Debut tras la cámara del director Britt Napier. Salió
únicamente en DVD dentro del Reino Unido el mes de noviembre pasado, mientras
que su venta en los Estados Unidos está programada para el próximo 18 febrero.
Sinopsis:
Michelle (Kaylee DeFer) es una
chica que está terminando su rehabilitación y para comenzar nuevamente con su
vida le recomiendan un trabajo como modelo. Esto la lleva a una
enorme mansión en donde quedará atrapada junto con tres psicópatas que la torturarán
para purificarla de todos sus pecados.
Comentarios generales:
Mentiría si dijera que sabía de qué
trataba Darkroom, ya que realmente el único conocimiento que tenia de ella era
la sinopsis del DVD que me prestaron, así que no tenía ni la mas mínima idea
sobre que esperar.
Napier en general nos trae una película
en donde todo el tiempo sentí que querían ofrecer algo mucho más brutal pero que
por alguna razón nunca se quitaron las cadenas para poder empujar a límites mucho
más extremos una idea que daba pie para eso. Y es que en teoría estamos
hablando de una historia de tortura con ciertos tintes de Saw; de hecho, la
forma en la que está ambientada te recuerda mucho a la popular franquicia,
incluso algunos trabajos con la cámara se asemejan muchísimo y te resulta
imposible el no considerarla una de los tantos semi-clones que hay por ahí.
Aunque sin el nivel de violencia necesaria como para justificarlo y el ritmo caótico.
La historia se divide en dos: la de
los psicópatas y la de los flashbacks de Michelle sobre el evento que la llevo a la rehabilitación.
Las cuales se la pasan entrelazando todo el tiempo, pero que al menos en el
caso de la segunda uno realmente nunca entiende el propósito de su inclusión debido
a que termina teniendo poca o nula relevancia en el desarrollo.
Simplemente no logran explicar que tiene que ver su trágico suceso con el hecho de que la secuestren o la torturen, es más… para tratar de justificarlo se centran en una cortísima escena del pasado de los asesinos que tampoco te deja muy claras las cosas, sobre todo porque sus intenciones parecen más centradas en aspectos de su perturbadora niñez y no precisamente por la conducta de la protagonista. Lo cual termina generando la sensación de que los flashbacks simplemente fueron incluidos para consumir tiempo y lograr pasar la hora con veinte minutos.
Simplemente no logran explicar que tiene que ver su trágico suceso con el hecho de que la secuestren o la torturen, es más… para tratar de justificarlo se centran en una cortísima escena del pasado de los asesinos que tampoco te deja muy claras las cosas, sobre todo porque sus intenciones parecen más centradas en aspectos de su perturbadora niñez y no precisamente por la conducta de la protagonista. Lo cual termina generando la sensación de que los flashbacks simplemente fueron incluidos para consumir tiempo y lograr pasar la hora con veinte minutos.
El final está lleno de acción genérica
que nunca falla y que lo ves venir desde como una hora antes, pero al menos hace
de los últimos minutos disfrutables.
En cuanto a las actuaciones ni
fu, ni fa: DeFer se limita a gritar y todos los asesinos me parecieron increíblemente
forzados, poco creíbles. En producción como lo dije anteriormente es muy del
estilo de Saw: la iluminación, la dirección de arte y las torturas son muy de
ese estilo. Aunque no cuenta con ningún tipo de efectos o maquillaje
llamativos; a lo mucho unas heridas provocadas por un cúter y un cadáver con
algunos órganos expuestos, pero de ahí en fuera todo lo violento no aparece
claramente en pantalla.
Opinión final: Darkroom no aburre ni
nada similar, pero realmente no se siente como algo que sea indispensable de
ver. Totalmente desechable.
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