jueves, 21 de noviembre de 2013

Crítica: Carrie (2013)


Nueva adaptación de la novela de Stephen King que representa el debut dentro del género de la directora Kimberly Peirce. Se estrenó en cines dentro de los Estados Unidos durante el mes de octubre, mientras que aquí en México llegó a las salas el pasado 15 de noviembre y hasta el momento lleva recaudados 53 millones de dólares en taquilla a nivel mundial.

Sinopsis:

Carrie White (Chloë Moretz) es una adolescente tímida que es víctima de rechazo y burlas de parte de todos sus compañeros de escuela. Para empeorar las cosas, su madre Margaret (Julianne Moore) es una religiosa que la quiere alejar de todos los “peligros”, provocando que desarrolle una telequinesis que se saldrá de control.



Comentarios generales:

Es curioso, pero de los remakes importantes que iban a salir durante el 2013 sin duda era este el que personalmente me parecía que tenia un potencial mucho mayor gracias a los involucrados en el proyecto y, aunque al final fue el más flojito de todos, no me decepcionó.

La verdad, a pesar de que es una nueva adaptación, resulta casi imposible el no compararla con la película de De Palma y seguramente muchos analizarán con lupa cada detalle para destrozarla, pero en general creo que Peirce logra abordar de manera bastante buena una problemática muy actual como lo es el bullying con los conceptos religiosos y sobrenaturales de la historia de King.

Esta nueva versión de Carrie en general es más fiel a la novela y en lugar de añadirle contenido (que si lo hace en contadas ocasiones) se enfoca en insertar de la manera más natural posible cosas actuales como el uso de la nueva tecnología para atormentar a la protagonista; aunque sin enfocarse demasiado en ello para dejar que lo importante de esta historia sean las interacciones humanas que terminan construyendo poco a poco a un “monstruo” de manera involuntaria. Todo en base a un ritmo muy fluido, sin muchas pausas para explicar cosas que ya sabemos y un manejo de los tiempos ideal que beneficia muchísimo a la masacre en la graduación gracias a que le proporciona un poco más de impacto.

Dentro de sus problemas están el hecho de que el personaje de la maestra Desjardin se siente totalmente obsoleto, ya que a pesar de que si se mantiene en la línea de la novela nunca sientes que sea relevante y te da exactamente lo mismo lo que le ocurra. Otro punto que personalmente me fastidio fue el final: nuevamente, es bastante cercano al de la novela, pero muy blando cuando en realidad el tono de la película en su parte final es fuerte y daba opciones para ofrecer algo mucho más memorable.

Está bien actuada, Moore esta estupenda en el rol de madre obsesiva y Chloë Moretz interpreta a la perfección el rol de esta Carrie en particular, ya que si refleja mucho mas ese look de outsider adolescente introvertida (influye mucho el hecho de que si tiene 16 años), aunque luce bastante forzada al momento de la locura final. En producción visualmente no es tan impactante como pensé que sería, mientras que en cuanto a los efectos especiales cumple bastante a pesar de que por ahí hay algunos que pudieron ser pulidos de mejor manera.

Opinión final: Carrie es aceptable. Definitivamente se queda lejos del clásico del 76, pero no tiene desperdicio.

Ojometro:
***