Nueva adaptación de la novela de
Stephen King que representa el debut dentro del género de la directora Kimberly
Peirce. Se estrenó en cines dentro de los Estados Unidos durante el mes de
octubre, mientras que aquí en México llegó a las salas el pasado 15 de
noviembre y hasta el momento lleva recaudados 53 millones de
dólares en taquilla a nivel mundial.
Sinopsis:
Carrie White (Chloë Moretz)
es una adolescente tímida que es víctima de rechazo y burlas de parte de todos
sus compañeros de escuela. Para empeorar las cosas, su madre Margaret (Julianne
Moore) es una religiosa que la quiere alejar de todos los “peligros”,
provocando que desarrolle una telequinesis que se saldrá de control.
Comentarios generales:
Es curioso, pero de los remakes
importantes que iban a salir durante el 2013 sin duda era este el que personalmente
me parecía que tenia un potencial mucho mayor gracias a los involucrados en
el proyecto y, aunque al final fue el más flojito de todos, no me
decepcionó.
La verdad, a pesar de que es una nueva adaptación, resulta casi imposible el no compararla con la película de De Palma y seguramente muchos analizarán con lupa cada detalle para destrozarla, pero en general creo que Peirce logra abordar de manera bastante buena una problemática muy actual como lo es el bullying con los conceptos religiosos y sobrenaturales de la historia de King.
La verdad, a pesar de que es una nueva adaptación, resulta casi imposible el no compararla con la película de De Palma y seguramente muchos analizarán con lupa cada detalle para destrozarla, pero en general creo que Peirce logra abordar de manera bastante buena una problemática muy actual como lo es el bullying con los conceptos religiosos y sobrenaturales de la historia de King.
Esta nueva versión de Carrie en
general es más fiel a la novela y en lugar de añadirle contenido (que si lo
hace en contadas ocasiones) se enfoca en insertar de la manera más natural
posible cosas actuales como el uso de la nueva tecnología para atormentar a la
protagonista; aunque sin enfocarse demasiado en ello para dejar que lo importante
de esta historia sean las interacciones humanas que terminan construyendo poco
a poco a un “monstruo” de manera involuntaria. Todo en base a un ritmo muy fluido,
sin muchas pausas para explicar cosas que ya sabemos y un manejo de los tiempos
ideal que beneficia muchísimo a la masacre en la graduación gracias a que le
proporciona un poco más de impacto.
Dentro de sus problemas están el
hecho de que el personaje de la maestra Desjardin se siente totalmente
obsoleto, ya que a pesar de que si se mantiene en la línea de la novela nunca
sientes que sea relevante y te da exactamente lo mismo lo que le ocurra. Otro
punto que personalmente me fastidio fue el final: nuevamente, es bastante cercano
al de la novela, pero muy blando cuando en realidad el tono de la película en
su parte final es fuerte y daba opciones para ofrecer algo mucho más memorable.
Está bien actuada, Moore esta
estupenda en el rol de madre obsesiva y Chloë Moretz interpreta a la perfección
el rol de esta Carrie en particular, ya que si refleja mucho mas ese look de
outsider adolescente introvertida (influye mucho el hecho de que si tiene 16
años), aunque luce bastante forzada al momento de la locura final. En producción
visualmente no es tan impactante como pensé que sería, mientras que en cuanto a
los efectos especiales cumple bastante a pesar de que por ahí hay algunos que
pudieron ser pulidos de mejor manera.
Opinión final: Carrie es aceptable. Definitivamente se queda lejos del clásico del 76, pero
no tiene desperdicio.
***