Película escrita y dirigida por
la dupla Michael Bartlett / Kevin Gates (The Zombie Diaries). Salió a la venta en
DVD y también en iTunes dentro del Reino Unido durante el mes de octubre,
mientras que su distribución en los Estados Unidos se ha confirmado para 2014.
Sinopsis:
En marzo de 1963 fue efectuada
una “Misa Negra” por un aquelarre de brujas en las ruinas de una iglesia
localizada en Clophill, Bedfordshire; ahí varias tumbas fueron saqueadas, hubo
animales sacrificados y huesos humanos puestos a disposición durante la macabra
ceremonia. Desde entonces dicho lugar ha sido escenario de varios sucesos
sobrenaturales que unos documentalistas están dispuestos a
investigar.
Comentarios generales:
Debo de admitir que el hecho de que
estuviera basada en eventos aparentemente reales evitó que la dejará pasar de
largo, sobre todo porque con esto esperaba, al menos, una historia interesante.
Desafortunadamente mis deseos no se cumplieron debido a que The Paranormal
Diaries: Clophill es, sin exagerar, una versión alargada de cualquier episodio
de Ghost Hunters o programas similares.
Bartlett y Gates básicamente lo
que nos traen es un documental casi en su totalidad, ya que los dos primeros
actos son eso: un trabajo centrado más que nada en la investigación. Donde se limitan a mostrar entrevistas con
diferentes personas de la localidad u expertos en ciertas cuestiones, largas y
tediosas escenas de los miembros del equipo caminando en la iglesia o sus
alrededores en busca de pistas e inclusive un intento de contacto por medio de
una Ouija; lo cual puede que esté bien para un show de 30 o 40 minutos en TV,
pero no para 75 minutos de una película de hora y media de duración.
Y es que mantenerte despierto con todo esto será una prueba bastante complicada debido a que no existe tensión alguna, no hay la más mínima intención de sacar sustos fáciles; es más… ni siquiera los supuestos hechos misteriosos logran llamar tu atención o generarte algo de intriga.
Y es que mantenerte despierto con todo esto será una prueba bastante complicada debido a que no existe tensión alguna, no hay la más mínima intención de sacar sustos fáciles; es más… ni siquiera los supuestos hechos misteriosos logran llamar tu atención o generarte algo de intriga.
El final es lo único de toda la película
que evidentemente no se maneja como documental, ahí es cuando la historia toma
sus tintes ficticios y pretende asustar al espectador (esto se da exactamente faltando
15 minutos para que termine), pero esta tan mal logrado que realmente pudieron
haberlo evitado y no hubiera cambiado mucho.
Las actuaciones no son tan malas
como uno supondría; ayuda mucho el que gran parte de la película no la exija grandes
cambios de emociones a los actores, pero en general no son insufribles. En producción,
recalco nuevamente, es como un programa de Ghost Hunters y la verdad no
encontrarán nada fuera de lo común.
Opinión final: Si son fans de lo
paranormal y del formato que se lleva manejando por años en la TV, esto es para
ustedes. Si no, mejor ahórrense el tiempo para otra cosa.
*