viernes, 11 de octubre de 2013

Crítica: Dark Touch (2013)


Producción realizada entre Francia, Irlanda y Suecia que está dirigida por la francesa Marina de Van (In My Skin). Obtuvo notoriedad en el Tribeca Film Festival de este año y se estrenó en VOD, así como en plataformas digitales, el pasado 27 de septiembre. Su salida en formato físico aún no está definida, pero es probable que se dé hasta el próximo año.

Sinopsis:

En un pueblo de Irlanda, una pequeña niña de 13 años de nombre Niamh (Missy Keating) es la única sobreviviente de una brutal masacre que terminó con la vida de sus padres y hermano. Para ayudarla a recuperarse de su trauma, unos vecinos aceptan acogerla en su hogar; sin embargo, estos no saben que esta pobre y aparentemente indefensa niña guarda un oscuro secreto.



Comentarios generales:

Marina de Van es una directora con una visión muy peculiar y Dark Touch es un buen ejemplo de ello, ya que aunque es muy evidente que está inspirada en Carrie, ella se encarga de darle un tono mucho más oscuro al filme y pone al espectador a cuestionarse seriamente algunas cosas.

Aquí se tocan temas que siempre son complicados como el abuso sexual, el maltrato a menores o la exclusión social, pero la directora (quien también es la guionista) nunca trata de irse por un camino en donde todo tenga una solución feliz, sino al contrario; aquí se te muestra un lado mucho más perturbador utilizando el personaje de Niamh como la plataforma perfecta para dejar en claro los traumas permanentes de estos sucesos y la incapacidad de esta para distinguir el bien del mal, siendo el detonante de sus poderes en base a secuencias estremecedoras.

Lo malo es que la historia deja varios sucesos sin una explicación, se olvidan de ellos y por momentos daba la sensación de que no tenía mucho sentido lo que estaba viendo; además de que se llega a tornar un tanto repetitiva en algunas situaciones.

Los últimos 15 minutos de la película son brutales. Hay una escena de una escuela que aunque no es muy gráfica si te mueve bastante y ni que decir del final, simplemente la tensión que maneja es estupenda.

Missy Keating está muy bien en su papel a pesar de que tiene una cantidad muy limitada de diálogos, es prácticamente imposible no sentir compasión y cariño hacia su personaje inclusive después de su cambio de personalidad. En producción lo primero que resalta es el estupendo score, el cual encaja de manera perfecta con cada escena y siempre está acorde con el tono de la historia; el trabajo de fotografía también es muy agradable, en especial cuando toca mostrar paisajes o estructuras. Por último, los efectos especiales no tienen mucha ciencia, pero son efectivos para los propósitos básicos.

Opinión final: Dark Touch tiene cosas geniales que tristemente no son del todo explotadas, pero indudablemente es un trabajo que vale la pena checarlo. Especialmente si el remake de Carrie no los tiene tan emocionados.

Ojometro:
***