarezas continúan, pero en esta ocasión por lo menos tenemos algo de historia. Un corto que se sustenta principalmente en el morbo y los perversos deseos alguien pudiera tener; además que de terror tiene muy poco.


"Hellyfish" (Patrick Longstreth & Robert McLean, 2014)

Buen segmento, tal vez compite como el mejor junto con The Grey Matter. Principalmente porque es otro que se centra en los monstruos como tal y con eso presenta un caos muy divertido basado en el fuerte uso de CGI, la sangre y situaciones un tanto absurdas que representan dignamente al cine de monstruos serie b.

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Opinión final: Monsterland simplemente no funcionó conmigo. Probablemente contenga elementos y segmentos que podrían agradar a varios, pero como antología en general es una de las más flojas que han salido en los últimos años.

Ojometro:
**

martes, 21 de junio de 2016

Crítica: The Invitation (2016)


Película dirigida por Karyn Kusama (Jennifer's Body), cuyo guión fue co-escrito por Phil Hay y Matt Manfredi. Se estrenó de manera limitada en cines y VOD dentro de los Estados Unidos el pasado 8 de abril, mientras que su salida en DVD está programada para el 26 de julio.

Sinopsis:

Will (Logan Marshall-Green) es invitado a una fiesta organizada por su ex esposa en su antigua casa. Ya estando ahí, rodeado de viejos amigos y de algunos desconocidos, este se dará cuenta de que algo no está bien con el misterioso comportamiento de su ex; provocando así que su de por si débil estado emocional se vea retado durante esta extraña velada.



Comentarios generales:

Debo de admitir que no me entusiasmaba mucho lo nuevo de Karyn Kusama después de habernos regalado la espantosa “Jennifers Body” hace unos años atrás. Tampoco ayudaba el hecho de que el punto central era sobre cultos, una de las temáticas más predecibles y menos arriesgadas que existen en la actualidad; sin embargo, después de verla puedo afirmar que The Invitation es la reivindicación de su directora.

Esto porque Kusama nos trae un trabajo que se cocina a fuego lento de una manera casi perfecta, en el cual el espectador siente una atmósfera llena de tensión prácticamente desde que Will pone un pie dentro de la casa para generar así una cantidad enorme de dudas sobre lo que ocurre ahí. Y es que no solo se trata de conocer al buen número de personajes con los que cuenta la historia, sino también de explorar un poco más del pasado del protagonista para entender esta paranoia con la que vive todo el tiempo y que le hace dudar de lo que ocurre a su alrededor durante una reunión llena de comportamientos en apariencia habituales, pero que por alguna razón lucen sospechosos. 

Algo que se desarrolla por medio de un ritmo lento y que para el segundo acto no cambia demasiado, convirtiendo así la experiencia en una bastante pesada; sin embargo, es aquí donde la directora aprovecha para darnos un poco más de idea sobre cómo es la estructura de la casa (algo importante para lo que vendrá después) y empezar a jugar de manera más profunda con la paranoia de Will. Ya que, aunque hay muchas señales que te indican un camino concreto sobre lo que puede ocurrir, el comportamiento de este juega como un distractor de peso para creer que está loco y elevar el nivel suspenso antes de que todo explote.

La parte final es bastante intensa. Es el pago ideal por toda la espera a pesar de que no contiene niveles de locura tan extrema como otras películas, cumpliendo con el propósito de generar un gran impacto y dejar el camino preparado para la revelación de algo muchísimo más perturbador durante el desenlace.

Las actuaciones son sólidas, aunque realmente todo lo importante recae en Marshall-Green y este saca de buena forma un personaje un tanto tosco, que no tiene demasiados diálogos, pero que con cada secundario logra genera momentos tanto de genuina amabilidad como de fricción pura. La producción no es nada ostentosa, pero está muy bien cuidada: el trabajo de fotografía es excelente, la dirección de arte es simple, el score cumple, tiene un trabajo de sonido cuidado, los efectos son muy básicos y lo mismo puedo decir del maquillaje.

Opinión final: The Invitation es cine de buena calidad, aunque un poco complicado de digerir gracias a su ritmo.

Ojometro:
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