lunes, 9 de diciembre de 2013

Crítica: Exit to Hell (2013)


Película escrita y dirigida por Robert Conway, la cual también se estuvo promocionando como "Sickle" durante algún tiempo. Se estrenó en VOD y varias plataformas digitales durante el mes de noviembre, mientras que al parecer su salida en formato físico dentro de los Estados Unidos se dará justo el 31 de diciembre.

Sinopsis:

Un grupo de ladrones roba de manera muy violenta un strip club y huyen rápidamente. Mientras el dueño mafioso del lugar los empieza a buscar, estos llegan a Redstone: un pequeño pueblo en medio de la nada donde serán aterrorizados por el extraño sheriff del lugar.



Comentarios generales:

Soy fan del cine Serie B, por lo regular son películas que me entretienen por más ridículas que sean, pero también siempre he dicho que inclusive estas tienen su chiste para hacerlas.

Exit to Hell es de esta clase de cine en toda la regla, pero su creador Conway parece que no tenía mucha idea sobre la línea que quería seguir; como si primero hubiera querido homenajear a Texas Chainsaw Massacre de manera totalmente irreverente y luego le vino el arrepentimiento que lo obligó a añadirle más cosas que simplemente se sienten fuera de lugar.

No niego que se logra crear una atmósfera interesante, pero eso no es suficiente gracias a que uno se queda con la sensación de que se tomaron las cosas muy en serio, sobre todo porque la historia alterna del mafioso ruso no aporta nada cuando claramente la única finalidad por la cual la integraron fue para darle una sensación de más incertidumbre y no solo dejarla como un slasher del montón, lo cual al final de cuentas termina siendo (de hecho, estoy casi seguro que el cambio de nombre también se debió a eso). Además nunca te cuentan más sobre el pueblo y lo poco que te muestran sobre el sheriff resulta muy ridículo (si, son caníbales ¿pero eso que tiene de especial?).

El final es probablemente la mejor parte, ya que es el único momento en donde verdaderamente te ofrecen lo que caracteriza a esta clase de trabajos: violencia y mucha sangre sin sentido.  

En el aspecto de las actuaciones es bastante olvidable, solamente Dan Higgins como el dueño de la gasolinera tiene sus momentos. En producción se nota que fue de bajo presupuesto, pero toda la ambientación por medio de la dirección de arte no esta tan mal; aunque la cuestión de maquillaje y efectos es un tanto decepcionante, ya que a pesar de que si hay sangre y escenas violentas, realmente nunca hay nada que se te quede grabado en la memoria a largo plazo.

Opinión final: Exit to Hell es cine Serie B del malo, sin muchas cosas que mínimo te hagan ameno el tiempo invertido en ella.

Ojometro:
**