sábado, 30 de noviembre de 2013

Crítica: Skinwalker Ranch (2013)


Primera película que dirige el hasta ahora actor Devin McGinn, quien además también es el productor. Se estrenó de manera limitada en cines y para iTunes el pasado 30 de octubre dentro de los Estados Unidos, aunque también se puede obtener mediante su sitio oficial.

Sinopsis:

Un equipo de científicos se aloja en un rancho para investigar y documentar ciertos sucesos paranormales que rodean la desaparición de un niño de 10 años en Utah. Estando ahí serán testigos de una serie de cosas inexplicables que los harán comprender que probablemente no fue una buena idea ir a ese lugar.  



Comentarios generales:

McGinn nos trae un found footage que realmente no ofrece nada nuevo, ya que aunque la historia está basada en hechos supuestamente reales del rancho localizado en Utah, la verdad es que lo único que varía de muchos otros trabajos similares es precisamente la locación.

Aquí no es un hospital psiquiátrico abandonado y eso en cierto modo amplia un poco el panorama de lo que pueden mostrar, el problema es que no saben cómo: lo que en un inicio se trata sobre la desaparición de un niño termina convirtiéndose en una mezcla de varios mitos/fenómenos mostrados de manera aleatoria en pantalla sin ningún tipo de conexión.

De pronto vemos espíritus corriendo y de manera abrupta se pasa a la aparición de un tipo como ¿lobo? gigante que a los cinco minutos es olvidado por la presencia de extraterrestres, los cuales quedan en segundo plano por la revelación de un misterioso vídeo sobre una niñita diabólica del pasado.

Así es, de todas estas cosas se muestra algo y la mayoría queda sin explicación alguna dado a que nunca se realiza el seguimiento necesario para que el espectador por lo menos pueda sentir algo de intriga por todos estos supuestos fenómenos; lo que deja como resultado un cóctel con algunos sustos fáciles que por más que quieres no les logras encontrar sentido.

Irónicamente la película tiene su punto fuerte en un aspecto que suele ser poco importante en los found footage: el desarrollo de los personajes. Si bien creo que hay muchos y algunos sobran, en general todos desarrollan personalidades interesantes conforme van sorteando los extraños sucesos, lo cual da como resultado interacciones con bastante fuerza que hacen del final algo entretenido a pesar de lo inexplicable que es.

Dado a que lo más sólido es precisamente el desarrollo de los personajes las actuaciones por lo consiguiente son aceptables, no son nada del otro mundo pero la mayoría de los actores (para mi desconocidos) cumplen. En producción también es atípica para su género, se nota más presupuesto de lo normal o un mejor uso de los recursos: el trabajo de fotografía en exteriores están muy bien, el sonido en determinadas escenas es estupendo y los efectos, aunque nada ostentosos, sirven perfectamente para cada situación.  

Opinión final: Skinwalker Ranch está pasable. De esas películas para perder el tiempo cuando no tengan nada más que hacer.

Ojometro:
***